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<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><U>boletín solidario de
información</U><BR><FONT size=5><FONT color=#800000>Correspondencia de
Prensa</FONT> <BR></FONT><U>2 de agosto 2010</U><BR><FONT color=#800000
size=5>Colectivo Militante - Agenda Radical</FONT><BR>Gaboto 1305 - Montevideo -
Uruguay<BR>redacción y suscripciones: </FONT></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=4>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A></DIV>
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<DIV><STRONG><FONT size=3>Brasil<BR><BR>El Parlamento prepara una amnistía
general para los autores de delitos ecológicos hasta 2008
<BR></FONT></STRONG></DIV></FONT>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT size=3>Los diputados
ruralistas logran imponer sus intereses</FONT></STRONG> </FONT></DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT
size=3></FONT></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT size=3>Un "retroceso histórico" dicen
los ecologístas</FONT></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR></DIV></FONT>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG>Francho Barón, desde Río de
Janeiro <BR>El Pais, Madrid, 2.8.10<BR></STRONG><A
href="http://www.elpais.com/"><STRONG>http://www.elpais.com/</STRONG></A></FONT></DIV><FONT
face=Arial size=2>
<DIV align=justify><BR><BR>Brasil se prepara para conceder una amnistía general
a los responsables de los desastres ecológicos cometidos en su vasto territorio.
Y lo hace después de que una Comisión Especial del Congreso haya aprobado por
aplastante mayoría (trece votos a favor y cinco en contra) una reforma del
Código Forestal brasileño que regula los niveles máximos de destrucción. Los
diputados ruralistas, aquellos que defienden los intereses del sector
agropecuario, a veces incluso en detrimento del medio ambiente, son numerosos en
el Congreso y en el Senado. Y todo apunta a que su conveniencia se convertirá
pronto en ley.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El nuevo código también reduce las márgenes preservadas
de los ríos y da más poder a los Gobiernos de los Estados brasileños a la hora
de aplicar las normas medioambientales. El conjunto no puede ser más desolador
para los sectores ecologistas, que califican el nuevo código de "retroceso
histórico". Obviamente, en el ojo del huracán se sitúa el Amazonas.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La ecuación es básica: los diputados ruralistas tienen el
control del Congreso ya que no pertenecen a ningún partido en concreto: tienen
amplia presencia en todas las formaciones, ya sean de izquierdas o de derechas.
Haciendo uso de esta fuerza han conseguido aprobar en primera instancia la
reforma del Código Forestal. Las elecciones presidenciales brasileñas se
celebrarán el próximo 3 de octubre, y el voto de agricultores y ganaderos vale
su peso en oro en Brasil, donde el sector agropecuario es muy poderoso. Una
reforma legislativa que implique flexibilizar las normas medioambientales en
beneficio de la productividad y que establezca una amnistía general para los que
hayan atentado contra el ecosistema es moneda de cambio valiosa a la hora de
pedir votos.</DIV>
<DIV align=justify><BR>"El escenario electoral es fundamental para entender lo
que está pasando. En este momento no existen las condiciones para abordar este
asunto con mesura. Nosotros pedimos que se atrasara la votación hasta después de
las elecciones. Ellos (los ruralistas) querían que se celebrara antes. De
momento, han ganado", explica a EL PAÍS Paulo Adario, director de la campaña
para el Amazonas de Greenpeace. "Esta discusión no puede llevarse a cabo en
periodo electoral. Es nefasto para el medio ambiente que esta reforma se haya
votado en este momento", abunda Paula Moreira, del Instituto de Investigación
Ambiental del Amazonas (IPAM).</DIV>
<DIV align=justify><BR>El texto aprobado en la Comisión Especial proviene del
diputado Aldo Rebelo, del Partido Comunista de Brasil (PCdoB), que defiende la
reforma forestal asegurando que "el 90 % de las propiedades son irregulares y
por lo tanto no consiguen establecer las áreas de reserva". Es cierto que el
nuevo marco legal urge, ya que durante la última década la regulación de las
áreas protegidas brasileñas se desarrolla en una suerte de limbo legal que ha
dado pie a numerosos desmanes. "Los ruralistas han escogido muy bien el momento
y a la persona (Aldo Rebelo), que le ha dado un barniz ideológico a un discurso
puramente económico. Es curioso observar cómo la izquierda ha consolidando el
discurso de la derecha", relata Adario.</DIV>
<DIV align=justify><BR>"En el texto no hay ninguna propuesta de amnistía",
replica Rebelo en una conversación telefónica con este diario. "Lo que esta
reforma hace es copiar un decreto del Gobierno Federal que ya existe y que
suspende las multas administrativas para que los propietarios puedan regularizar
su situación", añade. "Sí es una amnistía desde un punto de vista técnico. Pero
lo más grave es que desde el punto de vista simbólico o político, esta reforma
beneficia a todo aquel que deforestó ilegalmente hasta julio de 2008. Y esto
servirá de estímulo para nuevas deforestaciones", le contradice André Lima,
candidato a diputado por el Partido Verde (PV).</DIV>
<DIV align=justify><BR>Rebelo no oculta que su propuesta también recoge
motivaciones de carácter económico: "Existen las cuestiones medioambiental y de
producción rural. Pero también existe una guerra comercial. ONG financiadas por
Europa y EE UU apoyan los intereses de la agricultura subvencionada en sus
países. Evidentemente, estos intereses existen y yo, como legislador, defiendo
el medio ambiente, pero teniendo en cuenta los intereses de la agricultura
brasileña".</DIV>
<DIV align=justify><BR>Según los cálculos de Greenpeace, la amnistía que se
pretende extender a todos los delitos contra la vegetación cometidos antes de
2008 (año en que el Gobierno brasileño aprobó un marco legal consolidado para
regular los crímenes medioambientales) supondría la condonación de una deuda con
el Estado por valor de 8.000 millones de reales (más de 3.500 millones de
euros). El Ministerio de Medio Ambiente eleva esta cifra a 10.000 millones de
reales (más de 4.400 millones de euros). Esto quiere decir que aquellas personas
o empresas que fueron condenadas por deforestar ilegalmente quedarían impunes
tras regularizar la situación de sus propiedades en un plazo de cinco años.
Después, sus procesos serían archivados definitivamente. "Para entendernos:
estas personas ganaron mucho dinero con esos delitos y ahora van a ganar el
doble, ya que se van a ahorrar la multa. Es una tremenda injusticia con los
agricultores, que hacen enormes esfuerzos para adaptarse y cumplir la
legislación medioambiental", afirma Moreira.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El nuevo Código Forestal también establece que en ríos de
menos de cinco metros de ancho las márgenes de preservación forestal se reduzcan
de 30 a 15 metros, y hasta a 7,5 metros si así lo deciden las autoridades del
Estado. "Hemos calculado que 86 millones de hectáreas de selva podrán ser
deforestadas legalmente si el texto sale adelante. Es una superficie que supera
todo lo destruido en la historia de la Amazonia", alerta Adario. "Es una mentira
más de Greenpeace y de otras ONG. Si son capaces de demostrar que mi texto
autoriza a deforestar una sola hectárea en el Amazonas, renunciaré a mi mandato
de diputado", promete Rebelo.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El texto también deja en manos de los Estados brasileños
la posibilidad de flexibilizar la aplicación del nuevo código en función de las
características de la región. "La lógica indica que los Estados tienen mayor
agilidad a la hora de aplicar la norma, pero también están más sujetos a las
presiones de los lobbies y a casos de corrupción", alerta el responsable de
Greenpeace.
<HR>
</FONT></DIV></BODY></HTML>