<!DOCTYPE HTML PUBLIC "-//W3C//DTD HTML 4.0 Transitional//EN">
<HTML><HEAD>
<META http-equiv=Content-Type content="text/html; charset=iso-8859-1">
<META content="MSHTML 6.00.2900.3462" name=GENERATOR>
<STYLE></STYLE>
</HEAD>
<BODY bgColor=#ffffff background=""><FONT face=Arial size=2>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><FONT color=#800000><EM><U><FONT
size=5>correspondencia de prensa - boletín solidario</FONT></U></EM>
<BR><FONT color=#ff0000 size=6>Agenda Radical</FONT><BR>Edición internacional
del Colectivo Militante<BR><U>12 de diciembre 2008<BR></U>Redacción y
suscripciones:</FONT> </FONT></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=4>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A><BR></DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>Paraguay</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>La APC, Fernando Lugo y la nueva
etapa </STRONG></FONT></DIV><FONT face=Arial size=2>
<DIV align=justify><BR><STRONG><FONT size=3>El gobierno del “neoliberalismo
compasivo” </FONT></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG><FONT size=3>Marco Boltes</FONT></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG>Revista Socialismo o Barbarie Nº 22</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><STRONG>Buenos Aires, </STRONG><STRONG>noviembre
2008</STRONG><BR><A
href="http://www.socialismo-o-barbarie.org/"><STRONG>http://www.socialismo-o-barbarie.org/</STRONG></A></DIV>
<DIV align=justify><BR> </DIV>
<DIV align=justify>La coyuntura local cobró notoriedad internacional con el ex
obispo católico Fernando Lugo electo presidente. Con el triunfo de Lugo parece
culminar el ciclo de arribo al poder de los nuevos gobiernos progresistas en
Sudamérica. Paraguay aparece así como el último coletazo, producto de la
influencia del ascenso de masas a nivel continental, que termina en un gobierno
de este tipo, así como sucedió en otros países con cierta estabilidad parecida a
la nuestra, como Brasil y Uruguay. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Tal vez por formar parte de este fenómeno en forma muy
tardía, el gobierno Lugo tiene los rasgos “progresistas” mucho más desdibujados
en comparación con sus predecesores del continente, y tienen mayor peso los
elementos de estabilidad y las vías marcadamente institucionalistas. En nuestro
caso, se hace mucho más transparente el carácter de este tipo de gobiernos y su
filiación a fracciones de la clase dominante que apuestan ya no al modelo
neoliberal de los 90, sino más bien a un neoliberalismo moderado por la adopción
de políticas paliativas de corte asistencialista, a fin de no recaer en el caos
que originó la sucesión de rebeliones populares en todo el continente. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Sumado a esto, el movimiento social y de trabajadores no
está pasando por uno de sus mejores momentos desde la caída de la dictadura
stronista hasta hoy. Aun cuando el gobierno anterior de Nicanor Duarte Frutos
utilizaba métodos durísimos de persecución y criminalización de la lucha social,
principalmente contra el movimiento campesino, la lucha a pesar de los ataques
se mantuvo firme y combativa. Hoy, bajo el luguismo, varios de sus principales
dirigentes se dedican a organizar frentes y actos con el único fin de dar apoyo
incondicional al gobierno, sin que éste sea merecedor real de tales gentilezas y
olvidando algo tan básico como que el gobierno debe ser el que esté al ser–
vicio del movimiento de masas y no al contrario. Por su parte, la dirigencia del
movimiento obrero, que apoyó sustancialmente el proyecto electoral de Lugo, ni
bien éste llega al poder recibe una muestra del más descarado desprecio, cuando
Lugo nombrar a un dirigente del PLRA como Ministro de Justicia y Trabajo. A esto
se suma el plantón hecho al congreso de una de las más importantes centrales
obreras, la CNT, con el agravante de que, en cambio, Lugo no pierde oportunidad
de asistir a cuanto acto de corte populista se le presenta. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Otro fenómeno no menos importante es el papel de ciertos
sectores llamados de izquierda que forman parte del gobierno luguista. El
peculiar frente en el poder, la Alianza Patriótica para el Cambio, está
compuesto centralmente por un partido tradicional de origen decimonónico,
conservador y oligárquico: el PLRA, junto con otros dos, de reciente fundación,
que se proclaman de izquierda, el P–MAS y el Movimiento Popular Tekojoja.
