Brasil/ El verdadero rostro. Las candidaturas negras de la izquierda brasileña. [Marcelo Aguilar]

Ernesto Herrera germain5 en chasque.net
Vie Jun 10 11:45:44 UYT 2022


  _____

Correspondencia de Prensa

10 de junio 2022

 <https://correspondenciadeprensa.com/> https://correspondenciadeprensa.com/

redacción y suscripciones

 <mailto:germain en montevideo.com.uy> germain en montevideo.com.uy

  _____



Brasil



Las candidaturas negras de la izquierda brasileña



El verdadero rostro de Brasil



La Coalición Negra por los Derechos, que reúne a los principales grupos del
movimiento negro, lanzó 101 precandidaturas para las elecciones de octubre.
El objetivo es ampliar la escasa representación institucional de esta
población, mayoritaria en el país.



Marcelo Aguilar, desde San Pablo

Brecha, 10-6-2022

https://brecha.com.uy/



«No habrá nada en este país sobre nosotros sin nosotros. Quien piense que va
a transformar Brasil en un gran cementerio se equivoca. No vamos a
retroceder ni para tomar impulso. Este país solo es posible con el pueblo
negro, porque Brasil es un país negro», dijo en el micrófono la socióloga
baiana Vilma Reis en el evento celebrado el lunes por la Coalición Negra por
los Derechos, en el que fueron lanzadas 101 precandidaturas negras para las
elecciones generales de octubre de este año. Reis es una de esas candidatas
y disputará una banca de diputada federal por el Partido de los Trabajadores
(PT).



«Este país fue construido por manos negras, este país come la comida de la
cocina negra, baila la música negra, canta el canto negro y está de pie
porque nosotros estamos de pie», dijo, por su parte, el legendario actor
Antonio Pitanga durante el lanzamiento, en la Ocupación 9 de Julio, en el
centro de San Pablo. Aunque, según los datos del Instituto Brasileño de
Geografía y Estadística, en Brasil el 56 por ciento de la población se
declara negra o parda, su reflejo en la política institucional es escaso.
Negros y negras ocupan pocos espacios en las instituciones federales y
municipales, y, aunque su participación en la política crece paulatinamente,
todavía están notoriamente subrepresentados. En las elecciones municipales
de 2020, por ejemplo, de los más de 5.400 alcaldes electos, 1.700 se
declararon negros o pardos, el 32 por ciento del total, una suba del 3 por
ciento respecto de la elección de 2016. En el Congreso son 124 de los 513
diputados y 13 de los 81 senadores. En el frente económico, la renta media
de los blancos sigue siendo al menos dos veces mayor que la de los negros,
según un estudio publicado en julio de 2021 por el Instituto de
Investigación Económica Aplicada, vinculado al Ministerio de Economía de
Brasil.



Ruptura y disidencia sexual



En el contexto actual e histórico de Brasil, Erika Hilton es una excepción.
Fue la primera persona travesti y negra en asumir una banca de concejala y
fue la más votada en todo el país en la elección de 2020. Durante el
lanzamiento de las precandidaturas negras, dijo a Brecha que, tras años muy
duros para la población en general y para el pueblo negro en particular, es
necesario reconstruir el país: «Estamos aquí reunidos y reunidas para
organizar, diseñar y construir un plan de país en el que las necesidades del
pueblo negro estén en el centro de la construcción de un nuevo Brasil. Para
eso es necesario recordar que los negros y las negras cargan este país en
las espaldas y que tenemos un proyecto político que no aceptará que el país
se reconstruya sin nuestra presencia». Para esa reconstrucción, afirma la
concejala: «Es necesario cambiar esta realidad a la que nos obligaron a
acostumbrarnos, en la que los negros son víctimas del racismo estructural,
de la violencia institucional y de la ausencia de representatividad, y en la
que en los espacios de poder solamente limpian o sirven. Colocar negros y
negras en las instituciones es atacar este imaginario, cambiar esta
realidad, sacar a nuestro grupo social de un lugar de precariedad, muerte y
enfermedad, y hacer que realmente ocupe el lugar que siempre debería haber
ocupado en Brasil, que es un país mayoritariamente negro».



