Palestina/ ¿Cuándo reconocerá Occidente públicamente el derecho de las y los palestinos a defenderse? [Ilan Pappe]
Ernesto Herrera
germain5 en chasque.net
Mie Ago 17 12:16:05 UYT 2022
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Correspondencia de Prensa
17 de agosto 2022
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Palestina
¿Cuándo reconocerá Occidente públicamente el derecho de las y los palestinos
a defenderse?
Ilan Pappe *
Viento Sur, 16-8-2022
https://vientosur.info/
Traducción der Faustino Eguberri – Viento Sur
El último brutal ataque de Israel contra la Franja de Gaza reveló una vez
más la respuesta hipócrita e inmoral de Occidente a la política genocida de
Israel en los territorios ocupados. La continuación de estas políticas
despiadadas y las respuestas de los gobiernos occidentales, especialmente
los gobiernos estadounidenses y británicos, pueden conducir naturalmente a
la desesperación y la parálisis.
Sin embargo, la desesperación y la inacción son un lujo que las y los
palestinos sometidos al apartheid, el bloqueo y la ocupación no pueden
permitirse; por lo tanto, el movimiento de solidaridad también debe hacer
todo lo posible para no ceder a una sensación de impotencia y de
desesperación. Es importante registrar la continua falta de sinceridad de
Occidente, tal como se manifestó una vez más esta vez. Es importante
condenar esta duplicidad y contrarrestarla exponiendo los inventos y las
distorsiones en las que se basa.
El Presidente estadounidense, el Departamento de Estado y el enviado
estadounidense ante las Naciones Unidas "apoyaron el derecho de Israel a
defenderse" en respuesta al asalto israelí, al igual que el Ministro de
Relaciones Exteriores británico, que probablemente será el próximo Primer
Ministro en septiembre. Es bastante increíble escuchar estas declaraciones:
mientras que todas las principales organizaciones de derechos humanos y
derechos civiles del mundo han definido a Israel como un estado de
apartheid, las élites políticas occidentales han optado por aplaudir su
derecho a la legítima defensa.
No debemos cansarnos y debemos recordar al mundo que las personas que tienen
derecho a defenderse son las y los palestinos y que tienen medios muy
limitados para hacerlo, ya sea mediante la lucha armada o apelando al
derecho y las instituciones internacionales. En muchos casos, no han podido
defenderse, ni en Gaza este mes ni en ningún otro lugar de la Palestina
histórica desde 1948. Cuando logran hacerlo, se les acusa de ser
terroristas.
Los gobiernos occidentales parecen preocuparse muy poco por el derecho de
las y los palestinos a la vida, la dignidad y la propiedad. Las Naciones
Unidas se comprometieron a hacerlo en la Resolución 181, de 29 de noviembre
de 1947, y permanecieron inactivas cuando se violaron todos estos derechos
durante la limpieza étnica de Palestina. Desde entonces, y especialmente
desde 1967, ninguno de los gobiernos occidentales ha tratado de proteger a
las y los palestinos, cuando el ejército israelí les disparaba, mataba o
hería, con armas proporcionadas por Occidente o desarrolladas con su ayuda.
Tampoco ha hecho nada cuando sus casas han sido demolidas, sus medios de
vida destruidos o cuando han sido objeto de una limpieza étnica.
Podemos mirar solo julio de 2022 e identificar a algunas de las víctimas
palestinas cuyo derecho a la legítima defensa no ha sido reconocido por el
Presidente de los Estados Unidos o el Ministro de Relaciones Exteriores
británico. Estos políticos guardaron silencio cuando, durante este mes,
Saadia Faragallah-Mattar, madre de 8 hijos y abuela de 28 nietos y nietas,
de 64 años, murió en la prisión de Damon, donde ya había pasado 6 meses
detenida sin juicio. Nadie defendió ni reconoció el derecho a la vida en el
mismo mes de Amjad Abu Aliya, un niño de 16 años asesinado a tiros por
soldados israelíes.