Fuerzas que, hasta ahora, sólo han cobrado notoriedad por lo contradictorio
entre su accionar y los discursos o la lucha despiadada por cargos y
protagonismo entre ellas. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Sobre este punto, fue sintomático que el mismo día en que
el gobierno boliviano expulsaba a un embajador yanqui por brindar apoyo a la
derecha fascista de la Media Luna, el flamante ministro, autoproclamado
socialista y antiimperialista, Camilo Soarez, recibe sin complejos de manos de
la nueva embajadora de Washington en Asunción un interesante “donativo” para su
ministerio. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Con este tipo de acciones, por la vía de los hechos,
tenemos claro lo nefasto que puede resultar el gobierno Lugo. A pesar de haber
surgido de un apoyo electoral importante, producto del deseo de amplios sectores
de trabajadores de derrocar a la oligarquía vinculada a la burocracia del
Partido Colorado, hoy tenemos el contradictorio resultado de tener en esencia
nada más que una versión renovada de recambio institucional y estabilizador para
ese régimen desgastado y putrefacto. Pero con el agravante de que para la
burguesía local tiene la ventaja, por sobre los desplazados del gobierno, de que
tiene mayor capacidad para desarmar políticamente a gran parte de la dirección
del movimiento de masas. Su papel de coalición preventiva está, a estas alturas,
más que demostrado. </DIV>
<DIV align=justify><BR>En ese sentido, en lo que va del gobierno encabezado por
Fernando Lugo no se han visto ni rastros del tan anhelado y prometido “cambio”.
Antes bien, el nuevo gobierno se ha caracterizado por la ausencia de medidas
reales en cuanto a llevar a la práctica sus ya de por sí moderadas y modestas
promesas electorales. </DIV>
<DIV align=justify><BR>También son muy reveladores los movimientos y tendencias
en cuanto a los planes económicos y las políticas sociales durante los primeros
100 días de gobierno. Los hombres centrales de la administración Lugo y sus
políticas económicas y sociales nos dan una idea clara del rumbo que adopta este
gobierno. </DIV>
<DIV align=justify><BR>El gobierno del “cambio”, en realidad, es el gobierno del
continuismo en cuanto a la profundización de las medidas económicas
neoliberales, pero con la variante “progresista” de que van acompañadas de
medidas paliativas de corte asistencialista. </DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>EL SUPERMINISTRO BORDA</STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><BR>Empecemos por el flamante gabinete luguista. El primer
nombramiento fue el de Dionisio Borda, ex ministro de Hacienda (economía) del
saliente gobierno de Nicanor Duarte Frutos, llamado por la prensa el
“superministro”. Fue el artífice de la Ley de Reordenamiento Administrativo y
Adecuación Fiscal, más conocida como la ley del “impuestazo”. Mientras ocupó el
cargo por 21 meses, entre 2003 y 2005, fue el más fiel partidario del FMI, con
el que consiguió cerrar un acuerdo en diciembre de 2003 por 73,5 millones de
dólares. </DIV>
<DIV align=justify><BR>El impuestazo consistió esencialmente en generalizar el
Impuesto al Valor Agregado (IVA) y paralelamente reducir de 30% a 10% el
impuesto a las ganancias para las empresas, reforzando al mismo tiempo los
controles fiscales. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Como el IVA es en realidad un impuesto al consumo y en
los hechos un impuesto al salario, el famoso equilibrio macroeconómico y el
cumplimiento de los deberes ante el FMI fue logrado en base a cargar sobre las
espaldas de la clase trabajadora ocupada la crisis económica. Al mismo tiempo,
las patronales, tomándose de esta reforma tributaria, lograron imponer
formalmente el trabajo informal y precarizado, sin necesidad de modificar o
reformar mucho la legislación laboral. Se volvió moneda común que las empresas
dejen de tener empleados contratados que figuren en nóminas1, con los beneficios
sociales y derechos laborales que ello implica. Ahora un trabajador figura para
las administraciones sólo como “prestador de servicios”, que mediante expedición
de factura es expropiado del 10% de su salario mensual a través del IVA, monto
que luego sirve para ser utilizado por las patronales para su amortización
fiscal. Insistimos en que el equilibrio fiscal, y parte de los acuerdos con el
FMI, fue alcanzado en gran medida sobre la base de esta explotación adicional de
los trabajadores. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero lo peor todavía está por venir. Borda, cuando dejó
el ministerio en 2005, dejó inconclusa su tarea. Quedó pendiente la reforma de
las empresas públicas y del Banco Nacional de Fomento.2 Su salida probablemente
