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<BODY bgColor=#ffffff background=""><FONT face=Arial size=2>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><EM><FONT color=#800000 size=4>Boletín informativo -
Red solidaria de la izquierda radical</FONT></EM></STRONG></DIV>
<DIV align=center><STRONG><EM><FONT size=4><IMG alt="" hspace=0
src="C:\Documents and Settings\EH\Mis documentos\germain 1.JPG" align=baseline
border=0><BR><FONT color=#000080>Año III - Nº 9184 - Febrero 23 - 2006 -
Redacción: </FONT></FONT></EM></STRONG><A
href="mailto:germain@chasque.net"><STRONG><EM><FONT color=#000080
size=4>germain@chasque.net</FONT></EM></STRONG></A></DIV>
<DIV align=center>
<HR>
</DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG><FONT
size=3>Imperialismo</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT size=3>Las caricaturas
en la política de Oriente Próximo <BR><BR>James Petras y Robin
Eastman-Abaya</FONT></STRONG> </FONT></DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2></FONT> </DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2><A
href="http://www.lahaine.org/"><STRONG>http://www.lahaine.org/</STRONG></A></FONT></DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2><STRONG>Traducido para La Haine por Felisa
Sastre</STRONG></DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify>El eje central de la actual confrontación candente entre los
manifestantes musulmanes y árabes, dirigentes políticos y gobiernos, y los
regímenes de Europa occidental y editores, tiene su origen en los intentos
israelíes de polarizar el mundo a su favor y de promover el aislamiento, las
sanciones económicas y /o un ataque militar contra Irán. </FONT></DIV><FONT
face=Arial size=2>
<DIV align=justify><BR>Sin embargo, existen cuestiones clave que casi todos los
comentaristas y analistas han pasado por alto. Entre ellas, las
siguientes:</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Por qué las caricaturas se han publicado en
Dinamarca?</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Cuáles son los antecedentes políticos de “Flemming
Rose”, el redactor cultural de Jylland-Posten que pidió, seleccionó y publicó
las sátiras?</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Qué asuntos de mayor importancia han coincidido con el
calendario de la publicación y reproducción de los dibujos?</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Quién se beneficia de su publicación y del
enfrentamiento posterior entre árabes e Islam y Occidente?</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Cuál es el contexto político contemporáneo de las
protestas árabes y musulmanas?</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿En qué medida el servicio secreto israelí, Mossad, está
implicado en la provocación del conflicto entre occidente y los árabes y
musulmanes, y de qué forma los resultado obtenidos han respondido a sus
expectativas? </DIV>
<DIV align=justify><BR>Un punto de partida para analizar la controversia
suscitada, que se ha convertido en el foco para acusar a los musulmanes y a los
países islámicos de intolerancia frente la “libertad de expresión” occidental,
es el papel desempeñado desde hace tiempo por Dinamarca como centro principal de
las operaciones del Mossad en Europa. Dicho de otra manera; ¿Cómo un pequeño
país escandinavo de 5,400.000 ciudadanos y residentes (de los cuales 200.000 son
musulmanes, es decir, menos del 3 %,), conocido por sus cuentos de hadas, por el
jamón, y el queso, se ha convertido en objetivo de la furia de millones de
creyentes musulmanes, desde Afganistán a Palestina, de Indonesia a Libia y en
las calles de todo el mundo en donde existe una población musulmana
significativa? ¿Por qué, tras el bombardeo de Bagdad, las torturas de Abu Graib,
las masacres de Faluya y la total destrucción de los pueblos de Iraq y
Afganistán, habrían de volcar su cólera los musulmanes contra los símbolos de
Dinamarca, desde sus galletas en lata a sus embajadas y empresas en el
exterior?</DIV>
<DIV align=justify><BR>La historia, presentada con trazos duros por los
noticiarios de televisión, es del señor “Flemming Rose”, un esforzado redactor
cultural de un muy difundido periódico danés, quien ha querido contrarrestrar la
creciente “corrección política” de los europeos en su crítica hacia los
musulmanes, postura que compara con la “autocensura” de la que fue testigo en su
país de origen, la Unión Soviética. El editor de cultura del Jyllands-Posten,
ucraniano de nacimiento y con extraño nombre, encargó a caricaturistas daneses
presentar una serie de dibujos que representaran al Profeta Muhammad tal como
ellos (los dibujantes daneses) se lo imaginaban. Sin embargo, cuatro de los doce
dibujos seleccionados para su publicación fueron ilustrados por el propio equipo
de Rose, entre ellos el más controvertido, el de la “bomba en el turbante”.
