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<DIV align=center><STRONG><FONT size=4><U>boletín solidario de
información</U><BR><FONT color=#800000 size=5>Correspondencia de
Prensa</FONT><BR><U>19 de setiembre 2013<BR></U><FONT color=#800000
size=5>Colectivo Militante - Agenda Radical</FONT><BR>Montevideo -
Uruguay<BR>redacción y suscripciones: <A
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href="mailto:germain5@chasque.net">germain5@chasque.net</A></FONT></STRONG><A
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<DIV align=justify><STRONG><FONT
size=3>Imperialismo</FONT></STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Arial><STRONG></STRONG></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><STRONG><FONT size=3>Fuerzas de elite
ociosas de EEUU buscan qué hacer en América
Latina</FONT></STRONG><BR></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><STRONG>Jim
Lobe</STRONG></FONT></DIV>
<DIV align=justify><STRONG><FONT size=2 face=Arial>IPS, </FONT><FONT size=2
face=Arial>Washington, 18-9-2013</FONT></STRONG></DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial><A
title="http://www.ipsnoticias.net/ CTRL + clic para seguir el vínculo"
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title="http://www.ipsnoticias.net/ CTRL + clic para seguir el vínculo">http://www.ipsnoticias.net/</STRONG></A></FONT></DIV>
<DIV align=justify><FONT face=Calibri></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial></FONT> </DIV>
<DIV align=justify><FONT size=2 face=Arial>La política de Estados Unidos hacia
América Latina está en piloto automático, en gran medida por los poderosos
intereses que las burocracias militares y de la DEA han solidificado durante
décadas.</FONT></DIV><FONT size=2 face=Arial>
<DIV align=justify><BR>Esta es una de las causas de que la Casa Blanca haga
"oídos sordos" al "clamor" de gobiernos democráticos y de la sociedad civil de
la región por un relacionamiento diferente, asegura el informe "Hora de
Escuchar", publicado este miércoles 18 por la Oficina en Washington para Asuntos
Latinoamericanos (WOLA) y otros dos centros de pensamiento.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Si bien la ayuda militar y de seguridad de Estados Unidos
a la región viene cayendo desde 2010, las cantidades en dólares pueden resultar
engañosas, según uno de los coautores del informe, Adam Isacson, analista de la
WOLA y experto en Colombia.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Aunque los grandes paquetes de asistencia, como el Plan
Colombia antiinsurgente y antidrogas, se reducen o llegan a su fin, "están en
ascenso otras formas menos transparentes de cooperación entre fuerzas
militares", explicó Isacson.<BR></DIV>
<DIV align=justify><STRONG></STRONG> </DIV>
<DIV align=justify><STRONG>Ayuda oficial cae en picada</STRONG><BR><BR>En 2010,
los montos de la ayuda estadounidense a América Latina tocaron su punto más alto
en más de dos décadas, casi 4.500 millones de dólares, por los desembolsos de la
Iniciativa Mérida para México y América Central y por el mayor flujo de
asistencia para la recuperación de Haití tras su devastador
terremoto.<BR><BR>Pero en 2011, la ayuda se redujo de forma drástica a solo
2.500 millones y se espera que para el año fiscal 2014, que comienza el 1 de
octubre, no sume más de 2.200 millones, señala el informe.<BR><BR>La asistencia
militar y de seguridad también tuvo su pico en 2010, con 1.600 millones de
dólares. Pero desde entonces ha declinado a unos 900 millones anuales, en gran
medida por el final del Plan Colombia y de la Iniciativa Mérida.<BR><BR>América
Central es la única subregión en la cual la ayuda en general se está
incrementando.<STRONG> </STRONG>Esto obedece en parte a que la
administración de muchos programas ha migrado del Departamento de Estado
(cancillería), que tiene normas de derechos humanos más estrictas, al
Pentágono.</DIV>
<DIV align=justify><FONT size=3 face=Calibri></FONT><BR>Asimismo las Fuerzas de
Operaciones Especiales -unidades de elite como los Boinas Verde del ejército o