se dio ante su “radicalidad” en cuanto a privatizar, lo que implicaba en ese
momento un terrible dilema para el régimen colorado, que utilizaba las empresas
públicas como centros de distribución de prebenda y sus funcionarios constituían
un electorado cautivo. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Ahora quiere terminar la tarea inconclusa. El mismo
Borda, poco antes de asumir funciones, adelantó que el tema central según él es
“buscar soluciones” para las empresas del Estado. Para ello se ha formado un
consejo de ministros, refrendado por decreto del propio Lugo: el Consejo de
Empresas Públicas, con tres integrantes: Industria y Comercio, Obras Públicas y
Hacienda, cuya tarea fundamental será “coordinar planes y programas de
modernización de entes del Estado”. Ya en esa ocasión aclaró que buscar solución
a las empresas del Estado significa, básicamente, la incorporación de capital y
gerenciamiento privado bajo la forma de tercerización, concesión o
capitalización. En ningún momento se habla de privatización como tal, aclaró.
</DIV>
<DIV align=justify><BR>Sólo que al ministro Borda se le olvidó mencionar que las
actuales empresas públicas, jurídicamente, son sociedades anónimas, en las
cuales hasta ahora el Estado es el mayor accionista, lo que implica que si se da
la mentada incorporación de capital y el gerenciamiento privado, con el nombre o
modalidad que sea, se habla de una privatización de hecho.3 </DIV>
<DIV align=justify><BR>Otro punto no menos importante, es que en el citado
Consejo de Ministros lo acompañan nada menos que el empresario del rubro
farmacéutico Martín Heisecke, ministro de Industria y Comercio, junto con Efraín
Alegre, ocupante de la cartera de Obras Públicas. Ambos son afiliados del
conservador PLRA y defensores religiosos del neoliberalismo. Según el propio
Alfredo Jaegli, senador liberal conocido por ser el portavoz de los sectores más
oligarcas, la elección de Borda por Lugo para ocupar nuevamente la jefatura del
ministerio en cuestión se da porque “puede garantizar que no haya ruptura
brusca, ya conoce el manejo de este gobierno y puede ayudar al que entra”.4 En
esto Jaegli tiene mucha razón. Durante el lapso de forzado retiro, el reciclado
ministro de Hacienda presentó, antes de las elecciones, un trabajo hecho en
colaboración con otros “especialistas” titulado “Notas para el Debate Electoral
2008”. En el trabajo se plantean los temas que a su opinión son los prioritarios
para la gestión pública 2008–2013. </DIV>
<DIV align=justify><BR>El futuro ministro sostiene en el citado trabajo que el
impedimento para lograr un crecimiento económico sostenido, sustentable y
equitativo radica, por un lado, en la debilidad del Estado, manifestada en la no
vigencia del estado de derecho, la carencia de un plan estratégico y políticas
coordinadas, un sector público no reformado y una burocracia subordinada a los
intereses políticos. </DIV>
<DIV align=justify><BR>También hay que sumar a las causas mencionadas el escaso
desarrollo del mercado y la baja competitividad del sector privado por la
distorsión del Estado prebendario, imperfecciones del mercado, la informalidad y
la ausencia de regulación efectiva y el déficit en tecnología, servicios
públicos, créditos y mano de obra calificada. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Los temas incluidos en ese trabajo son: crecimiento
económico y empleo, reforma constitucional para la gobernabilidad y gobernanza,
energía y desarrollo de infraestructura, educación superior y desarrollo del
capital humano, reducción de la pobreza y de la desigualdad e inserción
económica del Paraguay en el mundo 5. </DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>NEOLIBERALISMO CON ROSTRO HUMANO</STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><BR>Estas conclusiones, elaboradas con ayuda de
“especialistas”, no son otra cosa que la aplicación a rajatabla de las recetas
del Banco Mundial enmarcadas en el nuevo consenso de Monterrey6, que vino a
suplantar al de Washington, y que están resumidas en los Objetivos de Desarrollo
del Milenio de la ONU. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Coincidentemente con el trabajo de Borda, según el propio
Banco Mundial las prioridades para los países en desarrollo como el nuestro se
dan en cuatro áreas: mejorar el clima para el sector privado, fortalecer el
sector público y mejorar la gobernabilidad, aumentar las inversiones en
infraestructura y mejorar la eficacia de la prestación de servicios que inciden
en el desarrollo humano. </DIV>
<DIV align=justify><BR>7 Estos Objetivos de Desarrollo del Milenio son el nuevo