La lista de personas asesinadas este mes de julio es larga. Incluye a Nabil
Gahnem, de 53 años, que intentó regresar a casa sano y salvo después de
trabajar en Israel y que fue asesinado a tiros por soldados israelíes en
julio pasado, y Taher Khalil Mohammad Maslat, un niño de 16 años asesinado a
tiros de camino a la escuela por francotiradores israelíes que le atacaron a
una distancia de 100 metros y le mataron. Odeh Mahmoud Odeh fue asesinado a
tiros en julio en al-Midya, una aldea cerca de Ramallah, durante una semana
que también vio el asesinato de Ayman Mahmoud Muhsein, de 29 años, padre de
3 hijos y prisionero político durante 3 años, asesinado en el campo de
Dheisheh cerca de Belén, y de Bilal Awad Qabha, de 24 años, asesinado en
Yabad.
Cuando el mes acababa de comenzar, Muhammad Abdulla Salah Suleiman, un chico
de Silwan, recibió un disparo en la Ruta 60, una carretera de apartheid de
colonos, por soldados israelíes sentados en una torre de vigilancia. Se le
dejó sangrar durante unas dos horas, y soldados israelíes impidieron que una
ambulancia palestina llegara hasta él, disparando a cualquiera que se le
acercara. Muhammad murió más tarde como resultado de sus heridas.
Las torres de vigilancia israelíes también están distribuidas cerca de la
valla de la Franja de Gaza, pero no sin nadie dentro. Están cargados de
ametralladoras operadas a distancia por unas jóvenes soldados israelíes,
aclamadas por la radio israelí como heroínas que defienden su tierra natal
cuando explicaron cómo usan un joystick en sus computadoras para matar a
cualquiera que se acerque a la valla.
Desde el 1 de enero de 2022, y hasta el asesinato de Shireen Abu Akleh, las
fuerzas israelíes han asesinado a 61 personas palestinas; estos asesinatos
se inscriben en el marco de lo que las organizaciones locales e
internacionales de defensa de los derechos humanos han descrito como una
“política de disparar a matar” contra las y los palestinos; incitadas por el
Primer ministro israelí de entonces, Naftali Bennett a utilizar la fuerza
letal contra personas palestinas que no representaban una amenaza inminente,
cientos de personas resultaron heridas durante el Ramadán de este año,
especialmente en Haram al-Sharif.
Y el número de muertes aumentó durante este último ataque. Niños como Momen
Salem, de 5 años, y Ahmad al-Nairab, de 11 años, en Jabaliya, fueron
asesinados junto con otros 14 niños de 4 a 16 años.
Las y los niños palestinos también mueren debido a la política israelí de
denegar permisos médicos a los niños en Gaza. Entre 2008 y 2021, unos 840
niños murieron mientras esperaban un permiso.
Nadie en los medios de comunicación occidentales ni en la política dominante
habló del derecho a defenderse de la gente palestina que fue mutilada por el
fuego israelí este mes. Nassim Shuman, un estudiante que caminaba por una
carretera lateral cerca de Ramallah, perdió una pierna y su amigo Ussayed
Hamail quedó paralizado en una silla de ruedas después de que soldados
israelíes les dispararan. Un destino similar este mes esperaba a Harun Abu
Aram de Yatta, que quedó paralizado de pies a cabeza después de tratar de
evitar que los soldados robaran el generador de su vecino.
Un silencio similar se escuchó alto y claro cuando la comunidad palestina de
Ras al-Tin, de 18 familias, fue desalojada de sus hogares en julio pasado y
cuando las familias de Masafer Yatta se convirtieron en objetivos del
entrenamiento militar israelí. Nadie en Londres o Washington en julio
pasado habló del derecho de las y los palestinos a defenderse a raíz de la
decisión de la Corte Suprema de Israel de aprobar el plan del ejército de
expulsar a un millar de personas palestinas de la región de Masafer Yatta.
