<!DOCTYPE HTML PUBLIC "-//W3C//DTD HTML 4.0 Transitional//EN">
<HTML><HEAD>
<META http-equiv=Content-Type content="text/html; charset=iso-8859-1">
<META content="MSHTML 6.00.6002.18357" name=GENERATOR>
<STYLE></STYLE>
</HEAD>
<BODY bgColor=#ffffff background=""><FONT face=Arial size=2>
<DIV align=justify>
<HR>
</DIV>
<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><U>boletín solidario de
información<BR></U><FONT color=#800000 size=5>Correspondencia de Prensa
<BR></FONT><U>23 de febrero 2011<BR></U><FONT color=#800000 size=5>Colectivo
Militante - Agenda Radical<BR></FONT>Gaboto 1305 - Montevideo -
Uruguay<BR>redacción y suscripciones: </FONT></STRONG><A
href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
size=4>germain5@chasque.net</FONT></STRONG></A></DIV>
<DIV>
<HR>
</DIV>
<DIV> </DIV>
<DIV><STRONG><FONT size=3>Israel </FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG><FONT size=3>La revolución de
Egipto: «Malo para los judíos»<BR></FONT></STRONG><BR><BR><STRONG>Ilan
Pappé<BR>The Electronic Intifada<BR></STRONG></FONT><A
href="http://electronicintifada.net/"><FONT face=Arial
size=2><STRONG>http://electronicintifada.net/</STRONG></FONT></A></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial
size=2><STRONG>Rebelión<BR></STRONG></FONT><A
href="http://www.rebelion.org/"><FONT face=Arial
size=2><STRONG>http://www.rebelion.org/</STRONG></FONT></A></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial size=2><STRONG>Traducido por J. M. y
revisado por Caty R.<BR></STRONG><BR><BR>La visión de Israel es que si las
revoluciones de Túnez y Egipto tienen éxito eso es malo, muy malo para Israel.
Los educados árabes -no todos ellos con el traje de «islamistas», muchos de
ellos hablando inglés perfecto y cuyo deseo por la democracia se articula sin
recurrir a la retórica «antioccidental»– son una mala perspectiva para Israel.
</FONT></DIV><FONT face=Arial size=2>
<DIV align=justify><BR>Los ejércitos árabes que no disparan sobre los
manifestantes son tan malos como muchas otras imágenes que entusiasmaron a tanta
gente en todo el mundo, incluso en Occidente. Esta reacción mundial también es
mala, muy mala. Hace que la ocupación israelí en Cisjordania y en la Franja de
Gaza y sus políticas de apartheid dentro del Estado aparezcan como la actuación
de un típico régimen «árabe». </DIV>
<DIV align=justify><BR>Durante un tiempo Israel no pudo decir oficialmente lo
que pensaba. En su primer mensaje con algo de sentido común a sus colegas, el
Primer Ministro Benjamin Netanyahu pidió a sus ministros, generales y políticos
que no hicieran comentarios en público sobre los acontecimientos de Egipto. Por
un breve momento se pensó que Israel había dado un vuelco en las relaciones de
vecindad y pasó de su carácter de matón de barrio a lo que siempre fue: un
visitante o residente estable. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Parece que Netanyahu estaba avergonzado en particular por
los desafortunados comentarios sobre la situación pronunciados públicamente por
el general Aviv Kochavi, el jefe de la inteligencia militar israelí. Este gran
experto de Israel en asuntos árabes declaró tranquilamente hace dos semanas en
el Parlamento que el régimen de Mubarak era tan sólido y resistente como
siempre. Pero Netanyahu no podía mantener su boca cerrada durante tanto tiempo.
Y cuando el jefe habló todos los demás le siguieron. Y cuando todos ellos
respondieron, los comentaristas de Fox News hicieron que se parecieran a un
grupo de pacifistas y hippies, practicantes del amor libre de la década de 1960.
</DIV>
<DIV align=justify><BR>La esencia de la narrativa israelí es simple: se trata de
una revolución al estilo iraní, con la ayuda de Al-Yazira y estúpidamente
permitida por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que es un nuevo
Jimmy Carter, y un mundo estupefacto. Los primeros dirigentes israelíes que
salieron a interpretar la situación fueron los ex embajadores que ejercieron en
Egipto. Toda su frustración por haber estado encerrados en un apartamento de una
zona privilegiada de El Cairo irrumpe ahora como un volcán imparable. Su
perorata se puede resumir en las palabras de uno de ellos, Zvi Mazael, que dijo
en el Canal Uno de la televisión israelí el 28 de enero: «esto es malo, muy malo
para los judíos». </DIV>
<DIV align=justify><BR>En Israel, por supuesto, cuando usted dice «malo para
judíos», quiere decir para los israelíes, pero también significa que todo lo que
es malo para Israel es malo para los judíos de todo el mundo (a pesar de la
evidencia que lo contradice desde la fundación del Estado). </DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero lo que realmente es malo para Israel es la
comparación. Independientemente de cómo acabe todo, esto expone las falacias y
las pretensiones de Israel como nunca antes. Egipto vive una Intifada pacífica
frente a la violencia mortal que viene del lado del régimen. El ejército no
disparó contra los manifestantes, e incluso antes de la salida de Mubarak, ya
con siete días de protestas, el ministro del Interior que envió a sus matones a
chocar violentamente contra las manifestaciones fue despedido y, probablemente,
será llevado ante la justicia. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Sí, esto se hizo con el fin de ganar tiempo y tratar de
persuadir a los manifestantes para que regresasen a casa. Pero incluso esta
escena, ahora olvidada, nunca puede suceder en Israel. Israel es un lugar donde
todos los generales que ordenaron la matanza de palestinos y de manifestantes
israelíes contra la ocupación, ahora compiten por el máximo puesto de Jefe del