Desafiando a las leyes danesas contra la blasfemia, Rose publicó las caricaturas
el 25 de septiembre de 2005, y el resto ya se sabe...</DIV>
<DIV align=justify><BR>Una enorme respuesta contra el “sagrado derecho a la
libertad de expresión” occidental ha surgido en el Mundo Musulmán mientras que
millones de europeos y estadounidenses se sentían conmocionados y decididos a
defender sus queridas libertades en este “enfrentamiento de civilizaciones”. Se
ha culpabilizado a Siria e Irán, especialmente, por movilizar a los
encolerizados creyentes en las calles de Damasco y Teherán, en Beirut y en los
barrios empobrecidos de Gaza. Según las Secretaria de Estado estadounidense,
Rice, “Irán y Siria se han salido de madre para atizar los sentimientos y para
servirse de ellos para sus propios objetivos, y el mundo debería llamarles la
atención por ello”. Las autoridades paquistaníes y libias, aliadas de Estados
Unidos, ordenaron disparar sobre los manifestantes, matando e hiriendo a un
montón de gente, al mismo tiempo que detenían a numerosos líderes religiosos.
Los gobiernos occidentales presionaron a sus aliados árabes e islámicos para que
evitaran más ataques contra los productos y propiedades daneses y culpabilizaron
de complicidad e instigación a aquellos incapaces de reprimir la furia. Todo
ello por una serie de caricaturas, o al menos eso se nos dice.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El editor cultural, “Flemming Rose”, que se cansó
enseguida de tener que estar rodeado de un equipo de policías daneses y de
agentes de seguridad para protegerle de un asesinato, y había perdido su
capacidad de movimientos habituales por su tranquilo Copenhague, eligió un
refugio seguro en Miami, Florida( en lugar de su Ucrania nativa), entre los
exiliados cubanos, los sayanim* (ver nota a pie de página)1 y jubilados que
juegan al Mah Jong2, mientras el drama continúa.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Dinamarca, centro de la actividad del
Mossad</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Por qué Dinamarca? ¿Se hubiera podido organizar esta
incivil y prefabricada controversia desde las páginas de cualquiera de los
principales periódicos de Londres o Nueva York? ¿Quién ha querido situar a
Dinamarca en el centro de este “choque de civilizaciones” que parece un guión de
una película islamófoba de suspense de la serie B?</DIV>
<DIV align=justify><BR>Un interesante capítulo del libro del ex agente israelí
del Mossad, Victor J. Ostrovsky, By Way of Deception (1990, St. Martin Press)
subraya las estrechas relaciones, durante décadas, entre los servicios de
inteligencia daneses y el Mossad israelí:</DIV>
<DIV align=justify><BR>“Las relaciones entre el Mossad y los servicios de
inteligencia daneses son tan estrechas que resultan indecentes. Pero no es la
decencia del Mossad la que queda comprometida por el acuerdo; es la de
Dinamarca. Y ello porque los daneses tienen la idea equivocada de que por haber
salvado a muchos judíos durante la II Guerra Mundial, los israelíes están
agradecidos y ellos pueden confiar en el Mossad”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El Mossad tiene capacidad para vigilar a toda la
población árabe y especialmente a los palestinos (presumiblemente incluso a
aquellos que tienen nacionalidad danesa) gracias a sus especiales relaciones con
los daneses:</DIV>
<DIV align=justify><BR>“...un hombre del Mossad controla ‘todos los mensajes
relacionados con los árabes y palestinos (de la comunidad árabe en Dinamarca)
que llegan a la sede central del Servicio de Seguridad Ciudadana Danés...un
extraordinario acuerdo para un servicio de inteligencia extranjero’.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El alto aprecio que los funcionarios de la inteligencia
danesa sienten por sus colegas israelíes del Mossad, según Ostrovsky,
aparentemente no es recíproco:</DIV>
<DIV align=justify><BR>“El Mossad siente tal desprecio por su contraparte danesa
que se refieren a ellos como ‘fertsalach’, palabra hebrea para definir una
pequeña explosión de gas, es decir, un pedo...así denominan en el Mossad todo lo
que hacen’ (pp. 231-232).</DIV>
