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<DIV align=center><FONT size=4><STRONG><U>boletín solidario de
información<BR></U><FONT color=#800000 size=5>Correspondencia de
Prensa</FONT><BR><U>14 de diciembre 2011<BR></U><FONT color=#800000
size=5>Colectivo Militante - Agenda Radical</FONT><BR>Montevideo -
Uruguay<BR>redacción y suscripciones: <A
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<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>México<BR><BR>Defensores mexicanos se
quedan sin escudo<BR><BR>Los estudiantes y campesinos mexicanos Gabriel
Echeverría de Jesús, de 20 años, y Jorge Alexis Herrera Pino, de 21,
participaron el lunes 12 en un bloqueo carretero para reclamar un aumento en la
matrícula escolar y el presupuesto de su escuela. Al intentar desalojarlos, la
policía los asesinó.<BR><BR></FONT></STRONG></DIV></FONT>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><STRONG>Daniela Pastrana <BR>IPS,
México, 14-12-201</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><A
title="http://www.ipsnoticias.net/ CTRL + clic para seguir el vínculo"
href="http://www.ipsnoticias.net/"><STRONG
title="http://www.ipsnoticias.net/ CTRL + clic para seguir el vínculo">http://www.ipsnoticias.net/</STRONG></A></FONT></DIV><FONT
size=2 face=Arial>
<DIV align=justify><BR><BR>Sus cuerpos quedaron tendidos sobre la autopista que
va de Chilpancingo a Acapulco, en el estado sureño de Guerrero, uno de los tres
más pobres del país y gobernado por el izquierdista Partido de la Revolución
Democrática. <BR><BR>Los jóvenes se preparaban para ser maestros rurales en la
escuela Normal Rural de Ayotzinapa, famosa porque en ella estudiaron Lucio
Cabañas y Genaro Vázquez, dirigentes guerrilleros de la década de 1970.
Echeverría se licenciaría en educación física y Herrera en educación primaria.
<BR><BR>"Todo se salió del control", admitió a la prensa el jefe policial Ramón
Miguel Arreola, frente a las evidencias de que policías locales y federales
dispararon armas largas hacia los manifestantes. Sin embargo, nadie se hace
responsable. <BR><BR>Las 16 escuelas normales rurales que hay en el país son un
reducto del proyecto de educación socialista que impulsó en la primera mitad del
siglo pasado el entonces presidente Lázaro Cárdenas (1934-1940), aunque existían
con anterioridad. <BR><BR>El primer requisito para ingresar es ser pobre. En las
últimas décadas han sobrevivido a constantes recortes presupuestales y al
hostigamiento de las autoridades, que ven en ellas semilleros de "revoltosos".
<BR><BR>Loa asesinatos de los estudiantes encendieron alertas en las
organizaciones campesinas y estudiantiles, pues se cometieron en medio de una
oleada de homicidios de defensores de derechos humanos. <BR><BR>Apenas el
domingo 11, el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad que encabeza el
poeta Javier Sicilia organizó una protesta en la Ciudad de México contra los
asesinatos, atentados y desapariciones de siete de sus integrantes, seis de
ellos en un lapso de apenas dos semanas. <BR><BR>"Los defensores nos quedamos
sin escudo", dijo a IPS el sociólogo Carlos Cruz Santiago, director de Cauce
Ciudadano, una organización que trabaja con jóvenes en la capital del país y
otras ciudades con altos índices de violencia. <BR><BR>En total, 11 activistas
han sido asesinados desde diciembre de 2010, una cifra que no tiene precedentes
en México. El ojo parece estar puesto en el movimiento pacifista convocado por
Sicilia tras el asesinato de su hijo, Juan Francisco, y que busca detener la
política de seguridad militar impuesta por el gobierno de Felipe Calderón.
