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<BODY bgColor=#ffffff background=""><FONT face=Arial size=2>
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<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><FONT size=5><U>boletín informativo - red
solidaria de revistas</U></FONT><BR><FONT color=#800000
size=6><EM>Correspondencia de Prensa</EM></FONT><BR>Año IV - 20 de mayo 2007 -
Redacción: </FONT></STRONG><A href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=4>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A></DIV>
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<HR>
</DIV></FONT>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>(In)justicia</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>Sacco y Vanzetti
*</STRONG></FONT></DIV>
<DIV><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT size=3>Cincuenta años
después de las ejecuciones de los inmigrantes italianos Sacco y Vanzetti, el
Gobernador Dukakis de Massachusetts puso en marcha una comisión para analizar la
limpieza del juicio, y la conclusión era que los dos hombres no habían tenido un
juicio justo. Esto despertó una tormenta menor en Boston. </FONT></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG><FONT size=3>Howard Zinn</FONT> </STRONG></DIV>
<DIV align=justify><STRONG></STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG>Sin Permiso y La Haine</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><A
href="http://www.sinpermiso.info/"><STRONG>http://www.sinpermiso.info/</STRONG></A></DIV>
<DIV align=justify><A
href="http://www.lahaine.org/"><STRONG>http://www.lahaine.org/</STRONG></A></DIV>
<DIV align=justify><STRONG>Traducción para Sin Permiso de Paco Ramos</STRONG>
</DIV>
<DIV align=justify><BR><BR></FONT><FONT face=Arial size=2>“Estoy aquí hoy en
este banco de acusados, por ser de la clase oprimida" (Nicola Sacco)</DIV>
<DIV align=justify><BR>Una carta, firmada por John M. Cabot, embajador americano
retirado, declaró su "gran indignación" y señaló que la confirmación de la pena
de muerte por el Gobernador Fuller se hizo después de una revisión especial por
"tres de los más distinguidos ciudadanos de Massachussets – el presidente de
Harvard, Lowell, el Presidente del MIT, Stratton y la Juez jubilada
Grant".</DIV>
<DIV align=justify><BR>Esos tres "distinguidos y respetados ciudadanos" fueron
vistos de forma diferente por Heywood Broun que escribió inmediatamente en su
columna para el New York World después de que la comisión del Gobernador hizo su
informe. Escribió:</DIV>
<DIV align=justify><BR>No todo prisionero tiene un Presidente de Harvard que
aprieta el interruptor para él… Si éste es un linchamiento, por lo menos el
vendedor ambulante de pez y su amigo artesano pueden tener como consuelo para el
alma que morirá a manos de hombres en traje de gala o con togas
académicas.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Heywood Broun, uno de los periodistas más distinguidos
del siglo XX, no continuó como redactor para el New York World.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En el 50 aniversario de la ejecución, el New York Times
informó que: "Los planes del Alcalde Beame para proclamar el siguiente martes el
día de Sacco y Vanzetti se han cancelado, en un esfuerzo para evitar la
controversia, según dijo ayer un portavoz del ayuntamiento".</DIV>
<DIV align=justify><BR>Debe haber una buena razón por la que un caso de hace 50
años, ahora de 75, despierta tal emoción. Yo sugiero que es porque hablar sobre
Sacco y Vanzetti plantea materias que nos preocupan hoy inevitablemente: nuestro
sistema de justicia, la relación entre la fiebre por la guerra y las libertades
civiles, y la mayor preocupación de todos, la idea de anarquismo: la eliminación
de límites nacionales y por consiguiente de la guerra, la eliminación de la
pobreza, y la creación de una democracia plena.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El caso de Sacco y Vanzetti reveló, en sus condiciones
más severas que las palabras nobles que se inscribieron sobre nuestros palacios
de justicia, "Justicia Igual ante la Ley”, siempre han sido una mentira. Esos
dos hombres, el vendedor ambulante de pez y el zapatero, no podrían conseguir
justicia en el sistema americano, porque la justicia no mide igual a pobres y a
ricos, a nacionales o a extranjeros, al ortodoxo y al radical, al blanco y la
