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<BODY bgColor=#ffffff background=""><FONT face=Arial size=2>
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<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><FONT size=5><U>boletín informativo - red
solidaria</U></FONT><BR><FONT color=#800000 size=6><EM>Correspondencia de
Prensa</EM></FONT><BR>Año IV - 7 de setiembre 2007<BR>Redacción y suscripciones:
</FONT></STRONG><A href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=4>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A></DIV>
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<HR>
</DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>Bolivia</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT size=3>La economía
boliviana en tiempos de Evo <BR><BR>Gabriel Tabera</FONT> </STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial
size=2><STRONG>Econoticias</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><A
href="http://www.econoticiasbolivia.com/"><STRONG>http://www.econoticiasbolivia.com/</STRONG></A><BR><BR><STRONG></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG>Los indicadores económicos
del 2007 muestran que el Estado acrecienta sus ingresos y se enriquece, que las
empresas extranjeras y nacionales son cada vez más prósperas y que la gente de a
pie se empobrece y consume menos. El FMI y el Banco Mundial no escatiman
elogios</STRONG> </FONT></DIV><FONT face=Arial size=2>
<DIV align=justify><BR>En el primer año y medio de la autodenominada “revolución
democrática y cultural”, encabezada por el primer presidente indígena, Evo
Morales, la economía boliviana volvió a mostrar en el 2007 sus grandes paradojas
y asimetrías, con empresarios que ganan a manos llenas, un Estado que fortalece
como nunca las finanzas públicas y una economía popular cada vez más deteriorada
y pobre.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En lo que va del año, según los datos del Ministerio de
Hacienda, los ingresos tributarios del Estado rompieron un nuevo récord
histórico ya establecido en el 2006 y aumentaron en otro 11,2 por ciento en el
2007, mientras que las ganancias de las empresas, declaradas por los mismos
empresarios, crecían en 20,1 por ciento, a la par que caía el ingreso real de
los trabajadores en por lo menos el 7 por ciento.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Estos registros consolidan y amplían lo que ocurrió en el
2006, cuando los indicadores consagraron como grandes ganadores de la política
económica boliviana al Estado y a los inversionistas privados, nacionales y
extranjeros, dejando en calidad de perdedores a los asalariados, a los
campesinos y población de bajos ingresos.<BR>Las causas de esta cruel paradoja,
que beneficia a pocos y empobrece a las grandes mayorías, son tres: i) la
persistencia del modelo neoliberal que sigue concentrando la riqueza en pocas
manos y desangrando a las mayorías, tal como viene ocurriendo desde hace dos
décadas, ii) la existencia de una economía dual, que sustenta gran parte de su
crecimiento en sectores intensivos en capital y orientados a la exportación de
materias primas, dejando en el atraso a grandes sectores de la economía
campesina en el agro y de informalidad en las ciudades, y iii) la abrumadora
desigualdad a la hora de repartir los beneficios del crecimiento.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Boom macroeconómico</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Aunque en el mundo de la política hay serias escaramuzas
entre el gobierno de Morales con la oligarquía y la derecha (por controlar el
Tribunal Constitucional, definir el texto de la nueva Constitución Política del
Estado, el alcance y carácter de las autonomías regionales y la reelección sin
límites del actual Presidente), en el mundo de la macroeconomía todo es bonanza,
tal como señalan los organismos multinacionales, como el Fondo Monetario
Internacional, el Banco Mundial, y todos aquellos que valoran las políticas
económicas del presidente Morales, más allá de su retórica anti-imperialista y
anti-neoliberal. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Los indicadores oficiales hablan de que existe una
bonanza macroeconómica, producto de la elevada cotización de las materias primas
de exportación en el mercado internacional y de la política económica oficial,
manejada por la burocracia forjada en los moldes neoliberales y orientada
básicamente a preservar la estabilidad y los grandes equilibrios a nivel
interno. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Como muy pocas veces en la historia nacional, hay
superávit en el comercio exterior y en las finanzas públicas, las exportaciones
privadas superan los cuatro mil millones de dólares y las reservas
internacionales se acercan a esa millonaria cifra, cuadruplicando los niveles
del pasado quinquenio. El auge alcanza al sistema financiero privado, a los
exportadores de materias primas, a la par que cae la deuda externa y retorna con
fuerza la inversión extranjera.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Elogios del FMI</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>El propio FMI, el mayor guardián de las políticas
