<!DOCTYPE HTML PUBLIC "-//W3C//DTD HTML 4.0 Transitional//EN">
<HTML><HEAD>
<META http-equiv=Content-Type content="text/html; charset=iso-8859-1">
<META content="MSHTML 6.00.2600.0" name=GENERATOR>
<STYLE></STYLE>
</HEAD>
<BODY bgColor=#ffffff background=""><FONT face=Arial size=2>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=center><EM><STRONG><FONT color=#800000 size=4>Boletín informativo -
Red solidaria de la izquierda radical</FONT></STRONG></EM></DIV>
<DIV align=center><EM><STRONG><FONT color=#000080 size=4><IMG alt="" hspace=0
src="C:\Documents and Settings\EH\Mis documentos\germain 1.JPG" align=baseline
border=0><BR>Año III - 17 de junio 2006 - Redacción: </FONT></STRONG></EM><A
href="mailto:germain@chasque.net"><EM><STRONG><FONT color=#000080
size=4>germain@chasque.net</FONT></STRONG></EM></A></DIV>
<DIV align=center>
<HR>
</DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>Chile</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT size=3>Las conquistas
de la lucha estudiantil, sus fuerzas y debilidades <BR><BR>Nicolás
Miranda</FONT></STRONG> </FONT></DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2></FONT> </DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2><STRONG>Clase contra Clase N° 96
(Chile)</STRONG></FONT></DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2><A
href="http://www.clasecontraclase.cl/"><STRONG>http://www.clasecontraclase.cl/</STRONG></A></DIV>
<DIV align=justify><BR><BR>La recién concluida lucha del movimiento estudiantil
secundario fue una caja de resonancia de las contradicciones del conjunto de la
sociedad. Las tendencias al agotamiento lento y controlado del neoliberalismo en
Chile, hicieron eclosión en estos días, aunque sin superar su carácter
estudiantil. </FONT></DIV><FONT face=Arial size=2>
<DIV align=justify><BR>Las críticas electorales, preventivas y por arriba de los
partidos patronales de la Concertación y la derecha en la campaña presidencial,
y que habían sido adelantadas por la Iglesia con su advertencia sobre las
“escandalosas desigualdades”, bajaron de las alturas y se tomaron las calles y
los colegios. </DIV>
<DIV align=justify><BR>En los meses previos, lo habían hecho los trabajadores
subcontratistas de Codelco, instalando otra demanda nacional, el trabajo
precario, que está entre las causas de tantos padecimientos. El motor inmediato
de una y otra de estas luchas, fue el aumento de los precios del cobre, los
mineros exigiendo bonos acordes, los estudiantes, con su consigna “el cobre por
el cielo, la educación por el suelo”. Uno de los mayores límites, en términos
amplios, es que no se avanzó a una unidad de los estudiantes, y también de los
pobladores con sus luchas por la vivienda, agrupándose detrás de las fuerzas de
la clase trabajadora. Pero se comienza a abrir una nueva dinámica, que vuelve a
poner en la discusión nacional esta necesidad y posibilidad.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Una lucha de carácter nacional, y los
representantes del “ni”</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>El Gobierno de Bachelet, aglutinó todo el descontento que
la lucha estudiantil secundaria expresó. No se trató tan sólo de su incapacidad
de previsión y reacción. También fue alimentado por la misma derecha, que se
dedicó a golpear al gobierno, aunque fueron ellos desde la dictadura quienes
instauraron el negocio de la educación, y están entre sus principales
beneficiaros. Pretenden así llegar al gobierno, según parece, y de ser así
deberán prepararse para beber de su propia medicina, de lograrlo. </DIV>
<DIV align=justify><BR>La Concertación, por su parte, en claro declive, en
especial la DC [Democracia Cristiana] (que, por ejemplo y para ser gráficos, ni
siquiera cuenta con dirigentes secundarios de algún peso), se montó a las
críticas rasgando vestiduras, aunque fue quien conservó y profundizó el legado
de Pinochet en estos 16 años. Así, los medios de comunicación empresariales, se
dedicaron a amplificar el proceso de lucha. De esta manera, la lucha avanzó
rápidamente a adquirir un carácter nacional y transformarse en una crisis
política de importancia. En las últimas encuestas, se puede observar: tanto el
gobierno de Bachelet, como la derecha, bajaron en sus preferencias: bajó en 7%
el Gobierno (de 62,1% a 54,5%) y en 5% la derecha (de 36,6% a 31,6%).</DIV>
<DIV align=justify><BR>El gobierno de Bachelet, así como la Concertación y la
derecha, están en un período de indefiniciones, tal como definimos desde estas
páginas en CcC n° 95, lo que plantea mejores condiciones objetivas para el
desarrollo de nuevos fenómenos de la lucha de clases. Son los representantes del
ni, no dicen no ni dicen sí. Ya lo habían demostrado en la discusión de la ley
de subcontratación, y ahora en la discusión nacional sobre la educación.
