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<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><FONT color=#800000><EM><U><FONT
size=5>correspondencia de prensa - boletín solidario</FONT></U></EM>
<BR><FONT color=#ff0000 size=6>Agenda Radical</FONT><BR>Edición internacional
del Colectivo Militante<BR><U>18 de mayo 2008</U><BR>Redacción y
suscripciones:</FONT> </FONT></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=4>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A><BR></DIV>
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<HR>
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<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>Palestina</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT size=3>La Nakba actual
<BR><BR>Jonathan Cook</FONT></STRONG><BR></DIV></FONT>
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<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG>Al Ahram
Weekly</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><A
href="http://weekly.ahram.org.eg/2008/897/sc4.htm"><STRONG>http://weekly.ahram.org.eg/2008/897/sc4.htm</STRONG></A></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG>Traducido del inglés para
Rebelión por Sinfo Fernández</STRONG><BR><BR><BR></FONT><FONT face=Arial
size=2>Hemos sido testigos de toda una semana de adulaciones y lisonjas por
parte de los líderes mundiales, de despliegues ostentosos de fiereza militar y
fiestas en la calle. Los jefes de estado mundiales han estado rozándose con los
famosos para rendir homenaje al estado judío en su sesenta cumpleaños a la vez
que, según se ha informado, un millón de israelíes se trasladaban a los bosques
del país para celebrar un pasatiempo nacional: la barbacoa.</FONT></DIV><FONT
face=Arial size=2>
<DIV align=justify><BR>Pero las festividades de este año del Día de la
Independencia esconden tanto como evidencian. Las imágenes de alegría y
celebración que el mundo vio no mostraban la realidad de un Israel profundamente
dividido, compartido por dos pueblos con recuerdos y demandas encontradas sobre
la tierra.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Lejos de las cámaras, una quinta parte de la población
israelí –más de un millón de ciudadanos palestinos- recordaban la Nakba, la
catástrofe que en 1948 sobrevino sobre el pueblo palestino mientras el estado
judío se construía sobre las ruinas de su sociedad.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La minoría palestina, al igual que ha estado haciendo
durante la última década, organizó un acto alternativo de conmemoración: una
comitiva de familias, muchos de ellos refugiados de la guerra de 1948, hacia uno
de los más de 400 pueblos palestinos arrasados por Israel en un monumental acto
de vandalismo de estado tras los combates. Destruyeron los pueblos para impedir
que los refugiados pudieran volver.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero como indicador de lo lejos que Israel está de
aceptar las circunstancias de su creación, la policía israelí disolvió a la
fuerza la marcha de este año. Se dedicaron a aporrear a indefensos manifestantes
con bastones y arrojaron botes de gases lacrimógenos y granadas de aturdimiento
contra una muchedumbre de familias con niños pequeños.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Mientras la atención se centraba esta semana en la visita
del presidente de EEUU, George W. Bush, los israelíes de a pie marcaban el Día
de la Independencia una semana antes, en el aniversario de la fundación de
Israel según el calendario hebreo.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El abismo existente entre los dos Israel no fue en
ninguna parte tan patente como en las ciudades vecinas de Nazaret, la capital
real de la minoría palestina de Israel, y el Alto Nazaret, una ciudad de
inmigrantes judíos construida en las tierras confiscadas a Nazaret hace medio
siglo como parte de un programa de “judaización”.<BR>Las celebraciones en el
Alto Nazaret comenzaron con una exhibición de fuegos artificiales, seguida al
día siguiente de fiestas callejeras, con banderas israelíes adornando los
coches, las casas privadas y las oficinas públicas. En Nazaret, en contraste, el
ambiente era sombrío. Las calles estaban vacías y silenciosas, las tiendas
cerradas y no se veía bandera alguna.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Para los palestinos que habitan dentro de Israel, como
para sus hermanos esparcidos por todo el mundo, el Día de la Independencia de
Israel representa el penoso recuerdo de la tragedia personal y nacional acaecida
en 1948, cuando 750.000 palestinos fueron expulsados y sus tierras ocupadas para
levantar allí un estado judío.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La mayor parte de los refugiados viven actualmente en
campos de refugiados en los estados árabes vecinos, pero unos cuantos permanecen
dentro de Israel. En estos momentos, uno de cada cuatro ciudadanos palestinos de
Israel es un refugiado o un descendiente de refugiados. No sólo se les ha negado
el derecho a volver siquiera a sus hogares, como a otros refugiados, sino que
muchos de ellos viven dolorosamente al lado de sus antiguas comunidades.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Todo lo concerniente a los pueblos destruidos ha sido
reinventado como comunidades exclusivamente judías o enterrado bajo el follaje
de programas de reforestación nacional supervisados por el Fondo Nacional Judío
y pagados por donaciones caritativas de los judíos europeos y
estadounidenses.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Durante la guerra de 1948, la ciudad de Nazaret, una de
las pocas comunidades palestinas perdonadas, ofreció santuario a gran número de
refugiados que huían del avance de las fuerzas israelíes. Una de las mayores
barriadas-refugio es Safafra, construida en lo alto de una colina que da sobre
el pueblo original de Saffuriya, el destino de la procesión de la Nakba de este
año.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Varios miles de palestinos, ondeando banderas y cantando
canciones palestinas, marcharon a través de los campos de las afueras de Nazaret
hacia el bosque plantado en las tierras de labor de Saffuriya. Iban con ellos
muchos ancianos que aún podían recordar su huida de sus pueblos en 1948, a los
que se unieron jóvenes familias para compartir el acto comunal de recuerdo.
