[Laredviene] Documento elaborado por ASPBAE para la Conferencia Regional de Asia y el Pacífico
LA RED VA
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Jue Oct 30 10:28:50 GMT+2 2008
Hacer cumplir el derecho a la educación de
personas adultas: aquello con lo cual la UNESCO y
sus Estados Miembros necesitan comprometerse
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Traducción español y portugués - ICAE
Documento elaborado por ASPBAE para la
Conferencia Regional de Asia y el Pacífico
Preparatoria de CONFINTEA VI, Seúl, República de Corea, 6.8 de octubre, 2008.
‘La revisión de la situación mundial de la
educación y el aprendizaje de personas adultas…
ha revelado una regresión inquietante en el área
y una disminución en los fondos públicos para la
educación y el aprendizaje de personas adultas
aún cuando la meta mínima de alfabetización
establecida en Dakar sea alcanzable. La ayuda de
diversas agencias internacionales como también de
parte de gobiernos nacionales se ha concentrado
en la educación básica formal de niños en
detrimento y descuidando la educación y el aprendizaje de personas adultas.’
- Documento de la Revisión de Medio Término de CONFINTEA V
B. El derecho de las personas adultas a aprender
Desde la Declaración Universal de Derechos
Humanos de 1948, el derecho a la educación ha
sido aprobado y ratificado por lo menos una vez
cada diez años. Un tiempo después, la
alfabetización y aprendizaje de los adultos
fueron objeto de una focalización específica. En
1975, la Declaración de Persépolis claramente
reconoció a la Alfabetización como un derecho y
en 1981, la CEDAW reafirmó los derechos de las
personas adultas a la alfabetización. El
reconocimiento gradual de la educación y
aprendizaje de las personas adultas como un
derecho se reforzó en la Declaración de París de
1985 (CONFINTEA IV) que recalcó el “derecho a
aprender”. Basada en ello, la Declaración de
Hamburgo sobre el Aprendizaje de Personas Adultas
construyó su afirmación de que la educación de
personas adultas es ‘más que un derecho humano,
es la clave para el siglo XXI’ (CONFINTEA V).
El Marco de Acción de Dakar del año 2000, que
afirmó la meta de “Educación para Todos” de
Jomtiem en 1990, definió las metas específicas
para la alfabetización y educación de las
personas adultas: los Objetivos 3 y 4 están
dirigidos a las necesidades de aprendizaje de los
jóvenes y de los adultos y se comprometen a una
mejora de la alfabetización de personas adultas
del orden del 50% para el año 2015.
A pesar de los mencionados compromisos, la brecha
entre la retórica y la acción, entre las elevadas
promesas y los logros reales para asegurar una
educación para todos y todas y el derecho a
aprender a lo largo de toda la vida continúa siendo vasta.
B. Asia y el Pacífico Sur: el caso de la educación de personas adultas
En los países en desarrollo de la región, decenas
de millones de personas adultas aún luchan para
solamente acceder a la alfabetización, los
cimientos básicos del aprendizaje. El Informe de
Seguimiento de la EPT en el Mundo 2008 (GMR)
describe el alcance sorprendente del
analfabetismo, la primera barrera para el aprendizaje:
· El analfabetismo en las personas adultas recibe
una mínima atención política y permanece como una
deshonra global, manteniendo a una de cada cinco
personas adultas y una de cada cuatro mujeres, al margen de la sociedad.
· En el mundo, 774 millones de personas adultas
carecen de las habilidades básicas de
alfabetización, según lo constatado por métodos
convencionales (self-reporting). Casi la mitad de
la referida cantidad reside en el sur y en el
oeste de Asia. La medición exacta de las
habilidades de alfabetización aumentaría en forma
significativa la estimación del número de
personas adultas a quines se les ha negado el derecho a la alfabetización.
· De los 101 países que se encuentran lejos de
lograr la “alfabetización universal”, 72 no
lograrán reducir la mitad de sus niveles de analfabetismo para el año 2015.
· Durante la pasada década la mayor parte de los
países han realizado escasos avances en la
reducción del número absoluto de personas adultas
analfabetas (en el Sur y Oeste de Asia, el número
de personas analfabetas disminuyó en un escaso 0.3% desde 1990).
· Más de las tres cuartas partes de las personas
analfabetas del mundo residen en 15 países,
incluyendo ocho de los nueve países de mayor
población (E-9), cinco de los cuales se
encuentran en Asia. El sur y oeste de Asia poseen
los índices de alfabetización más bajos del mundo
(59%). En la mayoría de los quince países
mencionados, los índices de alfabetización en
adultos han mejorado en el período 1985-1994
aunque el continuo crecimiento de la población se
traduce en aumentos de los números absolutos de
personas analfabetas en varios países.
Estas cifras, por terribles que sean, no logran
captar en su totalidad la pérdida masiva de
potencial humano que acarrea el analfabetismo, o
el aporte que podría significar para el mundo,
que podría abrirse asegurando el aprendizaje como un derecho humano básico.
Aún desde un punto de vista estrictamente
económico, los beneficios de una educación de
personas adultas justifican la inversión. Los
niveles de retorno de la inversión en educación
para la alfabetización fueron analizados en
proyectos del Banco Mundial. En Indonesia en
1986, el nivel individual de retorno de la
inversión estuvo en el entorno del 25 por ciento.
