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<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><U><FONT size=5>boletín informativo - red
solidaria de revistas</FONT></U><BR><FONT color=#800000
size=6><EM>Correspondencia de Prensa</EM></FONT><BR>Año IV - 11 de febrero 2007
- Redacción: </FONT></STRONG><A href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=4>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A></DIV>
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<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>América
Latina</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>¿Volverán los golpes de Estado?
</STRONG></FONT></DIV><FONT face=Arial>
<DIV align=justify><FONT size=2></FONT><BR><STRONG>La involución de la derecha
latinoamericana</STRONG></FONT></DIV>
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<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>Marcos Roitman Rosenmann
</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT size=3>La Jornada,
México, 11-2-07</FONT></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR></DIV>
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<DIV align=justify>No pocos son los síntomas que hacen pensar en una
rearticulación política de la derecha latinoamericana. Uno de ellos es la
pérdida de credibilidad del proyecto neoliberal. Sus buenaventuras se traducen
en miseria, hambre y desempleo para la mayoría de la población. Sus dirigentes y
partidos han resultado mal parados. Agotaron el crédito político. Hay más
pobres, crece la injusticia, la concentración de la riqueza y la desigualdad
social. Verdades difíciles de contrarrestar. Ni la publicidad agresiva en pro de
sus lemas ha podido evitar la catástrofe. El neoliberalismo sólo funciona para
los grandes empresarios del capitalismo trasnacional. El resto de los mortales
participa como fuerza de trabajo en condiciones de subordinación y
sobrexplotados. Por ende, su implantación no suscita entusiasmo, ni consenso
social. Aun así, su doctrina se presentó como una nueva etapa histórica. Una era
provista de una espada justiciera capaz de infligir la derrota al comunismo en
nombre de la civilización católica, judeo-cristiana occidental. En su nombre
emergió una ideología afín que promulgó la desaparición de la explotación, la
dependencia, el imperialismo y las clases sociales. Sólo existía la
globalización, un Big Bang homologable a la teoría del origen del universo. Un
catalizador del orden espontáneo y complejo cuya energía simbólica era la
economía de mercado. Sin embargo, en su interior se ve renacer la esclavitud
infantil, las muertes por hambruna y las enfermedades endémicas. Emergieron de
sus entrañas detenidos desaparecidos, gobernantes corruptos, pederastas,
cómplices de torturas, criminales de lesa humanidad. Durante el periodo
neoliberal es cuando más violaciones de los derechos humanos se han producido en
todo el planeta.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Ante tanto desaguisado los representantes de la derecha
latinoamericana buscan una salida. Sin embargo lo hacen escorándose hacia la
extrema derecha. Obligados a recomponer las estructuras partidistas, el siglo
XXI no responde a los postulados que los asesores estadunidenses vendieron en
sus cursos de formación y que una parte de las elites latinoamericanas compraron
como ingeniería y ciencia política. Allí se enseñaban tipologías sin rigor
teórico como partidos atrápalo-todo o cártel. Categorías, eso sí, para que
avezados profesionales hicieran carrera y terminaran siendo diputados,
senadores, alcaldes, concejales, y repitieran como loros el lenguaje
neoliberal.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Mientras tanto, la derecha política vuelve a sus raíces y
se torna extremista. Entiende la gravedad del momento, reaviva y establece
nuevas fronteras para evitar malos entendidos. Se acaban las concesiones. Es
necesario mantenerse en el poder, o recuperarlo si se ha perdido. Hay que pasar
al ataque. La iniciativa consiste en destruir, desprestigiar y socavar el orden
si se pasa a la oposición, caso de Bolivia, Ecuador y Venezuela. Hacer
ingobernable lo gobernable. Aplicar la máxima: desestabilizar hasta hacer
imposible la convivencia. Provocar un estado de nervios, crispar, confrontación
generalizada para postular un llamado a elecciones anticipadas. Siempre es
posible revertir un proceso democrático e incluso acudir al fraude electoral
como técnica golpista. Pero si se está gobernando, hay que desarticular a la
izquierda y sus alternativas, aplicar la razón de Estado, pasar por encima de
las instituciones y dar mano larga a las fuerzas de seguridad, garantizando su
impunidad para reprimir.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Hoy, ante tanta crisis de la derecha sus elites levantan
un proyecto de partido de masas antidemocrático fundado en los restos del
neoliberalismo. Sus futuribles dirigentes son parte del propio sistema
imperante. Pertenecen al orden sistémico. Liberales, conservadores y
demócrata-cristianos. Lo que tienen en común es su anticomunismo y su renuncia a
los valores sociales, éticos y económicos de la democracia política. Sólo que
ahora hacen gala de dicha renuncia. Para ellos, la democracia es un lastre. Son
partidarios de gobiernos fuertes y prefieren la estabilidad económica a los
derechos políticos de los ciudadanos. Por eso reivindican figuras como Ubico,
Estrada Cabrera, Porfirio Díaz o Pinochet. Para muestra, las palabras del actual
ministro de Asuntos Exteriores de la presidenta de Chile Michelle Bachelet,
Alejandro Foxley, quien afirma sin sonrojarse: "Pinochet realizó una
transformación sobre todo en la economía chilena, la más importante que ha
habido en este siglo. Tuvo el mérito de anticiparse al proceso de globalización
que ocurrió una década después, al cual están tratándose de encaramarse todos
los países del mundo. Hay que reconocer su capacidad visionaria y la del equipo
de economistas que entró a ese gobierno el año de 1973". Sin comentarios.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El fundamento del proyecto pretende unificar los partidos
de la derecha bajo el nombre genérico de partido popular. Es el desarrollo de un
populismo, el único posible, el de la derecha extrema. La financiación para
encarar la propuesta de unificación corre a cargo de fundaciones europeas y del
grupo popular del Parlamento Europeo, siendo apadrinada por José María Aznar, su
fundación y la propia Condoleezza Rice. El laboratorio sería Chile, donde ya el
nombre es propiedad de los amigos de Aznar, es decir, la democracia cristiana,
extendiéndose más tarde a Venezuela, Centroamérica, Cuba, República Dominicana,
Colombia, Ecuador y Paraguay.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Más allá de las diferencias existentes entre los posibles
articuladores del proyecto, el nuevo partido trata de movilizar un voto
militante en tiempos de abstención. Así, estamos en presencia de una involución
que marca el quehacer de las elites políticas de las clases dominantes formadas
en los años 80. La derecha latinoamericana parece haber concluido un ciclo,
gobierne o esté en la oposición. Hoy por hoy, y por primera vez, la democracia
deja de ser parte de su discurso y sus dirigencias asumen sus consecuencias: una
involución en sus principios políticos y además son conscientes. Ahora prometen
orden y progreso, gobernanza. Por ello llaman a zafarrancho. Muerte a la
democracia y a sus defensores. ¿Volverán los golpes de Estado?
<HR>
<STRONG><EM><FONT color=#000080 size=3>La información difundida por
Correspondencia de Prensa es de fuentes propias y de otros medios, redes
alternativas, movimientos sociales y organizaciones de izquierda. Suscripciones,
Ernesto Herrera: </FONT></EM></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><EM><FONT color=#000080
size=3>germain5@chasque.net</FONT></EM></STRONG></A>
<HR>
</FONT></DIV></BODY></HTML>