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<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><U>boletín solidario de
información</U><BR><FONT color=#800000 size=5>Correspondencia de
Prensa<BR></FONT><U>2 de noviembre 2012</U><BR><FONT color=#800000
size=5>Colectivo Militante - Agenda Radical</FONT><BR>Montevideo -
Uruguay<BR>redacción y suscripciones: <A
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href="mailto:germain5@chasque.net">germain5@chasque.net</A></FONT></STRONG><A
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size=4></FONT></STRONG></A></DIV>
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<DIV align=justify><STRONG><FONT
size=3>Imperialismo</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>La guerra debe continuar
</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>Los "años Obama" y su impacto en
México</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG>En el marco de una relación
bilateral profundamente asimétrica, para México los "años Obama" estuvieron
signados por el más puro continuismo. <FONT face=Arial>Dado que los planes
geopolíticos de Estados Unidos que incluyen a México son diseñados por el
Pentágono, la variable de un "demócrata" o un "republicano" en la Casa Blanca
sólo es cuestión de matices.</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><BR><FONT size=2 face=Arial> <BR><STRONG>Carlos Fazio,
desde México </STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><STRONG>Brecha, Montevideo,
2-11-2012</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><A
title="http://www.brecha.com.uy/ CTRL + clic para seguir el vínculo"
href="http://www.brecha.com.uy/"><STRONG
title="http://www.brecha.com.uy/ CTRL + clic para seguir el vínculo">http://www.brecha.com.uy/</STRONG></A></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><FONT size=3
face=Calibri></FONT><BR> <BR></FONT><FONT size=2 face=Arial></FONT><FONT
size=2 face=Arial>La guerra de intoxicación (des)informativa que arreció en
vísperas y tras la asunción de Barack Obama el 20 de enero de 2009, en la que
participaron el presidente saliente, George W Bush, el jefe del Pentágono,
Robert Gates, y los titulares de los principales organismos de seguridad e
inteligencia de la administración demócrata (cia, fbi, dea, Seguridad Interna),
logró construir la noción de México como "Estado fallido". Tal definición, que
provocó entonces un forzado malestar en el gobierno de Felipe Calderón, era
parte de una estrategia escalonada que arrancó en 1994 con la firma del Tratado
de Libre Comercio de América del Norte, siguió con el Plan Puebla Panamá (2001),
la Alianza para la Seguridad y la Prosperidad de América del Norte (aspan, 2005)
y llega hasta la Iniciativa Mérida (2007). </FONT></DIV><FONT size=2 face=Arial>
<DIV align=justify><BR>Si la aspan contenía una redefinición de facto de la
frontera (de acuerdo con los objetivos de seguridad de Washington y en
detrimento de la soberanía mexicana), la Iniciativa Mérida (símil del Plan
Colombia) implicó una acelerada readecuación del Ejército, la Marina y las
distintas fuerzas policiales mexicanas por asesores e instructores de operación
e inteligencia estadounidenses, combinada con una reanudación de las actividades
paramilitares y el aterrizaje de compañías privadas de seguridad subcontratadas
por el Pentágono y el Departamento de Estado. Pero también incluyó una
integración energética transfronteriza subordinada a Washington y megaproyectos
de capital trasnacional que subsumieron los criterios económicos a los de
seguridad, así como una normativa supranacional que hizo a un lado el control
legislativo del lado mexicano, mientras se impusieron leyes de tipo
contrainsurgente que criminalizan la protesta y la pobreza y globalizan el
disciplinamiento social.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La noción de México como Estado fallido, ya con Obama en
la oficina oval y Hilllary Clinton al frente de la diplomacia, respondía a
nuevas concepciones del Pentágono sobre la definición de enemigos (guerras
contra no-estados o contra enemigos asimétricos, no convencionales o
irregulares, verbigracia, el terrorista, el populista radical, el traficante de
drogas), que podrían actuar en países donde un gobierno débil habría perdido
parte del control del territorio y otras funciones estatales. </DIV>
<DIV align=justify><FONT size=3 face=Calibri></FONT><BR>La fabricación mediática
de México como Estado fallido durante la transición Bush/Obama incluía la