Bachelet asegura que mantendrá la libertad de enseñanza así como el derecho a la
educación. La Concertación, lo mismo. </DIV>
<DIV align=justify><BR>La UDI [Unión Demócrata Independiente, derecha], que
defenderá a ultranza la libertad de enseñanza (que no es más que libertad de
empresa para el negocio de la educación) y que no modificaría la LOCE [Ley
Orgánica Constitucional de Enseñanza], salvo que... haya que modificarla. RN
[Renovación Nacional, derecha], lo mismo. Todos tratan de cambiar algo para que
nada cambie. Después se preguntan “si hay alguien detrás” de todo esto, y
alimentan sus múltiples y estériles versiones conspirativas, además de ser
peligrosas porque alientan campañas criminalizadoras y climas represivos.</DIV>
<DIV align=justify><BR>No se trató entonces, tan sólo de las propias fuerzas
puestas en movimiento, sino de la debilidad de las fuerzas de los partidos
patronales. Hay una tendencia a la pérdida de base social de los partidos
patronales, Están marcando el paso- para avanzar por el mismo camino-, tanto
Bachelet como la Concertación y la derecha, y así, los padecimientos que
engendran sus políticas neoliberales, comienzan a iniciar la búsqueda, aún
parcial y a tientas de sus propios cauces, caminos y con sus propias fuerzas.
<BR>Tal vez eso sea lo verdaderamente nuevo. Y plantea la reapertura de una
situación transitoria en la vida política nacional, en la que se definirá en los
próximos meses si avanza a desplegar nuevos y mayores fenómenos de la lucha de
clases en la defensa de los derechos e intereses de la clase trabajadora, los
estudiantes y los pobladores, o se re-estabiliza el régimen de la Concertación y
la derecha, fortaleciendo nuevas mediaciones, haciéndose pasar falsamente como
renovados amigos del pueblo. Y esto nuevo se comienza a ver en algunas de las
conquistas principales que obtuvo el movimiento estudiantil en este proceso de
lucha.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Las tres conquistas de la lucha</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>El motor inmediato, decíamos, fue el aumento de los
precios del cobre, y la demanda de mayor igualdad social que va despertando.
Pero fue caja de resonancia de las contradicciones del conjunto de la sociedad.