<DIV align=justify><BR>A cambio de su servilismo, los daneses merecen recibir
“entrenamiento” por parte de los israelíes.:</DIV>
<DIV align=justify><BR>Cada tres años, agentes de la inteligencia danesa van a
Israel para un seminario dirigido por el Mossad... que genera contactos muy
útiles para el Mossad, perpetuando la idea de que no existe ninguna otra
organización que gestione mejor el terrorismo que el Mossad”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Tras el desastre de Estados Unidos en Iraq y la
resistencia del mundo a un “masivo ataque preventivo” o al embargo económico o
diplomático de Irán, que podría elevar el precio del barril de petróleo por
encima de los 100 $, Israel tuvo que cambiar sus ideas previas. Por ello tendría
sentido que una campaña dirigida a promover las justificaciones para atacar a
países como Irán y Siria (los actuales enemigos de Israel) surgiera de uno de
los más comprometidos aliados europeos de Estados Unidos en la invasión y
destrucción de Iraq y Afganistán, y cuyo servicio nacional de inteligencia
(denominado tan cariñosamente como ‘fertsalach’) estuviera impaciente por servir
a los intereses de Israel.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Flemming (o incendiario3) Rose: un periodista con
causa</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Habida cuenta de la infiltración del Mossad desde hace
muchos años en las agencias de inteligencia danesas, y sus estrechas relaciones
de trabajo con los medios de información de la derecha, no resulta sorprendente
que un judío ucraniano, que actúa con el nombre de “Flemming Rose”, y que tiene
relaciones directas con el Estado israelí ( y en particular con el gobierno
ultraderechista del Likud), fuera el centro de la controversia sobre las
viñetas. Los vínculos de Rose con el Estado israelí son anteriores a su bien
conocida y propagandista entrevista con Daniel Pipes (2004), el famoso ideólogo
sionista que aborrece a los árabes. Antes de que se le nombrara editor cultural
de un importante diario derechista danés, desde 1990 a 1995, “Rose” fue un
reportero con sede en Moscú que tradujo al danés la autobiografía hagiográfiaca
de Boris Yeltsin, protegido de los oligarcas rusos pro-israelíes del
poscomunismo, muchos de los cuales tienen la doble nacionalidad y colaboran con
el Mossad en el blanqueo de miles de millones de dinero negro.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Entre 1996-1999, “Rose”, el periodista, realizó el
circuito de Washington (viajando con Clinton a China) antes de volver a Moscú
donde trabajó como corresponsal durante los años 1999-2004 para el
Jyllands-Posten. En 2005, se convirtió en su editor cultural, a pesar de sus
escasos o nulos conocimientos de la materia, pasando por encima de otros
periodistas daneses del equipo de dirección. Desde su nuevo puesto, “Rose” puso
en marcha un programa decidido para agravar la creciente hostilidad de los
conservadores daneses hacia los inmigrantes de Oriente Próximo, y en particular
hacia los musulmanes practicantes. Sirviéndose del formato de la “entrevista”,
publicó las virulenta diatriba anti-islámica de Pipes, probablemente para
“probar la temperatura del ambiente” antes de dar el siguiente paso, de acuerdo
con la estrategia del Mossad, de polarizar una confrontación entre
Occidente-Oriente.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Contexto Político para actuar</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Existen suficientes pruebas que demuestran que la guerra
de Iraq fue en gran parte el resultado de una masiva campaña de desinformación
llevada a cabo por los civiles militaristas del Pentágono y por los sionistas
estadounidenses que ocupaban puestos relevantes dentro y fuera del Pentágono y
en la sociedad civil, en coordinación con el Estado israelí que deseaba la
destrucción de Iraq como nación viable. No existe prueba de que las principales
compañías de petróleo estadounidenses presionaran al Congreso o promovieran la
guerra en Iraq o el actual enfrentamiento con Irán, pero sí existen un montón de
evidencias que indican que están muy inquietas ante las pérdidas que puedan
