<!DOCTYPE HTML PUBLIC "-//W3C//DTD HTML 4.0 Transitional//EN">
<HTML><HEAD>
<META http-equiv=Content-Type content="text/html; charset=iso-8859-1">
<META content="MSHTML 6.00.2900.2523" name=GENERATOR>
<STYLE></STYLE>
</HEAD>
<BODY bgColor=#ffffff background=""><FONT face=Arial size=2>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><FONT color=#800000><EM><FONT
size=5><U>correspondencia de prensa - boletín solidario</U></FONT></EM>
<BR><FONT color=#ff0000 size=6>Agenda Radical</FONT><BR>Edición internacional
del Colectivo Militante<BR><U>18 de febrero 2008</U><BR>Redacción y
suscripciones:</FONT> </FONT></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=4>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A><BR></DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>Puerto Rico</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>Dar el más amplio apoyo a los
maestros puertorriqueños que luchan en contra de sus gobernantes coloniales y de
los “lugartenientes sindicales del imperialismo” </STRONG></FONT></DIV><FONT
face=Arial size=2>
<DIV align=justify><BR><STRONG><FONT size=3>Un caso de colonialismo sindical
</FONT></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3></FONT></STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>AFL-CIO y Change to Win versus la
Federación de Maestros</FONT></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG><FONT size=3></FONT></STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG>El Internacionalista, Puerto Rico, febrero
2007</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><STRONG>Revista Socialismo o Barbarie</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><A
href="http://www.socialismo-o-barbarie.org/"><STRONG>http://www.socialismo-o-barbarie.org/</STRONG></A></DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify><BR></DIV>
<DIV align=justify>En estos momentos en que la Federación de Maestros de Puerto
Rico (FMPR) se prepara para ir a huelga en contra del gobernador fuertemente
antisindical Aníbal Acevedo Vilá, del Partido Popular Democrático (PPD), en
abierto desafío a una ley draconiana que prohíbe la huelga (la Ley 45), tanto la
AFL-CIO como la federación Change to Win (CTW), se han alineado vergonzosamente
con los patronos. Esto no puede sorprender a los que saben algo de la sórdida
historia de la burocracia sindical norteamericana en esta colonia caribeña de
EE.UU. y como cómplice de las maquinaciones imperialistas en toda América Latina
(y el resto del mundo). </DIV>
<DIV align=justify><BR>Sin embargo, lo que estos falsos dirigentes sindicales
están preparando es una traición fundamental a los trabajadores puertorriqueños.
Lo que se está preparando es una prueba que el movimiento obrero entero no puede
eludir. ¿De qué lado estás? </DIV>
<DIV align=justify><BR>El 1° de enero, Dennis Rivera, vicepresidente del
Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SEIU) –el principal
componente de la CTW– y Aida Díaz, jefa de la “Asociación de Maestros de Puerto
Rico” (AMPR), anunciaron que han iniciado “un proceso de afiliación con el
propósito de obtener un triunfo en las elecciones del Departamento de Educación”
(AP, 1º de enero). A primera vista, esto podría parecer una redada sindical al
viejo estilo en contra de la FMPR. Pero es algo bastante peor: el SEIU, la CTW y
la AMPR están trabajando mano a mano con el secretario de educación Rafael
Aragunde, quien por más de dos años se ha rehusado a negociar con los dirigentes
de la Federación de Maestros, que en enero consiguió que la Comisión de
Relaciones Laborales del Servicio Público descertificara a la FMPR. Como reportó
el periódico neoyorquino El Diario-La Prensa (3 de febrero): “Todo eso en el
marco de las vísperas de una esperada huelga de maestros que amenaza con
paralizar el sistema público y ante la cual Change to Win (Unidos para el