La lucha secundaria expresó una lucha contra uno de los efectos principales de
las políticas neoliberales instauradas a sangre y fuego en la dictadura y
conservadas y profundizadas por la Concertación: fue una lucha contra el negocio
de la educación, contra las enormes desigualdades que ayuda a reproducir. La
municipalización, la alianza Estado- empresarios de la educación vía los
subsidios, la libertad de empresa denominada libertad de enseñanza, son sus
principales pilares consagrados en la LOCE.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Es así que las justas demandas económicas iniciales
(gratuidad del pase y el pasaje, de la PSU, etc) rápidamente derivaron, en este
marco general que planteamos, en demandas políticas contra el negocio de la
educación, que cobraron forma en la exigencia inicial de derogar la LOCE. Ni el
Gobierno de Bachelet, ni la Concertación ni la derecha, podían responder hasta
el final a esta exigencia. Impulsores, conservadores, beneficiarios, a lo más
tratarán de cambiar algo para que nada cambie. Esto hizo que perdieran la
iniciativa, tanto el gobierno, como la Concertación y la derecha (por lo que
sería así con el gobierno ciudadano de Bachelet, como con el pinochetista de
Lavin, Longueira y la UDI, como con el gerencial de Piñera. Y así, empujaban a
que los estudiantes secundarios tomaran esta lucha en sus propias manos. Además
que un proceso previo de acumulación, con el surgimiento de la ACES en 2001,
ayudaba a retomar en un nivel más alto esta experiencia.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Así que la primer conquista de esta lucha fue la
reconstitución de la ACES, luego AES, y finalmente Asamblea Nacional de
Estudiantes Secundarios. Un organismo de organización y de lucha basado en los
métodos de la democracia directa estudiantil, con delegados y voceros que debían
hablar y actuar según lo discutido, resuelto y mandatado por sus asambleas o en
caso contrario podían ser removidos. Este organismo permitió sostener esta lucha
y su magnitud, someter a los dirigentes secundarios partidarios (que fueron
revelando su militancia sin mayores problemas) a las decisiones de las bases,
mantener así la unidad necesaria hasta un cierto punto, iniciar una tendencia de
organización nacional. En rápido desarrollo, no llegó a sustituir las viejas
organizaciones de centros de estudiantes representativos completamente, sino que
se combinaron ambas formas, planteando un primer límite. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Un segundo límite, estuvo en las propias direcciones
políticas que comenzaron a atacarla cuando se demostraba su peso específico (al
no poder bajar las tomas y paros después del anuncio de Bachelet): unos,
intentaron desviarla políticamente hacia la salida del consenso nacional que
expresaría la Comisión Asesora y después la parlamentarización del debate;
otros, mediante las acciones descolgadas (como ejemplo la toma de la UNESCO)
justificadas en poner un signo igual entre el organismo y los dirigentes del
desvío, cuando no había tal identidad. Y parte de su fuerza esta aquí: lejos de
los intentos de la derecha de identificarlo consigo misma planteándola como una
fuerza gremialista (no partidaria), lejos de los timoratos de la Concertación
adelantándose en decir que ellos no instrumentalizaban nada (a lo que se sumó el
PC), lejos de los arrebatos de la ideología asamblearia autonomista anti-
partido, la fuerza de este organismo está en que combinó sus métodos de
democracia directa estudiantil, con la dirección políticas de diferentes
partidos y organizaciones, lo que permite confrontarlos más rápida y
directamente con las bases en lucha y organizadas. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Esta ideología asamblearia y autonomista, pretende
afirmar la ausencia de los partidos- algo que no es cierto-, y peor aun, la
necesidad de esta ausencia. De este modo, el resultado es que los partidos
existentes- los partidos patronales, la izquierda del régimen, estos mismos
partidos autonomistas- son los que siguen haciendo política, mientras se condena
a la clase trabajadora y el pueblo pobre a agruparse detrás de los mismos,
obstaculizando la necesidad de construir un nuevo partido revolucionario,
propio.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La segunda conquista es que este nuevo organismo puso,
contra todo lo previsto, la crisis de la educación mercantilizada, en la agenda
política nacional. Una vez más, no sólo del gobierno (con sus 36 medidas),
también de la Concertación (que se desbandaba a un debate valórico), e incluso
de la derecha (que reordenaba sus filas pero seguía ensimismada). Y que planteó
un cuestionamiento, a través de uno de sus pilares, a las políticas
neoliberales. Uno de sus mayores límites es que se mantuvo como una lucha de
carácter corporativo. Y así, la decisión de la CUT, co- gobernada por el PC con