Estado Mayor General. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Uno de ellos es Yair Naveh, quien dio órdenes en el año
2008 de matar a sospechosos palestinos que podían haber sido detenidos
pacíficamente. Este general no irá a la cárcel, pero la joven Anat Kamm, que
reveló dichas órdenes, ahora se enfrenta a nueve años de cárcel por filtrarlas
al diario israelí Haaretz. Ni un solo general o político israelí tiene que pasar
un día en prisión por ordenar a las tropas que disparasen contra manifestantes
desarmados, civiles inocentes, mujeres, ancianos y niños. La luz que irradian
Egipto y Túnez es tan fuerte que también ilumina los espacios más oscuros de la
«única democracia de Oriente Medio». </DIV>
<DIV align=justify><BR>La no violencia y la democracia árabes (ya sean
religiosas o no) son malas para Israel. Pero tal vez esos árabes estaban allí
todo el tiempo, no sólo en Egipto, sino también en Palestina. La insistencia de
los comentaristas israelíes de que la cuestión más importante en juego es el
tratado de paz de Israel con Egipto es un entretenimiento, y tiene muy poca
relevancia para el impulso de gran alcance que está sacudiendo al mundo árabe en
su conjunto. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Los tratados de paz con Israel son síntomas de la
corrupción moral, no la enfermedad en sí, es por eso que el presidente sirio,
Bashar Asad, indudablemente un líder antiisraelí, no es inmune a esta ola de
cambio. No, lo que está en juego aquí es la pretensión de que Israel es un país
estable, civilizado, una isla occidental en un mar agitado de barbarie y
fanatismo islámico árabe. El «peligro» para Israel es que la cartografía sería
la misma, pero la geografía cambiaría. Seguiría siendo una isla pero de barbarie
y fanatismo en un mar recién formado por Estados democráticos e igualitarios.
</DIV>
<DIV align=justify><BR>A los ojos de grandes sectores de la sociedad civil
occidental la imagen democrática de Israel ha desaparecido hace mucho tiempo,
pero ahora se puede oscurecer y ensuciar a los ojos de otros que están en el
poder y la política. ¿Tan importante es la imagen antigua y positiva de Israel
de mantener su relación especial con los Estados Unidos? Sólo el tiempo lo dirá.
</DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero de un modo u otro, el grito creciente de la plaza
Tahrir de El Cairo es una advertencia de que la falsa mitología de la «única
democracia de Oriente Medio», el duro cristianismo fundamentalista (mucho más
siniestro y corrupto que el de la Hermandad Musulmana), el usufructo de la
cínica corporación militar industrial, el neoconservadurismo y el cabildeo
brutal no garantizan la sostenibilidad de la relación especial entre Israel y
los Estados Unidos para siempre. </DIV>
<DIV align=justify><BR>E incluso si la relación especial persevera por un
tiempo, ahora es sobre fundamentos aún más endebles. Los estudios de casos
diametralmente opuestos de las resistencias regionales antiestadounidenses,
hasta ahora, de Irán y Siria, y en cierta medida Turquía por una parte, y de los
tiranos pro estadounidenses caídos recientemente por otro lado, son indicativos
de que aunque se mantenga el apoyo estadounidenses puede que en el futuro no sea
suficiente para mantener un étnico y racista «Estado judío» en el corazón de un
mundo árabe cambiante. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Esto podría ser una buena noticia para los judíos,
incluso para los judíos de Israel a largo plazo. Estar rodeados de pueblos que
anhelan la libertad, la justicia social y la espiritualidad y navegando a veces
de forma segura, y otras más o menos, entre la tradición y la modernidad, el
nacionalismo y la humanidad, la globalización capitalista agresiva y la
supervivencia diaria, no va a ser fácil. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Sin embargo todavía hay un horizonte, y éste está
preñando con la esperanza de provocar cambios similares en Palestina. Puede
traer el cierre de más de un siglo de colonización sionista y despojo para ser
sustituido por una reconciliación más equitativa entre las víctimas palestinas
de estas políticas criminales, dondequiera que se encuentren, y la comunidad
judía. Esta reconciliación deberá construirse sobre la base del derecho
palestino al retorno y de todos los demás derechos por los que tan valientemente
luchó el pueblo egipcio en los últimos veinte días. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero confíen en que los israelíes no perderán otra
oportunidad para evitar la paz. Clamarán que viene el lobo. Pedirán y recibirán
más fondos de los contribuyentes estadounidenses debido a la nueva «evolución»
de los acontecimientos. Interferirán clandestina y destructivamente para minar
cualquier transición a la democracia (recordemos que la fuerza y la brutalidad
caracterizan su reacción frente a los deseos de democratización de la sociedad
palestina), y elevarán la campaña islamófoba a alturas sin precedentes. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero, quién sabe, tal vez los contribuyentes
estadounidenses no se conmoverán en esta ocasión. Y tal vez los políticos
europeos acompañen el sentimiento general del público y permitan que no sólo
Egipto se transforme drásticamente, sino que también den la bienvenida a un
cambio similar en Israel y Palestina. En este escenario, los judíos de Israel
tienen la oportunidad de formar parte del Medio Oriente real y de dejar de ser
miembros ajenos y agresivos de un Medio Oriente creado por las alucinaciones de
la imaginación sionista.
<HR>
</FONT></DIV></BODY></HTML>