Brasil/ NINJA: una red de comunicadores y activistas que reniegan del periodismo "objetivo y neutral" [Lucía Naser - entrevista]

Ernesto Herrera germain5 en chasque.net
Jue Dic 15 14:12:18 UYT 2016


  _____

Correspondencia de Prensa

15 de diciembre 2016

Boletín Informativo

redacción y suscripciones

 <mailto:germain5 en chasque.net> germain5 en chasque.net

  _____

Brasil

Narrativa independiente, cuerpos en red

Lucía Naser

La Diaria, Montevideo, 15-12-2016

http://ladiaria.com.uy/

Reniegan del periodismo “objetivo y neutral”, y asumen sin culpa su
parcialidad. Los integrantes de Mídia NINJA (MN), una red brasileña de
comunicadores y activistas fundada en 2013, se consideran un movimiento
social dentro de la comunicación, toman partido en defensa de las
organizaciones más críticas con la actual administración de Michel Temer y
apuntan sus dardos contra la concentración del poder mediático en su país,
donde, según afirman, 70% de los medios son controlados por seis familias,
con una “marcada supremacía” de la Red Globo. La delicada situación política
de Brasil tiene múltiples expresiones; una de ellas es la aparición de
nuevas plataformas como esta, que intentan disputar espacios en el terreno
simbólico y político. Para conocer mejor la propuesta, hablamos con Oliver
Kornblihtt, uno de los integrantes del colectivo.

–¿Qué significa ser NINJA en el oficio del periodismo?

-NINJA es una sigla de Narrativas Independientes Periodismo y Acción. Esas
cuatro palabras describen muy bien nuestra respuesta a la pregunta. Somos
una red de comunicadores y activistas que buscan nuevas formas de producción
y distribución de la información a partir de las tecnologías y de una lógica
colaborativa de trabajo. Fue fundada en 2013 por Fora do Eixo [“fuera del
eje”, una red de colectivos que trabajan en el terreno de la cultura de
Brasil y algunos otros países latinoamericanos], y hoy somos una plataforma
con más de un millón de seguidores y un laboratorio permanente de
comunicación independiente con conexiones en toda Latinoamérica.

Ser NINJA es entender la comunicación democrática como un derecho humano
fundamental. Es entender que vivimos en una sociedad donde la disputa
narrativa con los grandes medios empresariales de comunicación es necesaria
para defender la democracia y los derechos humanos. Nos consideramos un
movimiento social dentro de la comunicación, y trabajamos en las calles y en
las redes junto a las luchas de otros movimientos sociales en el contexto
del siglo XXI: movimientos de mujeres, de negros, LGBT, campesinos, de
vivienda, estudiantiles, de trabajadores, etcétera.

No creemos en el mito de un periodismo objetivo y neutral. Todo periodismo
es posicionado. MN está de un lado y lo asume. El desafío está en la
transparencia de las posturas asumidas y en el desarrollo de una
comunicación profesional, de alto impacto. Asumimos también la crisis de
intermediarios propia de este siglo, y hacemos un periodismo en red a partir
de un mosaico de parcialidades, en constante intercambio y colaboración con
varios proyectos de medios independientes, construyendo un espectro amplio
de contrainformación.

–¿Cómo describen al colectivo y al trabajo que hacen desde él? ¿Qué
estrategias de sustentabilidad tiene el proyecto?

-La red está distribuida por todo Brasil y cuenta con miles de
participantes, que tienen diferentes niveles de involucramiento y de
disponibilidad. Hay integrantes con dedicación exclusiva, que además de
producir contenido, componen un consejo gestor de MN, para ayudar a
sistematizar y enviar a la red. Los colaboradores fijos sin dedicación
exclusiva actúan en la producción de contenidos, y también pueden coordinar
acciones específicas. Otros colaboradores ocasionales envían contenidos por
los canales de MN sin establecer vínculos con la red.

En cuanto a los recursos económicos, nos financiamos con nuestras propias
producciones. La estructura principal está basada en la de Fora do Eixo, y
por medio de las Casas Colectivas de esa red [donde se vive en comunidad] es
posible lograr sustentabilidad. Además, recibimos donaciones de personas
físicas y de organizaciones nacionales e internacionales para proyectos
específicos.

–Explicame un poco más la relación con Fora do Eixo y otros colectivos
políticos-culturales.

-Fora do Eixo inició sus actividades en 2005, cuando un grupo de productores
y artistas del Brasil profundo tuvo la iniciativa de crear un circuito
cultural para intercambiar, de forma solidaria, tecnologías sociales y
conocimiento relacionado con la producción de eventos. Al principio se
centraron en la producción musical, pero pronto la red que formaron fue
creciendo y abarcando otras áreas y formas de expresión, con una parte muy
importante en la comunicación.