Y nadie en el Occidente oficial habló sobre el derecho a defenderse de las y
los palestinos que son torturados por Israel. En julio pasado, nos enteramos
por el "Comité Público contra la Tortura en Israel" (PCATI) de que la
situación se había vuelto tan grave que decidió remitir el asunto a la Corte
Penal Internacional. La PCATI concluyó que Israel "no está interesado y no
puede poner fin al uso de la tortura contra las y los palestinos", una
política que constituye un crimen de guerra. Dijo que después de 30 años de
luchar contra la tortura, había " llegado a la desafortunada conclusión de
que Israel no quiere poner fin a la tortura, investigar honestamente las
denuncias de las víctimas y procesar a los responsables".
En julio, nos sacudió la historia de horror de Ahmad Manasra, encarcelado a
la edad de 13 años, que sufría de depresión mental. A pesar de los
llamamientos de la ONU para liberarlo, Israel reaccionó colocándole en
régimen de aislamiento.
Y no tenemos tiempo para enumerar a las y los palestinos utilizados como
escudos humanos, cuyas casas fueron demolidas, campos quemados y negocios
destruidos.
Ciertamente, todos tenían derecho a defenderse, pero ¿quién les defendió? Ni
la comunidad internacional, ni la Autoridad Palestina, ni la OLP dondequiera
que esté, ni los líderes palestinos en Israel, ni el mundo árabe. ¿Se
suponía que debían permanecer indefensos en ese momento, y se supone que
deben seguir estándolo en el futuro?
Israel ofrece ahora a Hamás lo que ofreció a la Autoridad Palestina, un
modelo de prisión abierta, donde los prisioneros estarían a merced de los
carceleros israelíes, ofreciendo derechos básicos limitados para vivir y
trabajar a cambio de un "buen comportamiento". Cualquier intento de llevar
una vida normal y liberada se tilda inmediatamente de terrorismo, y el poder
del ejército se activa instantáneamente. El modelo de "prisión abierta" es
reemplazado por un modelo de "prisión de máxima seguridad", donde el castigo
colectivo aparece en forma de bombardeos aéreos, asedios y una larga lista
de crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad.
Pregunto de nuevo, ¿quién defenderá a las y los palestinos de la necesidad
de elegir entre dos opciones despiadadas en Cisjordania y la Franja de Gaza?
Nadie ofrece una tercera opción. ¿Cuándo reconocerán públicamente los
líderes occidentales el derecho de las y los palestinos a defenderse, como
lo hacen, por ejemplo, en Ucrania? ¿Y cuándo logrará el movimiento de
solidaridad presionar a estos líderes para que lo hagan, para que todos y
todas podamos evitar el próximo asesinato, mutilación y expulsión de
palestinos inocentes? Esperemos que sea pronto, antes de que sea demasiado
tarde.
Hasta entonces, las y los palestinos que se defienden deben tener todo
nuestro apoyo y admiración.
* Ilan Pappé es un historiador israelí y profesor en la Universidad de
Exeter. Anteriormente fue profesor de ciencias políticas en la Universidad
de Haifa. Es autor de The Ethnic Cleansing of Palestine, The Modern Middle
East, A History of Modern Palestine: One Land, Two Peoples y Ten Myths about
Israel. Pappé es presentado uno de los "nuevos historiadores" de Israel que,
desde la publicación de documentos relevantes de los gobiernos británico e
israelí a principios de la década de 1980, ha reescrito la historia de la
creación de Israel en 1948. Ha contribuido con este artículo para The
Palestine Chronicle.
[Artículo publicado en The Palestine Chronicle, 11-8-2022:
https://www.palestinechronicle.com/when-will-the-west-publicly-endorse-the-r
ight-of-the-palestinians-to-defend-themselves/)
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