persona de color. Y mientras la injusticia se da más sutilmente y de maneras más
intrincadas hoy que en las circunstancias crudas de Sacco y Vanzetti, la esencia
se mantiene igual.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En su caso, la injusticia era flagrante. Fueron juzgados
por robo y asesinato, pero en las mentes, y en la conducta del fiscal, el juez,
y el jurado, lo importante de ellos estaba en que eran, como Upton Sinclair
señaló en su notable novela Boston , "wops”, los extranjeros, trabajadores
pobres, radicales.<BR>Aquí va una muestra del interrogatorio policial:</DIV>
<DIV align=justify><BR>Policía: ¿es usted un ciudadano?<BR>Sacco:
No.<BR>Policía: ¿Usted es comunista?<BR>Sacco: No.<BR>Policía:
¿anarquista?<BR>Sacco: No.<BR>Policía: ¿Usted cree en nuestro
gobierno?<BR>Sacco: Sí; aunque algunas cosas me gustan diferentes.<BR></DIV>
<DIV align=justify>¿Qué tenían estas preguntas que ver con el robo de una
fábrica de zapatos en Braintree Sur, Massachusetts, y el tiroteo de un pagador y
un guardia?</DIV>
<DIV align=justify><BR>Sacco mentía, claro. No, yo no soy un comunista. No, yo
no soy un anarquista. ¿Por qué mentir a la policía? ¿Por qué un judío mentiría a
la Gestapo? ¿Por qué un negro en África del Sur mentiría a sus interrogadores?
¿Por qué un disidente en la Rusia soviética mentiría a la policía secreta?
Porque todos saben que no hay justicia para ellos.</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Ha habido justicia en el sistema americano para los
pobres, la persona de color, el radical? Cuando se sentenciaron los ocho
anarquistas de Chicago a muerte después de los altercados de Haymarket de 1886,
no era porque había alguna prueba de la conexión entre ellos y la bomba tirada
en medio de la policía; no había ninguna evidencia. Era porque ellos eran
líderes del movimiento anarquista en Chicago.</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Cuándo Eugene Debs y mil otros fueron enviados a la
prisión durante el Primera Guerra Mundial, bajo la Ley de Espionaje, fue porque
ellos eran culpables de espionaje? Difícilmente. Eran socialistas que hablaron
contra la guerra. Confirmando la sentencia de 10 años de Debs, el juez de la
Suprema Corte de Justicia, Oliver Wendell Holmes dijo claro por qué Debs debía
ir a la prisión. Él citó del discurso de Debs: "La clase de los amos siempre ha
declarado las guerras, la clase oprimida siempre ha luchado las batallas”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Holmes, admirado como uno de nuestros grandes juristas
liberales, dejó claro los límites del liberalismo, los límites puestos por un
nacionalismo vindicativo. Después de que todas las apelaciones de Sacco y
Vanzetti se agotaron, el caso llegó ante Holmes, cuando estaba en la Corte
Suprema. Se negó a revisar el caso, mientras permitía que un veredicto así se
mantuviera.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En nuestro tiempo, Ethel y Julius Rosenberg fueron
enviados a la silla eléctrica. ¿Era porque ellos eran culpables más allá de una
duda razonable de pasar los secretos atómicos a la Unión Soviética? ¿O era
porque ellos eran comunistas, como el fiscal dejó claro, con la aprobación del
juez? ¿Era porque el país estaba en medio de la histeria anti-comunista, los
comunistas habían tomado el poder en China, había una guerra en Corea, y el peso
de todo ello podía hacerse recaer en dos comunistas americanos?</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Por qué George Jackson fue sentenciado a diez años en la
prisión, en California, por un robo de 70 dólares, y después disparado a muerte
por guardias? ¿Era porque él era pobre, negro y radical?</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Puede un musulmán hoy, en la atmósfera de la "guerra del
terror ", pedir igualdad de justicia ante la ley? ¿Por qué mi vecino de arriba,
un brasileño de piel oscura que podría parecerse a un musulmán del medio
oriente, fue sacado de su coche por la policía, aunque él no había violado
ninguna norma, y fue interrogado y humillado?</DIV>
<DIV align=justify><BR>¿Por qué de los dos millones de personas que están en las
cárceles americanas y prisiones, y seis millones de personas bajo libertad
provisional, o vigilancia, desproporcionadamente la mayoría son personas de
