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<HR>
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<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><U>boletín solidario de
información</U><BR><FONT color=#800000 size=5>Correspondencia de
Prensa<BR></FONT><U>28 de julio 2013</U><BR><FONT color=#800000 size=5>Colectivo
Militante - Agenda Radical<BR></FONT>Montevideo - Uruguay<BR>redacción y
suscripciones: <A
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href="mailto:germain5@chasque.net">germain5@chasque.net</A></FONT></STRONG><A
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href="mailto:germain5@chasque.net"><STRONG><FONT
title="mailto:germain5@chasque.net CTRL + clic para seguir el vínculo"
size=4></FONT></STRONG></A></DIV>
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<HR>
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<DIV align=justify><FONT size=3 face=Calibri></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG><FONT size=3>Capitalismo</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><STRONG><FONT size=3>El consumismo
aturdido</FONT></STRONG><BR><BR></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><STRONG>Juan Luis
Berterretche</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><BR><FONT size=2 face=Arial></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial>"Aparentemente, el consumo es un
hecho banal, incluso trivial. Todos lo hacemos a diario..." "Pero la mayor parte
del tiempo consumimos de hecho, se diría que rutinariamente y sin demasiada
planificación y sin pensarlo dos veces. En realidad, si se lo reduce a su forma
arquetípica en tanto ciclo metabólico de ingesta, digestión y excreción, el
consumo es una condición permanente e inamovible de la vida y un aspecto
inalienable de ésta, y no está atado ni a la época ni a la historia. Desde ese
punto de vista, se trata de una función imprescindible para la supervivencia
biológica que nosotros, los seres humanos, compartimos con el resto de los seres
vivos, y sus raíces son tan antiguas como la vida misma." /1</FONT></DIV><FONT
size=2 face=Arial>
<DIV align=justify><BR>Pero en el momento que el capital no sólo separa el valor
de uso del producto -que corresponde a la necesitad humana de él-, del valor de
cambio -que es el valor que adopta el producto en el mercado-, sino que también
subordina nuestras necesidades al valor que se puede realizar en el mercado, el
consumo adquiere un sentido diferente e incluso opuesto a su inicial destino de
garantizar la sobrevivencia biológica humana. El consumo subordinado al lucro
del Capital, ya ha puesto en peligro la existencia del planeta y de nuestra
especie.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>La Huella Ecológica</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>La tierra es un planeta finito. En ella los seres vivos
poseen un espacio común y limitado. El crecimiento exponencial de una especie,
reduce el espacio para la vida de las demás y ha conducido en nuestro mundo a la
extinción de múltiples especies. De la misma manera el crecimiento ilimitado de
la demanda de materias primas y alimentos que la economía capitalista exige para
su paradigma de "progreso", conduce a una destrucción cada vez mayor de los
recursos naturales.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La Huella Ecológica analiza las demandas humanas sobre la
biosfera comparando el consumo de la humanidad con la capacidad regenerativa de
la Tierra, o biocapacidad. Se formula calculando el área requerida para producir
los recursos que consume la gente, el área ocupada por infraestructuras y el
área de bosques que se necesita para secuestrar el CO2 que no es absorbido por
los océanos. Todas las actividades humanas utilizan tierra biológicamente
productiva y/o zonas pesqueras. La Huella Ecológica es la suma de estas áreas,
independientemente de su situación en el planeta. La Huella Ecológica no incluye
directamente el uso de agua; sin embargo, esto es algo intrínseco a la
biocapacidad, puesto que la falta de agua o el agua contaminada tiene un impacto
directo sobre la disponibilidad y estado de la biocapacidad. Tanto la Huella
Ecológica como la biocapacidad se expresan en una unidad común denominada
hectárea global (hag), donde 1hag representa una hectárea biológicamente
productiva de tierra de productividad media. En 2008 la biocapacidad total de la
Tierra era de 12.000 millones de hag (1,8 hag por persona), mientras que la
Huella Ecológica de la humanidad era de 18.200 millones de hag (2,7 hag por
persona). /2</DIV>
<DIV align=justify><BR>Desde los años 70, la demanda anual de la humanidad sobre