paradigma de las políticas de cooperación para el desarrollo, impulsadas por el
Banco Mundial y el FMI, llevadas adelante con el respaldo de las Naciones
Unidas. Los mismos son reducir para el 2015 en un 50% el número de personas que
viven con menos de 1 dólar, pasan hambre o carecen de agua potable; que todos
los niños y niñas pueden completar la enseñanza primaria; reducir en 2/3 la
mortalidad infantil y en 3/4 la mortalidad materna; detener epidemias como el
SIDA o la malaria; hacer la deuda externa sostenible a largo plazo; aumentar la
AOD hasta el 0,7% del PNB mundial, e integrar a los países en desarrollo en la
economía mundial a través de un sistema comercial y financiero abierto.8 Se
supone que el medio de aplicar esta estrategia será la reformulación nacional de
las Estrategias de Reducción de la Pobreza (PRSP), impulsadas por el Banco
Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI), movilizando todos los recursos
nacionales y asegurando el compromiso a largo plazo de la ayuda internacional,
con una perspectiva no de tres, sino de cinco y diez años. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Es evidente que muchas de las medidas concretas que
proponen para la lucha contra la pobreza parecen propuestas positivas tomadas en
sí mismas. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero está la otra cara de la moneda: estas metas del
milenio de lucha contra la pobreza van acompañadas de medidas conocidamente
neoliberales. Por eso afirmamos que es un nuevo paradigma: ya no se trata de la
aplicación ortodoxa de las recetas neoliberales, sino de un neoliberalismo
“compasivo”. Compasión que tampoco resulta gratuita. </DIV>
<DIV align=justify><BR>En este esquema aparecen dos elementos nuevos en relación
con el Consenso de Washington, ya apuntados en el nuevo Consenso de Monterrey.
</DIV>
<DIV align=justify><BR>El primero de ellos es el papel del Estado y el gasto
público para movilizar, regular y garantizar las inversiones necesarias en
infraestructura, “capital humano” y “clima de negocios” que aseguren el
desarrollo pleno de la acumulación primitiva de capital y, sobre todo para su
integración paulatina de nuestros países atrasados en el mercado mundial.10 La
venida a Paraguay, de la mano del Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo (PNUD), del conocido economista Joseph E. Stiglitz, que además de ser
ganador del premio Nobel en Economía en 2001 fue desde 1993 asesor económico de
Bill Clinton y desde 1997 vicepresidente y economista jefe del Banco Mundial,
sirve como un elemento más a la hora del recuento para asumir cuál será el
paradigma económico del gobierno Lugo. </DIV>
<DIV align=justify><BR>El asesor económico internacional de la APC es otro
neoliberal con rostro humano recientemente converso. Su visión de la economía:
la ineludible globalización de la economía capitalista mundial y la necesidad de
un nuevo intervencionismo estatal y multilateral internacional para regularla a
diferentes niveles. Según sus propias palabras durante la conferencia dictada en
el Congreso Nacional, donde compartió con Lugo, Franco y Borda: “Las economías
de mercado han alcanzado altos índices de crecimiento en los últimos años, pero
este crecimiento no ha traído aparejado consigo una disminución de las
inequidades sociales. Es por eso que el Estado debe dar énfasis a la reducción
de estas inequidades, teniendo en cuenta que las personas son el principal
recurso de un país”.11 En su planteamiento se hace necesaria una inyección
exógena de capitales, de manera selectiva. Es ahí donde entran a tallar los
organismos económicos multilaterales como el Banco Mundial. También se promueve
la creación de las condiciones de mercado necesarias para asegurar los
beneficios que atraigan a las multinacionales o la inversión extranjera, como
las privatizaciones. </DIV>
<DIV align=justify><BR>La discusión sobre las implicancias de la aplicación de
estas medidas económicas por el nuevo gobierno12, enmarcadas en un consenso
aparentemente técnico y científico con el apoyo de organismos internacionales,
es antes que nada una discusión política, no solo en cuanto a los metas sino en
cuanto a los medios sugeridos para lograrlas. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Este paradigma económico es el referente de los sectores
de la izquierda liberal del movimiento altermundista, el “capitalismo
humanitario”. Pensar que bajo el sistema capitalista, y más aún en esta
coyuntura de crisis global, los países semicoloniales puedan salir del agujero
donde están con la aplicación de las mismas recetas económicas responsables de
su actual situación, pero con medidas paliativas y focalizadas para mitigar sus