Cambio) se perfila como aliado estratégico del gobierno autonomista para sacar
del medio a la Federación.” </DIV>
<DIV align=justify><BR>La AMPR ni siquiera es una organización de trabajadores,
sino un organismo “profesional” que incluye a supervisores e, incluso, a la
portavoz de Aragunde, quien profiere sus amenazas de romper la huelga. Dado que
no está registrada como grupo sindical, la Asociación ha formado un fantasmal
“sindicato de maestros” cuya primera actividad será ofrecer sus servicios como
rompehuelgas. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Sus miembros “intentarán trabajar en los salones de
clase” en caso de que haya una huelga, según dijo un portavoz, mientras alega
que procurarán “evitar confrontaciones” (Primera Hora, 4 de febrero). Todo
sindicalista experimentado sabe qué significa esto: se están preparando para
provocar violencia en la línea de piquete. Sin embargo, cuando el secretario de
educación Aragunde pide a maestros retirados que den clases durante la huelga y
el gobernador se prepara para usar la Fuerza de Choque de la policía
puertorriqueña –e incluso a la Guardia Nacional– contra la FMPR en su intento de
mantener las escuelas abiertas, portavoces de los maestros retirados prometieron
que no actuarán como rompehuelgas. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Por su parte, la AFL-CIO, a través de su filial, la
Federación de Trabajadores de Puerto Rico (FT), se unió a las filiales
puertorriqueñas del SEIU, el Sindicato Puertorriqueño de Trabajadores (SPT) y la
Unión General de Trabajadores (UGT) para denunciar el llamado a huelga de la
Federación de Maestros. Mientras dice defender en abstracto el derecho a huelga,
en una conferencia de prensa celebrada poco después de la descertificación del
sindicato magisterial, José Rodríguez Báez, dirigente de la FT dijo que “estamos
en contra de su llamado a huelga”. Rodríguez Báez sostuvo que la Ley 45 ha
permitido que 100,000 empleados estatales disfruten de los beneficios de un
contrato colectivo (Vocero de Puerto Rico, 19 de enero). Pero cuando el
gobernador Acevedo Vilá decretó un paro patronal para 95,000 trabajadores
públicos durante dos semanas en mayo de 2006, quedaron paralizados por la misma
Ley 45. Aunque tienen muchas siglas, cada una de las “federaciones” sindicales
afiliadas a las centrales norteamericanas tiene menos miembros que la FMPR, el
mayor sindicato de Puerto Rico. Y ahora están a punto de apuñalar a los maestros
por la espalda en lo que es una batalla de clase crucial. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Partidarios del Internationalist Group en los sindicatos
magisteriales del área de Nueva York – la United Federation of Teachers (UFT),
que representa a los empleados de las escuelas públicas, así como el
Professional Staff Congress (PSC), que representa al profesorado de la
Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY) – han apelado a ellos para
emprender acciones concretas en defensa de la Federación de Maestros de Puerto
Rico. Instamos a los sindicalistas con conciencia de clase en todo Estados
Unidos a sumarse a la lucha por acciones obreras concretas de solidaridad con la
FMPR en contra de las vergonzosas acciones antihuelgas de los burócratas de la
AFL-CIO y de la CTW en colaboración con el gobierno rompe sindicatos. Si la
colaboración de clases de estos traidores se concreta en la forma de acciones
rompehuelgas concretas en el curso de una huelga, no sólo deben los rompehuelgas
recibir el trato tradicional que se merecen por cruzar líneas de piquete – las
líneas de batalla de la lucha de clases – sino que los proveedores de
rompehuelgas en la burocracia sindical deben ser denunciados enérgicamente en
dondequiera que se presenten. </DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>AFT/AFL-CIO/CTW: Una historia de traiciones a los
trabajadores puertorriqueños</STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><BR>Las acciones traidoras de la burocracia de “Change to