En Bangladesh en 2001, el nivel privado de
retorno se estimó en un 37 por ciento. Agreguemos
a esto los retornos sociales asociados a una
conciencia política expandida, reflexión crítica
y ciudadanía responsable: promover la educación
de adultos se torna incuestionable.
El examen del valor agregado de la educación de
adultos en torno a los objetivos desarrollo
prueba que se trata del nexo que une a todas las
Metas de Desarrollo del Milenio (ODM) y sin el
cual ningún desarrollo sustentable es posible.
Cómo contribuyen los Programas de Alfabetización de Personas Adultas en los ODM
ODM 1- Erradicar la pobreza extrema y el hambre
Cuando la alfabetización de personas adultas es
un elemento integral de los programas de
capacitación para las habilidades, permite que
minorías significativas de educandos -20 a 30%-
eleven su nivel de su productividad.
ODM 2 Enseñanza primaria universal
Entre un 60 a un 70% de la gente que participa,
principalmente mujeres, en clases de
alfabetización, son más proclives a enviar y
mantener a sus hijos e hijas en la escuela así como a monitorear su progreso.
ODM 3: Promover la igualdad entre los sexos y el empoderamiento de la mujer
Entre un 30 a un 40% de las mujeres que reciben
educación en alfabetización desarrollan una mayor
confianza para ayudar en la toma de decisiones
familiares y para participar en asuntos públicos locales.
ODM 4: Reducir la mortalidad infantil y ODM 5: Mejorar la salud materna
Las madres analfabetas enfrentan una mayor
mortalidad infantil. Entre un 20 a un 30% de las
participantes muestran una mayor probabilidad de
mejorar las prácticas nutricionales y de salubridad de sus familias.
ODM 7: Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente.
Entre un 30 a un 40% de los participantes de la
educación en alfabetización desarrollan una mayor
conciencia de la necesidad de proteger el medio
ambiente y el deseo de actuar para ello.
Fuente: Adaptación de DFID’s Literacy Update, agosto 2008.
La educación en general, y la educación de
personas adultas en particular, pueden brindar a
las personas las facultades, habilidades, la toma
de conciencia y las aptitudes creativas
necesarias para hacer frente y transformar sus
condiciones de vida. Permite a la gente ejercitar
de la mejor manera y llevar adelante sus otros
derechos. La educación de personas adultas es una
herramienta para el empoderamiento, un medio
poderoso para ganarle a la pobreza. Esto adquiere
un significado especial cuando nos enfrentamos a
los desafíos abrumadores en el desarrollo de la región Asia y el Pacífico.:
§ 641 millones de personas en Asia y el Pacífico
viven en la pobreza extrema, representando a más
del 60% de las personas pobres del mundo.
§ Asia hizo un gran adelanto en el combate contra
el hambre en la década de 1990, pero a pesar de
la marcada mejora en la condición nutricional de
niños y niñas, la región todavía posee el
predominio más alto de niños/as con peso insuficiente en todo el mundo.
§ Si bien Asia ha experimentado un rápido
crecimiento económico en la última década, el
crecimiento de la desigualdad, que empuja a más
gente a colocarse debajo de la línea de la
pobreza, también ha sido proporcional.
§ Cerca del 80% de la población mundial que vive
en áreas rurales sin servicios básicos de salud y
saneamiento se encuentra en Asia y el Pacífico;
más que el 60% en áreas urbanas.
§ La reciente crisis alimentaria- un aumento sin
precedentes en los costos de los alimentos en
todo el mundo- amenaza con erosionar los logros
en la lucha contra la pobreza. El Banco Mundial
estima que los aumentos de precios van a llevar a
otros 100 millones de personas o más a una
profunda pobreza representando siete años
perdidos en la lucha contra la pobreza.
§ Las tasas de analfabetismo son las más altas en
los países con mayor pobreza, un vínculo que se
observa aun a nivel de hogares. Más generalmente,
por varias razones sociales, culturales o
políticas, ciertas poblaciones migrantes, grupos
indígenas y gente con discapacidades están
sujetas a un acceso reducido a la educación
formal y a los programas de alfabetización.
El cambio climático, que se manifiesta en
desastres naturales erráticos y gradualmente cada
vez más devastadores, como tsunamis,
inundaciones, sequías, impactan con más fuerza sobre la gente pobre.
Las luchas étnicas, las guerras y el
fundamentalismo comunitario y religioso
continuaron caracterizando la naturaleza del
conflicto y la violencia en la región, cobrando
vidas y dañando profundamente la trama social en
un gran número de países de Asia y el Pacífico.
Las mujeres llevan una carga
desproporcionadamente más alta en la pobreza de
la región, la globalización amplía esa brecha, y
las mujeres pierden trabajos, beneficios y
derechos. Las violaciones sexuales se multiplican
y las mujeres y las niñas se convierten en el
objetivo último y más íntimo de las conquistas de
la guerra; mientras tanto persiste la violencia
doméstica a lo largo de toda la vida, con el
beneplácito de prácticas y leyes consuetudinarias
que surgen de las identidades religiosas y otras.
No causa sorpresa por tanto que la educación
continúe siendo menos accesible para mujeres y
niñas, y promueva un sistema de valores que les
confiere un estatus bajo y devalúe el trabajo y
los aportes de las mujeres, no solo en sus
hogares sino también en el desarrollo.
