Brasil/ el gobierno está acorralado: de hecho no hay gobierno [Bernardo Pilotto - entrevista]

[Ernesto Herrera]

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Correspondencia de Prensa

16 de marzo 2016

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Brasil

Entrevista a Bernardo Pilotto

“El gobierno está acorralado y difícilmente salga del atolladero en que se
metió desde el comienzo” 

Gabriel Brito   

Correio da Cidadania

http://www.correiocidadania.com.br/

Traducción de Ernesto Herrera – Correspondencia de Prensa

Brasil amaneció bajo el impacto de una de las mayores manifestaciones
políticas nacionales desde la llamada redemocratización, un histórico
domingo de dominio conservador en diversas capitales e importantes ciudades,
cuyo impacto fue todavía más aterrador para el debilitado gobierno Dilma.
Para hacer un primer análisis, Correio da Cidadania conversó con Bernardo
Pilotto, funcionario del Hospital de las Clínicas de Curitiba y candidato a
gobernador estadual por el PSOL (Partido Socialismo e Liberdade) en 2014.

-Correio da Cidadania: ¿Cómo evalúas las masivas manifestaciones del día 13
de marzo, que pusieron cerca de 5 millones de personas en la calle bajo de
la anticorrupción y en franco repudio al gobierno Dilma? ¿Cómo mides su
fuerza y magnitud?

Bernardo Pilotto: Representa el descontento de la población respecto al
gobierno. Aunque quienes fueron a las calles no representen a toda la
población, la mayoría apoya las protestas de quienes salieron a la calle. Se
mostró una indignación todavía más focalizada en la cuestión de la
corrupción, extendiéndose en las pautas conservadoras y atacando medidas
progresistas del gobierno, como Bolsa Familia y programas sociales que ni
deberían ser considerados muy progresistas.

El gobierno está acorralado y difícilmente salga del atolladero en que se
metió desde el comienzo desde el comienzo de Dilma. De hecho, no hay
gobierno, y ahora existe un riesgo mayor de que Dilma sea apartada, dejar de
ser la presidenta de hecho y no sólo de derecho, como ahora.

-Correio da Cidadania: ¿Qué tipo de perfil atribuyes a esas marchas tan
masivas? ¿Algún grupo político tiende a capitalizar la insatisfacción o
todos son afectados?

Bernardo Pilotto: Quien tiende a capitalizar son los grupos y partidos de
derecha que están fuera del establishment político actual, tales como el MBL
(Movimiento Brasil Libre) y Ven para la Playa, que pueden también
capitalizar por vías tradicionales en las elecciones, a través de partidos
de alquiler, pero más críticos de esos mismos partidos. 

Quedó bien claro que partidos como PSDB, PPS, también Solidaridad tiene
dificultades para dialogar con tales movimientos, aunque el foco resida en
el PT. 

-Correio da Cidadania: ¿Cómo imaginas la política brasilera en las próximas
semanas, en términos de consecuencias de esas manifestaciones?

Bernardo Pilotto: Creo que depende un poco del andamiento del Lava Jato
(operación lavado rápido), que está fuera del esquema político, ya que viene
por el poder judicial. Tendremos que ver como la delación de Delcídio
(Amaral) en la próxima semana puede impactar y, principalmente, depende de
la posición del PMDB.

El PMDB puso un plazo de 30 días para tomar una alguna decisión, en verdad
sólo esperaba el resultado de ayer (13 de marzo). Como hubo mucha gente en
la calle, el partido debe decidir salir del gobierno, lo que sería una
palada de cal para para que Dilma se mantenga en el cargo. 

-Correio da Cidadania: ¿Crees que la crítica al perfil de clase, color e
ingreso de los manifestantes del domingo son suficientes políticamente?

Bernardo Pilotto: Esa crítica no basta. Si miramos una faja de la
manifestación, hay sectores que dialogan mucho con la izquierda, ejemplo de
los funcionarios públicos. La faja salarial de 5 a 10 mínimos representa
eso, se trata de un ingreso de 4 mil reales. 

Decir que sólo había rico, elite, en las manifestaciones, es cerrar los ojos
a la realidad. La manifestación es, sí, capitaneada por las elites; y sí,
comandada por un sector de empresarios y profesionales liberales. Pero la
población en general apoya, aunque no tenga la voluntad de ir a la calle. Y
ya vimos manifestaciones de demandas más populares capitaneadas por personas
de perfil de clase media. 

Creo que la diferencia del domingo es que no había muchos jóvenes. No es
tanto el perfil económico, a pesar de esto ser importante. Pero está la
cuestión de edad. Quienes fueron a las calles en 2013,  no fueron a las
calles en 2015 y 2016, al menos bajo el llamado de ese movimiento. 

-Correio da Cidadania: ¿Qué imaginas como salida del gobierno y de los
sectores lulistas, que también organizarán manifestaciones en defensa del
gobierno y de la democracia este mes?