el mundo natural ha superado lo que la Tierra puede renovar en un año. Esta
"translimitación ecológica" ha seguido creciendo con los años, alcanzando un
déficit del 50 por ciento en 2008. Esto significa que la Tierra tarda 1,5 años
en regenerar los recursos renovables que utiliza la gente y en absorber el CO2
que producen ese mismo año. ¿Cómo es posible esto si solo hay una
Tierra?...Ahora es frecuente que la gente cambie de fuente de recursos cuando
pasa esto; sin embargo, con las actuales tasas de consumo, estas fuentes dejarán
también de dar recursos y algunos ecosistemas colapsarán antes incluso de que se
terminen completamente. Las consecuencias del exceso de gases de efecto
invernadero que no pueden ser absorbidos por la vegetación se están notando ya,
con los aumentos de los niveles de CO2 atmosférico que provoca un aumento de las
temperaturas globales, cambio climático y acidificación de los océanos. /3</DIV>
<DIV align=justify><BR>El ejemplo más destacado de "translimitación ecológica"
es el de EEUU. Si todos los pobladores del mundo consumieran recursos como un
ciudadano estadounidense, se necesitarían 4 planetas para regenerar todos los
años la demanda de la humanidad.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Del consumo elitista al consumo de
masas</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Para focalizar los atributos del consumismo actual es
necesario tener una visión que nos permita descifrar las transformaciones en el
mercado de mercancías, de capitales y de trabajo a escala mundial y tratar de
encontrar las leyes que, en la actualidad, rigen estos procesos. David Harvey
nos brinda al respecto un panorama histórico esclarecedor.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En el mismo año de la caída del muro de Berlín, D. Harvey
editó La Condición Posmoderna /4 un libro que codificó los enormes cambios
económicos-sociales-políticos-culturales de las últimas décadas. Superando la
visión esclerosada de la mayoría de los sociólogos y economistas predominantes
de esos años, abrió un camino de interpretación sobre el nuevo fenómeno de la
posmodernidad, permitiendo empezar a entender las modificaciones en los mercados
de trabajo, de mercancías y de capitales, que condujeron hacia una nueva
modalidad de acumulación de capital y como consecuencia a un cambio cultural y a
la predominancia de una nueva subjetividad sometida al consumismo
irresponsable.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Para Harvey las transformaciones de las últimas décadas
manifestadas en todos los planos de la sociedad se corresponden con profundas
modificaciones en el sistema de producción, que pueden ubicarse temporalmente en
los inicios de la década del setenta. Más precisamente, él señala a 1973 -año de
recesión generalizada a nivel mundial- como el punto de inflexión de estos
cambios. Afirma que se abre un nuevo período de acumulación de capital -o de
incremento en el valor del capital- que él denomina Acumulación Flexible.
/5</DIV>
<DIV align=justify><BR>Esta nueva forma de acumulación de capital vino a
sustituir al fordismo-keynesianismo, que combinó innovaciones tecnológicas
impuestas por esta modalidad de producción (línea automática de montaje) y
organizacionales (forma corporativa de organización de negocios, separación
entre gerencia, concepción, control y ejecución y detallada división del
trabajo) con cambios en los modos y mecanismos de intervención estatal
permitiendo atender en forma efectiva los requisitos de la producción fordista.
El reconocimiento explícito por el fordismo de que producción de masas
significaba consumo de masas, lo hizo introducir la jornada de ocho horas con un
pago de cinco dólares, estableciendo un nuevo sistema de reproducción
generacional de la fuerza de trabajo. Y también un nuevo modelo de consumo que
abarcó nuevas capas y clases sociales. Todo esto condujo, al decir de Harvey, a
"una nueva estética y una nueva sicología, en suma un nuevo tipo de sociedad
democrática, racionalizada, modernista y populista". La configuración y el uso
propio de los poderes del Estado sólo fueron resueltos después de 1945. Desde
ese momento el fordismo se alió firmemente al keynesianismo. El fordismo,
entonces, combinado con la administración económica keynesiana, produjo lo que
dio en llamarse estado de bienestar social (welfare state) en los países
capitalistas avanzados. Es ésta la base de un largo período de expansión
económica pos guerra.</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Del consumo de masas al consumismo