neoliberales, no escatima elogios para la actual administración económica del
primer presidente indígena de Bolivia. “Se han registrado superávits
significativos en la cuenta corriente externa y las reservas internacionales
netas han alcanzado niveles máximos históricos. La situación fiscal ha mejorado
notablemente y (...) la deuda pública de Bolivia ha disminuido en forma
sustancial”. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Según un informe elaborado por el Directorio del FMI, y
presentado por su representante, Esteban Vesperoni, la economía boliviana no
sólo alcanzó un crecimiento satisfactorio sino que se aplicaron las políticas
adecuadas para preservar la estabilidad fiscal y se mejoró el clima para la
llegada de inversiones extranjeras, tras la legalización de los contratos
petroleros con las transnacionales y la entrega a la inversión extranjera del
Mutún, el yacimiento de hierro más grande del mundo.</DIV>
<DIV align=justify><BR>"El informe destaca el énfasis que las autoridades
locales pusieron en mantener la estabilidad macroeconómica y que este énfasis
está apoyado por una prudencia fiscal significativa y por políticas monetarias
consistentes", dijo el representante extranjero.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Alabanzas del Banco Mundial</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>El banco Mundial tampoco ahorra adjetivos a la hora de
calificar la gestión de Morales. Así, el jefe de economistas del BM para América
Latina y el Caribe, Guillermo Perry, dice con claridad: </DIV>
<DIV align=justify><BR>“Me parece que Bolivia está haciendo muy bien las cosas.
Ha estado haciendo una política macroeconómica, una política fiscal, monetaria y
cambiaria muy cuidadosa. En este momento hay algunas dificultades en el tema de
la inflación, que se ha hecho más complejo, pero en general lo han hecho
bastante bien, muy bien. Y eso se nota, porque eso ha permitido aprovechar este
buen período en que la economía ha estado creciendo”.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Más pobreza y desigualdad</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Lo que no se dice, sin embargo, es que con un crecimiento
económico cercano al 4 por ciento (3,9 por ciento a junio, según el registro del
Ministerio de Hacienda), la economía nacional está generando anualmente un
promedio de 130 mil nuevos pobres, advierte el economista George Gray. Se estima
que se necesita por lo menos un crecimiento del 6 por ciento al año para que no
aumente la pobreza, que afecta a dos tercios de la población (un tercio de ellos
sumido en la pobreza extrema y la subalimentación).</DIV>
<DIV align=justify><BR>Otros a los que no les llega los beneficios del
crecimiento son a los casi 300 mil desocupados, que tienen cero de ingresos y
que van camino a la indigencia, arrastrando en su caída a su entorno
familiar.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Se eleva el costo de vida</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) y
de las organizaciones laborales señalan, además, que el creciente costo de vida,
traducida en el aumento de la inflación, ha ocasionado la pérdida del poder
adquisitivo de los salarios e ingresos del conjunto de los trabajadores en 6,43
por ciento, hasta finales de julio.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Este deterioro se agravó mucho más en agosto, producto de
la espiral de agio y especulación que encareció los productos de la canasta
familiar. En La Paz, por ejemplo, se estima oficialmente que tan sólo en agosto
hubo un incremento de precios de los productos alimenticios (carne, abarrotes y
otros artículos básicos de consumo) en casi 7 por ciento. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Con ello, en lo que va del año, los trabajadores y los
sectores más empobrecidos de la población ya habrían perdido más del 10 por
ciento del poder adquisitivo de sus ingresos y salarios, reduciéndose su consumo
en más de una décima parte. </DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Reacción laboral</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Motivos más que suficientes para que la Central Obrera
Boliviana (COB), por boca de su dirigente Pedro Montes, intente zafarse del
control gubernamental y convoque a la movilización social contra el alza de
precios de los productos de consumo y en demanda de un incremento salarial que
no se esfume con la inflación.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“Con el salario mínimo mensual de 500 bolivianos (62,5
dólares) no se puede vivir (…) Sin exagerar, en nuestro pliego petitorio estamos
pidiendo 1.800 como mínimo nacional y en la canasta familiar para una familia de
cinco miembros de 6.700 bolivianos (837 dólares). Hemos ido por los mercados y
eso es lo que cuesta mantener una familia de cinco miembros”, dice el líder de
la COB, Pedro Montes que asegura que actualmente “los obreros están ganando 800
bolivianos (cerca de 100 dólares), 1.000 bolivianos que no alcanza para nada.
