Estados Unidos/Debates/ "Aferrarse a la Guerra Fría". [Melvin Goodman]

Ernesto Herrera germain5 en chasque.net
Jue Jul 22 17:04:28 UYT 2021


  _____

Correspondencia de Prensa

22 de julio 2021

https://correspondenciadeprensa.com/

redacción y suscripciones

germain en montevideo.com.uy <mailto:germain en montevideo.com.uy>

  _____



Estados Unidos/Debates



"Aferrarse a la Guerra Fría"



Melvin Goodman *

A l’encontre, 22-7-2021

http://alencontre.org/

Traducción Ruben Navarro – Correspondencia de Prensa



Estados Unidos no puede ignorar las consecuencias de la Guerra Fría. Y es
que la Guerra Fría moldeó nuestra cultura política, nuestras instituciones
políticas y nuestras prioridades nacionales. La Segunda Guerra Mundial
terminó hace 75 años, pero todavía gastamos más que el conjunto de la
comunidad mundial en defensa, controlamos una infraestructura militar en el
extranjero con más de 700 bases e instalaciones y gastamos decenas de miles
de millones de dólares al año en fuerzas y armas nucleares. A eso le debemos
añadir el absurdo Comando Espacial de los Estados Unidos. La Guerra Fría
dividió a Europa, incluyó al Tercer Mundo (nuestro patio trasero), inspiró
una insensata carrera armamentística y creó tensiones geopolíticas crónicas.
Como resultado de ello, Estados Unidos se convirtió en un Estado de
seguridad nacional que se basa en el poder militar y en el uso de la fuerza,
pese a que sus fronteras geográficas son las más seguras de todas las
grandes potencias.



Los recientes acontecimientos en Haití, que terminaron con el asesinato del
presidente Jovenel Moïse, permiten recordar nuevamente que nuestra política
de guerra fría consiste en apoyar a dirigentes autoritarios en todas partes
del mundo con el objetivo de promover los intereses estadounidenses. Pese a
las advertencias sobre un régimen cada vez más autocrático, Joe Biden siguió
apoyando a Moïse. A lo largo de la Guerra Fría, los presidentes
estadounidenses destacaron la importancia del gobierno democrático y de un
“internacionalismo basado en normas”, luego violadas en la práctica. [Joe
Biden no suprimió en absoluto las 242 órdenes ejecutivas de Trump que
endurecieron el embargo y el bloqueo a Cuba, el que golpea antes que nada a
la mayoría de la población, no a la "jerarquía" en el poder. Red. A
l'encontre].



Ningún presidente estadounidense ha intentado abordar la situación de
nuestra seguridad nacional, si bien es cierto que el desempeño de algunos
presidentes fue mejor que el de otros. Los presidentes Eisenhower y Carter
no registraron grandes bajas en el campo de batalla durante sus mandatos.
Los presidentes Kennedy, Nixon y Reagan se enfrentaron al Pentágono en sus
intentos de control de armamentos y de desarme. Pero, desde Eisenhower
ningún presidente entendió el funcionamiento del complejo
militar-industrial. Varios se dejaron intimidar por los militares (Clinton y
Obama) y otros estuvieron demasiado dispuestos a ceder ante ellos (Bush
padre y Bush hijo). Joe Biden tiene la ventaja de haber vivido la
militarización de nuestra política de seguridad nacional durante medio
siglo. Incluso advirtió a Barack Obama que no se dejara “capturar” por los
militares, lo que provocó la indignación del Secretario de Defensa Robert
Gates [2006-2011 bajo George W. Bush y Barack Obama] quien, como buena parte
de los secretarios, fue “capturado” por los jefes del estado mayor.



Pero cuando ya han transcurrido seis meses de su presidencia, Joe Biden no
ha planteado soluciones colectivas y universales en materia de política
exterior. En cambio, utiliza los tópicos de la Guerra Fría, especialmente en
lo que respecta a Rusia y China. Los desafíos de Biden, lanzados tanto a
Rusia como a China, son contraproducentes dada la estrecha relación
chino-rusa forjada por Xi Jinping y Vladimir Putin y que pone fin a un
período de sesenta años de discontinuidad, un período que incluyó
enfrentamientos por la ayuda a Vietnam del Norte, guerras fronterizas,
divergencias sobre la ayuda militar y rivalidades geopolíticas.



La incursión diplomática de Biden en Europa en el mes junio y la reunión
cumbre con la alemana Angela Merkel, que tuvo lugar en julio, pusieron
nuevamente de manifiesto la “vieja mentalidad” que domina la política y la
diplomacia de Estados Unidos incluso después del derrumbe de la Unión
Soviética en 1991, el que había abierto la posibilidad de una “nueva
mentalidad”. La orientación europea de Biden gira en torno a la reactivación
de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) e incluye la
ampliación de su alcance para hacer frente al desafío que representa China.



El equipo de seguridad nacional de Biden está convencido de que Estados
Unidos puede aislar y frenar a China. Por primera vez, un documento de la
OTAN incluye a China en la lista de amenazas a la seguridad de la Alianza,
lo que probablemente provoque muchos dolores de cabeza en Pekín. Los
principales Estados europeos lo firmaron a regañadientes; prefieren no
formar parte de los conflictos chino-estadounidenses, agravados por la
administración Trump. Por su parte, el presidente ruso Putin puede estar
satisfecho con la postura firme de la OTAN contra China, la que fue
formulada en parte para compensar la falta de una postura firme contra
Rusia. La defensa por parte de Alemania del gasoducto Nord Stream 2 [al que
Biden se había opuesto al principio] y el interés franco-alemán en la
coordinación de políticas con Rusia muestran la falta de éxito duradero de
la diplomacia de Biden en Europa.