Las mujeres y los hombres jóvenes representan
algunos de los activos más grandes del mundo y
constituyen los cimientos para el desarrollo
futuro. Y sin embargo, cientos de millones de
jóvenes son frustrados en su capacidad para
desarrollar su pleno potencial ya que quedan
sumergidos en la pobreza, privándoselos de una
vida digna con libertades fundamentales. El
Informe Mundial sobre la Juventud del año 2005
estimaba que casi 515 millones de jóvenes, cerca
del 45% de todos los jóvenes, viven con menos de
US$ 2 diarios. El Sur de Asia posee el mayor
número de jóvenes que viven bajo esta línea de
pobreza. Cerca de 88.2 millones de mujeres y
hombres jóvenes en todo el mundo están
desempleados, lo que constituye el 47% de los
185.9 millones de personas desempleadas en todo
el mundo (OIT 2006). Las mujeres jóvenes
enfrentan dificultades adicionales ya que es más
probable que se las confine a los trabajos menos
protegidos y peor pagados. La juventud indígena,
careciendo de oportunidades en sus propios
territorios, también debe enfrentar a
vulnerabilidades específicas al momento de buscar empleo en otras áreas.
Invertir en los y las jóvenes a través de la
alfabetización, la educación, el aprendizaje de
jóvenes y las habilidades para la subsistencia
otorga medios poderosos para luchar contra la
pobreza, empoderar a la juventud, especialmente a
las mujeres jóvenes y a las adolescentes, para
que puedan tomar el control de sus propias vidas
y tomen decisiones informadas, y para que
desarrollen una ciudadanía activa y socialmente responsable.
C. Cuatro ángulos de un marco de trabajo holístico y colaborativo
Durante la evaluación de Medio Término de
CONFINTEA V en el año 2003, ASPBAE y las
organizaciones de la sociedad civil de Asia y el
Pacífico acometieron contra el estado de las
políticas y prácticas de educación y observaron lo siguiente:
La Educación de Personas Adultas:
? Tiene bajo estatus y baja prioridad
? Recibe financiación deficiente
? Está definida de forma estrecha
? Es de mala calidad
? Es responsabilidad de todos por lo tanto de nadie
? Sufre escasez de información y análisis
Fuente: Asia Pacific Civil Society Perspectives
on Progress in Implementing CONFINTEA 5: A Discussion Paper, ASPBAE 2003
Si bien algunas medidas relacionadas con la EPT y
la Década de la Alfabetización de la ONU
impulsado en cierta medida a que se prestara
atención a las políticas, específicamente a la
alfabetización de personas adultas (objetivo 4 de
la EPT) a nivel mundial, la mayoría de los
informes nacionales indican que las observaciones
de las OSCs realizadas cinco años atrás todavía continúan vigentes.
¿Qué podría generar un cambio decisivo para
asegurar de una vez por todas el derecho de las
personas adultas al aprendizaje a lo largo de toda la vida?
1. Mecanismos de políticas y mecanismos
institucionales: reflejando el compromiso y el deber de rendir cuentas.
El consenso global sobre los Objetivos de
Desarrollo del Milenio llevó a muchos gobiernos y
organizaciones donantes a reducir la agenda más
amplia de la EPT al objetivo de Enseñanza
Primaria Universal (EPU). Muchos gobiernos
nacionales y organizaciones donantes han
caracterizado a la educación primaria como el
vehículo más eficiente para asegurar la educación
para todos y todas, contraviniendo el supuesto
medular detrás de los seis objetivos de la ETP
según el cual los objetivos son indivisibles y se
deben perseguir de manera holística a partir de
un enfoque que tome en cuenta múltiples ángulos.
Si bien la alfabetización de personas adultas la
cual tiene un objetivo cuantitativo definido
entre los objetivos de la EPT- atrajo escasa
atención de las políticas, el Objetivo 3 sobre
programas de habilidades para la subsistencia y
aprendizaje de personas adultas casi no figuró en
el discurso de las políticas.
UNESCO buscó enfocar la atención en la
importancia de la educación y el aprendizaje de
personas adultas a nivel global dentro del marco
de los procesos de la ETP, de la Década de
Naciones Unidas para la Alfabetización, la
Iniciativa de Alfabetización para el
Empoderamiento (LIFE), la Década de Naciones
Unidas para el Desarrollo Sostenible, y CONFINTEA
por ejemplo, pero la realidad actual nos dice que
la noción de aprendizaje a lo largo de toda la
vida como marco de referencia operacional y de
políticas tiene aún que encontrar aceptación e
informar sobre la práctica y la prioridad
política, tanto a nivel global como nacional. El
valor de la alfabetización y el aprendizaje de
personas adultas para terminar de forma decisiva
con la pobreza y construir un futuro sustentable
debe ser entendido y aceptado ampliamente. Este
es un desafío que CONFINTEA VI debe tomar de manera más enérgica.
Bajo estas circunstancias, ASPBAE insta a que:
§ Los gobiernos se comprometan a colocar, allí
donde no exista, una legislación y políticas
nacionales de educación de personas adultas que
garanticen el derecho de todas las personas
adultas a la alfabetización y a la educación
dentro del marco del aprendizaje a lo largo de
toda la vida; donde sea necesario, los gobiernos
deberían ser apoyados en sus esfuerzos para
fortalecer su base legislativa y de políticas en
torno al aprendizaje a lo largo de toda la vida.