efectos, no sólo es una utopía reaccionaria. Es toda una contraofensiva política
para desmontar los procesos de construcción que están llevando adelante los
movimientos sociales y de trabajadores en busca de la verdadera salida para
nuestro país, América latina y el resto de los países semicoloniales de la
pobreza y el atraso en que estamos sumidos: una salida socialista obrera,
campesina y popular. </DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>PROFUNDIZANDO EL CONTINUISMO NEOLIBERAL</STRONG>
</DIV>
<DIV align=justify><BR>Con el gabinete económico encabezado por Borda, es
evidente que se prepara el continuismo y la profundización de la aplicación de
las medidas económicas neoliberales, pero con el matiz de una política
asistencialista a gran escala, a fin de combatir los efectos más visibles
resultantes de la aplicación de esas medidas, como la extrema pobreza. Pero si
hablamos de continuismo, también hay que remarcar que seguirá vigente la fórmula
de cargar sobre las espaldas de la ya terriblemente castigada clase trabajadora
los ajustes para lograr estas metas. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Difícilmente los ganaderos y sojeros sufran un descuento
a sus cuantiosas ganancias, como se viene especulando. Y si ello ocurriera,
sería meramente testimonial. En la práctica, Borda no tocó un pelo a estos
sectores en su anterior gestión, y es claramente consecuente en ese aspecto con
su teoría económica en cuanto a crear un “clima de negocios”. Pero, sobre todo,
el propio Lugo, en ningún momento, incluyendo la campaña electoral, habló de
tocar al modelo económico agroexportador. Terrible contradicción cuando en otras
ocasiones habla de la realización de una reforma agraria durante su gobierno.
</DIV>
<DIV align=justify><BR>Un dato importante a este respecto es la percepción de
tranquilidad que tienen para invertir los sectores del agrobusiness. Tanto es
así que la empresa de maquinarias agrícolas New Holland reportó que este año
será muy promisorio, ya que en los primeros meses de 2008, las ventas de
tractores fueron en un 113% superiores a las registradas en el mismo período del
año pasado.13 En cuanto a lo que podemos esperar los trabajadores de parte del
gobierno, basta mirar los resultados de la anterior gestión Borda: la pobreza
extrema ha aumentado en un 40 por ciento en el período 2005–2007, es decir, unas
270.000 personas más cayeron en la extrema pobreza, debido principalmente al
incremento de los precios de los alimentos en la canasta básica (según el último
informe de la ONU). </DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>LA ALIANZA ENTRE EL MANGURUYÚ Y LAS
MOJARRITAS</STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><BR>Cabe también dar una mirada al aparato político sobre el
que se sustenta Fernando Lugo, a fin de completar la caracterización sobre el
rumbo que va tomando su gobierno. La Alianza Patriótica para el Cambio
obviamente ha dejado de ser un frente electoral para pasar a ser una alianza
política que dirige el aparato del estado. Como citamos, está conformado
centralmente por el Partido Liberal Radical Auténtico y otros dos que se
autoproclaman socialistas, el Partido del Movimiento al Socialismo y el
Movimiento Popular Tekojoja.14 Estos últimos tienen en realidad muchos más
puntos en común con los liberales, aparte del ejercicio del poder, que con las
organizaciones políticas del movimiento de masas. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Esta aclaración es importante, pues entre todas las
caracterizaciones hechas por distintas organizaciones y corrientes socialistas,
podemos encontrar las que van desde las posiciones más oportunistas o ingenuas,
que suponen al gobierno de Lugo como de izquierda, por la inclusión de estos
partidos, hasta las que hablan de un gobierno de colaboración de clases. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Sin embargo, podemos ver que en esencia el gobierno Lugo
no pasa de ser un gobierno burgués normal, donde el peso de la administración
estatal está en poder de un partido tradicional de derecha junto al cual, por
ahora, participan partidos que defienden posturas a lo sumo progresistas. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Por eso, ni siquiera se puede hablar de que el gobierno
aliancista sea de colaboración de clases: no existe en el gobierno Lugo el más
mínimo peso político o influencia real de alguna organización social del
movimiento de masas, y menos de trabajadores y el movimiento campesino. Es más,
el movimiento de masas está sufriendo un profundo desarme político a causa de la
cooptación que el luguismo lleva adelante con varios sectores de su dirigencia.