aturdido</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero a partir de 1966 hay una caída de la productividad y
lucratividad de las corporaciones. Entre 1965 y 1973 se hizo evidente la
incapacidad del fordismo-keynesianismo de contener las contradicciones
inherentes al sistema. Para Harvey, en la superficie, todas esas dificultades
eran sintetizadas por la palabra "rigidez". Rigidez en las inversiones de
capital fijo de gran escala y de largo plazo y por tanto rigidez en la
planificación, presumiendo crecimiento estable en mercados de consumo estancado
o de franca saturación. Rigidez en los mercados, en la localización y en los
contratos de trabajo. Resistencia de los trabajadores a toda tentativa de
superar estos problemas de rigidez que llevaron a las grandes huelgas de
1968-1972. Rigidez en los compromisos del Estado por aumento de los programas de
asistencia social en momento que la rigidez en la producción restringía
expansiones de la base fiscal para gastos públicos. El único instrumento
flexible que tenían los estados estaba en la política monetaria, imprimir moneda
para estabilizar la economía. El resultado fue una onda inflacionaria que acabó
con la expansión pos guerra.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La recesión generalizada de 1973 dejó a las corporaciones
con mucha capacidad excedente inutilizable, en condiciones de acentuación de la
competencia. Esto obligó a abrir un período de racionalización, reestructuración
y aumento del control del trabajo. La mudanza tecnológica, la automatización, la
búsqueda de nuevas líneas de productos y nichos de mercado, la dispersión
geográfica para zonas donde se podían imponer condiciones de trabajo más
rigurosas y las fusiones y medidas para acelerar el tiempo de giro del capital,
pasaron al primer plano de las estrategias corporativas de sobrevivencia en
condiciones generales de deflación /6. En consecuencia las décadas del setenta y
ochenta fueron un conturbado período de reestructuración económica y reajuste
social y político, que continuó en los años siguientes. En el espacio social
creado por todas esas oscilaciones e incertezas, una serie de nuevas
experiencias en los dominios de la organización industrial y de la vida social y
política comenzó a tomar forma. Esas experiencias pueden representar los
primeros ímpetus del pasaje para un régimen de acumulación de capital
enteramente nuevo, asociado con un sistema de regulación política y social bien
distinta.</DIV>
<DIV align=justify><BR>El mercado de trabajo pasó por una radical
reestructuración. La desocupación -gran cantidad de mano de obra excedente tanto
de desempleados como subempleados- y precarización del trabajo y el
debilitamiento del poder sindical fueron aprovechados para imponer "regímenes y
contratos de trabajo más flexibles". Lo mismo que el traslado de las plantas de
producción a zonas con menos exigencias salariales o de beneficios sociales. Y
lo que es más importante "una reducción del empleo regular (formal) en favor del
creciente uso del trabajo en tiempo parcial, temporario o subcontratado (o
tercerizado)"..."Las economías de fines determinados derrotaron a las economías
de escala." La industria debió adaptarse a la producción en pequeños lotes.
"Estos sistemas de producción flexible permitieron una aceleración del ritmo de
innovación del producto, al lado de la exploración de nichos de mercado
altamente especializados y de pequeña escala."..."El tiempo de giro (del
capital) -que siempre es una llave de la lucratividad del capital- fue reducido
de modo dramático por el uso de nuevas tecnologías productivas (informática y
programación, automatización, robots) y de nuevas formas organizacionales (como
el sistema de gerenciamiento de estoques 'just-in-time', que disminuye la
cantidad de materia prima necesaria para mantener la producción fluyendo en
forma continua)."</DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero la aceleración del tiempo de giro en la producción
hubiera sido inútil sin una reducción del tiempo de giro en el consumo. La vida
media de un producto fordista típico, por ejemplo, era de cinco a siete años,
pero la acumulación flexible disminuyó ese tiempo, en un primer momento a menos
de la mitad en el sector textil o vestuario. Hoy en esas ramas -en los grandes
mercados de consumo- la vida media se mide en meses y aún en semanas), mientras
que en otros sectores -hardware, software, videogames, telefonía móvil, MP3,
MP4, MPn, , etc.- la obsolescencia se alcanza antes de los dieciocho meses y
para los tablet e i-Pad, los lanzamientos de nuevos modelos son cada 12 meses.
