Economía/ Muchos lo dicen: la codicia empresarial aviva la inflación. [Branko Marcetic]

Ernesto Herrera germain5 en chasque.net
Sab Jun 3 22:57:13 UYT 2023


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Correspondencia de Prensa

3 de junio 2023

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Economía




Cómo la codicia de las grandes empresas impulsa la inflación en Estados
Unidos y Europa



Avarinflación



La idea de que las grandes empresas están remarcando sus precios muy por
arriba de lo que demanda el alza de costos, para así hacer ganancias
extraordinarias en plena crisis, era considerada hasta hace poco como una
chifladura de la izquierda. Hoy la proclaman los bancos centrales europeos y
los economistas del mainstream.



Branko Marcetic *

Brecha, 2-6-2023

https://brecha.com.uy/avarinflacion/

Traducción de Brecha



Desde el principio de la actual crisis, economistas, medios y políticos de
tendencia izquierdista en Estados Unidos y Europa vienen argumentando que el
abuso empresarial es uno de los factores detrás del explosivo aumento del
costo de vida en esas economías: que las empresas no solo están
transfiriendo un aumento de costos de producción a los consumidores, sino
que están aprovechando los titulares sobre la inflación para aumentar los
precios más de lo necesario y, con disimulo, amasar cuantiosas ganancias.



Al comienzo esta denuncia fue descartada por el establishment como una
excusa izquierdista para atacar a los empresarios. El año pasado Jeff Bezos
tachó de «desinformación» un tuit del presidente Joe Biden en el que se
sugería que aumentar los impuestos a las grandes empresas podía ayudar a
bajar la inflación. Una de las columnistas del Washington Post (propiedad de
Bezos) tildó la sugerencia de «retórica demagógica», cuyo uso por el
gobierno podría empeorar la inflación. En la cadena MSNBC, fuertemente
identificada con el electorado demócrata, los comentaristas económicos han
expresado con alarma que son las propuestas de Biden para fortalecer los
salarios las que agigantarán la inflación, y no las ganancias empresariales.



Mientras tanto, las ganancias de las grandes empresas en Estados Unidos
vienen creciendo a niveles récord (Bloomberg informó, en agosto, que los
márgenes de ganancia aumentaron  15,5 por ciento a mediados del año pasado,
su mayor nivel desde 1950). Ejecutivos de empresas del rubro de la
alimentación y los supermercados, como Kellogg’s, Hershey’s, MGP Ingredients
y Kroger, entre otras, han proclamado abiertamente a sus accionistas que la
inflación los está ayudando a hacer ganancias; en algunos casos, es la
capacidad de fijar precios «lo que está detrás de la mayoría de –si no de
todo– nuestro crecimiento neto», en palabras del CEO de Kellogg’s, una
compañía que tuvo un aumento de sus ganancias de 54 por ciento entre 2019 y
2021.



Pero, como suele suceder, lo que alguna vez fue una locura de izquierdistas
trasnochados ahora se reconoce como una realidad. Allí está el testimonio
que dio al Congreso, en marzo, el presidente de la Reserva Federal, Jerome
Powell. Cuando el senador demócrata Chris Van Hollen le preguntó si los
salarios podrían seguir creciendo de manera constante en un escenario de
inflación bajo control y caída de las ganancias empresariales, Powell
respondió que, efectivamente, esto era posible «a corto plazo». Fue una
admisión importante: la estrategia antinflacionaria de Powell ha sido
explícitamente la de «bajar los salarios», pero frente a la pregunta
senatorial reconoció que los salarios pueden seguir creciendo si el país se
encamina a salir de sus problemas de inflación, siempre y cuando las altas
ganancias corporativas actuales caigan.



El reconocimiento de Powell vino dos meses después de que la entonces
vicepresidenta de la Reserva Federal, Lael Brainard, dijera que «los
salarios no parecen estar impulsando la inflación en una espiral
precios-salarios estilo década del 70» y que es «la remarcación de precios
en varios sectores» lo que está creando «una espiral precios-precios»
(Brainard es ahora la jefa del Consejo Económico Nacional de Biden). En
enero también se publicó un documento del Banco de la Reserva Federal de
Kansas City que concluye que «el crecimiento del margen de beneficio fue una
contribución importante a la inflación de 2021»: fue el responsable de hasta
la mitad de la tasa de inflación de ese año.