color, y pobres? Un estudio mostró que el 70% de las personas en las prisiones
estatales de Nueva York salieron de siete barrios donde reina la pobreza y la
desesperación.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La injusticia de clase se produce todas las décadas,
todos los siglos de nuestra historia. En medio del juicio de Sacco y Vanzetti,
un hombre adinerado en el pueblo de Milton, al sur de Boston, disparó y mató a
un hombre que estaba recogiendo leña en su propiedad. Se pasó ocho días en la
cárcel, fue liberado bajo fianza, y no se le persiguió. El fiscal del distrito
lo llamó "el homicidio justificable”. Una ley para los ricos, otra para los
pobres -una característica persistente de nuestro sistema de justicia.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero ser pobre no era el crimen principal de Sacco y
Vanzetti. Ellos eran italianos, inmigrantes, y anarquistas. Habían pasado menos
de dos años del final de la Primera Guerra Mundial. Ellos habían protestado
contra la guerra. Se habían negado a ser reclutados. Ellos vieron la montaña de
histeria contra los radicales y extranjeros, observaron las correrías llevadas a
cabo por los agentes del Fiscal General Palmer en el Departamento de Justicia,
que irrumpían en casas en la mitad de la noche sin garantías para las personas
incomunicadas.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En Boston se arrestaron 500 personas, fueron encadenados
juntos, y marcharon a través de las calles. Luigi Galleani, editor del periódico
anarquista Cronaca Sovversiva al que Sacco y Vanzetti se subscribieron, fue
detenido en Boston y rápidamente deportado.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Algo más grave pasó. Un anarquista compañero de Sacco y
Vanzetti, un tipógrafo llamado Andrea Salsedo que vivía en Nueva York fue
secuestrado por los miembros del FBI (uso la palabra "secuestrado" para
describir la detención ilegal de una persona), y retenido en la planta 14 de las
oficinas del FBI del Edificio de Park Row. No le permitieron llamar a su
familia, amigos, o a un abogado, y fue interrogado y agredido, según un
prisionero compañero. Durante la octava semana de su encarcelamiento, el 3 de
mayo de 1920, el cuerpo de Salsedo, fue encontrado en el pavimento cerca del
Edificio de Park Row, y el FBI anunció que él se había suicidado saltando de la
ventana de la habitación en que estaba custodiado. Fue dos días antes del
arresto de Sacco y Vanzetti.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Hoy sabemos, como resultado de los informes del congreso
en 1975, que por medio del programa del FBI COINTELPRO, agentes del FBI
irrumpían en casas y oficinas, llevaban a cabo escuchas telefónicas ilegales,
estaban envueltos en actos de violencia al punto de asesinato, y colaboraron con
la policía de Chicago en la matanza de dos líderes de los Panteras Negras en
1969. El FBI y la CIA han violado la ley una y otra vez. No hay ningún castigo
para ellos.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Ha habido pocos motivos para tener fe que se protegerían
las libertades civiles de las personas en este país en la atmósfera de histeria
que siguió el 11 S y continúa hasta el momento. En casa ha habido redadas contra
inmigrantes, detenciones indefinidas, deportaciones, y espionaje doméstico no
autorizado. En el extranjero se han dado matanzas extra-judiciales, tortura,
bombardeos, guerra, y ocupaciones militares.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Igualmente, el juicio de Sacco y Vanzetti empezó
inmediatamente después del Día del Memorial, un año y un medio después de la
orgía de muerte y patriotismo que fue la Primera Guerra Mundial, cuando los
periódicos todavía vibraban con el ruido de tambores y la retórica
patriotera.</DIV>
<DIV align=justify><BR>A los doce días del juicio, la prensa informó que se
habían repatriado los cuerpos de tres soldados de los campos de batalla de
Francia a la ciudad de Brockton, y que el pueblo entero había participado en una
ceremonia patriótica. Todo esto estaba en periódicos que los miembros del jurado
podían leer.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Sacco fue interrogado por el fiscal Katzmann:</DIV>
<DIV align=justify><BR>Pregunta: ¿Amaba usted este país en la última semana de
mayo de 1917?<BR>Sacco: Me es difícil responder en una sola palabra, Sr.