Win” constituyen una prueba más de que no son ni un poquito más combativos que
los dirigentes vendidos de la AFL-CIO. Desde la época en que apuñalaron la
huelga de los controladores del tráfico aéreo de PATCO en 1981, los burócratas
han sido responsables de la caída en picada del número de trabajadores
sindicalizados que hoy apenas alcanza el 12 por ciento del total de la fuerza
laboral. En torno a la escisión de 2005, el presidente del SEIU Andy Stern, dijo
que estaban construyendo “una organización sindical nueva y más fuerte”. Pero
aunque usara tácticas publicitarias espectaculares en la campaña de “justicia
para los conserjes”, la esencia de los “esfuerzos de Stern para modernizar el
funcionamiento de los sindicatos”, como lo señaló la revista empresarial Fortune
(10 de octubre de 2006), consiste en “cooperar” con los patronos. “Los
empresarios y los trabajadores deben actuar de manera conjunta en lo que toca al
seguro médico”, anunció, para luego formar una “alianza” con los rompe
sindicatos de Wal-Mart, cuyos empleados carecen aún en su inmensa mayoría de
seguro médico. </DIV>
<DIV align=justify><BR>En lo que toca al ex dirigente de la Sección 1199 y ahora
vicepresidente del SEIU, Dennis Rivera, su marca registrada de oportunismo
sindical queda resumida con su alianza política con el gobernador republicano
del estado de Nueva York, George Pataki. </DIV>
<DIV align=justify><BR>La colaboración de la AFL-CIO con los patronos y su
gobierno es tristemente célebre en Puerto Rico. En la época de la dura huelga de
los telefonistas de 1998 que se convirtió en una huelga general de dos días en
Puerto Rico, el dirigente de la FT declaró que no tenía sentido alguno ir a
huelga en contra de la privatización de la compañía telefónica (ver nuestro
artículo “Huelga general en Puerto Rico: ¡Forjar un partido obrero
revolucionario!”, julio de 1998). </DIV>
<DIV align=justify><BR>En 2003, el jefe de la FT, Rodríguez Báez, provocó una
ola de repudio por haber escrito una carta privada al entonces gobernador Sila
Calderón para denunciar a “algunos ‘dirigentes sindicales’” que habían propuesto
que un incremento salarial de 150 dólares mensuales se extienda a todos los
empleados gubernamentales (Bandera Roja, 18 de junio de 2003). </DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero el caso clave de colaboración traicionera de los
burócratas sindicales norteamericanos con el gobierno de Puerto Rico en contra
de sus empleados, atañe a la FMPR misma. Desde poco después de su formación en
1966, la Federación de Maestros de Puerto Rico estuvo afiliada a la American
Federation of Teachers (AFT), que durante décadas ha sido dirigida por la UFT
neoyorquina. En años recientes, hubo un creciente descontento en la isla ante
las prepotentes acciones de los jefazos de la AFT, y por los pobres beneficios
obtenidos por los maestros a cambio de los 2,8 millones de dólares pagados
anualmente por concepto de cuotas a la AFT en Washington. Esto llegó a su punto
culminante en 2003, cuando el plan de seguro médico de la FMPR quebró debido al
hurto de 43 millones de dólares cuando estuvo bajo la administración del hombre
de la AFT en San Juan, Félix Rodríguez. En mayo de ese año, Rodríguez fue
derrotado y remplazado por Rafael Feliciano y su grupo Compromiso, Democracia,
Militancia (CODEMI). </DIV>
<DIV align=justify><BR>CODEMI realizó su campaña sobre la base de la propuesta
de desafiliarse de la AFT, y en septiembre de 2004 una asamblea de la FMPR
aprobó con una votación de más del 60 por ciento (793 a 393) separarse del
sindicato norteamericano. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Los burócratas de la AFT reaccionaron con un esfuerzo
cada vez más intenso para tomar el control de la FMPR y destituir a su dirección
elegida. Primero, dijeron que la votación había sido ilegal, aún cuando sus