Varias docenas de simpatizantes judíos israelíes marchaban junto a ellos.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Pronto hubo indicios de que iba a haber problemas.
Mientras los caminantes se dirigían hacia el manantial de Saffuriya, que las
autoridades judías habían cerrado con una valla metálica hace unos cuantos años
para impedir que sus habitantes cogieran agua, se encontraron con una pequeña
contra-manifestación organizada por judíos israelíes de extrema derecha. Se
situaban sobre los campos del otro lado de la carretera principal, a la entrada
de lo que una vez fue Saffuriya y ahora es una comunidad agrícola judía llamada
Zippori. Agitaron banderas israelíes y cantaron canciones nacionalistas hebreas,
mientras policías antidisturbios se alineaban en el borde de la carretera que
separaba a las dos manifestaciones.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Tareq Shehadeh, director de la Asociación para el Turismo
y la Cultura de Nazaret, cuyos padres fueron expulsados de Saffuriya, dijo:
“Había unos 50 manifestantes judíos a los que se había permitido apoderarse del
planificado destino de nuestra marcha. Sus derechos acabaron automáticamente con
los nuestros, aunque nosotros fuéramos miles y ellos sólo un puñado”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La policía se desplegó de espaldas a los manifestantes
judíos mientras se encaraban con la comitiva palestina. “Era como si nos
dijeran: ‘Estamos aquí sólo en beneficio de los judíos, no de vosotros’”, dijo
Shehadeh. “Era como un recordatorio de que, en caso de necesitarlos, nos
hallábamos en un estado judío y éramos incluso menos bienvenidos de lo normal
cuando nos encontrábamos solos frente a ellos”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Los manifestantes se desviaron y se dirigieron colina
arriba hacia el bosque, hasta llegar a un claro donde los refugiados palestinos
contaron sus recuerdos.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Cuando el evento terminó ya muy avanzada la tarde, los
manifestantes regresaron hacia la carretera principal para coger sus coches.
Según la versión policial, los jóvenes palestinos bloquearon la carretera y
arrojaron piedras contra sus dotaciones, obligando a la policía a utilizar la
fuerza para restaurar el orden.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Docenas de manifestantes resultaron heridos, incluidos
mujeres y niños, y dos miembros árabes de la Knesset acabaron ensangrentados por
los bastonazos de la policía. La policía montada cargó contra la muchedumbre
mientras disparaban granadas de aturdimiento y gases lacrimógenos en dirección a
los campos por donde las familias cruzaban. Ocho jóvenes fueron
arrestados.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Shehaded, que estaba cerca de los policías cuando
empezaron los problemas, y muchos manifestantes más, dicen que vieron cómo
extremistas judíos, situados detrás de la policía, les lanzaban piedras.
Declaran que un puñado de muchachos palestinos les respondieron de la misma
forma. Otros añaden que fue una muchacha la que provocó a la policía ondeando
una bandera palestina.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“A ninguno de los policías le interesaba detener a los
judíos que lanzaban piedras. Y además, si unos cuantos jóvenes palestinos
reaccionaron de la misma forma, persígueles y arréstales, no envíes a la policía
montada a cargar contra una muchedumbre de familias con gases lacrimógenos y
granadas de aturdimiento. Fue una actuación totalmente indiscriminada y
temeraria”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Nubes de gas envolvieron a las familias que marchaban con
mayor lentitud mientras intentaban escapar con los niños hacia el bosque para
protegerlos.</DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify>Therese Zbeidat, una nacional holandesa que estaba allí con
su marido palestino, Ali, y dos hijas adolescentes, Dina y Awda, describió como
“espantosa” la experiencia de su familia y de otras familias a manos de la
policía.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“Hasta entonces era realmente un encuentro familiar.
