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<DIV align=center><STRONG><EM><FONT color=#800000 size=4>Boletín informativo -
Red solidaria de la izquierda radical</FONT></EM></STRONG></DIV>
<DIV align=center><STRONG><EM><FONT size=4><IMG alt="" hspace=0
src="C:\Documents and Settings\EH\Mis documentos\germain 1.JPG" align=baseline
border=0><BR><FONT color=#000080>Año III - 6 de junio 2006 - Redacción:
</FONT></FONT></EM></STRONG><A
href="mailto:germain@chasque.net"><STRONG><EM><FONT color=#000080
size=4>germain@chasque.net</FONT></EM></STRONG></A></DIV>
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<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>Capitalismo<BR> <BR>La máscara
humanitaria de la explotación…<BR> <BR>Los comunistas liberales de Porto
Davos<BR> <BR>Slavoj
Zizek</FONT></STRONG> <BR> <BR></DIV><STRONG></STRONG></FONT>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG>Es uno de los críticos más
rigurosos del capitalismo y la cultura dominante. Slavoj Zizek, sociólogo y
filósofo, nació en Ljubljana, Eslovenia. Profesor en la Universidad de París
VIII y en las Universidades de Minnesota, Columbia y Michigan, actualmente
reside entre Buenos Aires, París y Ljubljana. Autor de más de cincuenta libros
traducidos a varios idiomas, la obra intelectual de Zizek aunque polémica, es
una referencia ineludible del pensamiento crítico. El texto que presentamos fue
tomado de la Revista de Cultura Ñ (Clarín, Buenos Aires 6-5-06), es una versión
resumida del publicado en London Review of Books. (Redacción de Correspondencia
de Prensa)</STRONG><BR> <BR> <BR>En la última década, Davos y Porto
Alegre han surgido como las ciudades mellizas de la globalización. En Davos, la
elite global de directores de empresas, hombres de estado y personalidades
mediáticas, se reúnen bajo una fuerte protección policial, intentando
convenceronos a nosotros (y a sí mismos) de que la globalización es su mejor
remedio. En Porto Alegre, la contra-elite del movimiento antiglobalización se
reúne, intentando convencernos a nosotros ( y a sí mismos) de que la
globalización capitalista no es nuestro destino; como dice su slogan: “otro
mundo es posible”. Últimamente, sin embargo, las reuniones de Porto Alegre
parecen haber perdido su ímpetu ¿Dónde fueron las brillantes estrellas de Porto
Alegre? ¡Algunas de ellas se fueron a Davos! Es decir, el tono predominante de
las reuniones de Davos viene del grupo de empresarios que el periodista Oliviar
Mainuit menciona irónicamente como los “comunistas liberales” que no aceptan la
oposición entre Davos (capitalismo global) y Porto Alegre (los nuevos
movimientos sociales y su alternativa al capitalismo global). Afirman que
podemos tener la tarta global capitalista (prosperar como empresarios con
beneficios) y a la vez comérnosla (apoyar las causas anticapitalistas de
responsabilidad social, ecologístas, etc.). No se necesita Porto Alegre, dicen,
ya que Davos puede convertirse en Porto Davos.<BR> <BR>¿Y quiénes son estos
comunistas liberales? Los sospechosos de siempre: Hill Gates y George Soros, los
CEOs de Google, IBM, Intel, eBay, así como filósofos de la corte de Thomas
Friedman. Lo interesante de la ideología de este grupo es que se está volviendo
indistinguible de la de Antonio Negri, quien alaba el capitalismo digital
posmoderno; el cual dice, se está convirtiendo en algo imposible de distinguir
del comunismo. Según Negri, ambas vieja derecha - con sus ridículas creencias en
la autoridad, el orden y el patriotismo parroquial – y vieja izquierda - con su
gran lucha contra el capitalismo – son los conservadores de hoy, totalmente
fuera de onda (…) Gates - magnate del software y filántropo – es icono de
lo que llamo “capitalismo sin fricción”, la sociedad post-industrial en la que
somos testigos del “fin del trabajo”, en que el software está venciendo al
hardware y donde el joven empollón ha sustituido al gerente con traje. En el
nuevo cuartel general de la compañía hay poca disciplina externa y los (ex)
hackers dominan el terreno, con largas jornadas y disfrutando de una bebida
gratis en entornos de peluche (…) La noción subyacente aquí es que Gates es un
hooligan subversivo y marginal que ha tomado el control y se viste como un
directivo respetable.<BR> <BR>Los comunistas liberales son grandes
ejecutivos reformando el espíritu de la lucha, gente contra cultural que tomó el
control de las grandes corporaciones. Actualizan la mano invisible de Adam
Smith: el mercado y la responsabilidad social pueden utilizarse juntos para un
beneficio mutuo (…) Como comunistas liberales son pragmáticos: odian la