producirse como consecuencia de un ataque israelí contra Irán.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Los sionistas consiguieron sus objetivos en Iraq:
establecer una cabeza de puente en el enclave kurdo del norte (‘Kurdistán’), y
asegurarse activos estratégicos en el nuevo régimen “iraquí” a través de Chalabi
y compañía.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Las principales organizaciones judías se movilizaron para
oponerse a cualquier crítica de los políticos sionistas, acusándolas según lo
previsto de ‘anti-semitismo’. Sin embargo, con el tiempo, las investigaciones
del FBI, los informes de la CIA y las resoluciones judiciales han señalado a
agentes clave y a sus colaboradores internos como espías israelíes. Mientras
Israel se beneficiaba de la invasión de Iraq capitaneada por Bush-Blair, no se
puede decir lo mismo respecto de Estados Unidos: los miles de víctimas aumentan,
los gastos de la guerra se disparan hasta centenares de miles de millones de
dólares, y la oposición a la guerra se intensifica.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Los planes estratégicos de Israel para extender las
operaciones militares de Estados Unidos a Irán y Siria se enfrentan a desafíos
importantes, desde el interior del mismo ejército, de la opinión pública e
incluso de parte de los medios comunicación. Las influencias del Mossad en el
New York Times, en el Wall Street Journal y en otros medios, han tenido que
tragarse pequeños artículos sobre la inexistente amenaza de armas nucleares de
Irán, precisamente una vez que se ha demostrado que el mismo complot contra Iraq
fue una total manipulación. Por ello, se necesitaba otra línea propagandista
para silenciar a quienes criticaban la guerra y azuzar la animosidad contra los
islamistas y árabes en general, y contra Irán en particular. En ese momento, la
operación “Flemming Rose-Mossad entra en escena. Los dibujos reflejando el odio
hacia el Islam se publicaron en Dinamarca en septiembre de 2005, mientras los
israelíes y los sionistas estadounidenses intensificaban su propaganda bélica
contra Irán.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero la respuesta inicial de los países islámicos fue
limitada. La historia no apareció en el International Herald Journal hasta
finales de diciembre de 2005. A principios de enero de 2006, los “katsas” (en
hebreo, agentes encargados del caso) activaron a los sayarim (colaboradores
judíos voluntarios que trabajan fuera de Israel) en los medios europeos
occidentales y orientales para que reprodujeran simultáneamente las caricaturas
los días 1 y 2 de febrero de 2006. Una operación semejante de los sayarim podría
haber sido el origen de la decisión tomada por el redactor jefe de France-Soir,
Arnaud Levy y el editor Serge Faubert, de publicar las caricaturas. El
propietario egipcio del periódico francés, casi de inmediato despidió al
redactor Jacques Lefranc- quien, según dijo en una entrevista para la CNN, se
había opuesto en principio a su publicación-, pero dejó en sus puestos a Levy y
Faubert.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Una campaña escandalosa se lanzó en prácticamente todos
los medios de comunicación pro-occidentales, en la que se condenaba la que en
sus inicios fue una relativamente moderada protesta islámica, que se produjo
entre septiembre y diciembre de 2005, lo que provocó rápidamente la subsiguiente
masiva intensificación, ayudada sin duda por agentes camuflados del Mossad entre
las poblaciones árabes. Los “peditos” del Mossad, es decir, los servicios de
inteligencia daneses, avivaron el fuego aconsejando al derechista primer
ministro de Dinamarca, Anders Fogh Rasmussen que no cediera y se negara a
presentar disculpas tal como los gobiernos árabes pro-occidentales pedían, e
incluso que rechazara la petición de una entrevista con un grupo de diplomáticos
de países árabes e islámicos acreditados en Dinamarca para hablar sobre “la
situación”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“Flemming Rose” y el Mossad intentaron otra estrategia
para elevar la tensión entre Oriente y Occidente. Públicamente se ofreció a
publicar en “su” periódico cualquier viñeta iraní que se mofara del Holocausto.