§ Los gobiernos se comprometan a desarrollar
planes y objetivos de alfabetización y educación
de personas adultas como parte de sus planes en
torno a la EPT y la educación en todos los
sectores, y de los planes generales de los
gobiernos para erradicar la pobreza. Estos planes
deben conllevar cálculos exactos de los costos y recibir plenos recursos.
§ Se acorde un espacio legítimo a las OSCs para
la participación en los procesos de las políticas
a fin de promover la educación de personas
adultas de forma verdaderamente colaborativa.
§ Se convoque a las estructuras nacionales de
todas las partes interesadas (stakeholders),
involucrando a todos los ministerios
gubernamentales relevantes, a donantes, OSCs,
educandos, facilitadores de educación de personas
adultas, departamentos universitarios, el sector
privado, con el objetivo de movilizar el apoyo
político y público necesario para sostener la
alfabetización y la educación de personas adultas
en el marco del aprendizaje a lo largo de toda la vida.
§ UNESCO realice máximos esfuerzos para lograr
obtener coherencia y coordinación entre las
diversas iniciativas DNUA (UNLD), LIFE y
CONFINTEA a fin de lograr una sinergia, con el
objetivo de que éstas brinden argumentos
poderosos a favor de la alfabetización y la
educación de personas adultas en el marco de la
ETP y los ODMs, y sus respectivos procesos (por
ejemplo, IVR, Grupo de Alto Nivel, Cumbres sobre los ODMs).
§ En vista de que los ODMs son las metas que
mayor compromiso generan, UNESCO lidere los
esfuerzos a favor de que se incluyan tasas de
alfabetización de personas adultas (y no sólo de
jóvenes) como uno de los indicadores medulares a
ser monitoreados en relación al Objetivo 1 de
reducir a la mitad la pobreza en el mundo.
2. Valoración, monitoreo y evaluación:
herramientas poderosas en el kit de los encargados de formular políticas
El desarrollar políticas justas e inclusivas y
traducirlas a programas eficientes es difícil, si
no imposible, sin tener una valoración exacta de
la realidad del terreno. Un aspecto indicativo de
la baja prioridad que se otorga a la educación de
personas adultas en la mayoría de los países es
que la base de datos y estadísticas para este
sector es sumamente pobre. Existe escasa
información sobre la oferta y la demanda en
relación al aprendizaje de personas adultas, por
ejemplo, el número de educandos adultos que
participan en actividades relativas al
aprendizaje de personas adultas, su perfil
demográfico y socio-económico, o sus logros y
necesidades diferenciadas de aprendizaje. La
escala y calidad del suministro de educación de
personas adultas de parte de los diferentes
ministerios gubernamentales y de parte de actores
no estatales que trabajan en el campo de la
educación de personas adultas, como ser OSCs,
ONGs, sindictos, organizaciones empresariales y
de negocios- aún permanece en gran parte sin
estudiarse. Monitorear la calidad y conocer los
resultados y logros de las actividades relativas
a educación y aprendizaje de personas adultas es
fundamental para asegurar un aprendizaje de alta
calidad. Asimismo, lo anteriormente mencionado es
igualmente importante al momento de la
certificación y la acreditación de las
actividades de aprendizaje, ayudando a allanar el
camino entre los sistemas de aprendizaje formal y
no formal para los educandos en los diferentes
niveles, así como para aumentar sus oportunidades laborales.
En el campo de la alfabetización de personas
adultas, la valoración es dominada por
instrumentos indirectos y poco elaborados tal
como el método del auto-informe (self-reporting),
el cual casi invariablemente exagera los niveles
de alfabetización. Esto por lo tanto distorsiona
el grado de desafío y diluye la debida prioridad.
Además, existen lagunas evidentes en los datos de
algunos países que constituyen obstáculos para
una formulación efectiva de políticas (la escasez
de los datos sobre alfabetización en 12 de los 15
países del Pacífico es testimonio del terrible
estado en que se encuentran la valoración, el
monitoreo y la evaluación de la alfabetización).
Aun en aquellos casos donde existe información
disponible, se diluye casi invariablemente la
magnitud del problema. Por ejemplo, en Papua
Nueva Guinea la tasa oficial de alfabetización
era de 52% en el 2005, mientras que una
valoración exacta llevada a cabo por el
Observatorio de Educación de ASPBAE revela que
solo el 15% está alfabetizado y el 39,4% está semi-alfabetizado.
Aun cuando se lleven a cabo encuestas sobre
alfabetización, su frecuencia es tan baja que es
difícil encontrar información reciente. El costo
prohibitivo de las encuestas sobre alfabetización
se cita como la razón de lo esporádico de este
emprendimiento, sin embargo la coordinación y
sincronización entre varias encuestas de hogar
pueden ayudar a acumular la información necesaria
dentro de presupuestos razonables.
Bajo estas circunstancias, ASPABE insta a que:
§ Los gobiernos se comprometan a establecer
mecanismos creíbles, relevantes y más oportunos
para la recolección de datos y para una
valoración apropiada de la alfabetización de
personas adultas, cubriendo las diversas
necesidades y contextos de aprendizaje, con la
plena participación de todas las partes
interesadas (stakeholders). Se insta a la
comunidad internacional a apoyar plenamente estos
esfuerzos financieramente, brindando también un
apoyo orientado a la demanda, basado en el
contexto y la construcción de las capacidades.