Nuestros compañeros jornaleros están con 400, con 500 bolivianos”.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Más ingresos para el fisco</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero mientras el pueblo se queja por la falta de dinero,
los que manejan el Estado no dejan de contar billetes y anunciar millonarias
cifras que engordan al fisco y las reservas internacionales. Según el Ministerio
de Hacienda, los ingresos tributario del Estado alcanzaron en los primeros seis
meses del 2007 su pico más alto de su historia contemporánea, al llegar a
10.960,2 millones de bolivianos (casi 1.400 millones de dólares). Con relación
al primer semestre del 2006 hay un crecimiento del 11,2 por ciento y en
comparación con el 2005 de cerca del 80 por ciento. </DIV>
<DIV align=justify><BR>En términos absolutos, el aumento de los ingresos
efectivamente recibidos por el Estado es de casi 140 millones de dólares con
relación a un periodo similar del 2006 y de cerca de 400 millones de dólares al
primer semestre del 2005.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Esta tendencia ya fue marcada por Hacienda en los
primeros tres meses del 2007. Hasta antes de 1996, los ingresos tributarios del
primer trimestre estaban por debajo de los mil millones de bolivianos y hasta
antes del 2004 no superaban los dos mil millones, por lo que las actuales cifras
(por encima de los cinco mil) representan más del doble de lo obtenido en el
2004, cuando se recaudó casi 2.500 millones de bolivianos.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Ganancias empresariales</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>En el sector privado, las ganancias son enormes y
extraordinarias. Según los datos del Ministerio de Hacienda, las ganancias
oficialmente declaradas por las medianas y grandes empresas aumentaron, en
promedio, casi al doble entre los primeros semestre del 2005 y del 2007. Esto
quiere decir que los empresarios, nacionales y extranjeros, están ganando más en
la administración indígena que durante los gobiernos neoliberales de la minoría
blancoide. En el último año, las ganancias empresariales crecieron en 20,1 por
ciento.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En este periodo, los mayores niveles de ganancia
estuvieron entre las grandes empresas exportadoras de minerales, gas y de
agroindustriales del oriente, que recibieron utilidades adicionales
extraordinarias por el aumento internacional de los precios de las materias
primas.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Así, por ejemplo, las empresas mineras, especialmente las
transnacionales y las de la minería mediana, y en menor proporción las
cooperativas y empresas chicas, obtuvieron en el 2006, además de sus ganancias
habituales, otros 500 millones de dólares en ganancias adicionales
extraordinarias, sin tener que aumentar la producción ni sus costos de operación
Estas empresas sólo pagan el 3 por ciento de sus ingresos brutos. </DIV>
<DIV align=justify><BR>En lo que va del 2007 estos beneficios netos adicionales
aumentaron mucho más, lo que se refleja, según Hacienda, “en el Impuesto a las
Utilidades Mineras que creció en 426,4 por ciento, situación que muestra el buen
momento que atraviesa el sector minero en el mercado internacional, producto de
la creciente demanda en los países asiáticos y la India y el importante aumento
de las inversiones en este sector”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Los datos de la Superintendencia de Bancos y Entidades
Financieras revela, además, que otros que ganan como nunca son los banqueros.