El redactor jefe de Jyllands-Posten, aparentemente con retraso, se sorprendió
por los planes ocultos de “Flemming Rose”, vetó la oferta y pidió a Rose que se
tomara unas vacaciones. Rose salió para Miami, no hacia Tel Aviv- donde su
estancia podría levantar sospechas en relación con su proclama de que se oponía
simplemente a la “autocensura”. En Miami, no tenía dudas de que disfrutaría de
la protección de los sayanim locales, armados y adiestrados para la
“autodefensa” de los sionistas amenazados.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Los sayanim - defensores de la civilización
occidental</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Los sayanim, palabra derivada, según Victor Ostrovsky, de
la palabra hebrea “ayudar”, constituyen una enorme red mundial de judíos
situados en lugares estratégicos o rentables ( inmobiliarias, medios de
comunicación, finanzas, concesionarios de coches, etc...) que se han
comprometido a ayudar a las actividades del Mossad israelí en el interior de sus
propios países, debido a la lealtad supranacional que los sayanim ofrecen a
Israel por encima, y no siempre a favor, de los intereses de su país de origen.
Según Gordon Thomas y Martín Dillon en su detallada biografía, Robert Maxwell,
Israel Superspy (Carroll and Graf Publishers, 2002), el famoso magnate de los
medios de comunicación, fue un super-sayanim, que facilitaba cobertura, agentes,
concesiones políticas, servicios de blanqueo de dinero y noticias inventadas al
servicio de Israel, por petición del Mossad. Jonathan Pollard, el investigador
naval estadounidense encarcelado por espionaje, es otro relevante sayanim.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Las actividades de estos “auxiliares” alcanzan desde el
mundo del espectáculo a lo más mundano y, de acuerdo con lo que afirma Victor
Ostrovsky en su biografía de 1990, By Way of Deception, constituyen un colectivo
de miles de individuos activos e inactivos que pueden prestar servicios
discretamente a la “causa de Israel”, tal como se define en cualquier operación
actual del Mossad. El cinismo de este acuerdo es evidente: para el Mossad poco
importa si una operación como la de “Flemming Rose” pone en peligro los
intereses nacionales y económicos del país del sayanim y, que en caso de ser
descubierto, podría perjudicar la situación de los judíos en la diáspora. La
respuesta habitual del Mossad sería: ¿Qué es lo peor que podría ocurrirle a esos
judíos? ¿Que vinieran a Israel? Estupendo”. Esta imprudencia tiene claras
repercusiones para los judíos que se han negado a ser reclutados como
colaboradores del Mossad en los países afectados.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>La propaganda bélica del Mossad y las
“caricaturas de la controversia”</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Los dirigentes israelíes han expresado su oposición a los
esfuerzos diplomáticos de la Administración Bush para comprometer a las
potencias europeas en las negociaciones con Irán. Automáticamente y sin dudar,
las principales organizaciones sionistas y judías en Estados Unidos (AIPAC, los
presidentes de las organizaciones judías más importantes, ADL y otras) han
puesto en marcha un campaña nacional para movilizar al Congreso y a sus “amigos”
en el Ejecutivo para emprender acciones militares de inmediato o para imponer
sanciones económicas a Irán. La Administración Bush, sin embargo, aunque está de