propios partidarios habían estado en el comité que contó los votos del
escrutinio y ratificó con su firma el resultado. Más tarde, en su convención de
julio de 2004, la AFT presentó una serie de enmiendas a su constitución en las
cláusulas tocantes a la puesta de sus locales bajo sindicatura por el sindicato
nacional. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Era claro que todo esto estaba dirigido en contra de la
FMPR. Entonces procedieron a reunir firmas de sus miembros para justificar el
someter a la Federación a una administración nombrada por la AFT. Pero aunque
estaban obligados a presentar 11,000 firmas (correspondientes al 30 por ciento
de la membresía), apenas lograron juntar unas 650, muchas de las cuales eran de
empleados escolares que no eran miembros del sindicato. En junio de 2005, la AFT
realizó audiencias en San Juan para “investigar” a la dirección de la FMPR, ante
las cuales protestaron centenares de maestros. Finalmente, el 6 de julio,
exactamente a las 4 de la tarde, el consejo ejecutivo de la AFT anunció que
había nombrado un administrador para la FMPR. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Aunque decían que habían encontrado “irregularidades
financieras” en la FMPR (“Administratorship in Puerto Rico”, American Teacher,
septiembre de 2005) no se mencionó que el administrador nombrado, Félix
Rodríguez, había estado a cargo del fondo de seguro médico cuando se dio el
fraude en virtud del cual 43 millones de dólares habían desaparecido
misteriosamente. Los jefes de la AFT tampoco mencionaron que dos minutos antes
de su decisión de imponer a un administrador, a las 3 de la tarde con 58
minutos, habían acudido al Tribunal Federal para conseguir un “recurso jurídico”
para destituir al dirigente Rafael Feliciano (Luis Ángel Torres, “La hora de los
hornos”, Bandera Roja, 29 de julio de 2005). Así, tras esta pantomima en el
comité ejecutivo de la AFT, en realidad recurrieron a los tribunales coloniales
para intentar imponer su golpe de estado en contra de la dirección elegida del
sindicato magisterial. (Ya lo habían intentado antes en un tribunal
puertorriqueño, pero sin éxito). Al día siguiente en Washington, miembros de la
FMPR protestaron afuera de las oficinas de la AFT con pancartas de denuncia en
contra de los chupacuotas. Feliciano descalificó la idea que tiene la AFT de la
democracia sindical como “poco menos que medieval” y dijo que “su imposición de
una administración tiene tanta sustancia como el viento” (Educational
Intelligence Agency, 18 de julio de 2005). </DIV>
<DIV align=justify><BR>Más tarde, un juez federal desechó la demanda de la AFT
sobre la base de que los maestros puertorriqueños no están sujetos a las leyes
federales en materia laboral de Estados Unidos (fundamentalmente la Ley
Taft-Hartley). La FMPR reaccionó mediante un referendo entre sus miembros
realizado el 18 de agosto, sobre la cuestión de la desafiliación de la AFT:
19,421 votaron a favor de la desafiliación (el 76 por ciento), en tanto que
5,882 votaron a favor de mantener la afiliación, con una votación total del 82
por ciento de los miembros del sindicato. No cupo duda de la posición que
tomaron los maestros puertorriqueños en el ejercicio de sus derechos. </DIV>
<DIV align=justify><BR>El apelar a los tribunales capitalistas para que
intervengan en los asuntos del movimiento obrero constituye una traición
elemental a la democracia obrera. Los obreros con conciencia de clase se oponen
a toda intervención judicial en los asuntos del sindicato. Tanto más en el caso
de una colonia, como Puerto Rico, donde los tribunales, lo mismo que la policía
y la Guardia Nacional, son órganos directos de la dominación imperialista. La
acción de los jefes de la AFT fue un vil caso de colonialismo sindical que todo
sindicalista digno y los que se oponen al dominio colonial deben denunciar.
