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<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><U>boletín solidario de
información</U><BR><FONT color=#800000 size=5>Correspondencia de
Prensa</FONT><BR><U>6 de octubre 2012</U><BR><FONT color=#800000
size=5>Colectivo Militante - Agenda Radical</FONT><BR>Montevideo -
Uruguay<BR>redacción y suscripciones: <A
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href="mailto:germain5@chasque.net">germain5@chasque.net</A></FONT></STRONG><A
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<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>Venezuela<BR><BR>Chávez, ¿el antimodelo
de izquierda?</FONT></STRONG><BR><BR><BR><STRONG>Marc Saint-Upéry *<BR>Le Monde,
París, 4-10-2004<BR><A
title="http://www.lemonde.fr/ CTRL + clic para seguir el vínculo"
href="http://www.lemonde.fr/">http://www.lemonde.fr/</A></STRONG><A
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title="http://www.lemonde.fr/ CTRL + clic para seguir el vínculo"></STRONG></A></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><STRONG>La Clase, Caracas,
6-10-2004<BR><A
href="http://www.laclase.info">http://www.laclase.info</A></STRONG><A
title="http://www.laclase.info/ CTRL + clic para seguir el vínculo"
href="http://www.laclase.info/"><STRONG
title="http://www.laclase.info/ CTRL + clic para seguir el vínculo"></STRONG></A><BR><BR><BR>Presentar
hoy la experiencia chavista como una inspiración para la izquierda es
simplemente un fraude intelectual. Si uno pretende debatir sobre Venezuela,
sería mejor no sustituir el análisis serio con verdades a medias y slogans
propagandísticos recogidos con base a visitas guiadas en las aldeas Potemkin del
circo bolivariano. Observador y activista de una serie de procesos sociales y
políticos suramericanos desde hace quince años, soy también elector del Frente
de Izquierda francés (1). Por estas dos razones, quiero dar mi punto de
vista.</FONT></DIV><FONT size=2 face=Arial>
<DIV align=justify><BR>Beneficiaria de la riqueza petrolera más abundante de su
historia, Venezuela lanzó desde finales de 2003 una política de reducción de la
pobreza meritoria pero muy problemática en sus métodos como en su sustancia. En
los últimos 5 años, esta política se enfrenta a limitaciones inherentes mientras
persisten o empeoran problemas agudos de inseguridad, de inflación, de escasez
de vivienda y de subempleo. En cuanto a la marcha hacia al "socialismo",
señalemos simplemente que el peso del sector privado en el PIB venezolano ha
aumentado bajo el mandato de Hugo Chávez.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Además del ocaso comprobado de las "misiones"
bolivarianas -fugazmente revitalizadas con inyección de petrodólares en cada
período electoral -, lo que hace falta es una verdadera política social
articulada a una reforma coherente del aparato estatal. Lo social, en Venezuela,
son operaciones de comando extra-institucionales, sin horizonte sostenible
definido, a veces militarizadas, cuando no son directamente manejadas por un
Estado extranjero a cambio de regalos petroleros.</DIV>
<DIV align=justify><BR>No es necesario dejarse llevar por ninguna propaganda
derechista para entender cómo esta política veleidosa se inscribe en la lógica
perversa del Petro-Estado venezolano. En un documento del 2011, el Partido
Comunista de Venezuela, aliado algo reticente de Chávez, indica que no sólo el
"modelo de capitalismo rentista dependiente e improductivo que dominó en nuestro
país sigue vigente, sino que se fortalece." Además de no encontrar "ningún
progreso en la diversificación de la economía", sino más bien una grave
profundización de la dependencia -tecnológica y alimentaria en particular- y el
triunfo de una burguesía importadora parásita, los comunistas venezolanos
destacan que las iniciativas marginales de tipo cooperativas o "empresas de
producción social" promovidas por el régimen son "muy poco exitosas" -un
eufemismo cortés en vista de los desastres observables en el terreno.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Denunciando los daños del hiperpresidencialismo y la
ausencia total de "instancias de dirección colectiva", describen al Estado
bolivariano como "altamente ineficiente", observan una "intensificación de la
corrupción" y lamentan que, pese a avances sociales parciales y frágiles, "en
otros casos hemos retrocedido, como en materia de planificación y coordinación y
en prestación de algunos servicios públicos básicos." Conclusión: "La brecha