Durante ocho años, Fora do Eixo desarrolló un frente de comunicación muy
fuerte, Mídia Fora do Eixo, con metodologías propias de trabajo para cubrir
los festivales de música. Coberturas en tiempo real, transmisiones en vivo,
una estética potente fuertemente trabajada, y un trabajo enfocado en la
difusión mediante las redes sociales. En 2013, esas formas de trabajar la
comunicación se cruzaron con un grupo de periodistas alternativos, y se
salió a la calle con el objetivo de cubrir manifestaciones y otros
acontecimientos sociales. De ese laboratorio surgió Mídia NINJA, que se
monta sobre la estructura y la metodología construida por Fora do Eixo.

–¿Qué papel desempeña actualmente el poder económico en la conducción de los
medios de comunicación brasileños?

-La concentración de poder mediático en Brasil es una de las mayores en
América Latina. 70% de los medios es controlado por seis familias, con una
marcada supremacía de la Red Globo, que está básicamente en manos de la
familia Marinho. A su vez, hay una elite económica que comanda según sus
intereses a este poder mediático concentrado. Todo eso quedó muy claro en la
construcción del golpe institucional, jurídico y mediático que vive Brasil
en la actualidad. Se hizo más evidente la relación de la línea editorial de
medios como O Globo y O Estado de São Paulo con la Federación de Industrias
del Estado de San Pablo, que es una de las instituciones más poderosas de
Brasil.

–Dando vuelta la pregunta, ¿qué papel desempeñan actualmente los medios de
comunicación en la política brasileña?

-Ese complejo mediático monopólico tiene un poder político muy grande, ya
que construye una narrativa omnipresente (desde las novelas de la tarde
hasta los noticieros de la noche) sobre la realidad del país. Sin ese poder
mediático, es imposible entender cómo Dilma [Rousseff], una presidenta a la
que no se le ha comprobado ningún caso de corrupción, fue destituida por el
Congreso más corrupto de la historia de Brasil. Hay una estructura mediática
que dio sustento a la toma del poder, mediante un golpe institucional o
golpe blando, por parte de un proyecto político y económico que fue
derrotado en las urnas en 2014.

–¿Cómo conceptualizan, en su trabajo, la relación entre activismo y
periodismo?

-Como dije antes, somos un movimiento social que proviene de la cultura y
encuentra su campo de acción en la comunicación. En la batalla comunicativa
la lucha es desigual, pero somos muchos haciendo la diferencia a muchas
manos. Peleamos junto a otros movimientos sociales por la democracia y
contra el golpe, por los derechos humanos y por una democratización en la
comunicación. Asumimos nuestro trabajo como un activismo dentro de la
comunicación. Nos han preguntado varias veces si nos consideramos
periodistas. Somos comunicadores; la mayor parte de los ninjas no vienen del
campo del periodismo profesional. Buscamos ser profesionales en nuestro
oficio, pero descreemos fuertemente del supuesto de objetividad y
neutralidad del periodismo tradicional. Creemos que la objetividad y la
neutralidad no existen, ni siquiera en aquellos medios de comunicación que
se llaman profesionales. Sí nos parecen importantes la transparencia y el
compromiso.

–Considerando que MN usa tecnologías de comunicación y medios virtuales para
cubrir acontecimientos en los que la presencia y política de los cuerpos
tiene un rol fundamental, ¿cómo piensan, desde el activismo mediático, la
importancia de los cuerpos y del espacio virtual en los movimientos de
resistencia política?

-Entendemos esta relación mediante la idea de “redes e rúas” [redes y
calles]: la interacción entre esos dos espacios de acción se retroalimenta y
es fundamental. En 2013 entendimos que las nuevas tecnologías y medios
virtuales traían consigo una nueva dinámica social. Las personas que salían
a la calle masivamente, a protestar por sus derechos, vivenciaban esa lucha
poniendo el cuerpo en el espacio público, junto a muchos otros miles de
personas. Eso las movilizaba emocionalmente, pero cuando volvían a sus casas
y prendían los televisores o las radios, no encontraban nada allí que
reflejase la experiencia que acababan de vivir. Entonces se volcaban a las
redes sociales para compartir sus experiencias, y trabajos como el de MN
traían un acercamiento mayor a esa experiencia vivida, con transmisiones en
vivo continuas durante cuatro horas, o con imágenes impactantes realizadas
de igual a igual. En todo el proceso de lucha contra el golpe, entender el
potencial de movilización de las redes y de las calles fue fundamental para
el movimiento de resistencia política. Pensamos que el proceso virtual no
puede comprenderse sin el presencial, y viceversa. Movilizarse virtualmente
sólo toma consistencia junto a la presencia masiva de los cuerpos en las
calles, ocupando, manifestando.

–¿Tienen colaboradores internacionales con los cuales trabajen o en quienes
se inspiren? ¿Están insertos en algún circuito internacional de medios
alternativos?