§ CONFINTEA VI marque el ritmo de un monitoreo
firme y efectivo de la educación de personas
adultas mediante la creación de un mecanismo de
monitoreo global sobre las políticas de educación
de personas adultas, interactuando y
complementando los mecanismos existentes de
monitoreo global tal como el Informe de
Seguimiento de la ETP en el Mundo, y apuntando
activamente a la ETP, los ODMs y otros procesos
que experimentan las políticas de educación a
nivel de región a fin de prestar a la
alfabetización y la educación de personas adultas
la atención que se merecen. El Informe Global
sobre Aprendizaje y Educación de Personas Adultas
(GRALE), el cual será presentado en CONFINTEA VI,
debería formar parte de un mecanismo sistemático
existente de monitoreo y seguimiento a la
implementación de los compromisos asumidos en CONFINTEA VI.
§ Se lleve a cabo una Revisión de Medio Término
de CONFINTEA VI que sea sustancial, la cual
coincidiría con el plazo de la ETP y los ODMs en el año 2015.
3. Financiamiento: fondos concretos para respaldar los compromisos asumidos
En 1997 CONFINTEA V reiteró el llamado a los
gobiernos a invertir el 6% de su PBI en
educación, y a destinar una porción equitativa de
estos fondos a la educación de personas adultas.
En la región de Asia y el Pacífico muy pocos
países cumplieron con este punto de referencia en
la asignación presupuestaria para la educación- y
como consecuencia la provisión de educación sufre
profundamente. A pesar del número abrumador de
analfabetos adultos, la inversión estatal en
programas de alfabetización ha caído abruptamente
durante las dos últimas décadas. En muchos países
la inversión en alfabetización de personas
adultas constituye aproximadamente el 1% o aún
menos de los presupuestos de educación.
La “Iniciativa de la Vía Rápida” (IVR) para
educación, el único mecanismo multi-lateral
financiado para alcanzar las metas de la ETP se
focaliza exclusivamente en los objetivos de la
EPU de la EPT. Si bien la IVR declara que no se
encuentra renuente a apoyar a la alfabetización
de personas adultas siempre que esté considerada
dentro de los planes generales de educación, la
ausencia de una referencia a la alfabetización de
personas adultas en las pautas de evaluación de
la IVR está enviando una señal a los gobiernos,
haciéndoles entrever que la alfabetización de
personas adultas no entra en las prioridades de financiamiento.
Se utilizan muchos mitos para justificar una
inversión pobre en la alfabetización de personas
adultas: se argumenta que las tasas de
alfabetización se van a elevar automáticamente en
cuanto las generaciones más viejas y con poca
educación vayan pasando, siendo reemplazadas por
las generaciones que les suceden y que se han
visto beneficiadas por la Enseñanza Primaria
Universal. Este enfoque tiene defectos en muchos
puntos: manifiesta un optimismo excesivo en las
proyecciones de la EPU. Aun en sistemas de
educación primaria con mejores desempeños, un
número importante de niños y niñas en la mayoría
los más pobres y vulnerables- abandonan la
escuela antes de siquiera haber adquirido las
habilidades funcionales de la alfabetización. Y
con una educación de muy mala calidad, el ir a la
escuela tampoco garantiza la alfabetización. Más
aún, esperar que la EPU elimine el analfabetismo
significa esperar por décadas antes que las
personas adultas se alfabeticen y que los adultos
analfabetos que existen se dirijan a la
extinción. Esto es una grave violación de los
derechos de cientos de millones de personas
adultas y representa un costo inaceptable para la sociedad.
Otro mito común, pero sin fundamentos, que
alimenta a la escasísima inversión es que los
programas de alfabetización de personas adultas
son una pérdida de los pocos recursos que tiene
porque no brinda habilidades sostenibles y el
retorno de la inversión es mucho más bajo
comparado con la enseñanza primaria. La evidencia
que surge de la investigación apunta a lo
contrario. Las personas adultas que pasan un año
en un curso de educación básica tienen un mejor
desempeño que los niños y niñas de 3er. y 4º
grado en los exámenes estandarizados. Por lo
tanto, los costos de la educación básica
parecerían ser efectivos, dependiendo de los
costos relativos (Oxenham y Aoki, citados en el GMR ’06 de la ETP).
Se precisan inversiones financieras importantes
para satisfacer las necesidades básicas de
aprendizaje diversas y complejas de la región y
para asegurar el derecho a la educación de todas
y todos los ciudadanos. Una revisión de los datos
sobre la asignación de fondos a la alfabetización
de personas adultas de parte de los gobiernos,
que figuran en los informes nacionales para
CONFINTEA VI (allí donde se encuentran
disponibles), revela enormes brechas entre los
recursos que actualmente se invierten en
alfabetización de personas adultas y los costos
mínimos que se requieren para alcanzar el
Objetivo 4 de la ETP para el 2015. Éstos tendrán
claramente que generarse internamente a través de
un incremento de la inversión del Estado en
alfabetización y a través de la ayuda externa.
Para tal fin, ASPBAE insta a que-
§ Se acuerden objetivos de Presupuesto y Finanzas
para la alfabetización y la educación de personas
adultas. Los gobiernos deberían destinar el 6% de
su PBI a la educación y al menos el 6% de su
Presupuesto General de Educación a la educación
de personas adultas. Allí donde fuere necesario,
se debería destinar al menos la mitad de ése (3%
del presupuesto nacional de educación) a los
programas de alfabetización de personas adultas.