La acumulación flexible fue acompañada en la punta del consumo, por una atención
mucho mayor a las modas fugaces y por la movilización de todos los artificios de
inducción de necesidades ficticias -con apoyo de la publicidad- y de la
transformación cultural que eso implica. La estética relativamente estable del
modernismo fordista cedió lugar a todo el fermento, inestabilidad y cualidades
huidizas de una estética posmoderna que celebra la diferencia y en especial lo
efímero en términos de utilización de mercancías, de apetitos y aspiraciones
individuales, así como en el espectáculo, la moda y la mercantilización de las
formas culturales. El mundo capitalista se zambullía en el consumismo aturdido
concerniente a la crisis estructural crónica del capital, en su etapa
senil.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Como lo define Z. Bauman respecto al individuo: "Se puede
decir que el 'consumismo' es un tipo de acuerdo social que resulta de la
reconversión de los deseos, ganas o anhelos humanos (si se quiere 'neutrales'
respecto del sistema) en la principal fuerza de impulso y de operaciones de la
sociedad, una fuerza que coordina la reproducción sistémica, la integración
social y la formación del individuo humano, así como también desempeña un papel
preponderante en los procesos individuales y grupales de auto-identificación, y
en la selección y consecución de políticas de vida individuales." /7<BR></DIV>
<DIV align=justify><STRONG>La tasa de utilización decreciente</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>A mediados de la década de los 90 István Mészáros publicó
Beyond Capital /8 y desde una teoría socio política y económica renovada
esclareció muchas cuestiones actuales. Su formulación de la ley tendencial de la
tasa de utilización decreciente y la ubicación del rol del complejo
industrial-militar en la economía capitalista actual son dos significativos
aportes que nos esclarecen respecto a la crisis estructural crónica del capital
en su etapa senil. La primera rige el consumo individual y social; y el nuevo
rol del complejo industrial-militar se impone como determinante en el consumo
estatal.<BR></DIV>
<DIV align=justify>La tasa de utilización decreciente es una de las leyes
tendenciales más importantes que engloban el desenvolvimiento del capitalismo.
Tiene como condición sine qua non y origen directo, la separación del
trabajador de sus medios de producción (herramientas, maquinaria, materias
primas e instalaciones) y la conversión de esos medios en capital. No podemos
extendernos en los atributos y el desarrollo de este proceso que llevó
centenares de años y sólo resaltaremos que realizada la separación del
trabajador de sus medios de producción, los objetivos de la producción ya no
están directamente atados y subordinados a las limitaciones de un consumo
determinado. A partir de ese momento la producción puede anticiparse al consumo
e imponer una "demanda mayor, conducida no por las necesidades reales de uso del
producto, sino por la oferta de ese producto en el mercado." De esta forma la
producción remueve los antiguos obstáculos al consumo y a través de la oferta,
adopta un papel "activo/estimulador" de la demanda y con el pasar del tiempo,
crecientemente manipulador de ella. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Como contrapartida: "la remoción de los antiguos
obstáculos al consumo, en relación a la demanda, para el capital también
significa simultáneamente la pérdida de su capacidad de poner límites a sus
propios procedimientos productivos (que en los sistemas de producción más
antiguos eran circunscritos por la demanda equivalente al uso directo), evitando
hundirse en la inactividad y la crisis".</DIV>
<DIV align=justify><BR>Por eso como contrapartida de la subordinación del valor
de uso al valor de cambio tenemos las crisis de sobreproducción cuando la oferta
de mercancías no logra realizarse en el mercado. Como es evidente, no se trata
de sobreproducción respecto a las necesidades humanas sino a las posibilidades
del consumidor de adquirir el producto en el mercado. Por ejemplo:
"sobreproducción" de alimentos que puede convivir con hambrunas o
sobreproducción de viviendas que coexiste con millones de "sin techo". </DIV>
<DIV align=justify><BR>La innovación de subordinar el valor de uso del producto,
al valor que se puede obtener en el mercado, se basa en la percepción "de que
cualquier mercancía, en un extremo de la escala, puede estar constantemente en
uso o, en el otro extremo de las posibles tasas de utilización, absolutamente
nunca ser usada, sin perder con eso su utilidad en lo que se refiere a las