acuerdo, no tiene el apoyo de la opinión pública en EE.UU. ni entre sus aliados
europeos y sus respectivos electorados. La política del Mossad tenía que crear
un pretexto para polarizar la opinión pública de Oriente Próximo (y de otras
regiones) y de Occidente para intensificar las tensiones y demonizar a los
adversarios islámicos sobre sus hegemónicos propósitos en la zona. Las
caricaturas de “Rose” han servido a la perfección al Mossad.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El asunto podía presentarse como un tema de libertad de
expresión, un conflicto de “valores”, no de “intereses”, entre el “occidente
democrático” y el fundamentalismo “totalitario” (tal como lo caracterizan
Rose-Pipes) de los islamistas. Nada más lejos de la verdad. Rose pidió y
seleccionó las caricaturas islámicas mientras que su periódico había rechazado
dibujos similares de Jesucristo con anterioridad. La imagen de Rose como un
“iconoclasta cultural”- al mismo tiempo que trabaja para un periódico derechista
en cuyas páginas se publican diariamente “nuevas historias” contra los
inmigrantes de Oriente Próximo, y entrevistas elogiosas con sionistas
extremistas- es, prima face, increíble, aunque esa imagen ha sido difundida por
todos los medios de comunicación más importantes. Aunque “Rose” inició las
tensiones internacionales, sus colegas liberales y neoconservadores y sus
camaradas, dentro y fuera del Mossad, publicaron sus transgresiones y provocaron
la cólera del Mundo Árabe e Islámico.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Las caricaturas, los insultos que las siguieron y las
calumnias en las que se atacaba a los manifestantes islámicos y a sus aliados en
África, Oriente Medio, Asia y Europa, eventualmente provocaron las protestas, en
su mayor parte pacíficas y más tarde violentas, de millones de personas. Las
imágenes visuales de las protestas y manifestaciones violentas fueron destacadas
por los medios de comunicación occidentales, creando con éxito un miedo
intencionado y una reticencia contra los países islámicos y contra las minorías
en Europa. La islamofobia ha ganado ímpetu. Los propagandistas sionistas en
Europa y Estados Unidos han vinculado la defensa de la “libertad de expresión”
con las políticas de “seguridad” de Israel. Mientras Occidente volcaba su furia
contra los manifestantes islámicos, Israel bloqueaba Gaza , y Estados Unidos y
Europa cortaban sus ayudas a los palestinos, amenazando a su población con
masivas hambrunas ¡por ejercitar su democrático derecho a elegir a sus propios
dirigentes! La farsa de la “libertad de expresión” de Rose ha resucitado la
desprestigiada doctrina del “Choque de civilizaciones”promocionada por los
sionistas conservadores. Aprovechándose de la islamofobia europea y de la
creciente sensibilidad de los musulmanes practicantes y de los nacionalistas
árabes frente a los abusos de Occidente, es probable que los expertos israelíes
en la guerra psicológica adoptaran el tema de la”libertad de expresión” como el
detonante ideal del conflicto.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La democrática victoria electoral de Hamás- calificado
por Israel como un movimiento terrorista- aceleró los esfuerzos de Israel en
convencer a los gobiernos occidentales para que insistieran ante los regímenes
de los países musulmanes en que reprimieran a las “irracionales muchedumbres
islámicas” o se enfrentaran a la censura occidental o la retirada de la ayuda.