el PS de Arturo Martínez, de sostener al gobierno de Bachelet, fue fácilmente
justificada con el planteo de los secundarios que solo se haría el segundo paro
solidarizando con las demandas estudiantiles. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero vale la pena preguntarse: ¿no hubiese fortalecido la
lucha secundaria, no hubiese fortalecido el paro social, si se sumaban las
demandas de la clase trabajadora, los pobladores, los universitarios, en vez de
limitarse a la sola demanda corporativa de los secundarios, para efectivamente
avanzar a cuestionar las políticas neoliberales de conjunto? Por eso, el llamado
a paro social, no pudo pasar de su proclamación- aún contando con las enormes
simpatías del conjunto de la sociedad.</DIV>
<DIV align=justify><BR>No es menor en este corporativismo, que la enorme fuerza
de los colegios industriales y técnicos, prácticamente fue opacada, porque
emergieron, aunque dentro del proceso de lucha secundaria, con sus formas y
demandas específicas como jóvenes hijos de la clase trabajadora, lo que quedaba
por fuera de las demandas corporativas principales (aunque en las cartas a
Bachelet se incorporaran algunas de sus exigencias). A pesar de esto, se deja
ver que esta enorme fuerza dormida comienza a estirar sus músculos
también.</DIV>
<DIV align=justify><BR>A su vez, que la viga maestra del gobierno de Bachelet
sea la política social, con las expectativas que aún se mantienen en estas
promesas aceitadas por la bonanza económica, aún mantienen un gobierno
relativamente fuerte y con capacidad de presentarse falsamente como amigo del
pueblo.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La tercera conquista, es que comienza la irrupción de una
nueva generación, como se ha planteado en diversos análisis. El despertar de una
nueva generación a la vida política, y en forma masiva, con los inicios de una
diferenciación de sectores hacia izquierda. El límite de esto, es que al tomar
estas banderas rápidamente el Gobierno, sectores de la Concertación, y a medias
y empujados en la derecha, se evitó una radicalización que decantara hacia
izquierda sectores enteros del movimiento estudiantil. Comenzó así el
desvío.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>El consenso nacional y el desvío
parlamentario</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>La fuerza desplegada y sostenida en estas tres
conquistas, impedían una derrota del movimiento. Y efectivamente, no pudo ser
derrotado. Pero a su vez, todos estos límites que planteamos, empujaban al
desvío que se preparaba. El anuncio de Bachelet buscó dividir a los estudiantes,
y aislarlos del mayoritario apoyo que recibían. La convocatoria al Consejo
Asesor buscó crear el marco de un amplio consenso nacional (la derecha que ahora
critica esto, es la que reclama por la democracia de los consensos y advierte
contra la aplanadora de la mayoría parlamentaria concertacionista, cuando lo que
hacen las comisiones es tratar de relegitimar esta práctica de los consensos
entre el pinochetismo de civil- la derecha- y la Concertación). Una vez logrando
avanzar en este Consejo, se buscará coronar todo en el Parlamento. Así, se habrá
consumado el desvió parlamentario. Desvío porque no hubo derrota, pero se
termina en los salones cerrados de un Parlamento que sólo legisla a favor de los
intereses patronales. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Es por esto que planteamos que se desvía la lucha, se la
aleja de sus objetivos, y se busca legitimar este Parlamento que sólo defiende
intereses de la clase patronal (como fue con la lucha de los subcontratistas del
cobre, lo que nos permite preguntarnos, si no es que se está marcando tal vez un
sello político que combine la parlamentarización con esta creciente e
injustifcable represión y criminalización). Una vez aquí, la Concertación
buscará nuevamente reformas cosméticas para vestirse como amigos del pueblo, con
el apoyo resignado de la derecha. La derecha ya anunció que busca profundizar la
municipalización (descentralización), y aumentar la rentabilidad (aumentando las
subvenciones). El PC se suma, planteando que si se puede reformar así la
Constitución, también se podría hacer con otros temas, como el binominal, lo que
contribuye a fortalecer el camino parlamentario.
<HR>
<STRONG><EM><FONT color=#000080>La información contenida en el boletín es de
fuentes propias, sitios web, medios periodísticos, redes alternativas,
movimientos sociales y organizaciones políticas de izquierda. Los artículos
firmados no comprometen la posición editorial de Correspondencia de Prensa.
Suscripciones, Ernesto Herrera: </FONT></EM></STRONG><A
href="mailto:germain@chasque.net"><STRONG><EM><FONT
color=#000080>germain@chasque.net</FONT></EM></STRONG></A>
<HR>
</DIV>
<DIV align=justify><BR></FONT> </DIV></BODY></HTML>