exigencias expansionistas del modo de producción capitalista."/9</DIV>
<DIV align=justify><BR>"Como resultado, nuevas potencialidades productivas se
abren al capital, cuyo sistema no sufrirá cualquier consecuencia si la relación
de alguien con un producto dado, es caracterizada por la tasa de utilización
mínima o máxima, pues esa tasa no afecta en absoluto la única cosa que realmente
importa desde el punto de vista del capital: que una cierta cantidad de valor de
cambio sea realizada en la mercancía en cuestión, a través del propio acto de
venta, independientemente de ser ella sujeta a uso constante, a poco, o a ningún
uso conforme el caso. El capital define "útil" y "utilidad" en términos de
vendible, un imperativo que puede ser realizado bajo la hegemonía y el dominio
del propio valor de cambio." /10 O dicho de otra forma por Marx: "el valor de
cambio de una mercancía no aumenta si su valor de uso es más consumido y con
mayor provecho"./11 Es quizá esta afirmación de Marx en El Capital, la que
fundamenta la ley tendencial de la tasa de utilización decreciente formulada por
Mészáros.</DIV>
<DIV align=justify><BR>"Por el contrario -afirma Mészáros- cuanto menos una
mercancía es realmente usada y re-usada (en vez de rápidamente consumida, lo que
es perfectamente aceptable para el sistema) mejor es desde el punto de vista del
capital: ya que tal subutilización torna vendible otra pieza de
mercancía."</DIV>
<DIV align=justify><BR>"De hecho esa tendencia a reducir la tasa de utilización
real ha sido precisamente uno de los principales medios por los cuales el
capital consiguió alcanzar su crecimiento inconmensurable en el curso del
desenvolvimiento histórico."/12 La subutilización de los productos se impone por
la manipulación de la demanda (publicidad y prédica cotidiana de los grandes
medios), los imperativos de la moda, la obsolescencia programada /13, o inducida
para la mayoría de las mercancías y la creación de necesidades ficticias, entre
otros mecanismos. Cuánto más efímera es la utilización de un producto, cuánto
más fugaz es su pasaje por el mercado, mejor para el funcionamiento de la
economía capitalista. Con las consecuencias de despilfarro de materias primas y
de horas de trabajo que esto implica y con el crecimiento exponencial del
desperdicio y el aumento geométrico de la producción de basura y chatarra.</DIV>
<DIV align=justify><BR>La tasa de utilización decreciente se evidencia en la
producción de bienes y servicios tanto como en la producción de bienes de
producción (maquinaria e instalaciones). "Paradojalmente, cuanto mayor la
magnitud del capital dedicado a los medios de producción... tanto mayor es la
presión para suplantarlo por una magnitud siempre creciente de capital destinado
al mismo tipo de existencia..."/14. Dicha tasa se expresa en la fábrica en forma
de subutilización crónica acoplada a una presión creciente para acortar el ciclo
de amortización de la maquinaria.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En relación al propio trabajo vivo la tasa de utilización
decreciente asume, con el pasar del tiempo, la forma de desempleo creciente. La
técnica y la ciencia realizan la doble tarea de "inventar más y más maquinaria
productiva eficaz en relación al costo, lo que quiere decir, primordialmente
economizadora de trabajo, y de encontrar los métodos y procesos adecuados para
la lucrativa producción en masa de mercancías ."/15 La expansión de la
agro-industria y la minería a cielo abierto en Latinoamérica utiliza nueva y
mayor cantidad de maquinaria desplazando el trabajo vivo tanto en la agricultura
como en la minería. La ciencia y la tecnología lejos de tener un sentido neutro
está subordinada a la acumulación de capital y por tanto, sus objetivos se
expresan en la búsqueda del cumplimiento de la tasa de utilización
decreciente.<BR>En la tasa de utilización decreciente confluyen las tres
mercancías, tanto los bienes y servicios, como los bienes de producción, como la
mercancía trabajo. Mészáros lo sintetiza de esta forma: "...cuanto más el modo
establecido de producción y consumo pueda aproximarse a la tasa cero de uso,
habiendo removido completamente el 'trastorno disfuncional' (...) del consumo
real, mayor alcance se confiere automáticamente por esta aproximación a la
producción continua y la expansión ilimitada. No importa cuán absurda pueda ser
la suposición en sus implicaciones finales (...) Siendo así, el objetivo y el
principio orientador de la producción se tornan: cómo asegurar la máxima
expansión posible (y el correspondiente lucro) sobre la base de una tasa de
utilización mínima que mantenga la continuidad de una reproducción ampliada"/16.