Expulsada la vieja burocracia colorada de los puestos claves de la
administración estatal, lógicamente alguien debía de ocupar esos espacios para
darle el barniz de “cambio” que tanto predica el luguismo. Claro está, luego de
que los dirigentes de comités del PLRA aseguren los suyos. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Tanto por los discursos como por su trayectoria anterior,
podemos decir que la fracción “progresista” del PLRA, personificada y liderada
por el vicepresidente Federico Franco15 por un lado y los otros dos partidos
citados, son auténticos representantes políticos del neoliberalismo compasivo.
Con uno que otro matiz, la Alianza en su conjunto comparte esta visión política,
donde el mayor o menor grado de preocupación por la “cuestión social” es la
única diferencia política real. Como son considerados el ala izquierda del
gobierno, es importante hacer hincapié en la orientación que tuvieron y tienen
actualmente el Movimiento Tekojoja y el P–MAS. </DIV>
<DIV align=justify><BR>En este sentido, puede decirse que Tekojoja es el
representante más fiel de la izquierda liberal “progresista”. Es la organización
más propensa a defender e implementar las políticas paliativas del
neoliberalismo compasivo. El partido tiene una importante composición
dirigencial de, si no administradores, por lo menos funcionarios de varias ONGs.
Tal vez por ello, son bastante coherentes con su visión de cambiar lo que sea
posible cambiar dentro del capitalismo sin cuestionarlo como tal. Impulsados por
esa idea del posibilismo, no hace mucho algunas de sus actuales figuras públicas
estuvieron vinculadas notoriamente a la organización local del Foro Social
Mundial y a la idea de que “otro mundo es posible”. El partido surgió con el fin
de apuntalar el proyecto electoral que llevó al poder a Fernando Lugo, y ahora
consecuentemente su política gira en torno a dar un apoyo incondicional a su
figura. </DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify>Por su parte el P–MAS16 es más ecléctico en cuanto a fuentes
y referencias políticas. El espectro de las mismas abarca desde el movimiento
altermundista hasta la reivindicación del chavismo, pasando por las obligatorias
citas al Che Guevara. Sin embargo, esto no impide que el denominador común con
Tekojoja sea la defensa a ultranza de Lugo. El P–MAS tampoco está desligado del
neoliberalismo humanitario: no es casual que su principal dirigente sea el
ministro de la Secretaría de Emergencia Nacional, repartición encargada de
administrar el asistencialismo estatal. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Desde otro ángulo, también podemos ver que en la Alianza
el peso político específico del PLRA es sin dudas muchísimo mayor al que puedan
tener el P–MAS o Tekojoja, desequilibrio que con el paso del tiempo en vez de
ser superado se va acentuando. Principalmente por dos factores: la falta de
política propia y distintiva frente a la política de defensa de los privilegios
de un partido de tipo oligárquico que se adapta en forma oportunista a los
nuevos vientos de cambio. Pero el factor más importante es la falta de bases
sólidas en el movimiento de masas. La falta de un movimiento fuerte y en lucha
en el cual sostenerse o por lo menos referenciarse hace que ambos partidos
políticos sólo tengan peso en las superestructuras estatales.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Ambas organizaciones actualmente siguen un curso de
rápida absorción por el aparato estatal. Desde un inicio, llevados por la lógica
de la realpolitik, entraron en una primera fase de su anulación, por parte del
PLRA y la burguesía en su conjunto, como organizaciones que puedan de alguna
manera contrapesar su política, y ni que hablar de representar los intereses de
los sectores pobres y explotados. Esto es más notorio cuando se hace pública la
enconada rivalidad entre ambas en torno a ocupar tal o cual espacio de poder o a
las disputas en torno a ser los referentes “socialistas” del gobierno. Ambas
organizaciones políticamente tan parecidas y con propósitos comunes podrían
aliarse para sumar y equilibrar fuerzas con su circunstancial aliado de derecha.