Katzmann.<BR>Pregunta: Hay dos palabras que usted puede usar, Sr. Sacco, sí o
no. ¿Cual es?<BR>Sacco: Sí<BR>Pregunta: ¿Y para mostrar su amor por los Estados
Unidos de América cuándo estaba a punto de ser llamado como soldado, usted
corrió a México?<BR></DIV>
<DIV align=justify>Al principio del juicio, el Juez Thayer (quién, hablando a un
conocido en una partida de golf, se había referido a los demandados durante el
juicio como "esos bastardos anarquistas") dijo al jurado: “señores, ustedes han
sido convocados para realizar con el mismo espíritu de patriotismo, valor, y
devoción su deber como lo hicieron nuestros soldados".<BR></DIV>
<DIV align=justify>Las emociones evocadas por una bomba que explotó en la casa
del Fiscal General Palmer en tiempo de guerra -como las emociones liberadas por
la violencia del 11 S- crearon una atmósfera rara en la que se vieron
comprometidas las libertades civiles.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Sacco y Vanzetti entendieron que los argumentos legales
que sus abogados pudieran proponer no prevalecerían contra la realidad de la
injusticia de clase. Sacco dijo a la corte, en la sentencia: "Yo sé que la
sentencia estará entre dos clases, la clase oprimida y el clase rica…Es por eso
por lo qué yo estoy aquí hoy en este banco, por ser de la clase oprimida".</DIV>
<DIV align=justify><BR>Ese punto de vista parece dogmático, simplista. No todas
las decisiones de la corte se explican por él. Pero, faltando una teoría que
explique todos los casos, el punto de vista de Sacco es ciertamente una mejor
buena guía para entender el sistema legal que otro que asume una contienda entre
iguales basada en la búsqueda objetiva de la verdad.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Vanzetti supo que los argumentos legales no los
salvarían. A menos que un millón de americanos se organizaran, él y su amigo
Sacco morirían. No palabras, sino lucha. No súplicas, sino demandas. No
peticiones al gobernador, sino tomas de fábricas. No lubricar la maquinaria de
un sistema supuestamente justo para hacerlo trabajar bien, sino una huelga
general para llegar a parar las máquinas.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Eso nunca pasó. Miles se manifestaron, marcharon,
protestaron, no sólo en Nueva York, Boston, Chicago, San Francisco, sino también
en Londres, París, Buenos Aires o África del Sur. No era bastante. En la noche
de su ejecución, miles se manifestaron en Charlestown, pero fueron mantenidos
lejos de la prisión por una multitud de policía. Se arrestaron a los
manifestantes. Había ametralladoras en las azoteas y grandes reflectores
barriendo la escena. Una gran muchedumbre se congregó en Union Square el 23 de
agosto de 1927. Después de medianoche, las luces de la prisión oscurecieron y
los dos hombres fueron electrocutados. El New York World describió la escena:
"La muchedumbre respondió con un sollozo gigante. Las mujeres se desmayaron en
quince o veinte lugares. Otros, también superados, se reprimieron y escondieron
las cabezas entre sus manos. Los hombres se apoyaban unos en otros y
lloraban”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Su último crimen era su anarquismo, una idea que hoy
todavía nos sobresalta como un relámpago debido a su verdad esencial: todos
somos uno, los límites y los odios nacionales deben desaparecer, la guerra es
intolerable, deben compartirse los frutos de la tierra, y sólo a través de la
lucha organizada contra la autoridad, puede llegar un mundo así.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Lo que nos ha llegado a nosotros hoy del caso de Sacco y
Vanzetti no es sólo tragedia, sino también inspiración. Su inglés no era
