Honduras/ la crisis divide a presidentes en cumbre Iberoamericana [Agencias]

[Ernesto Herrera]

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1º de diciembre 2009
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Honduras

Crisis divide a presidentes

El rechazo categórico a la legitimidad del proceso electoral hondureño lo representan Venezuela, Bolivia, Cuba, Argentina y Brasil; Colombia, Costa Rica, Panamá y Perú reconocen la cita electoral. España, aún sin definir.

DPA y La Jornada



Estoril. La XIX Cumbre Iberoamericana de Estoril cerró este lunes su primera jornada de trabajo con una división fuerte entre los jefes de Estado y de gobierno por la situación en Honduras.

Portugal y el gobierno español pusieron en duda que el encuentro vaya a poder lograr una declaración de consenso sobre la legitimidad de los comicios celebrados el domingo en el país centroamericano, un tema que ha acaparado toda la atención en Estoril.

"Vamos a trabajar hasta el límite para lograr una convergencia posible. En este momento, digo que es difícil", declaró el ministro portugués de Relaciones Exteriores, Luís Amado.

El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, expresó a sus colegas que su gobierno no reconoce las elecciones "como un intento de blanqueamiento de un golpe de Estado", dijo a la prensa su asesor Marco Aurelio Garcia, quien añadió que "por ahora hay que esperar" y "discutir con la comunidad internacional".

Por su parte, el presidente mexicano, Felipe Calderón, advirtió que en América Latina se están registrando "expresiones de retroceso democrático" y agregó que los hechos en Honduras son "un llamado de atención para todos".

Honduras fue representado por Patricia Rodas, la canciller del despuesto presidente Manuel Zelaya, quien pese a las declaraciones de unos y otros se mostró segura de que la XIX Cumbre Iberoamericana cerrará con una declaración unánime de condena al golpe de Estado y la exigencia de restituir la democracia y al propio mandatario derrocado.

Después de que Estados Unidos confirmase hoy que avala los comicios en los que el conservador Porfirio Lobo obtuvo la victoria, en Estoril se produjeron movimientos. El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, se unió a la postura defendida por Costa Rica, Panamá y Perú de reconocer la cita electoral.

"El resultado es inobjetable", manifestó el colombiano en Estoril, ubicado a 25 kilómetros de Lisboa.

También España movió ficha y de encontrarse en el grupo de países que como Brasil, Argentina o Venezuela reclaman tajantemente el regreso de Manuel Zelaya al poder, pasó a situarse en una posición intermedia, en lo que parece ser un paso en aras del consenso.

"El gobierno español no reconoce estas elecciones, pero tampoco las ignora", ya que "tenemos nuevos actores políticos y un objetivo compartido": "alcanzar una solución de reconciliación nacional" y "una salida definitiva de la crisis", defendió el canciller español al margen de la Cumbre Iberoamericana.

"Porfirio Lobo tendrá algo que decir y será un nuevo actor en el diálogo con el presidente Zelaya", precisó Moratinos.

El propio José Luis Rodríguez Zapatero abogó por un "acuerdo nacional" para después dar el paso hacia un "consenso" en el ámbito centroamericano, latinoamericano y europeo, dijo.

Cuba pidió este lunes a los gobernantes iberoamericanos que asisten a la Cumbre desconocer al "gobierno espurio" que resulte de las elecciones en Honduras, al tiempo que acusó a Estados Unidos de apoyar la instalación de una "dictadura" en el país centroamericano.

"Reconocer el gobierno espurio que de estas elecciones ilegítimas emerja traicionaría los principios de paz, democracia y justicia que se proclaman, y así debería manifestarse esta Cumbre", dijo en su discurso el canciller cubano Bruno Rodríguez.

En términos generales, y tal y como resumió al final de la jornada el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, "todo el mundo condena el golpe" que el 28 de junio expulsó del poder a Zelaya. Pero tras los comicios del domingo, dijo, los jefes de Estado y de gobierno debaten sobre qué significan.

El rechazo categórico a la legitimidad del proceso electoral lo siguen representando Venezuela, Bolivia, Cuba, Argentina y Brasil.

La atención sobre Honduras fue tal, que el tema de la cumbre quedó prácticamente solapado. Sólo en la apertura de las sesiones de trabajo, por la mañana, se hizo mención a "Innovación y Conocimiento", el lema del encuentro.

Enrique Iglesias reconoció que la situación en el país centroamericano copó la mayor parte del "retiro" de dos horas en el que los jefes de Estado y de gobierno pudieron departir a solas, sin otros miembros de delegación de por medio.

Aún así, algo hablaron de la próxima cumbre sobre el clima de Copenhague, donde lo bueno sería, dijo Iglesias, que todos los iberoamericanos acudieran y lo hicieran con una "posición firme".

Coincidieron también en que América Latina está manejando mejor que otras la actual crisis económica que, aseguró el secretario general iberoamericano, "ofrece una oportunidad importante" para la región. 
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