§ Se tenga en cuenta la indivisibilidad de los
objetivos de la ETP al momento de destinar los recursos.
§ Se incremente la AOD para la alfabetización y
la educación de personas adultas en el marco de
las metas y los objetivos de la ETP. Los donantes
deberían movilizar los recursos de acuerdo a los
estándares indicativos: por lo menos 15% de la
AOD debería asignarse a la educación; con al
menos 60% del mismo destinado a la educación
básica, incluyendo programas de alfabetización de
personas adultas y habilidades para la
subsistencia para personas jóvenes y adultas. La
asistencia debería ser más receptiva,
transparente, participativa y libre de ataduras-
sin condicionalidades. La Iniciativa de la Vía
Rápida de la ETP debería incluir componentes de
educación y alfabetización de personas adultas, y
asegurar una entrega eficiente y ágil del apoyo financiero.
4. Educación de personas adultas de calidad:
transformando las políticas en acción
En Asia y el Pacífico, varias valoraciones de los
programas de alfabetización de personas adultas
han demostrado que la mala calidad de los
programas de alfabetización de personas adultas
desmotivan la participación sostenida de adultos
en los programas de alfabetización y educación de
personas adultas en curso. Las y los educadores
de personas adultas de la región típicamente
tienen bajos sueldos y reciben una mala
capacitación. Las oportunidades limitadas para el
desarrollo de un equipo y una baja compensación
no brindan incentivos para una enseñanza
sostenida, de calidad. Los cálculos que se
realizan acerca de los costos por estudiante son
generalmente sumamente bajos, ya que
frecuentemente se hacen conjeturas sobre la base
de la dependencia de “voluntarios” y
contribuciones de la comunidad , y sobre la
lógica de que los sistemas no formales,
particularmente los de personas adultas, no
requieren infraestructura tal como edificios y
otros equipamientos y materiales que se
consideran necesarios para la escolarización
formal (aunque éstos están también siendo
reducidos a una estructura mínima). Los planes de
estudio de la alfabetización y educación
post-alfabetización son frecuentemente
irrelevantes para las muy diversas realidades y
contextos de los diferentes educandos, son
aburridos y los materiales para tales programas
son habitualmente de mala calidad.
Si bien el foco supuestamente está puesto en las
y los educandos, en la realidad los programas de
alfabetización de personas adultas pierden su
credibilidad social ya que los educandos no
encuentran que ese paquete sea relevante para sus
vidas. Aquellas personas que completan los cursos
tampoco encuentran que sus vidas se transformen
tal como se les había prometido. Hacen falta
materiales creativos, atractivos y relevantes
para motivar a continuar con el aprendizaje y con
un hábito de lectura sostenido. La
infraestructura de alfabetización y educación
vinculada a las necesidades de la gente a lo
largo de sus vidas centros comunitarios de
aprendizaje, bibliotecas y salas de lectura-
continúan estando ausentes en gran medida.
El sub-empleo invisible basado en una
incongruencia de habilidades ha ido penetrando
lentamente en la región. El porcentaje de empleo
vulnerable en el Sur de Asia es aún el más alto
del mundo (más del 70%), pero no se ha prestado
la merecida atención a programas de aprendizaje
de calidad que mitiguen esta situación. Se busca
una capacitación vocacional en torno a los
intereses y demandas de la industria y de los
intereses corporativos nacionales y
transnacionales en vez de hacerlo en torno al
desarrollo sustentable y los sistemas de medios
de subsistencia para las y los ciudadanos.
Las oportunidades para la educación y el
aprendizaje de personas adultas que sirvan para
promover el pensamiento crítico, la comprensión
de los derechos humanos, la tolerancia, la
conciencia social, una mayor conciencia y
responsabilidad cívicas son exiguas. Y esto pasa
a pesar de la creciente conciencia de que los
sistemas económicos no pueden sostenerse a menos
que se asegure la paz y una buena gobernanza en base a la justicia.
Bajo el peso de todos estos defectos, los
programas mal diseñados perpetúan los mitos de la
futilidad de la educación de personas adultas y
crean un círculo vicioso, donde se formulan
políticas miopes a través de valoraciones
defectuosas, las cuales a su vez conducen a
programas con financiación inadecuada y que no
responden a las necesidades de la gente.
En este contexto, ASPBAE hace un llamado para que:
§ Los gobiernos se comprometan a colocar
programas de alfabetización y educación de
personas adultas de buena calidad. Los Puntos de
Referencia Internacionales sobre la
Alfabetización de Personas Adultas (Anexo 1) de
la Campaña Mundial de Educación (CME) y ActionAid
avalados por los representantes de los gobiernos,
OSCs y donantes que participaron en el Taller de
Alto Nivel sobre Alfabetización de Personas
Adultas en Abuja en el año 2007 brindan un punto
de arranque muy útil para establecer estándares
de calidad en la alfabetización de adultos. Éstos
deben ser avalados por CONFINTEA VI.