</DIV>
<DIV align=justify><BR><STRONG>Perspectivas</STRONG></DIV>
<DIV align=justify><BR>Para el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), la Red de
la Huella Global (GFN) y las demás instituciones que elaboraron el Informe
Planeta Vivo 2012, la propuesta de futuro es mantener la Huella Ecológica sin
sobrepasar los límites planetarios, es decir gestionar, gobernar y compartir el
capital natural por debajo de las fronteras ecológicas. Esto implica reducir la
huella ecológica y llevarla de 1 ½ planeta actual a 1; reorientar los flujos
financieros recompensando la gestión sostenible de los recursos y la innovación;
producir mejor reduciendo insumos y desechos en la producción y aumentando la
generación de energía renovable; distribuir con equidad los recursos y abandonar
el PBI como medida privilegiada de desarrollo de los países; y consumir de forma
más responsable cambiando el estilo de vida, mudando el modelo energético y
promoviendo el consumo humano saludable. Es una perspectiva loable y también
inalcanzable bajo el sistema capitalista. Pero imprescindible en un programa
social-político de transformaciones radicales. </DIV>
<DIV align=justify><BR>El Capital es sinónimo de más desocupación, desigualdad y
pobreza y una mayor destrucción ambiental. Las perspectivas que tiene el
capitalismo para nuestro planeta: son acelerar cada vez más el giro del capital
en la producción y acumulación, centrar los flujos financieros en la
especulación y el fraude, despilfarrar las riquezas naturales comunes e
incentivar la generación de desechos de todo tipo, empeorar la matriz energética
global con nuevas tecnologías más destructivas -como el fracking-, deteriorar la
alimentación mundial con la expansión de las semillas transgénicas y todo tipo
de organismos genéticamente modificados y empeorar la salud global a través de
la actual industria de la alimentación y del monopolio de la medicina por las
transnacionales de los laboratorios. Y está implícito en su dinámica actual
acelerar el vértigo del consumismo atolondrado e irresponsable. </DIV>
<DIV align=justify><BR>Aunque aún el consumismo aturdido pueda confundir por
períodos a nuestras poblaciones, décadas de sacrificios y luchas han hecho que
nuestro continente tenga, como ningún otro, miles de movimientos sociales y
social-políticos confrontando en la actualidad, en distintos niveles, todas esas
lacras que impulsa el capital.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Para aquellos individualistas fanáticos que han abrazado
al consumismo como su medular filosofía de vida les advierto con un aforismo de
Heráclito de Éfeso /17: "La compulsión por satisfacer todos nuestros deseos, se
paga con pedazos del alma."</DIV><FONT size=3 face=Calibri></FONT>
<DIV align=justify><BR><STRONG><U>Notas</U></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><STRONG><U></U></STRONG><BR>1/ Zygmunt Bauman, Vida de
consumo, Trad. de M. Rosenberg y J. Arrambide, FCE, México, 2007, p. 44 y
siguientes.<BR>2/ Planeta Vivo, Informe 2012. Biodiversidad, biocapacidad y
propuesta de futuro.WWF. p.40. Ver
en:<BR>http://d3nehc6yl9qzo4.cloudfront.net/downloads/informe_planeta_vivo_2012.pdf<BR>3/
Ibíd. p. 42.<BR>4/ David Harvey The Condition of Postmodernity - Basil Blackwell
Ltd. 1989. Todos los entrecomillados de este subtítulo y el siguiente pertenecen
al libro mencionado.<BR>5/ Otros autores ampliaron y enriquecieron el concepto
de flexibilidad en la producción capitalista enunciado por Harvey. Podemos
mencionar a Tony Smith en La Production Flexible: une Utopie Capitalista? Cahier
d'étude et de recherche Nº 23, Institut International de Recherche et de
Formation, 1996 y Alain Bihr en La Novlangue Néolibérale (La rhétorique du
fétichisme capitaliste) capítulo sobre la Flexibilité (p.61) Cahiers libres,
Editions Page deux, 2007. Por su parte Richard Sennett en La corrosión del
carácter, (Editorial Anagrama, Barcelona 2000.) desarrolla los estragos en el
carácter de las personas, de la nueva forma flexible de producción.<BR>6/ La
deflación es la caída generalizada del nivel de precios de bienes y servicios en
una economía. Es el movimiento contrario a la inflación.<BR>7/ Zygmunt Bauman,
Ibíd.<BR>8/ István Mészáros, Beyond Capital, Towards a Theory of Transition,
Merlin Press, Londres, 1995. Las citas entrecomilladas en este subtítulo
pertenecen a la versión en portugués del libro de Mészáros: Para Além do
Capital, Editorial Boitempo, Sao Paulo, 2002.<BR>9/ István Mészáros, Para Além
do Capital. p. 660.<BR>10/ Ibíd. p. 660-661.<BR>11/ Karl Marx O Capital, São
Paulo, Abril Cultural, 1983 v. 1/1, p. 282.<BR>12/ Mészáros, Ibíd. p.
661.<BR>13/ Para entender la obsolescencia programada ver el documental de
Cosima Dannoritzer Comprar, tirar, comprar,
en:<BR>http://www.rtve.es/alacarta/videos/el-documental/documental-comprar-tirar-comprar/1382261/<BR>14/
Mészáros, Ibíd. p. 665.<BR>15/ Ibíd. p. 668.<BR>16/ Ibíd. p. 684.<BR>17/
Heráclito de Éfeso, filósofo griego, nació hacia el año 535 A.C. y falleció
hacia el 484 A.C.
<HR>
<BR> <BR></DIV></FONT></BODY></HTML>