Sin embargo, llevados por el deseo de hegemonía y el contagio sufrido de la
lógica del poder, terminan utilizando los métodos propios de los partidos
tradicionales de la burguesía, como el prebendarismo y la utilización de los
recursos estatales con fines partidarios. </DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>DESPERTAR DEL LETARGO</STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><BR>Las consecuencias para el movimiento social y de
trabajadores van a sentirse más pronto de lo que parece: alguien tiene que pagar
la factura para sostener el programa asistencialista dirigido a los sectores
marginalizados y mantener el mentado “clima de negocios” del superministro
Borda, porque con los fondos exógenos de la cooperación internacional17 o del
FOCEM18 no alcanza para que, en los próximos cinco años, los efectos más
visibles de las medidas neoliberales y de continuidad del modelo agroexportador
se mitiguen de alguna forma, si en realidad les interesa. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Nuevamente, exprimir a los trabajadores será el recurso
económico central del gobierno del “cambio”. </DIV>
<DIV align=justify><BR>A estas alturas, afirmar que el gobierno Lugo no es el
proyecto de un sector burgués (que tiene como norma, desde el vamos, adoptar
cambios superficiales para no tocar el grueso de los privilegios de los mismos
oligarcas que iniciaron su ascenso ya en los albores del stronismo) que se
propone y presenta como alternativa de renovación efectiva para la defensa de
los intereses generales de toda la burguesía local, frente al anterior agotado e
inservible régimen bajo la hegemonía del Partido Colorado, ya no es ingenuidad
sino mala fe o vulgar oportunismo. </DIV>
<DIV align=justify><BR>La cuestión de apoyar o incluso formar parte del gobierno
Lugo se constituyó en una verdadera divisoria de aguas al interior del
movimiento social y de trabajadores. Hecho muy positivo por una parte, pues se
definieron sectores que optaron por la construcción de espacios independientes y
clasistas, pero por otro lado el proceso de cooptación de dirigentes sociales y
de parálisis, que ya hemos citado, trajo consigo la ruptura y división, con el
consecuente debilitamiento de varias organizaciones gremiales y políticas del
campo popular. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Que todo siga igual o no, una vez más, depende de los
llamados sectores sociales, la clase trabajadora organizada y el movimiento
campesino. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Lamentablemente, a pesar del fortalecimiento de algunas
iniciativas en la clase trabajadora19, vemos que el rasgo general es el de la
confusión y de la concesión tácita de un periodo de confianza hacia Lugo; se
impone el “esperemos a ver qué pasa”. Actitud que trae aparejada la inmovilidad
absoluta y la pérdida de reflejos del movimiento campesino y de trabajadores,
que a futuro tendrá un costo altísimo a la hora de enfrentar la implementación
de nuevas medidas de corte neoliberal que sin dudas se avecinan. Y en este punto
volvemos a recalcar el papel paralizador de las organizaciones reformistas que
forman parte del gobierno, con su política de apoyo incondicional y de congelar
las luchas con el viejo pretexto de no remover el avispero porque “las
circunstancias pueden ser aprovechadas por la derecha reaccionaria”. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Así como recordamos que se definieron sectores por la
conformación de un polo independiente y clasista, debemos aunar esfuerzos para
recomponer una verdadera oposición de izquierda al gobierno Lugo. En estos
momentos parece una tarea difícil, pero debemos dar sin demora los primeros
pasos en pos de ese objetivo. No más falsas esperanzas en la lapicera de