</DIV>
<DIV align=justify><BR>Los trotskistas defendimos a Jimmy Hoffa en contra de la
vendetta que lanzó el gobierno en su contra. Sabíamos, como lo sabía también
cualquier persona informada, que la razón por la que el demócrata Robert Kennedy
lanzó una persecución en contra de este dirigente de los Teamsters con tanto
ímpetu no era porque el gobierno de Estados Unidos estuviera a favor de la
democracia obrera, sino porque temía la posibilidad de que hubiera una poderosa
huelga de los camioneros a escala nacional. De hecho, las investigaciones contra
los teamsters comenzaron poco después de que se firmara el primer contrato
nacional de carga (Master Freight Agreement). También denunciamos la traición de
los dizque izquierdistas de Teamsters for Democracy (TDU), respaldados por los
socialdemócratas de International Socialist y Solidarity, que apelaron al
Departamento del Trabajo de Ronald Reagan para supuestamente democratizar al
sindicato de los camioneros. Después de que el candidato de TDU Ron Carey fuera
elegido en unas elecciones manejadas por el gobierno en 1991, perdió la
oportunidad de reelegirse en 1997 por desvío de fondos sindicales. Los fondos de
pensiones y seguro médico de los Teamsters que el gobierno entregó a una
administración “profesional” de “expertos” financieros, sufrió pérdidas masivas
durante el crack bursátil de 2000-2001, en tanto que los fondos regionales que
el gobierno federal no alcanzó a incautar gozan de salud financiera (¡gracias a
inversiones en Las Vegas!). </DIV>
<DIV align=justify><BR>En el caso de Puerto Rico, el apelar a los tribunales
federales significa pedir la intervención de los amos coloniales
estadounidenses, que a lo largo de más de un siglo, desde 1898, han usado Puerto
Rico como base militar para el control del Caribe. Es apelar al gobierno que ha
pisoteado los derechos de decenas de miles de puertorriqueños mediante el
espionaje, particularmente aquellos que pelean por la independencia. Las
carpetas de la policía se hicieron públicas en los años 80, causando gran
revuelo. Después de que el representante demócrata del Bronx, José Serrano,
cuestionó al director del FBI durante una sesión del subcomité de apropiaciones
del Congreso en 2001, éste admitió que los archivos constan de 1.8 millones de
páginas, copias de las cuales están ahora reunidas en el centro de Estudios
Puertorriqueños de Hunter College en Nueva York. Estos archivos documentan cada
movimiento del dirigente independentista Pedro Albizu Campos cuando agonizaba en
una prisión federal, además de voluminosos informes reunidos como parte del
infame programa de espionaje y provocación conocido como COINTELPRO, acerca de
“manifestaciones estudiantiles y huelgas obreras” en la isla (New York Times, 28
de noviembre de 2003). </DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>La AFL-CIA en América Latina</STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><BR>Éste es el aparato gubernamental colonial al que apeló la
American Federation of Teachers para expulsar a la dirección del sindicato
magisterial puertorriqueño. Más tarde, para justificar su traición, los
dirigentes de la AFT han recurrido a las clásicas tácticas anticomunistas de
caza a los “rojos”, argumentando que la actual dirección de la FMPR tiene una
agenda política, que está a favor de la independencia de Puerto Rico y que es
socialista. Feliciano y otros en la dirección de la Federación y en el CODEMI
son partidarios del Movimiento Socialista de Trabajadores (MST) ¿Y qué? Sin
embargo, que la AFT recurra a estas repulsivas tácticas de la Guerra Fría no es
ninguna casualidad. Durante décadas bajo la dirección de Albert Shanker y sus
herederos de los Social Democrats U.S.A. (SDUSA), la AFT llevó a cabo
operaciones anticomunistas rompe sindicatos financiadas por la CIA, en toda
América Latina, bajo la cubierta del Instituto Americano para el Desarrollo del
Sindicalismo Libre (IADSL). Esta historia está documentada en el folleto de
George Schmidt, The American Federation of Teachers and the CIA (1978). Shanker
y sus colaboradores canalizaron también dólares norteamericanos al
seudosindicato Solidarność en Polonia que, bajo la guisa de promover “sindicatos
libres”, actuó como punta de lanza de la contrarrevolución capitalista en el