Este análisis parece cobrar fuerza también en Europa. Reuters informó que,
en febrero, 26 funcionarios del Banco Central Europeo (BCE) celebraron un
retiro en Finlandia para discutir el asunto. Allí estudiaron datos que
muestran un incremento acelerado de las ganancias empresariales que está
superando el crecimiento salarial, en parte gracias a la capacidad de las
empresas para fijar precios. Desde entonces, una gran cantidad de
responsables políticos europeos han hecho declaraciones públicas sobre el
tema, incluidos la presidenta del BCE, Christine Lagarde, y el gobernador
del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey.



En un discurso de marzo en Fráncfort, un miembro de la junta ejecutiva del
BCE, Fabio Panetta, advirtió que «el comportamiento oportunista por parte de
algunas empresas podría retrasar la caída de la inflación subyacente» y que
«algunos productores han estado explotando la incertidumbre» creada por la
inflación para aumentar sus márgenes de beneficio. «Deberíamos monitorear el
riesgo de que una espiral de ganancias y precios pueda hacer que la
inflación subyacente sea más rígida», instó.



Más tarde ese mismo mes, los economistas del BCE Óscar Arce, Elke Hahn y
Gerrit Koester señalaron lo inusual de que las ganancias sigan aumentando a
pesar de que la economía esté atravesando una etapa de desaceleración. Según
su análisis, los aumentos de costos que las empresas han estado enfrentando
para fabricar sus productos «han facilitado que aumenten sus márgenes de
ganancias, ya que han hecho más difícil saber si la suba de precios es
causada por costos más altos o por márgenes mayores». El trío concluyó que
«el efecto de las ganancias sobre la presión inflacionaria está siendo
excepcional desde una perspectiva histórica».



Esto parece ser reconocido en todo el Viejo Continente. Las autoridades de
los bancos centrales de Polonia, Hungría y República Checa señalaron en
enero los mismos puntos que los tres funcionarios del BCE, y advirtieron que
«los aumentos de precios han excedido los aumentos de costos en varios
sectores» y han contribuido a la inflación, al tiempo que prometieron estar
atentos a una «espiral de ganancias inflacionaria».



Incluso algunos economistas de bancos de inversión privados están haciendo
sonar la alarma. «La inflación actual es más un producto de las ganancias
que de los salarios», escribió en noviembre el economista jefe de UBS Global
Wealth Management, Paul Donovan, quien acusó a las empresas de «aprovecharse
de las circunstancias para expandir sus márgenes de ganancia». En abril,
Albert Edwards, estratega global de Société Générale, el tercer banco más
grande de Francia, manifestó su incredulidad ante las formas «sin
precedentes» en que las grandes empresas han usado las perturbaciones
inflacionarias de los últimos años como una «excusa» para acumular «márgenes
de beneficio por encima de lo normal». Edwards señaló en su blog que es
necesaria una política de control de precios y advirtió, en un análisis que
fue replicado por la revista Fortune, que este comportamiento de las grandes
compañías, junto con el hecho de que los trabajadores estén pagando por
estos excesos, podría «avivar el malestar social» y conducir al «fin del
capitalismo».



En abril y mayo del año pasado, los senadores demócratas estadounidenses
Bernie Sanders y Elizabeth Warren presentaron proyectos de ley para contener
los aumentos de precios y recuperar parte de las ganancias empresariales
obtenidas a través de estos. Sin embargo, el tabú que rodea este tema ha
llevado a que los proyectos de Sanders y Warren no hayan prosperado. En
cambio, el banco central de Estados Unidos persiste en una estrategia de
guerra antisalarial y suba de las tasas de interés que llevará al país a la
recesión, según reconocen sus propios economistas en las minutas de una
reunión oficial celebrada en marzo y que fueron publicadas recientemente en
su sitio web.



* Branko Marcetic es redactor de Jacobin y autor de Yesterday's Man: The
Case Against Joe Biden. Vive en Chicago, Illinois.



(Publicado originalmente en Jacobin, 16-4-2023:
https://jacobin.com/2023/04/greedflation-inflation-price-gouging-corporate-p
rofits-central-banks-economists)

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