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size=5>correspondencia de prensa - boletín solidario</FONT></U></EM>
<BR><FONT color=#ff0000 size=6>Agenda Radical</FONT><BR>Edición internacional
del Colectivo Militante<BR><U>16 de abril 2008</U><BR>Redacción y
suscripciones:</FONT> </FONT></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=4>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A><BR></DIV>
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<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>Egipto</FONT></STRONG></FONT></DIV>
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<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>La ola de protestas del 6 de
abril<BR><BR>André Duret</STRONG></FONT></DIV>
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<DIV><FONT face=Arial size=2><STRONG>La Breche</STRONG></FONT></DIV>
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href="http://www.alencontre.org/"><STRONG>http://www.alencontre.org/</STRONG></A></FONT></DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2><STRONG>Traducción de Viento
Sur</STRONG></FONT></DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2><A
href="http://www.nodo50.org/viento_sur/"><STRONG>http://www.nodo50.org/viento_sur/</STRONG></A></DIV>
<DIV align=justify><BR><BR>La ola de movilizaciones sociales, políticas y de
huelgas que se desarrolla actualmente en Egipto se inició ya hace meses. La
relación entre esta “explosividad social” y su expresión política organizada es
muy compleja. No la abordamos aquí. En cualquier caso, estas movilizaciones se
enfrentan a la democratura de Hosni Mubarak. <BR><BR>Se ha lanzado un
llamamiento a favor de “un día de cólera popular” el 6 de abril de 2008, fecha
en que debe comenzar la huelga de los trabajadores de la mayor fábrica textil de
Medio Oriente, la de Ghazl El-Mahalla. Por otra parte, las fuerzas del orden han
intervenido ya en El-Mahalla, ciudad del delta del Nilo en que se encuentra esta
empresa. <BR><BR>Hay que recordar que esta huelga del textil es hoy, de alguna
forma, una huelga que constituye una referencia. Se inscribe en un movimiento
social muy amplio provocado por la subida rápida y masiva de los precios de los
bienes alimenticios, así como de la gasolina, del gasóleo y del gas (en
bombona). Y esto en un país que es un aliado muy importante para la
administración estadounidense en toda esta región del mundo. <BR><BR>Los precios
del arroz y del pan se han duplicado durante el último año. El aceite de
alimentación ha cuadruplicado su precio. La carne de pollo ha aumentado el 40%
durante los últimos tres meses. El abanico de las capas sociales golpeadas por
esta inflación galopante no ha hecho más que ampliarse. Lo que explica huelgas
de funcionarios, de médicos, de profesores de universidad, etc. En el medio
universitario, desde las manifestaciones masivas –pero contenidas- de marzo de
2003, se han constituido diferentes reagrupamientos “contra la guerra” llevada a
cabo por los Estados Unidos y Gran Bretaña; lo que tiene una significación
particular en Egipto.<BR><BR>Las huelgas de estos sectores se han expresado en
la onda de las huelgas obreras y de las explosiones populares en los barrios de
numerosas ciudades. Incluso, sectores campesinos manifiestan su descontento
social y su oposición al régimen de Mubarak, cuyo hijo se suponía iba a tomar el
relevo, igual que ha ocurrido en Siria. <BR><BR><STRONG>Obreros contra una
operación especulativa</STRONG><BR><BR>A unos diez kilómetros de El Cairo, la
sociedad conocida con el nombre de Al-Nasr Compagny, que forma parte de Manial
Shiha –especializada en la producción de calentadores de agua, de condensadores,
de sistemas de calefacción, de generadores eléctricos así como de concepción de
productos relativamente avanzados tecnológicamente- ha sido vendida a la firma
Orascom Construction Industries (OCI), que pertenece a uno de los más
importantes hombres de negocios egipcio, Nassef Sawiris. En el curso de las
negociaciones de venta, un proyecto de desarrollo industrial –incluido un
aspecto siderúrgico- había sido mencionado. <BR><BR>Luego toda la transacción ha
aparecido como mucho más obscura. En efecto, ha aparecido en la superficie la
idea de demoler la fábrica y de reemplazarla por un complejo turístico de lujo.
