<!DOCTYPE HTML PUBLIC "-//W3C//DTD HTML 4.0 Transitional//EN">
<HTML><HEAD>
<META http-equiv=Content-Type content="text/html; charset=iso-8859-1">
<META content="MSHTML 6.00.2900.2523" name=GENERATOR>
<STYLE></STYLE>
</HEAD>
<BODY bgColor=#ffffff background=""><FONT face=Arial size=2>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><FONT size=5><U>boletín informativo - red
solidaria de revistas</U></FONT><BR><FONT color=#800000
size=6><EM>Correspondencia de Prensa</EM></FONT><BR>Año IV - 25 de marzo 2007 -
Redacción: </FONT></STRONG><A href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=4>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A></DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>Bolivia</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>Cayó el presidente de la petrolera
estatal por haber "flexibilizado" los convenios de gas</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>Escándalo por contratos petroleros:
Evo cambia a un funcionario clave </STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT size=3>Morales Olivera
admitió que estudios de abogados de Nueva York (pagados por la venezolana PDVSA)
habían participado en la redacción de los contratos</FONT></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Pablo Stefanoni, desde La Paz</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><STRONG>Clarín, Buenos Aires, 24-3-07</STRONG><BR><BR><BR>La
polémica por los "petrocontratos" hizo rodar ayer la cabeza del titular de YPFB,
Manuel Morales Olivera, hasta hace poco hombre de confianza de Evo Morales. En
su lugar quedó Guillermo Aruquipa, hasta ayer viceministro de Exploración y
Explotación de hidrocarburos y uno de los artífices de la ley de hidrocarburos
presentada por el MAS, ahora en el poder, al Parlamento en 2005 y considerada un
antecedente del decreto de nacionalización de 2006. Esa medida, principal fuente
de la popularidad del mandatario socialista quedó bajo un manto de dudas al
salir a luz una cadena de desprolijidades que tiene a Morales Olivera como
principal responsable. <BR><BR>En un nuevo capítulo de la crisis, el ex ministro
de Hidrocarburos, Andrés Soliz Rada, había puesto en duda la legalidad de los
convenios "por no haber sido aprobados por el directorio de YPFB", al tiempo que
el ex titular de la petrolera estatal, Juan Carlos Ortiz, afirmaba que se habría
negociado sin su conocimiento la flexibilización de los contratos originalmente
suscriptos con la brasileña Petrobras. Estas dos revelaciones dieron nuevos
argumentos a la oposición —que controla el Senado— para mantener congelados los
contratos mientras avanza la investigación parlamentaria. Muchos analistas creen
que esto puede poner en riesgo el aumento de los volúmenes de exportación a
Argentina ya acordados (VerGas...). <BR><BR>El embrollo actual tiene varios
flancos: los contratos que llegaron al Congreso no son los mismos que los
firmados el 28 de octubre de 2006. Se confirmó que existieron negociaciones
reservadas con las petroleras luego de esa fecha para flexibilizar los anexos
que determinan el reparto de la renta entre YPFB y las firmas privadas. Y,
finalmente, se supo que el entonces "asesor" Morales Olivera —con escasa
experiencia en el área— operó a espaldas del presidente y del directorio de
YPFB, y del propio ministro de Hidrocarburos Carlos Villegas. Más tarde, Morales
Olivera ascendió a presidente de la petrolera estatal y ayer dejó el cargo en
medio del enojo presidencial.<BR><BR>"El único contrato que yo tengo conciencia
de haber firmado con Petrobras es el original. Yo no autoricé ninguna
renegociación", disparó Juan Carlos Ortiz ante los senadores. Villegas también
se había desmarcado de la renegociación, en tanto que Soliz Rada apuntó más
arriba: "El origen de la responsabilidad está en el presidente de la República,
por haber permitido que fuera un asesor el encargado de negociar con las
petroleras".<BR><BR>En medio de la pelea con la oposición, Morales Olivera
admitió que estudios de abogados de Nueva York —pagados por la venezolana PDVSA—
habían participado en la redacción de los contratos. <BR><BR>Pese a todo, desde
el gobierno destacan que los ingresos del Estado boliviano pasarán de US$ 200 a
1.200 millones anuales gracias a las nuevas reglas. Aseguran que en los
denominados "campos grandes" —controlados por Petrobras, Repsol-YPF y la
francesa Total— el Estado recibirá, por impuestos y regalías, el 82% del valor
de la producción, pero esto está en duda ya que los diferentes anexos firmados
establecen distintos modos de calcular los "costos recuperables" de las
empresas. Se agrega un debate conceptual: como YPFB deberá absorber parte del
riesgo de las inversiones algunos críticos consideran que no se suscribieron
contratos de operación sino de producción compartida. <BR><BR>Un último golpe de
la guerra mediática comandada por la derecha, vestida con renovado traje
patriótico, había incluido ayer fotos de Morales Olivera y su equipo técnico en
playas y bares de La Habana, adonde fueron "para capacitarse". Ahora Aruquipa
tiene una tarea inmediata: lograr que la semana próxima la cámara alta apruebe
los contratos. Y una de mediano plazo: restaurar la credibilidad de la política
petrolera nacionalista de Evo Morales.
<HR>
<STRONG><EM><FONT color=#000080 size=3>La información difundida por
Correspondencia de Prensa es de fuentes propias y de otros medios, redes
alternativas, movimientos sociales y organizaciones de izquierda. Suscripciones,
Ernesto Herrera: </FONT></EM></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><EM><FONT color=#000080
size=3>germain5@chasque.net</FONT></EM></STRONG></A>
<HR>
</FONT></DIV></BODY></HTML>