bloque soviético. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Hoy en día el dinero de la “Compañía” [CIA] es enviado a
través de conductos como la National Endowment for Democracy, manejada por el
mismo personal de los SDUSA que otrora se encargara del IADSL. En la AFL-CIO, el
Departamento Internacional ha sido remplazado con un “Centro de Solidaridad”,
cuyas operaciones latinoamericanas usaban a sus esbirros puertorriqueños y a
siniestros gusanos cubanos, veteranos de Playa Girón (como el ex agente de la
CIA que recientemente golpeó a ex gobernador Pedro Roselló en el ojo por
criticar la guerra en Irak). Y ahora están recurriendo de nuevo a sus viejos
“trucos sucios” imperialistas. El Diario-La Prensa (14 de enero) informa que
tiene pruebas documentales de la identidad de “un propagandista a sueldo del
gobierno de Puerto Rico que ha participado en al menos uno de los intentos de
las federaciones sindicales norteamericanas para retomar el control de la
Federación de Maestros”, en la misma época del intento de la AFT de imponer una
sindicatura, y que ahora “está directamente vinculado con el gobernador Aníbal
Acevedo Vilá”. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Entretanto, Wilda Rodríguez, ex secretaria de prensa del
jefe Dennis Rivera, escribe columnas en El Nuevo Día (24 de enero) en las que
dice que los huelguistas “provocan enfrentamientos” en el contexto de una
“acción civil concertada contra la huelga”. Cabe preguntar: ¿quién está
provocando aquí? </DIV>
<DIV align=justify><BR>Hace un siglo, el socialista norteamericano Daniel de
León acuñó la elocuente frase que describe a los burócratas sindicales como los
“lugartenientes sindicales de la clase capitalista”. Esto describe con precisión
el actuar de toda una capa de la burocracia sindical cuyo trabajo, en un sentido
amplio, consiste en controlar a las bases con el propósito de preservar al
capitalismo. A nivel internacional, la AFLCIO, la AFT y el SEIU/Change to Win
van más allá y actúan como agentes directos de la represión imperialista.
Agentes sindicales de la AFL-CIO contribuyeron en los preparativos del
sangriento golpe de estado de Pinochet en contra del gobierno de la Unidad
Popular de Salvador Allende en Chile en 1973, por ejemplo, al organizar
“huelgas” de los dueños de los camiones. Más recientemente, estos operativos
sindicales han estado activos en la Venezuela de Hugo Chávez en el curso del
golpe contrarrevolucionario de 2002, disfrazado como una “huelga”, cuando de lo
que en realidad se trataba era de un paro patronal. Ahora los vemos trabajando
nuevamente en el Caribe, que Washington considera un “lago norteamericano”, así
como trata al resto de América Latina como su “patio trasero”. </DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>¡Independencia para Puerto Rico y todas las
colonias! ¡Por la revolución socialista internacional!</STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><BR>Estos descarados agentes del imperialismo no representan
sino el ariete de una burocracia sindical pro capitalista más amplia. En tanto
que los agentes directos del gobierno deben ser simplemente echados de las
organizaciones obreras, en el caso de EE.UU., los sindicalistas con conciencia
de clase deben luchar dentro de la AFL-CIO, Change to Win y otros sindicatos
para expulsar a los falsos dirigentes sindicales que encadena a los trabajadores
a los partidos capitalistas, especialmente a los demócratas – aunque no
exclusivamente a ellos, como muestra el ejemplo de Dennis Rivera con los
republicanos. Muchos izquierdistas que critican el trabajo sucio de la “AFL-CIA”
en América Latina se dan la vuelta y apoyan a burócratas liberales favorables al
Partido Demócrata en Estados Unidos e, incluso, interponen demandas contra los
sindicatos en los tribunales patronales (como en los casos de los Teamsters, los
mineros, los trabajadores del transporte y en otros sindicatos). De esta manera,
usan las mismas tácticas que los dirigentes de la AFT en contra de la FMPR.
Debido a que no reconocen que hay una línea de clase que separa al proletariado
de la burguesía, se ven inexorablemente conducidos a formar parte de “frentes
populares” con los partidos capitalistas supuestamente más “progresistas” (como
la UP de Allende en Chile). </DIV>
<DIV align=justify><BR>Hace 90 años, en medio de la Primera Guerra Mundial, V.I.