§ Los gobiernos y la comunidad internacional
apuntalen las inversiones en investigación, becas
y desarrollo profesional en educación de personas
adultas. Las universidades y los institutos de
enseñanza superior deberían ser contrapartes
plenas y responsables, compartiendo sus
competencias definidas y sustanciales con las
comunidades de educación de personas adultas, las
organizaciones no gubernamentales, las entidades
públicas y privadas, la UNESCO y otras
organizaciones intergubernamentales en la plena
implementación del aprendizaje a lo largo de toda la vida.
§ Los gobiernos se comprometan a sostener fuertes
mecanismos de coordinación inter-agencias a nivel
nacional para la planificación, implementación y
monitoreo de programas de educación de personas
adultas y de aprendizaje de personas adultas de
calidad. Las OSCs deberían estar bien
representadas en estos espacios y deberían tener
los suficientes recursos como para jugar su papel
como contrapartes plenamente funcionales.
§ Los gobiernos lleven a cabo una “Auditoría
sobre la Alfabetización” y aseguren que todas las
transacciones y comunicaciones oficiales sean
simplificadas a fin de evitar la exclusión de las
poblaciones semi-alfabetizadas, atendiendo al
mismo tiempo la mejora de sus niveles de alfabetización.
¡Hay que actuar.. aquí mismo y YA!
Para que la educación de personas adultas
realmente haga la diferencia en las vidas de
billones de personas pobres y marginadas, una
serie de proyectos pequeños, dispares,
excepcionales no va a ser suficiente. Lo que se
requiere no son “medidas a medias” ni
“oportunidades a medias”, sino un cambio
fundamental en la visión sobre educación, que
respete y valore el derecho de todas y todos
(niños, niñas, y personas adultas) a satisfacer
sus necesidades de aprendizaje, tanto básico como
a lo largo de toda la vida. Es necesario usar
esta oportunidad de encuentro en CONFINTEA VI y
aprovecharla al máximo, con el objetivo de
desarrollar acuerdos sólidos en torno a una
agenda medular para el compromiso y la acción
marcada que finalmente asegure de forma decisiva
el derecho de todas las personas a tener acceso a
las oportunidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida.
Bibliografía:
ActionAid International. 2005. Writing the
Wrongs: International Benchmarks on Adult Literacy. London: ActionAid and GCE.
ASPBAE. 2008. An Asia Pacific Citizens’ Report
Card Rating Governments’ Efforts to Achieve Education for All. Mumbai: ASPBAE.
ASPBAE. 2003. Asia Pacific Civil Society
Perspectives on Progress in Implementing CONFINTEA 5: A Discussion Paper
DFID. 2008. Adult Literacy: an update: A DFID Practice Paper. London: DFID.
ILO and FAO, Youth Employment,
http://www.fao-ilo.org/fao_ilo_youth/en/ accessed on September 30, 2008
International Food Policy Research Institute.
2007. The World’s most Deprived: Characteristics
and causes of Extreme Poverty and Hunger. Washington. IFPRI.
UNESCAP.2007. MDGS: Progress in the Asia and the Pacific 2007. Bangkok
UNESCO. 2006. Literacy for Life.: EFA Global Monitoring Report. Paris: UNESCO.
UNESCO. 2008. Education for All by 2015: Will we
make it? EFA Global Monitoring Report. Paris: UNESCO.
UNESCO Institute for Education. 2003.
Recommitting to Adult Education and Learning:
Synthesis Report of the CONFINTEA V Midterm review meeting. Bangkok: UNESCO.
Youth and United Nations, Hunger and Poverty
http://www.un.org/esa/socdev/unyin/wpayhunger.htm
ASPBAE
La Oficina de Asia y Pacífico Sur para la
Educación de Personas Adultas (Asian-South
Pacific Bureau of Adult Education ASPBAE) es una
red regional de organizaciones y personas que
trabajan en el tema de educación de personas
adultas con y a través de ONGs, organizaciones de
la comunidad, agencias gubernamentales,
universidades, sindicatos, pueblos indígenas,
organizaciones de mujeres, medios de comunicación
y otras instituciones de la sociedad civil a
través de toda Asia y el Pacífico.
Fundada en 1964, ASPBAE tiene más de 200
organizaciones miembro de 30 países. Mantienen
relaciones operativas con la UNESCO y tiene
Estatus Roster ante el ECOSOC. ASPBAE forma parte
de la Directiva de la Campaña Mundial de
Educación (CME) y el Consejo Internacional para
la Educación de Personas Adultas (ICAE).
Por comentarios a este informe y consultas : mtanvir.aspbae en gmail.com.
ANEXO 1: PUNTOS DE REFERENCIA INTERNACIONALES DE LA CME-ActionAid
1. La alfabetización tiene que ver con la
adquisición y el uso de habilidades de lectura,
escritura y cálculo matemático y, por lo tanto,
con el desarrollo de la ciudadanía activa, el
mejoramiento de la salud y los medios de
subsistencia y la igualdad de género. Las metas
de los programas de alfabetización deberían reflejar este concepto.
2. La alfabetización es un proceso continuo que
requiere aprendizajes sostenidos. No existe una
línea mágica que se cruza para pasar del
analfabetismo al alfabetismo. Todos los programas
y políticas deberían estar diseñados para
fomentar una participación continua y un
aprovechamiento progresivo, en lugar de centrarse
en una provisión puntual con un solo resultado final.