Actualmente, Hilton es la líder de la bancada del Partido Socialismo y
Libertad (PSOL) en la Cámara Municipal de San Pablo y preside la Comisión de
Derechos Humanos y Ciudadanía. Dijo a este semanario que, aunque su carrera
política no ha sido fácil y ha enfrentado mucha resistencia, cree en el
impacto positivo de que personas como ella ocupen espacios en la política
institucional: «Hacemos cambios estructurales importantes a través de
nuestras propuestas legislativas, pero también a través del debate que
promovemos, del revuelo que armamos sobre temas que antes estaban
adormecidos». Y agregó: «Hoy estamos viendo cómo los cambios están
trascendiendo el papel, convirtiéndose en políticas públicas, en leyes que
impactan directamente en la realidad y la vida de la población negra y, con
ello, en el futuro de nuestro país». Hilton es precandidata a diputada
federal para las elecciones de octubre. Si resulta electa, será la primera
diputada travesti de la historia política brasileña.



Racismo y religión



Otro de los precandidatos presentes en el lanzamiento fue el pastor Henrique
Vieira. Reconocido como una de las voces más potentes del progresismo
evangélico, disputará una banca de diputado federal por el PSOL. Entiende
que el racismo es una herida abierta en la historia del país y que el
fundamentalismo religioso es uno de los vectores que legitiman la violencia
contra los negros y las negras, y por eso se coloca en el lado contrario.
«Quiero estar junto con este gran movimiento de empoderamiento negro, de
construcción de bancadas y disputa de espacios, con esta especificidad de la
lucha contra el fundamentalismo y el racismo, que son problemas en Brasil y
el mundo entero, donde la ultraderecha y su ataque a la democracia tienen un
aura de fundamentalismo religioso», dijo a Brecha. Busca que su banca sea
«una expresión colectiva de la fe al servicio de la emancipación de los
oprimidos, una fe que dialoga con la diversidad, defiende el Estado laico y
se posiciona en la lucha antirracista con una cultura de paz, garantías y
ampliación de derechos».



Tras el masivo apoyo de los sectores evangélicos a Jair Bolsonaro durante
las últimas elecciones presidenciales y el avance del lobby fundamentalista
y de la agenda ultraconservadora (véase «El casamiento perfecto», Brecha,
21-IV-22), la relación entre las izquierdas y los evangélicos no ha sido
para nada armónica. Para Vieira, reconstruir ese vínculo es fundamental para
el avance democrático: «Es necesario quebrar los prejuicios con relación al
campo evangélico. Existe un extremismo evangélico, con un proyecto de poder
que se articula en Brasilia y que tiene que ser enfrentado. Pero la
población evangélica en general es en su mayoría trabajadora, gente pobre
que lucha para sobrevivir. Y si no dialogamos con esas personas, no
dialogamos con una parte significativa de la clase trabajadora». Y añadió:
«No es posible tener un proyecto de democracia, un proyecto popular o un
proyecto anticapitalista revolucionario en Brasil que no considere el
elemento religioso ni la espiritualidad».



Voto antirracista



En 2018, el día en que Bolsonaro ganó la elección, Carmen Silva, líder del
Movimiento sin Techo del Centro, se desmayó. Estaba con su gente en la
Ocupación 9 de Julio, antiguo edificio del Instituto Nacional del Seguro
Social, ocupado desde 1997 y en el que viven 120 familias. «Estamos juntos y
esa es nuestra resistencia. El odio jamás», dijo antes de desvanecerse. Casi
cuatro años después, durante el evento celebrado en este mismo lugar, le
dijo a Brecha: «Me desmayé porque se me apretó el corazón al ver que nuestra
población más pobre –que siempre fue rechazada y hostilizada– había sido
engañada y había votado a un hombre que siempre dejó claro que no tenía nada
más para ofrecernos que odio». Silva planteó que el enorme desafío de este
año es, «además de derrotarlos en las urnas, derrotar su legado: el
bolsonarismo; derrotar el odio que dividió a las familias y que trajo
nuevamente el hambre».