ideología. No hay una clase trabajadora única y explotada hoy, tan sólo
problemas concretos que hay que resolver, como el hambre en Africa, la situación
de las mujeres musulmanas o la violencia religiosa fundamentalista. Cuando hay
una crisis humanitaria en Africa (los comunistas liberales aman las crisis
humanitarias ¡sacan lo mejor de ellos!), en lugar de emplear una retórica
antiimperialista, consideran que deberíamos analizar qué es lo que realmente
resuelve el problema: “contratar” a la gente, a los gobiernos y a los negocios
dirigiéndolos hacia una empresa común, aproximarse a las crisis de formas
creativas y no convencionales. Los comunistas liberales también el Mayo del 68
¡Qué explosión de energía juvenil y de creatividad! (…) <BR> <BR>Por encima
de todo, los comunistas liberales se ven a sí mismos como verdaderos ciudadanos
del mundo, buena gente que se preocupa. Ven las “causas profundas” de los
problemas de hoy, la masiva pobreza y la falta de esperanza que engrendra el
terror fundamentalista. Así que su objetivo no es ganar dinero, sino cambiar el
mundo (y de paso ganar más dinero). El truco es que para poder dárselo a la
comunidad primero hay que tomarlo (o como ellos dicen, crearlo), tienes que
tener los medios para hacerlo. Y como la experiencia nos enseña, luego de esa
experiencia fallida y lúgubre de todos los estados centralizados y las
aproximaciones colectivistas, la iniciativa es de lejos la forma más eficiente.
Así que si el estado quiere regular sus negocios o ponerles demasiados
impuestos, está socavando su objetivo oficial (hacer mejor la vida para la gran
mayoría).(…)Esto es lo que hace a la figura de Soros tan problemática
éticamente. Su rutina diaria es una mentira personificada: la mitad de su tiempo
lo dedica a especulaciones financieras y la otra mitad, a actividades
humanitarias (financiando actividades culturales y democráticas en los países
poscomunistas, acuñando términos peyorativos como “fundamentalismo libre de
mercado”), que combaten los efectos de sus propias especulaciones. De forma
parecida, las dos caras de Gates: un cruel hombre de negocios que destruye o
compra a sus competidores y busca un monopolio virtual, usando todas las trampas
posibles para sus propósitos…y el mayor filántropo en la historia.
<BR> <BR>En la ética del comunista liberal, la persecución despiadada de la
ganancia se contrarresta a través de la caridad; es hoy la máscara humanitaria
que se esconde tras la explotación económica. En un chantaje gigantesco, los
países desarrollados está “ayudando” constantemente a los no desarrollados
(créditos, ayudas), evitando por tanto la cuestión central: es decir, su
complicidad y co-responsabilidad por la situación miserable de los no
desarrollados. Lo mismo sucede con la oposición entre las aproximaciones lista y
no lista. La noción clave es la subcontratación. Subcontratando, exportas el
(necesario) lado oscuro; salarios bajos, prácticas laborales duras y polución, a
lugares no-listos en el Tercer Mundo (o lugares invisibles dentro del Primer
Mundo). Etienne Balibar distingue las dos formas opuestas pero complementarias
de violencia objetiva “estructural” que es inherente a las condiciones sociales
del capitalismo global (es decir, la creación “automática“ de excluidos y
dispensables, los desempleados, los que no tienen seguro ni techo), y la
violencia subjetiva de los nuevos fundamentalismos étnicos y/o religiosos.
<BR> <BR>Mientras que combaten la violencia subjetiva, los comunistas
liberales son en si los agentes de la violencia estructural que crea las
condiciones para tales explosiones de violencia subjetiva. Dado que ellos
quieren resolver todos estos problemas secundarios, son la personificación
directa de lo que hay de erróneo en el sistema. En cualquier alianza táctica
necesaria que uno tenga que hacer con los comunistas liberales al combatir el
racismo, el sexismo o el oscurantismo religioso, deberíamos recordar: son el
enemigo de toda lucha progresista hoy en día. </DIV>
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<HR>
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<DIV align=justify><STRONG><EM><FONT color=#000080>La información contenida en
el boletín es de fuentes propias, sitios web, medios periodísticos, redes
alternativas, movimientos sociales y organizaciones políticas de izquierda. Los
artículos firmados no comprometen la posición editorial de Correspondencia de
Prensa. Suscripciones, Ernesto Herrera: </FONT></EM></STRONG><A
href="mailto:germain@chasque.net"><STRONG><EM><FONT
color=#000080>germain@chasque.net</FONT></EM></STRONG></A> </DIV>
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