Así, la docena de bancos comerciales, extranjeros y nacionales, que operan en
Bolivia obtuvo una ganancia líquida de 42,9 millones de dólares en el primer
semestre del 2007, el mayor registro de las últimas dos décadas. En el 2006 las
utilidades fueron de 57 millones de dólares y en el 2005 de 28 millones. Son
tiempos de bonanza para los banqueros, que utilizan a fondo su extraordinaria
habilidad para pagar muy poco por los ahorros de la gente y ofrecer créditos con
una elevada tasa de interés.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Ganancias y política</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Ello no impide, sin embargo, que los dirigentes
empresariales cuestionen la política gubernamental, enfrentamiento que en
esencia responde al choque entre el tibio reformismo de Morales y la rancia
oligarquía boliviana, acostumbrada al saqueo de los recursos naturales y a
exprimir las arcas fiscales.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La intención gubernamental es lograr que los empresarios
se conviertan en socios del Estado y no en sus patrones, quieren que los
inversionistas “ganen lo razonable” y ya no saqueen el país.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“El Estado apoya al empresariado, pero nunca apoyará el
sector productivo especulador que quiere todo del Estado y no quiere poner de su
bolsillo para llevar adelante emprendimientos”, dice el vicepresidente Álvaro
García Linera.</DIV>
<DIV align=justify><BR>"Varias de las personas que hoy protestan contra el
Gobierno vivían del Estado. Hay sectores especuladores que vivían del uso
abusivo del Estado para beneficio personal, y ahora han perdido ese mecanismo de
enriquecimiento familiar. Son estos sectores especuladores políticos, que habían
unido promiscuamente política y economía, los que ahora reaccionan rabiosamente
contra el Gobierno, porque no quieren que continúe este proceso de cambio que se
vive", agrega.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Los cambios</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Hasta ahora, el gobierno de Morales ha legalizado los
contratos con las transnacionales petroleras, distribuyendo a mitades los
ingresos, dejando sin cambios a los otros sectores donde dominan las
transnacionales y la oligarquía criolla (minería, banca, telecomunicaciones,
energía, construcción, comercio, agropecuaria comercial).</DIV>
<DIV align=justify><BR>Sobre el particular, el informe del FMI dice lo
siguiente: “Cambios importantes han sido introducidos en la política de
hidrocarburos en los últimos dos años, incrementado los ingresos tributarios que
percibe el gobierno y ampliando la participación del sector público en ese
sector. Como consecuencia de un referendo nacional realizado en agosto de 2004,
se promulgó una nueva ley de hidrocarburos en mayo de 2005 (en el gobierno
neoliberal de Carlos Mesa) y se emitió un decreto relacionado en mayo de 2006
(por Evo Morales). Los principales efectos de la nueva legislación han sido: a)
una "migración" de los contratos suscritos con las empresas extranjeras que
operan en Bolivia, de un régimen de riesgo compartido a uno en que la totalidad
de la producción se entrega a la empresa estatal de energía YPFB, la cual se ha
convertido en el único exportador de gas natural del país; b) un aumento
permanente de las regalías del gas natural, del 18 al 50 por ciento del volumen
de producción, y c) el requisito (no cumplido, NdR) de que YPFB recupere el
control de las cinco empresas de hidrocarburos que se privatizaron en los años
noventa”.</DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><EM><FONT color=#000080 size=4>Correspondencia de
Prensa - boletín informativo - red solidaria<BR>Ernesto Herrera (editor):
</FONT></EM></STRONG><A href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><EM><FONT
color=#000080 size=4>germain5@chasque.net</FONT></EM></STRONG></A></DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=justify><BR></DIV></FONT></BODY></HTML>