Bernardo Pilotto: Los sectores gubernistas no tienen salida. Van a marcar
una defensa ciega del gobierno, diciendo que nada cambió en Brasil en
términos políticos, que no existe una nueva generación, que da para seguir
haciendo todo, como ellos siempre hacen, a ejemplo de llamar a los
sindicatos, con el mismo perfil, para hacer actos en horarios comerciales
los días de semana. Tales sectores no van a dialogar con nadie más allá de
con los que ya dialogaron. 

Las medidas del gobierno son cada día más conservadoras, lo que desgarra aún
más las bases populares del gobierno. Y no hay ninguna autocrática, toda la
culpa se le asigna a la red Globo, al juez  Sergio Moro, al “golpe de la
derecha”, pero no se hace ninguna crítica al respecto de con quien dialogan,
cuales sectores están recibiendo su atención, sus métodos
políticos...Difícilmente los gubernistas puedan conseguir gente nueva para
defender su gobierno. 

-Correio da Cidadania: ¿Crees en una respuesta de los sectores más pobres y
de los trabajadores en apoyo al gobierno y al PT, o tendremos un gobierno
cada vez más abandonado a su propia suerte?

Bernardo Pilotto: Creo que quedarán abandonados. El gobierno no da motivos
para ser defendido. Esas capas sociales ya protestan todos los días,
quemando neumáticos, ómnibus, contra los desalojos. Son manifestaciones
desorganizadas desde el punto de vista político, pero ocurren todos los días
protestas de las clases pobres, que van a seguir luchando, hasta porque para
ellos luchar es cuestión de vida o muerte. Van a continuar luchando por
fuera de los sindicatos y de los aparatos tradicionales, que hoy están
bastante desmoralizados por el apoyo incondicional que le dieron al
gobierno. 

-Correio da Cidadania: ¿Cuánto puede hacer la izquierda que está por fuera
del lulismo, hay algo para hacer en un momento de tamaña conmoción y donde
los viejos aparatos gubernistas aluden a una polarización entre izquierda y
derecha, ricos y pobres?

Bernardo Pilotto: Tiene mucho campo. Hay una gran masa insatisfecha que no
ha ido a esas protestas y está contra el gobierno. Tales personas pueden
participar en protestas con agendas más ligadas el campo de izquierda. 

De forma general, la izquierda precisa comenzar a presentar salidas
económicas para la crisis porque, cuando se discuten las salidas a tal
crisis, también económica, PT y PSDB están muy próximos. Ambos defienden la
austeridad, el ajuste fiscal, la Reforma de la Previsión Social, aumento de
los impuestos, etc. Por tanto, aplican los mismo paquetes en el gobierno
federal y en los gobiernos estaduales. Es ahí que se abre una brecha por
donde la izquierda puede capitanear algún proceso, defendiendo la tasación
sobre las grandes fortunas, auditoria de las cuentas públicas, el combate a
la corrupción. 

Así, la izquierda puede firmar un campo en la sociedad y, aunque por el
momento no sea mayoritario, tendrá un potencial para resistir al proceso de
ajuste fiscal y de austeridad que va a continuar con el gobierno Dilma y con
el gobierno que venga después, caso ocurra el impeachment, sea con Temer,
Cunha, Aécio, cualquiera de las opciones disponibles en el sistema político.


-Correio da Cidadania: ¿Para finalizar, qué dices respecto a la Operación
Lava Jato, con todos sus efectos mediáticos, intereses dirigidos,
procedimientos cuestionados? ¿A pesar de todos esos aspectos, cómo analizas
a la luz de la historia?

Bernardo Pilotto: La Lava Jato es una operación que se propone investigar
los desvíos en la Petrobrás a partir de 2003, incomoda un poco cuando se
dice: “¿y el gobierno FHC (Fernando Henrique Cardoso)?”. 

También incomoda la campaña la campaña contra Sérgio Moro. Primero porque
hace de él un héroe. Las personas piensan que si el gobierno habla mal de
él, hay que defenderlo. Además de eso, los ataques sobre que es afiliado al
PSDB son mentirosos. Moro es ideológicamente una persona conservadora, pero
eso apenas refleja a la amplia mayoría de los jueces brasileros. 

La tercera incomodidad que siento es la selectividad en la indignación de
los petistas. Porque la “intimación coercitiva” que condujo Lula a declarar,
se hace todos los días en Brasil, y no hay una conmoción tan fuerte como
cuando el objeto son figurones. 

Fuera de eso, de hecho la Lava Jato va mostrando sus problemas. Por ejemplo,
cuando los medios de prensa corporativos ya saben lo que va a acontecer,
incluso antes de que el propio Lula recibiera la “intimación coercitiva”, ya
se encontraban São Bernardo do Campo para filmar o momento.

Obviamente, existen jugadas combinadas o vaciamiento de informaciones. Por
otro lado, es la primera vez que en Brasil que van presos los corruptores.
No es poca cosa que el dueño de la Obviamente esté preso y condenado a 19
años de cárcel. En ese sentido, la Lava Jato se beneficia de la Ley
Anticorrupción aprobada por el propio gobierno Dilma, lo que es importante
registrar. 

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