previsión de un "colapso rápido y sorpresivo", lo que según el Comando Conjunto
de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos no dejaría más opción que la
intervención militar directa de Washington. Entonces, la posibilidad de un
colapso fue atribuida al accionar de grupos de la economía criminal y llevó a
una acelerada militarización.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Construcción del miedo</STRONG></DIV>
<DIV align=justify> </DIV>
<DIV align=justify>El manejo de una red de medios sistémicos bajo control
monopólico privado también permitió la construcción social del miedo, la
fabricación del "enemigo interno" y el aterrizaje de doctrinas y matrices de
opinión como las referentes a los estados fallidos y otras como las propaladas
por el entonces jefe del Comando Norte, general Victor Renuart, y Hillary
Clinton para México, tales como "narcoinsurgencia" y "narcoterrorismo",
dirigidas a justificar la cada vez más notoria presencia de agentes encubiertos
estadounidenses en territorio mexicano.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En mayo de 2010, ya con miles de muertos, desaparecidos y
desplazados forzosos producto de la "guerra a las drogas" de Calderón, México y
Estados Unidos emitieron la Declaración para la Administración de la Frontera en
el siglo xxi. La franja fronteriza fue definida entonces como un área clave de
la llamada "seguridad energética colectiva", que incluye la generación e
interconexión de electricidad y la exploración y explotación segura y eficiente
de hidrocarburos (petróleo, gas) y agua. </DIV>
<DIV align=justify><FONT size=3 face=Calibri></FONT><BR>A siete años de la
entrada en vigor de la aspan y a cinco del lanzamiento de la Iniciativa Mérida,
que militarizó varios estados del norte de México, no se entiende que siendo la
"seguridad energética colectiva" la prioridad número uno de Washington, el
estado de Tamaulipas reúna las características de un estado fallido. Rico en
hidrocarburos, Tamaulipas limita además con Texas (estado petrolero por
excelencia) y con el Golfo de México, considerado el mare nostrum de la
Unión Americana. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Como señala John Saxe-Fernández, el Caribe es una pieza
central de la estrategia oceánica de Estados Unidos, ya que es el vínculo con el
teatro de operaciones militares en el Atlántico. El envío de combustibles,
materiales estratégicos y bélicos en tiempos de paz y el tránsito de fuerzas
estadounidenses hacia Europa en tiempos de guerra "hacen que el dominio sobre
las líneas de comunicación marítima del Caribe, el Golfo de México, el Canal de
Panamá y eventualmente el Istmo de Tehuantepec, resulten vitales en la
planeación oceánica de Estados Unidos".</DIV>
<DIV align=justify><BR>Dado que Tamaulipas y el Golfo de México son puntos
sensibles de la "seguridad energética" de Washington, ¿se estará asistiendo en
Tamaulipas a una violencia provocada cuyo fin es el desplazamiento forzado de
población y una eventual balcanización de esa porción del territorio mexicano?
¿Obedecerá a la misma estrategia la escalada de violencia en estados como
Veracruz, Nuevo León, Coahuila, Chihuahua, Sonora y Baja California, estos cinco
últimos fronterizos con Estados Unidos?</DIV>
<DIV align=justify><BR>La lógica de una desestabilización encubierta dirigida a
provocar un desmembramiento territorial podría explicar la llegada al país del
embajador Earl Anthony Wayne y del agregado militar Colin J Kilrain.
Especialista en administrar a la llamada "comunidad de inteligencia", a su
perfil de experto en contrainsurgencia, terrorismo, lavado de dinero y
aseguramiento de activos de la economía criminal, Wayne suma habilidades en
temas económicos, comerciales y energéticos. El hombre vino desde Kabul, donde
estaba dirigiendo una invasión bajo la pantalla de combatir al terrorismo. A su
vez, el arribo en marzo del nuevo agregado militar, contralmirante Colin
Kilrain, quien hasta su nombramiento se desempeñaba como director encargado de
combate al terrorismo en el Consejo de Seguridad Nacional en Washington,
refuerza esa percepción. Kilrain era comandante de las fuerzas especiales Seal
?acrónimo de sea, air and land: mar, aire y tierra?, las unidades de elite de la
Marina. Con el envío de Wayne y Kilrain el mensaje de Obama fue claro: la guerra
en México debe continuar. Con él o con el republicano Mitt Romney.
<HR>
</FONT></DIV></BODY></HTML>