entre el discurso "socialista" de algunos actores gubernamentales y la práctica
concreta del gobierno es ya inocultable, y la tensión que genera esa brecha
creciente está alcanzando un punto crítico."</DIV>
<DIV align=justify><BR>Es con el mismo diagnóstico que, en los últimos años,
muchas organizaciones políticas y sociales y decenas de miles de activistas
progresistas honestos se alejaron del proceso bolivariano. Enseguida fueron
tachados de "traidores" y "agentes del imperio" por los esbirros del régimen, no
obstante, tienen mil veces razones para denunciar esas contradicciones
flagrantes y rechazar una cultura política ultra-autoritaria sistemáticamente
reafirmada por la Voz de su Amo: "Exijo lealtad absoluta a mi liderazgo. Yo no
soy un individuo, soy un pueblo... Unidad, discusión libre y abierta, pero
lealtad... Todo lo demás es traición." (Chávez, enero de 2010).</DIV>
<DIV align=justify><BR>Resumamos. En lo social, los esfuerzos redistributivos de
los años 2004-2006 -bastante erráticos, pero con el mérito de poner las cuestión
social en el centro del debate político- fueron seguidos por una fase de
estancamiento relacionada con la gravísimas disfunciones de un Estado rentista
colonizado por la "boliburguesía". En lo económico, hay una vertiginosa
profundización de un modelo parasitario, dependiente y corrupto que Chávez no
inventó, aunque sí llevó al extremo todas sus características más nefastas. En
lo internacional, hace mucho tiempo que todo el mundo en América Latina sabe
que, debido a sus inconsistencias y su histrionismo estéril, Chávez perdió la
batalla del liderazgo regional. El discurso "antiimperialista" del régimen
-cuyas relaciones petro-comerciales con Estados Unidos son excelentes-, se
reduce a un apoyo indefectible y vocinglero a déspotas como Gaddafi, Assad,
Ahmadinejad o Lukashenko. Mientras tanto, Chávez es patéticamente dependiente de
las multinacionales brasileñas y vive un verdadero idilio con su "mejor amigo",
el presidente colombiano Juan Manuel Santos, aliado clave de Washington.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En el ámbito de las prácticas institucionales, el
gobierno de Chávez sin duda no es una dictadura; pero usemos una comparación
europea: en un gradiente de autoritarismo manipulador que iría de Berlusconi a
Putin, es muy similar en sus métodos y su espíritu a un régimen como el de
Viktor Orban en Hungría. Justicia maniatada, criminalización de los movimientos
sociales y del sindicalismo de lucha, encarcelamientos arbitrarios,
discriminación laboral por tendencia ideológica, confusión sistemática entre
Partido y Estado, desprecio a los mecanismos y garantías establecidos por la
misma Constitución bolivariana, tolerancia cómplice frente a la corrupción en
las filas del poder y protección descarada de los nuevos ricos adeptos al
régimen. la lista de abusos y violaciones es abundante. Por último, en cuanto a
la ética militante, Chávez y su partido de arrodillados encarnan un modelo
hipercaudillista caracterizado por sus tendencias mafiosas y su charlatanismo
ideológico.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Pese a su constante erosión electoral desde 2007, Chávez
mantiene un capital carismático suficiente para ganar elecciones, y los
venezolanos tienen todo el derecho a elegir a sus dirigentes sin injerencia
externa o campañas de diabolización. Pero en lo sustancial, el "modelo"
bolivariano es exactamente lo contrario a lo que debería anhelar una izquierda
digna de ese nombre.</DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify><FONT size=3 face=Calibri><FONT size=2 face=Arial><STRONG>*
</STRONG>Escritor, traductor y politólogo francés residente en Perú, es conocido
por sus análisis sobre la sociedad latinoamericana y la evolución política desde
las revoluciones del siglo XIX. Su libro más conocido<STRONG> </STRONG>"El sueño
de Bolívar", ha levantado una polémica entre sectores de la izquierda
latinoamericana.</FONT></FONT></DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG><U>Nota</U></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><FONT size=3 face=Calibri></FONT> </DIV>
<DIV align=justify>1) El Frente de Izquierda en reúne el Partido de Izquierda
(que nació de una escisión del Partido Socialista), el Partido Comunista y
varias corrientes independientes. Varios dirigente del Partido de Izquierda han
lanzado desde hace unas semanas un campaña de apoyo incondicional y acrítico a
Hugo Chávez que genera cierto malestar en algunos sectores militantes.
<HR>
<BR></FONT></DIV></BODY></HTML>