Los 750 trabajadores de Al-Nasr han reaccionado inmediatamente y denunciado la
operación. La suerte de esta fábrica ilustra un proceso comenzado en la segunda
mitad de los años 1970 en Egipto, y que se ha acelerado en el último período. En
1994, Al-Nasr fue privatizado. La firma fue vendida en primer lugar a la
transnacional Babcok &Wilcoks, luego a Khaled Shatta. Este último ha montado
la operación de venta, en febrero de 2008, con Nassef Sawiris. A través de esta
privatización y de las reventas, el número de empleados ha pasado de 1187 a 750;
pero de ellos, unos 520 son bien trabajadores con contratos diarios, bien tienen
contratos temporales o anuales. Lo que implica, como explican trabajadores de
esta fábrica: “no hay seguridad en el empleo, ni seguridad social y de salud, no
hay vacaciones y el no pago de los días de baja por enfermedad”. “Nuestra lucha
tiene por objetivo salvar la firma, salvar nuestros empleos, salvar nuestro
medio de subsistencia”, dice Hassan (Al-Ahram Weekly, 9 abril 2008). La batalla
llevada a cabo por estos trabajadores se apoya a la vez en su capacidad de
movilización y en la utilización del hecho “legal” siguiente: en 1961, la firma
Al-Nasr estaba no solo en el sector público, sino que era considerada “como de
utilidad pública y para el desarrollo industrial”. <BR><BR>Este aspecto, según
los trabajadores, no fue liquidado formalmente en la privatización de 1994.
Hassan reafirma que “desplazar a otro lugar la producción y planificar un
complejo turístico es una ruptura evidente de contrato. Estamos del lado bueno
de la barrera, tanto legal como moralmente”. <BR><BR>No es necesario insistir en
el hecho de que la federación sindical responsable de este sector, ligada
estrechamente al aparato del estado, no apoya a los obreros en su acción. Hace
tres años, en una huelga, la burocracia sindical de la General Federation of
Engineering, Electrical and Metal manufacturers había abandonado a los
trabajadores a su suerte. Aparece a sus ojos como un agente del gobierno; lo que
es un hecho probado. En la lucha presente, la federación se ha contentado con
enviar una carta, a la que el gobierno ni siquiera ha respondido.
<BR><BR><STRONG>La importancia de la huelga de Ghazl
El-Mahalla</STRONG><BR><BR>Los trabajadores del textil en Ghazl El-Mahalla han
planteado 14 reivindicaciones, que han sido también asumidas por quienes llaman
a la “jornada de cólera” del 6 de abril. Entre estas reivindicaciones están en
primera fila el aumento salarial; el aumento de las subvenciones a la
alimentación; subvenciones para la vivienda, la regularización de las primas
salariales en términos de montante y de fecha de pago; la persecución de los
dirigentes corruptos de la sociedad Ghazl El-Mahalla y la reorganización de la
clínica ligada a la firma. Se constata que estas reivindicaciones remiten
parcialmente al tipo de organización socioestatal del sector textil tal como
existía en la época de Nasser y a las transformaciones ligadas a la política de
“apertura” económica. <BR><BR>Las amenazas represivas no dejan de aumentar.
Fuerzas militares se han acercado a la firma y grupos de esquiroles se han
manifestado ya a las puertas de la fábrica. La presión sobre los militantes que
se han perfilado desde hace cierto tiempo es extremadamente fuerte. El chantaje
por las estructuras sindicales oficiales es enorme. La federación sindical del
sector intenta poner en pie estructuras intermedias para operar una ligazón
controlada entre los trabajadores y la detestada oficialidad sindical.
<BR><BR>En este sentido, esta lucha, su audiencia, la forma en que sea apoyada
en Egipto e internacionalmente, podrán marcar el perfil de las luchas actuales,
eso sin querer exagerar su impacto o interpretar de forma unilateral su
expresión en el plano político. </DIV>
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<HR>
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<DIV align=center><STRONG><FONT size=3><FONT color=#800000><FONT
size=4>Correspondencia de Prensa - Agenda Radical - Boletín
Solidario</FONT><BR>Ernesto Herrera (editor): </FONT></FONT></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=3>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A><BR><STRONG><FONT size=3><FONT
color=#800000>Edición internacional del Colectivo Militante - Por la Unidad de
los Revolucionarios<BR>Gaboto 1305 - Teléfono (5982) 4003298 - Montevideo -
Uruguay</FONT><BR></FONT></STRONG><A
href="mailto:Agendaradical@egrupos.net"><STRONG><FONT
size=3>Agendaradical@egrupos.net</FONT></STRONG></A></DIV>
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