-La experiencia de MN se inscribe en una tradición de medios alternativos
mundiales, que también tiene antecedentes en Brasil. El cineasta francés
Jean-Luc Godard ya fue preso en mayo del 68 por realizar coberturas
medioactivistas con su cámara súper 8. En MN reconocemos la herencia y la
inspiración de experiencias locales como el Centro de Medios Independientes,
Intervozes, el Foro Mundial de Medios Libres, el Foro Nacional por la
Democratización de la Comunicaión, Cia de Fotos y Radios Libres y
Comunitarias, y también la de experiencias internacionales como Magnum
Photos, Indy- Media o la argentina Sub-Coop.

En lo referido a la articulación con experiencias de otros países, desde
Fora do Eixo hemos construido un frente de trabajo internacional, desde el
cual intentamos conectar a Brasil con el resto de Latinoamérica, e
impulsamos redes regionales que buscan acercar y enlazar experiencias
colectivas. Formamos parte de Facción-Red Latinoamericana de Mediactivismo,
que reúne a más de 200 activistas y experiencias de comunicación de 21
países. Construimos en conjunto y participamos en intercambios y
experiencias con medios hermanos como los argentinos Emergente, La Garganta
Poderosa, Revista Anfibia y Medio Negro; el mexicano DesInformémonos; el
guatemalteco Prensa Comunitaria; los peruanos Chola Contravisual y La Mula,
el paraguayo CigarraPy, el ecuatoriano Nina Shunku, los chilenos The Clinic
y Prensa Opal, el uruguayo Rebelarte y el regional latinoamericano AJ+,
entre otros.

–¿Qué significado y alcances tiene hoy el concepto de “medio alternativo”, y
cuál piensan que es la tarea de los medios alternativos en un contexto de
crisis política?

-En un contexto de crisis política y golpe institucional, jurídico y
mediático como el que vive Brasil, el papel de los medios alternativos y de
las construcciones alternativas para disputar poder es fundamental. La
construcción de alternativas colectivas, horizontales y en red, o la disputa
de agenda, son tareas fundamentales.

MN tiene actualmente la capacidad de lograr más interacción en las redes
sociales que los principales medios empresariales de Brasil, como O Globo,
Folha de São Paulo, O Estado de São Paulo o Veja. Y no se trata sólo de MN;
es todo un espectro de medios alternativos que crecen y colaboran con nuevas
lógicas de interacción, creando lo que el estudioso Fábio Mallini llama “los
nuevos grandes medios”. Entre ellos hay experiencias como Jornalistas
Livres, Brasil de Fato, Revista Forum, O Cafezinho, Observatório de Favelas
o The Intercept: marcan un mapa de medios que en su conjunto interactúa con
millones de personas en Brasil y las moviliza. Es fundamental el rol de
estos nuevos medios en la disputa narrativa y en la disputa de poder para un
proyecto de sociedad más democrática y más justa.

–¿Qué ha cambiado, en términos de libertad de prensa y represión de
manifestaciones, desde la destitución de Rousseff?

-Hemos visto una creciente ola represiva en las calles, en especial contra
las movilizaciones de protesta. No son situaciones nuevas, ya que la Policía
Militar siempre ha tenido un accionar violento contra la prensa en Brasil,
pero esto se ha intensificado.

Hubo represión violenta de marchas pacíficas en San Pablo, en Río de
Janeiro, y recientemente en el acto unificado contra el proyecto de enmienda
constitucional para congelar el gasto social por 20 años (PEC55). En este
último se vio una represión feroz de la Policía Militar, durante más de
cuatro horas, a estudiantes y trabajadores que habían llegado de todo
Brasil. En este contexto, hemos vivido situaciones de persecución, amenaza y
represión, sobre todo en Brasilia y San Pablo.

–¿Cómo salir del pozo en el que parece haber caído Brasil? ¿Cómo activar
fuerzas de resistencia o revolucionarias?

-El desafío que enfrenta Brasil hoy es el de encontrar las bases y las
fuerzas para generar un nuevo ciclo de desarrollo del campo progresista,
tanto en nuestro país como en el resto de América Latina, que provenga de
nuevas fuerzas políticas. Los movimientos de la cultura y la comunicación
tienen mucho para ofrecer en este nuevo panorama de construcción.

Creemos que es desde el Brasil profundo y desde el desarrollo de tecnologías
sociales colectivas, partiendo de la cultura, que se pueden construir otras
lógicas. Hay una nueva generación, formada al calor de 15 años de proyectos
en países latinoamericanos, que mostraron posibilidades de avance. La
reacción está viniendo desde abajo, desde un mapa de nuevas iniciativas que
pueden generar cambios trabajando en forma colaborativa, en colectivo y en
red; por ejemplo, los jóvenes estudiantes ocupando más de mil escuelas en
todo Brasil, en contra de los recortes y las reformas del plan de educación,
con medios de comunicación en red.

  _____





---
El software de antivirus Avast ha analizado este correo electrónico en busca de virus.
https://www.avast.com/antivirus


------------ próxima parte ------------
Se ha borrado un adjunto en formato HTML...
URL: http://listas.chasque.net/pipermail/boletin-prensa/attachments/20161215/50ccc400/attachment-0001.htm


Más información sobre la lista de distribución Boletin-prensa