los grupos Mar, Aire y Tierra de la armada (SEAL)- están realizando más
entrenamiento a efectivos latinoamericanos y caribeños, a raíz de su retiro de
Iraq y su reducción paulatina en Afganistán.</DIV>
<DIV align=justify><BR>En la última década, estos grupos se multiplicaron por
más de dos y ahora suman unos 65.000 efectivos.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Su comandante, el almirante William McRaven -responsable
de la acción que acabó con la muerte de Osama bin Laden- se ha mostrado
especialmente agresivo buscando misiones para sus tropas en nuevos teatros de
operaciones, incluso en América Latina y el Caribe, donde están entrenando a
miles de sus pares.</DIV>
<DIV align=justify><BR>"Usted puede entrenar a mucha gente por lo que cuesta un
helicóptero", dijo Isacson a IPS.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Esta mayor inversión en operaciones especiales forma
parte de una estrategia más amplia del Pentágono (Departamento de Defensa), que
consiste en mantener una presencia de "bajo impacto" en todo el mundo,
reforzando su influencia en las instituciones militares locales.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Pero el Pentágono es mucho menos transparente que el
Departamento de Estado y es frecuente que sus programas no estén sujetos a las
mismas exigencias de derechos humanos ni al mismo grado de control parlamentario
que los de la cancillería.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Más aun, McRaven ha intentado obtener la potestad de
desplegar fuerzas especiales en distintos países sin consultar con los
embajadores estadounidenses ante esos gobiernos y ni siquiera con el Comando Sur
de Estados Unidos.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Si lo lograra, sería más difícil rastrear lo que hacen
estas unidades de elite y saber si trabajan con fuerzas locales cuyos malos
antecedentes en derechos humanos harían imposible que recibieran ayuda o
entrenamiento estadounidense, según lo que prevé la llamada ley Leahy.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Según Isacson, el comando de McRaven intentó este verano
boreal sellar un acuerdo con Colombia para establecer en ese país un centro de
coordinación de operaciones especiales regionales, sin consultar al Comando Sur
ni a la embajada en Bogotá.</DIV>
<DIV align=justify><BR>"Estos hechos significan que el papel militar en la
elaboración de la política exterior se está haciendo mayor y que las relaciones
entre fuerzas militares empiezan a importar más que las diplomáticas", añadió el
analista.</DIV>
<DIV align=justify><BR>De acuerdo al informe, otra tendencia preocupante es que
algunos países, en especial Colombia, han comenzado a entrenar a fuerzas
militares y policiales vecinas, y es frecuente que detrás de estas acciones haya
aliento y financiación de Estados Unidos.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Pese a que los militares colombianos tienen antecedentes
muy polémicos en materia de respeto a los derechos humanos, a oficiales de ese
país se les asignaron papeles importantes en políticas destinadas a frenar
delitos transfronterizos y narcotráfico, como la Iniciativa Regional de
Seguridad para América Central, la Iniciativa Mérida y la reforma policial en
Honduras, señala el informe.</DIV>
<DIV align=justify><BR>Las nuevas tecnologías de seguridad, los drones (aviones
no tripulados) y el ciberespionaje -como el que causó la abrupta cancelación de
la visita a Washington de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff- entrañan
nuevos y grandes riesgos para el clima político y las libertades civiles de la
región, añade el reporte.</DIV>
<DIV align=justify><BR>A estos fenómenos se suma la persistencia de la "guerra a
las drogas" de Washington, inmune a los cada vez más ruidosos reclamos de cambio
formulados por presidentes y expresidentes, la Organización de los Estados
Americanos y la sociedad civil organizada de la región.
<HR>
</DIV>
<DIV align=justify><BR></FONT> </DIV></BODY></HTML>