«Nosotras comprendimos que ya no queremos ser representadas. Queremos ser
representantes de nuestra propia causa, porque somos nosotras las que
tenemos la vivencia del día a día», dijo Silva. Para ella, es preciso
«ennegrecer el Congreso y los parlamentos de los estados brasileños» para
«trabajar las políticas públicas y las luchas sociales sin olvidarse de
nadie», en un país donde «las políticas son históricamente dirimidas por el
pensar blanco». Entiende que «los resultados de la necropolítica imperante
tienen color y dirección definida: son las personas negras». En este
sentido, el 12 de mayo, tras una iniciativa de la Coalición Negra por los
Derechos, los partidos de la oposición presentaron al Supremo Tribunal
Federal un pedido para que el Estado brasileño reconozca el genocidio de su
población negra y el gobierno dé explicaciones. El documento destaca el
creciente aumento de letalidad policial y el desmonte de las políticas de
salud pública y redistribución de la riqueza, lo que imposibilitaría el
acceso de esta población a condiciones de vida dignas. La magistrada Rosa
Weber dio un plazo de diez días a partir del 30 de mayo para que el gobierno
responda.



Douglas Belchior, coordinador de la Coalición Negra por los Derechos y
precandidato a diputado federal por el PT, dijo en el evento del lunes: «El
voto antirracista es el voto al movimiento negro. No estamos aquí para
elegir a personas negras y nada más. Estamos aquí para elegir liderazgos del
movimiento negro, aquellos que en su elaboración política plasman esta
tradición de lucha. No apoyamos a cualquiera: estamos con aquellos que
abrieron el camino y nos trajeron hasta aquí». Lo dijo rodeado de figuras
históricas del movimiento negro brasileño, como la filósofa Sueli Carneiro;
el economista Hélio Santos; la psicóloga Cida Bento; el fundador del
Movimento Negro Unificado, Milton Barbosa, y la ingeniera agrónoma y
escritora Nilma Bentes. Y dejó un desafío en el aire: «Estas elecciones son
una buena prueba para las organizaciones de la sociedad civil, para los
partidos políticos de izquierda, para las fundaciones que han gritado a los
cuatro vientos que son antirracistas. Llegó la hora: demuéstrenlo».



***



El apoyo a Lula



Van con él



A pesar de ser de diferentes partidos, los asistentes al evento tenían una
preferencia común para las presidenciales de octubre: Luiz Inácio Lula da
Silva. Recientemente infectado de covid, el expresidente no pudo participar
presencialmente de la actividad, pero lo hizo de forma virtual. Al comenzar
su discurso, afirmó que es la primera vez que ve un encuentro de esta
importancia en su «larga lucha por la democracia en el país» y destacó la
importancia de votar a candidatos negros: «¿Cómo queremos que las
reivindicaciones y las necesidades de la población negra y del pueblo pobre
sean atendidas si no tenemos a los negros y las negras en las cámaras de
concejales, en las alcaldías, en la presidencia de la república, en el
Congreso? Nuestro país tiene que reflejar nuestros colores, y aquí los
negros son mayoría».

  _____





--
El software de antivirus Avast ha analizado este correo electrónico en busca de virus.
https://www.avast.com/antivirus


------------ próxima parte ------------
Se ha borrado un adjunto en formato HTML...
URL: http://listas.chasque.net/pipermail/boletin-prensa/attachments/20220610/b78a3ee4/attachment-0001.htm


Más información sobre la lista de distribución Boletin-prensa