Fernando Lugo: sólo la movilización, la coordinación en torno a las reales
reivindicaciones de la clase trabajadora y el conjunto de los explotados en base
a un programa de luchas será la fuerza del verdadero cambio. Despertemos del
letargo. <BR><BR><U><STRONG></STRONG></U></DIV>
<DIV align=justify><U><STRONG>Notas</STRONG></U><BR><BR>1 También de este modo
evitan pagar los respectivos montos al Instituto de Previsión Social por
ejemplo. <BR>2 “El Paraguay de Lugo y el FMI”, <A
href="http://ifis.choike.org/esp/informes/924.html"><FONT
color=#000000>http://ifis.choike.org/esp/informes/924.html</FONT></A>. </DIV>
<DIV align=justify>3 “Dionisio Borda habla de tercerización y no de
privatizaciones”, <A
href="http://www.abc.com.py/articulosphp?pid=437919fec"><FONT
color=#000000>http://www.abc.com.py/articulosphp?pid=437919fec</FONT></A>=
(2008–08–02).</DIV>
<DIV align=justify>4 “Popularidad posibilita a Lugo elegir ministros sin mucha
presión de aliados”, http://anteriores.lanacion.com.py, 4–5–08) 5 “Borda será
ministro”, confirmó Lugo, http://www.abc.com.py/articulos.php?fec=2008–05– 02
pid=411750. </DIV>
<DIV align=justify>6 Cumbre extraordinaria de las Américas – Monterrey, México
del 12 al 13 de enero de 2004. <BR>7 “El largo camino para alcanzar los
objetivos de desarrollo del milenio”, http://www.bancomundial.
<BR>org/temas/omd/camino.htm. <BR>8
http://siteresources.worldbank.org/quienessomos/Resources/folletobancomundial–2007.pdf
9 G. Búster, “El proyecto milenio o la globalización capitalista compasiva”,
http://www.rebelion. <BR>org/noticia.php?id=19992 10 Ídem. <BR>11
http://www.lanacion.com.py/noticias.php?not=198884 12 En el informe de Naciones
Unidas en Paraguay se afirma que estas políticas serán adoptadas por nuestros
gobiernos en sus primeros cien días, quedando claro que trascienden las
decisiones a nivel local (“Objetivos de Desarrollo del Milenio Informe
Paraguay”, Sistema de las Naciones Unidas en Paraguay, Asunción, 2003). <BR>13
“Venta de máquinas agrícolas se duplicó en lo que va del año”, La Nación,
13–9–08. <BR>14 Los acompañan también otros partidos más pequeños, como el
Partido Democrático Progresista y el Partido País Solidario. <BR>15 Franco fue
primero intendente municipal y luego gobernador del Departamento Central, antes
de candidatearse como compañero de dupla de Fernando Lugo. En realidad
representa a una fracción del PLRA, y no pertenece al oficialismo del partido.
<BR>16 Otro elemento en común con Tekojoja es que el P–MAS también se inicia a
partir de una ONG, la llamada “Casa de la Juventud”. <BR>17 La vicepresidenta
del Banco Mundial, Pamela Cox, en reciente visita ofreció créditos por 500
millones de dólares, de los cuales se donarán 5 millones para obras sociales
(http://www.abc.com.
<BR>py/2008–09–16/articulos/451456/banco–mundial–ofrece–us–500–millones–al–gobierno–de–lugo).
<BR>18 Marco Boltes, “Cómo se viene el 2008. Recuento y Perspectivas”. <BR>19 La
Mesa Coordinadora Sindical, que agrupa a varios sindacatos estatales y otros del
sector privado, lleva adelante una política independiente y crítica al gobierno
Lugo. </DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><FONT color=#800000 size=3>Correspondencia de Prensa -
Agenda Radical - Boletín Solidario<BR>Ernesto Herrera (editor):
</FONT></STRONG><A href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=3>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A><BR><STRONG><FONT color=#800000
size=3>Edición internacional del Colectivo Militante - Por la Unidad de los
Revolucionarios<BR>Gaboto 1305 - Teléfono (5982) 4003298 - Montevideo -
Uruguay</FONT></STRONG><BR><A href="mailto:Agendaradical@egrupos.net"><FONT
size=3><STRONG>Agendaradical@egrupos.net</STRONG></FONT></A></DIV>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV></FONT></BODY></HTML>