La canciller alemana, Angela Merkel, se refirió de forma clara y sucinta a
los enfoques de Estados Unidos y de la Unión Europea sobre los problemas de
Rusia y Ucrania: “Nuestras evaluaciones son diferentes”. Merkel no formuló
una respuesta concreta respecto al interés de Joe Biden por hacer frente a
la China. Francia e Italia parecen alinearse con Alemania en estas
cuestiones bilaterales clave. Del mismo modo, muchas naciones asiáticas no
quieren elegir entre Estados Unidos por razones de seguridad y China por
razones relativas a su prosperidad.



En lugar de revertir las políticas de disociación de la administración Trump
con respecto a la China, Biden nombró un equipo de seguridad nacional
decidido a contrarrestar y contener a la China de forma más agresiva en Asia
Oriental. El Secretario de Estado, Antony Blinken y el Asesor de Seguridad
Nacional Jake Sullivan, son partidarios de la línea dura frente a China. El
subdirector de Sullivan es Kurt Campbell, quien elaboró la política de
“pivote” sobre China hace una década. El principal asesor de Campbell en el
Consejo de Seguridad Nacional es Rush Doshi, el que publicó recientemente
The Long Game: China's Grand Strategy to Displace American Order (Oxford
University Press, 8 de julio de 2021). Sullivan nombró a otro partidario de
la línea dura, Ely Ratner, como asesor especial del Secretario de Defensa
Lloyd Austin. Estos nombramientos sugieren una visión colectiva sistemática
sobre China, nuestro mayor desafío diplomático, que se basa en el principio
de la Guerra Fría de negociar desde una posición de fuerza.



Entretanto, la comunidad militar-industrial del Congreso de Estados Unidos
aprovecha las rivalidades sino-estadounidenses en el Mar de China Meridional
y las tensiones entre Estados Unidos y Rusia por Ucrania para hacer campaña
a favor de un mayor gasto militar. La propaganda se centra especialmente en
el tema de China como gran amenaza, y parece incapaz de entender las
posibles consecuencias de la política estadounidense con respecto a ese
país.



Paralelamente, existe un consenso bipartidista en el Congreso según el cual
China constituye la principal amenaza para Estados Unidos. La ley
estadounidense sobre la innovación y la competencia (U.S. Innovation and
Competition Act) obtuvo el apoyo de la mayoría de los dos partidos, los que
subrayaron la importancia de desafiar a la China en materia de inteligencia
artificial y sistemas de computación cuántica. Las acusaciones, a menudo
hiperbólicas, contra la China por parte del Congreso y de los principales
medios de comunicación han dado lugar a una "retórica xenófoba" [1] según
los principales miembros del Asian Pacific American Caucus [CAPAC].



Para la administración Biden, el desarrollo de armamentos avanzados va a
lograr que China se muestre más agresiva hacia Taiwán y en la zona del Mar
de China Meridional. Las acciones de Estados Unidos en el Mar de la China
Meridional giran en torno a medidas similares a las de la Guerra Fría,
incluso con el despliegue de portaaviones para las operaciones llamadas de
libertad de navegación. Las iniciativas estadounidenses respecto a Ucrania
tienen como objetivo establecer una "relación estratégica" con Kiev y
hacerle frente a la influencia rusa en el Mar Negro.



El gobierno de Biden busca presentar a Rusia y China como amenazas
existenciales para la democracia occidental. Muchos expertos y medios de
comunicación dominantes presentan a Irán y a Corea del Norte de la misma
manera. Estos países representan un problema para la diplomacia
estadounidense, pero los problemas existenciales para Estados Unidos son un
mundo en el que hay demasiadas potencias nucleares, una pandemia, una crisis
climática y la ciberseguridad. Estos problemas requieren un enfoque
colectivo y cooperativo, y Estados Unidos es el país que está mejor situado
para abrir el camino hacia la participación de Rusia y China en estos
asuntos. Lamentablemente, Joe Biden y su equipo de seguridad nacional no
parecen dispuestos a hacerlo, ni quieren hacerlo. (Artículo publicado en
Counterpunch, 21-7-2021
https://www.counterpunch.org/2021/07/21/holding-onto-the-cold-war/)



* Melvin A. Goodman es investigador en el Center for International Policy y
profesor de política estatal en la Universidad Johns Hopkins. Fue reconocido
analista de la CIA. Goodman es autor de numerosos libros. El más reciente:
American Carnage: The Wars of Donald Trump (Nova Science Pub, 2019).



Nota



[1] Sobre esto, véase el artículo «Fear and discord among Asian Americans»
en The New York Times, International Edition, 21 juillet 2021, p. 6.
(Redacción A l¨encontre))

  _____





--
El software de antivirus Avast ha analizado este correo electrónico en busca de virus.
https://www.avast.com/antivirus


------------ próxima parte ------------
Se ha borrado un adjunto en formato HTML...
URL: http://listas.chasque.net/pipermail/boletin-prensa/attachments/20210722/cb15eefb/attachment-0001.htm


Más información sobre la lista de distribución Boletin-prensa