(El fracaso en aplastar violentamente a los manifestantes se ha presentado por
los medios de información como una aprobación o instigación oficial). Las
principales organizaciones sionistas de Estados Unidos pudieron influir en la
Secretaria de Estado, Rice, para que culpabilizara a Irán y Siria de fomentar
las manifestaciones en todo el mundo, desde Gaza a Filipinas. La estrategia
israelí fue la de servirse de los ultrajes a Europa para debilitar su oposición
a un ataque militar o a adoptar sanciones económicas contra Irán y Siria.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Más allá de la Blasfemia Religiosa</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Aunque la mayoría de los analistas del establishment han
considerado que las caricaturas han sido la causa de las masivas manifestaciones
en todo el mundo, en realidad, en el mejor de los casos, han sido el detonante
de una serie completa de acontecimientos en marcha que tienen una mayor
significación política. Desde el bombardeo de Iraq- “Conmoción y temor”- a las
torturas masivas y la rutinaria humillación diaria en los países ocupados; desde
la destrucción total de Faluya (un ejemplo estadounidense como lo fue Guernica
para los nazis) a la devastación israelí de Jenin y Palestina; desde los
asesinatos diarios de palestinos a manos de los ocupantes israelíes, al hecho de
cubrir de suciedad el Corán en Guantánamo, Israel, EE.UU. y Europa han intentado
demostrar que ningún musulmán está a salvo en lugar alguno- ni en sus escuelas,
casas, oficinas, campos, fábricas o mezquitas- y que nada es sagrado.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El motivo por el que millones de personas se manifiestan
contra una caricatura de Muhammad, publicada en un insignificante periódico
escandinavo de derechas, es que ha sido la gota que ha hecho rebosar el vaso- el
detonante- de una serie de violaciones deliberadas de los derechos fundamentales
políticos y sociales de los pueblos musulmanes, árabes colonizados. Mientras los
medios occidentales se han centrado exclusivamente en el contenido religioso de
las manifestaciones, casi todos los países donde han tenido lugar
manifestaciones masivas continuadas han sido objeto de intervenciones
occidentales recientes, del pillaje a gran escala de sus materias primas y /o
han experimentado la destrucción de sus derechos seculares: países invadidos,
viviendas, escuelas, hospitales, sistemas de salud y de abastecimiento de agua
potable arrasados; recursos naturales y agrícolas saqueados; museos, bibliotecas
y sitios arqueológicos sometidos a pillaje y mezquitas profanadas. Las actuales
condiciones materiales de existencia para la gente que vive en países árabes e
islámicos son un infierno provocado por los occidentales (tanto para los no
creyentes como para los creyentes). Y ahora su más profundo, histórico y
espiritual punto de referencia, el profeta Muhammad- la figura religiosa más
venerada- ha sido pisoteado repetidamente con impunidad por los arrogantes
imperialistas, sus serviles medios de comunicación, ayudados e incitados por
Israel y sus “sayanim” operarativos en el exterior. Resulta cínico sugerir que
los musulmanes practicantes pudieran profanar la figura de Jesucristo
impunemente cuando el Corán lo prohíbe.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Tal como los estrategas israelíes sabían muy bien con
anterioridad, la difamación del Islam no tenía lugar en un contexto de vacío
político: las condiciones materiales para una rebelión arabo-islámica estaban
maduras: Hamás había barrido en las elecciones palestinas, el ejército
estadounidense era consciente de que estaba perdiendo la guerra en Iraq, Irán se
negaba a rendirse, Bush estaba perdiendo el apoyo de la opinión pública por la
actual guerra y las futuras en Oriente Medio, el AIPAC- principal instrumento
político de Israel para influir en la política estadounidense- se encuentra
sometido a una investigación criminal...la estrategia de Israel de que Estado
Unidos hiciera por ellos sus guerras se estaba volviendo en contra. Había que
resucitar las tensiones políticas y militares que ya habían explotado tras el 11
de septiembre de 2001 para obtener ventajas para Israel: de ahí la provocación
de “Flemming Rose”; de ahí la coordinación y la amplia difusión de su actuación;
de ahí la agitación en torno a la “libertad de expresión” por parte de los
sayanim occidentales, de los ideólogos liberales, conservadores y
neoconservadores; de ahí la previsible explosión de protestas, de ahí la
“recreación” de la tensión en Oriente Próximo...y los avances de los planes de
Israel.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La confrontación que sigue su curso es más que un asunto