Lenin explicó el hecho de que la mayor parte de los socialdemócratas terminaran
apoyando a “su propia” burguesía en la matanza imperialista al señalar el papel
jugado por la “aristocracia obrera”. Esta capa social es comprada con migajas de
la mesa imperialista –las oficinas afelpadas, las excursiones a ultramar, los
salarios altos, etc. – para encadenar a los trabajadores a sus enemigos de
clase. Hoy, escribió Lenin, “cada ‘gran’ potencia imperialista puede sobornar y
soborna a capas más reducidas (que en Inglaterra entre 1848 y 1868) de la
‘aristocracia obrera’. Anteriormente, como dice con extraordinaria profundidad
Engels, sólo en un país podía constituirse un ‘partido obrero burgués’, porque
sólo un país disponía del monopolio… Ahora, el ‘partido obrero burgués’ es
inevitable y típico en todos los países imperialistas.” El dirigente bolchevique
continúa: “Lo importante es que, desde el punto de vista económico, ha madurado
y se ha consumado el paso de la aristocracia obrera a la burguesía; este hecho
económico, este desplazamiento en las relaciones entre las clases, encontrará
sin gran ‘dificultad’ una u otra forma política” (“El imperialismo y la escisión
del socialismo”, octubre de 1916). </DIV>
<DIV align=justify><BR>La conclusión de Lenin era que resultaba necesario echar
a esta capa social que mantiene a las organizaciones obreras sometidas a la
burguesía. Pero eso exige una lucha política no sólo en contra de los “social
chovinistas” que abiertamente apoyaron a los gobernantes imperialistas en la
guerra (como la AFT, la AFL-CIO y CTW han hecho desde tiempo atrás), sino
también en contra de los “social pacifistas” que quieren cuando mucho un cambio
en la política bélica, sin desafiar al sistema imperialista. En tanto que los
social pacifistas como Karl Kautsky hablaban de la “paz”, los bolcheviques
luchaban por “convertir la guerra imperialista en guerra civil” mediante la
movilización de los obreros en lucha de clases en contra del imperialismo. Hoy,
cuando las diversas coaliciones por la “paz” con plataformas políticas
prácticamente idénticas disputan entre sí en torno a cuestiones esencialmente
organizativas, compitiendo para atraer a unos políticos demócratas a sus
tribunas, el Grupo Internacionalista ha sido la única organización en luchar por
huelgas obreras contra la guerra, por que la clase obrera se rehúse a
transportar material bélico y por la derrota de la guerra imperialista en el
extranjero y de la guerra contra los trabajadores, las minorías oprimidas y los
inmigrantes en el propio país. Luchamos en los sindicatos para remplazar a la
burocracia vendida con una dirección clasista, que rompa con los demócratas y
forje un partido obrero revolucionario. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Que los sindicatos en las colonias sigan formando parte o
no de los sindicatos estadounidenses, es una cuestión táctica que debe ser
resuelta por los revolucionarios en los países coloniales. Ciertamente, al haber
sido víctimas de un desfalco y sujetos a dictados que resuenan de arrogancia
colonial/ imperialista, los sindicalistas puertorriqueños están plenamente
justificados para romper la afiliación organizativa con semejantes sindicatos.
Sin embargo, formar parte de los sindicatos que organizan a trabajadores en todo
EE.UU. puede ampliar la capacidad de intervenir directamente en el corazón del
imperialismo. El hecho es que la más grande concentración de puertorriqueños
está en el área metropolitana de Nueva York, el centro del capital financiero
internacional. En cualquier caso, los internacionalistas proletarios procuran la
más estrecha colaboración entre los obreros de las colonias, los de los países
semicoloniales y los de las metrópolis imperialistas. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Ésta es una razón fundamental porque la que hay que dar
el más amplio apoyo a los maestros puertorriqueños hoy cuando luchan en contra
de sus gobernantes coloniales y de los “lugartenientes sindicales del
imperialismo”. </DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><FONT color=#800000 size=3><FONT
size=4>Correspondencia de Prensa - Agenda Radical - Boletín
Solidario</FONT><BR>Ernesto Herrera (editor): </FONT></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=3>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A><BR><STRONG><FONT size=3><FONT
color=#800000>Edición internacional del Colectivo Militante - Por la Unidad de
los Revolucionarios<BR>Gaboto 1305 - Teléfono (5982) 4003298 - Montevideo -
Uruguay</FONT><BR></FONT></STRONG><A
href="mailto:Agendaradical@egrupos.net"><STRONG><FONT
size=3>Agendaradical@egrupos.net</FONT></STRONG></A></DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV></FONT></BODY></HTML>