<BR><BR>El 28 de noviembre, Nepomuceno Moreno, un hombre que buscaba a su hijo
desaparecido y que se había convertido en uno de los pilares del movimiento de
víctimas, fue muerto en la capital del estado de Sonora, noroeste del país, a
plena luz del día y a seis cuadras del despacho del gobernador. <BR><BR>Un mes
atrás, Moreno había denunciado amenazas y hostigamiento de autoridades locales y
pedido protección al presidente Calderón. Su muerte recordó a la sociedad
mexicana la de Marisela Escobedo, quien el 16 de diciembre de 2010 cayó abatida
frente a las puertas de la sede del gobierno del norteño estado de Chihuahua,
cuando reclamaba justicia para su hija asesinada. <BR><BR>Cuatro días después de
la muerte de Moreno, el viernes 2 de diciembre, Norma Andrade, fundadora de
Nuestras Hijas de Regreso a Casa, una organización que busca a jóvenes
desaparecidas en la fronteriza y norteña Ciudad Juárez, sufrió un atentado al
llegar a su casa. <BR><BR>Ese mismo viernes, en Ciudad de México, se halló el
cuerpo de la actriz y promotora cultural Julia Marichal, quien estaba
desaparecida desde el 12 de noviembre; su caso aparentemente no estaría
relacionado con su activismo por la paz, si bien tampoco ha sido aclarado.
<BR><BR>Pero en México cada tragedia supera a la anterior. <BR><BR>El 6 de
diciembre, Eva Alarcón y Marcial Bautista, ecologistas de Guerrero viajaban a la
capital en un autobús comercial que, según testigos, fue detenido dos veces: la
primera en un retén militar en el que soldados preguntaron por Bautista, pero él
no contestó, y la segunda, por hombres encapuchados que obligaron a los
activistas a apearse. <BR><BR>Desde entonces están desaparecidos. Ambos habían
solicitado medidas de protección por amenazas. <BR><BR>Ese mismo día, cuatro
hombres armados emboscaron una caravana del Movimiento por la Paz que iba a
presenciar una consulta popular de la comunidad nahua de Santa María Ostula, en
las costas del sudoccidental estado de Michoacán, sobre el océano Pacífico.
<BR><BR>En la caravana viajaba el comunero Trinidad de la Cruz, de 73 años,
quien fue torturado ante los ojos de 12 personas -entre ellas seis periodistas-
a quienes les quitaron sus teléfonos y obligaron a tomar una ruta en la que no
hay paradas en las siguientes tres horas. "Nos dijeron que una camioneta negra
nos iba a esperar a la mitad del camino, para vigilar que no nos desviáramos, y
que si nos atrevíamos a regresar, íbamos a volar en pedazos", narró un testigo.
<BR><BR>En junio de 2009, la comunidad indígena de Santa María Ostula recuperó
más de 1.000 hectáreas de propiedad comunal que habían sido ocupadas 40 años
atrás por terratenientes. Ahí edificaron un nuevo poblado, Xayakalan, que es la
puerta de entrada a la región nahua y a una zona litoral codiciada por muchos
para desarrollar megaproyectos carreteros, inmobiliarios, mineros y turísticos.
<BR><BR>Además, es la zona que rodea el puerto de Lázaro Cárdenas, un punto
clave para las rutas del narcotráfico. Para los indígenas, el costo ha sido
alto: 28 muertos y cuatro desaparecidos en dos años. <BR><BR>Las 40 familias que
habitan ese poblado están cercadas por grupos armados que no permiten el acceso
a ninguna autoridad civil, policiaca o militar, un caso muy similar al de San
Juan Copala, en el sureño estado de Oaxaca, donde otra caravana humanitaria fue
emboscada en abril de 2010. <BR><BR>La situación es tan grave que en diciembre
2010 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos solicitó al Estado mexicano
medidas cautelares para los ejidatarios de Ostula. <BR><BR>En la consulta, los
comuneros analizarían el "plan de pacificación" propuesto por las autoridades.
<BR><BR>El 28 de noviembre -el mismo día que en Sonora era asesinado Moreno-
autoridades de la marina de guerra, la Policía Federal y el gobierno del estado
se comprometieron a proteger la caravana pacifista. <BR><BR>De la Cruz, líder
respetado en la comunidad, había buscado refugio en un estado vecino luego de
ser golpeado y amenazado de muerte el 14 de noviembre. El comunero pretendía
regresar a Ostula a denunciar a sus agresores con la protección de la caravana.
<BR><BR>Fue asesinado seis kilómetros antes, al salir de Xayakalan. Las
autoridades no han aclarado por qué los policías federales que tenían la orden
de proteger la caravana abandonaron la vigilancia al llegar al poblado.
<BR><BR>El escenario para los activistas es muy oscuro. "Se rompió la burbuja de
seguridad que daba la prensa. Ahora tenemos que replantear nuestras
actividades", dijo a IPS uno de los testigos del crimen.
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