perfecto, pero cuando ellos hablaron parecía poesía. Vanzetti dijo de su amigo
Sacco:</DIV>
<DIV align=justify><BR>Sacco es un corazón, una fe, un carácter, un hombre; un
amante del hombre de naturaleza y de la humanidad. Un hombre que dio todo, que
sacrifica todo a la causa de libertad y a su amor por la humanidad: el dinero,
el descanso, la ambición mundana, su propia esposa, sus niños, él y su propia
vida…. Oh sí, yo puedo ser más inteligente, como algunos han dicho, yo soy mejor
hablando que él, pero muchas, muchas veces, oyendo su corazón expresar una fe
sublime, considerando su sacrificio supremo, recordando su heroísmo, yo me
sentía pequeño, pequeño en presencia de su grandeza, y compelido a secar de mis
ojos las lágrimas, apagar los latidos de mi corazón que late en mi garganta para
no llorar ante él- este hombre fue llamado jefe, asesino y condenado.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Lo peor de todo, eran anarquistas, lo que significa que
tenían alguna noción loca de democracia plena en la que ni lo extranjero ni la
pobreza existiría, y pensaban que sin estas provocaciones, la guerra entre las
naciones acabaría para siempre. Pero para ello habría que luchar contra el rico
y sus riquezas ser confiscadas. Ese ideal anarquista es un crimen mucho peor que
robar una nómina, y por ello la historia de Sacco y Vanzetti no puede evocarse
sin gran ansiedad.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Sacco escribió a su hijo Dante: "Así que, hijo, en lugar
de llorar, sé fuerte, para poder confortar a tu madre… llévala de paseo por el
campo, recogiendo flores salvajes aquí y allí, descansando bajo la sombra de los
árboles… Pero siempre recuerda, Dante, en esta obra de felicidad, no uses todo
para ti sólo…ayuda a los perseguidos y a las víctimas porque ellos son tus
buenos amigos... En esta lucha por la vida, encontraras más amor y serás
amado".</DIV>
<DIV align=justify><BR>Sí, era su anarquismo, su amor por la humanidad que los
condenó. Cuando Vanzetti fue arrestado, él tenía una octavilla en bolsillo
anunciando un mitin cinco días después. Es una hoja impresa que podría
distribuirse hoy, por el mundo, tan apropiado ahora como lo era el día de su
arresto. Decía:</DIV>
<DIV align=justify><BR>“Has luchado en todas las guerras. Has trabajado para
todos los capitalistas. Has vagado por todos los países. ¿Has recogido la mies y
los frutos de tu trabajo, el precio de tus victorias? ¿El pasado te conforta?
¿El presente te sonríe? ¿El futuro te promete algo? ¿Has encontrado un trozo de
tierra dónde puedes vivir y puedes morir como un ser humano? Sobre estas
preguntas, estos argumentos, y estos temas, la lucha por la existencia, hablará
Bartolomeo Vanzetti.”</DIV>
<DIV align=justify><BR>Ese mitin no tuvo lugar. Pero su espíritu todavía existe
hoy en las personas que creen, aman y se esfuerzan en todo el mundo.</DIV>
<DIV align=justify><BR> </DIV>
<DIV align=justify>* Resumen del nuevo libro de Howard Zinn, Un poder que los
gobiernos no pueden suprimir , publicado este año por Luces de la Ciudad .Howard
Zinn es coautor, junto con Anthony Arnove, de Voices of a People's History of
the United States. Su libro más reciente es A Power Governmets Cannot Suppress
(Un poder que los gobiernos no pueden suprimir).</DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
<STRONG><EM><FONT color=#000080 size=3>La información difundida por
Correspondencia de Prensa es de fuentes propias y de otros medios, redes
alternativas, movimientos sociales y organizaciones de izquierda. Suscripciones,
Ernesto Herrera: </FONT></EM></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><EM><FONT color=#000080
size=3>germain5@chasque.net</FONT></EM></STRONG></A>
<HR>
</DIV></FONT></BODY></HTML>