Cuando la policía empezó a disparar los gases lacrimógenos, había una pareja
cerca de nosotros empujando hacia abajo un cochecito de bebé por un camino
pedregoso que llegaba hasta la carretera. Una densa nube de gas nos envolvió. Le
dije al hombre que dejara el cochecito y corriera con el bebé colina arriba tan
rápido como pudiera”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“Más tarde volví a encontrarme con ellos y el bebé iba
vomitando medio asfixiado y con los ojitos muy mal. Se me rompió el corazón.
Había tantas familias con niños pequeños y no medió provocación alguna para que
la policía cargara. Empezaron por nada”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El novio de 17 años de Awda, la hija de Teréese Zbeidat,
estaba entre los arrestados. “Era la primera vez que iba a un evento
nacionalista”, dijo. “Estaba con mi madre y cuando empezamos a correr colina
arriba para escapar de la policía a caballo, ella tropezó y cayó. Corrió a
ayudarla y lo siguiente que vimos fue que un grupo de unos diez policías
disparaban botes de gases lacrimógenos directamente contra él. Entonces le
pusieron la keffiyah (pañuelo palestino) alrededor del cuello y se lo llevaron
arrastrando. ¡Todo lo que estaba haciendo era ayudar a mi madre!”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Poco después, Therese y sus hijas pensaron que se habían
salvado sólo para encontrarse de nuevo en medio de otra carga policial que venía
por otra dirección, esta vez con la policía de a pie. Awda fue golpeada y tirada
al suelo y pateada, mientras Dina era amenazada por un policía que según ella
cuenta le dijo: “Te voy a romper la cabeza”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“He estado antes en varias manifestaciones en las que la
policía se puso muy desagradable”, dijo Therese, “pero lo que pasó allí no lo
había visto nunca. Esos niños pequeños, algunos que ni siquiera andaban, en
medio de todo ese caos llorando y llamando a sus padres… ¡Qué forma de celebrar
el Día de la Independencia!”</DIV>
<DIV align=justify><BR>Yafar Farah, jefe del lobby político Mossawa, que estaba
allí con sus dos hijos pequeños, les encontró un lugar seguro en el bosque y
corrió colina abajo para ayudar a trasladar a otros niños a un lugar seguro. Al
día siguiente, acudió a la vista de un tribunal en la cual la policía pedía que
los ocho jóvenes detenidos permanecieran retenidos durante siete días más. Tres
de ellos, incluido un periodista local que había sido golpeado y al que la
policía había robado su cámara, fueron liberados una vez que el juez contempló
un video gravado por los manifestantes sobre la confrontación. El novio de Awda,
Saher, no estaba entre los inmediatamente liberados.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Farah dijo sobre los hechos del Día de la Independencia:
“Nuestra comunidad ha tenido prohibido durante décadas recordar públicamente lo
que como pueblo sufrimos durante la Nakba. Nuestros profesores eran despedidos
tan sólo por mencionarlo. Pretendían que ignoráramos hasta que éramos
palestinos”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“Además, la policía israelí ha venido utilizando siempre
la violencia contra nosotros para enseñarnos cuál era nuestro sitio. En octubre
de 2000, al comienzo de la [segunda] Intifada, 13 de nuestros jóvenes,
desarmados, fueron asesinados a tiros en una manifestación. Nadie ha rendido
cuentas por aquellos hechos”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“A pesar de todo, quisimos empezar a creer que Israel
estaba finalmente lo suficientemente maduro como para permitirnos recordar
nuestra tragedia nacional. Las familias vinieron para enseñar a sus niños las
ruinas de los pueblos para que tuvieran conocimiento de sus orígenes. La
comitiva se convirtió en un acontecimiento memorable. La gente se sentía segura
asistiendo”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“Pero parece que estábamos equivocados. Pienso con todas
mis fuerzas que este ataque de la policía estaba planeado. Pienso que a las
autoridades israelíes les molestaba muchísimo el éxito de las marchas y querían
acabar con ellas”.</DIV>
<DIV align=justify><BR>“Puede que hayan ganado. ¿Qué padres llevarán a sus niños
a la marcha del próximo año sabiendo que serán atacados por policías
armados?”</DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><FONT size=3><FONT color=#800000
size=4>Correspondencia de Prensa - Agenda Radical - Boletín
Solidario</FONT><BR><FONT color=#800000>Ernesto Herrera (editor):
</FONT></FONT></STRONG><A href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=3>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A><BR><STRONG><FONT size=3><FONT
color=#800000>Edición internacional del Colectivo Militante - Por la Unidad de
los Revolucionarios<BR>Gaboto 1305 - Teléfono (5982) 4003298 - Montevideo -
Uruguay</FONT><BR></FONT></STRONG><A
href="mailto:Agendaradical@egrupos.net"><STRONG><FONT
size=3>Agendaradical@egrupos.net</FONT></STRONG></A></DIV>
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