religioso o de libertad de expresión; más que una provocación despiadada de un
errático redactor cultural, mimado por los “peditos” de una agencia de
inteligencia danesa infiltrada. Lo que está en juego es la creación de
estereotipos sobre los pueblos árabes, islámicos y del Tercer Mundo para
mantener y profundizar su opresión, explotación y subordinación.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La fuente más influyente, prolífica e importante de los
estereotipos racistas árabes la constituyen Israel y sus estudiosos, “expertos
en terrorismo”, psicólogos de las más prestigiosas universidades y laboratorios
de ideas (en especial estadounidenses y europeos), que han suministrado los “
perfiles psicológicos” para torturar, humillar, provocar y reprimir a las
millones de personas que luchan por la autodeterminación contra el dominio
imperial y colonialista.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Israel, una vez más, y de forma particular a través de
sus agentes en el exterior, ha antepuesto sus intereses expansionistas y
militaristas a los de los pueblos de Estados Unidos y Europa. “¿Es bueno para
los judíos?”. El camino establecido por el Estado israelí ha conducido al
callejón sin salida de la confrontación masiva, de la profunda animosidad entre
árabes y musulmanes y los gobiernos occidentales. Lo que parece una maniobra
inteligente para los “Rose” del mundo y sus dóciles katsas y sayanim: el
provocar los enfrentamientos, puede volverse otra vez en contra. La revuelta
puede ir más allá de la protesta contra los símbolos de la humillación para
atacar las bases del poder, entre ellas las de los procónsules árabes y
musulmanes y los colaboradores de las políticas y el poder económico
euro-estadounidenses. Aunque el Mossad es muy astuto al infiltrarse y provocar a
los grupos oprimidos, ha sido especialmente inepto en controlar y contener las
revueltas originadas, tal como lo prueban la reciente victoria de Hamás y el
éxito de la resistencia iraquí. La próxima caricatura que podría suscitar
controversia puede mostrar a Moisés conduciendo a su pueblo a través del
desierto.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Epílogo</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Mientras el asunto de la “libre expresión contra la
blasfemia”, provocado por el Mossad sigue haciéndose más profundo, Israel
continúa imponiendo un asedio económico, al estilo nazi, sobre 4 millones de
palestinos, planeado para privarles de alimentos para que renuncien a sus
libertades democráticas. Intencionada es la palabra exacta, Gideon Levy,
periodista estrella del diario israelí Haaretz (19.02.06), grabó a Dov
Weisglass, consejero del primer ministro israelí, comentando jocosamente a
funcionarios de alto nivel “ Es como(el bloqueo económico que puede incluir la
electricidad , el agua, y la comida) una cita con el dietista. Los palestinos
adelgazarán bastante pero no morirán”. Los funcionarios israelíes “se partían de
risa”. Como señala Levy “más de la mitad de los palestinos viven ya en la
pobreza...el año pasado el 37 % tuvo dificultades para conseguir comida...el 54
% de los habitantes de Gaza han tenido que reducir el consumo de alimentos...la
mortalidad infantil ha subido al 15 %...el paro subió un 28 %.”. Una meditada y
planificada hambruna masiva de una población recluida en guetos, jocosamente
comparada por sus verdugos como “una cita con el dietista”, constituye una
réplica exacta de las discusiones internas de los altos mandos nazis sobre la
población del Gueto de Varsovia. La capacidad de Israel para imponer y llevar a
cabo su política genocida se ha facilitado en gran medida gracias a la
polarización en los símbolos- orquestada en Europa occidental por el Mossad y
“Rose”. Un “conflicto” cultural al servicio del genocidio, difícilmente puede
considerarse una maniobra inteligente o una mera violación de los sentimientos
islámicos, es un crimen contra la humanidad.<BR><BR><STRONG><U>Notas de la
traducción</U></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>1) N.T.: Aunque el autor alude a una nota a pie de
página, no la introduce y explica el significado del término a lo largo del
texto.<BR>2) N.T.: Juego de cartas que se practica en solitario<BR>3) N.T.: En
el original “flamming” (incendiario), juego de palabras del autor respecto al
nombre del responsable de la publicación de las viñetas.
<HR>
<STRONG><FONT color=#000080>La información contenida en el boletín es de fuentes
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sociales y organizaciones políticas de izquierda. Los artículos firmados no
comprometen la posición editorial de Correspondencia de Prensa. Suscripciones,
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