3. A los gobiernos les corresponde cumplir el
derecho a la alfabetización de las personas
adultas, ejercer liderazgo para el desarrollo de
políticas públicas y de un entorno propicio y
proveer los recursos necesarios. Ellos deben
• Velar por que exista cooperación entre los
ministerios pertinentes y vínculos con todos los
programas de desarrollo pertinentes.
• Trabajar en colaboración sistemática con organizaciones de la sociedad civil.
• Garantizar la creación de vínculos entre todos
estos organismos, especialmente a nivel local.
•Velar por la relación con asuntos de la vida de
las y los participantes, fomentando la
descentralización de presupuestos y de la toma de
decisiones sobre el currículo, los métodos y el material.
4. Es importante invertir en mecanismos continuos
de retroalimentación y evaluación,
sistematización de datos e investigación
estratégica. Todas las evaluaciones deberían
centrarse en la aplicación práctica de lo
aprendido y en el impacto sobre la ciudadanía
activa, el mejoramiento de la salud y los medios
de subsistencia y la igualdad entre los sexos.
5. Para favorecer la permanencia de los
educadores y educadoras, es importante que se les
pague por lo menos el equivalente al sueldo
mínimo de un profesor de escuela primaria, en
función del número de horas trabajadas.
(incluyendo tiempo de formación, preparación y seguimiento).
6. Los educadores deben ser preferentemente
personas locales, que reciban una formación
inicial importante. Deberán recibir una
capacitación inicial considerable y asistir,
posteriormente, a cursos de actualización
regulares. También es importante que puedan
intercambiar permanentemente ideas con otros
educadores. Los gobiernos deben establecer un
marco para el desarrollo profesional del sector
de la alfabetización de adultos, especialmente
para los formadores/ supervisores, accesible a
los educadores de todo el país (por ejemplo., por
medio de la educación a distancia).
7. La relación entre educadores y estudiantes
debería ser de al menos un educador por cada 30
estudiantes y de un capacitador o supervisor por
cada 15 grupos de estudiantes (1 a 10 en zonas
alejadas), con un mínimo de una visita de apoyo
por mes. El calendario de clases, que deberá
responder de manera flexible a las necesidades de
la vida diaria de los estudiantes, consistirá en
contactos regulares y sostenidos (p.ej. dos veces por semana
durante dos años, como mínimo).
8. En contextos multilingües, resulta importante
que en todas las etapas del proceso, los
participantes puedan escoger en qué idioma
aprender. Se debe hacer todo lo posible para
fomentar y sostener el aprendizaje bilingüe.
9. Para mantener el interés de los participantes
es fundamental utilizar una amplia gama de
métodos participativos en los procesos de
aprendizaje y temáticas relacionadas con su vida
cotidiana. Estos mismos métodos y procesos
participativos deben utilizarse en todos los
niveles de la formación de formadores y educadores.
10. Los gobiernos deben asumir la responsabilidad
de fomentar la producción y distribución de una
amplia variedad de materiales que se adapten a
las necesidades de los nuevos lectores, por
ejemplo, trabajando con casas editoriales y
productores de periódicos. Deberían equilibrar
esta tarea con financiamiento para la producción
local de materiales, especialmente por los mismos
participantes, facilitadores y capacitadores-supervisores.
11. Un programa de alfabetización de buena
calidad que respete todos estos puntos de
referencia, probablemente costará entre $US 50 y
$US 100 por participante, por año, durante un
mínimo de tres años (dos años de aprendizaje
inicial más la creación de otras oportunidades de aprendizaje para todos).
12. Los gobiernos deberían destinar al menos 3%
de su presupuesto nacional de educación a
programas de alfabetización de adultos, como los
formulados en estos puntos de referencia. A esto
podría sumársele las contribuciones adicionales
de otros ministerios (p.ej. de género / de la
mujer, de desarrollo rural, de agricultura, de
salud, etc.). Cuando el gobierno cumple con este
nivel de compromiso, los donantes internacionales
(p.ej. mediante la Iniciativa de la Vía Rápida)
deberían llenar cualquier vacío de recursos que
pudiera quedar, en concordancia con la promesa
hecha en el Foro Mundial de Educación de Dakar.
Portugês
Fazer cumprir o direito à educação de pessoas
adultas: É com isso que a UNESCO e seus Estados
Membros necessitam se comprometer.
Documento elaborado por ASPBAE para a Conferência
Regional da Ásia e do Pacífico Preparatória à
CONFINTEA VI, Seul, República da Coréia, 6 a 8 de outubro de, 2008.
'A revisão da situação mundial da educação e a
aprendizagem de pessoas adultas... tem revelado
uma regressão inquietante na área e uma
diminuição dos fundos públicos para a educação e
a aprendizagem de pessoas adultas, mesmo quando a
meta mínima estabelecida em Dakar seja atingível.
A ajuda de diversas agências internacionais, como
também por parte de governos nacionais tem sido
concentrada na educação básica formal de crianças
em detrimento e descuidando a educação e a aprendizagem de pessoas adultas.’
- Documento da Revisão de Meio Termo da CONFINTEA V
C. O direito das pessoas adultas a aprender
Desde a Declaração Universal de Direitos Humanos
de 1948, o direito à educação tem sido aprovado e
ratificado pelo menos uma vez a cada dez anos.
Algum tempo depois, a alfabetização e a
aprendizagem dos adultos foram objeto de um foco
específico. Em 1975, a Declaração de Persépolis
reconheceu claramente a Alfabetização como um
direito e em 1981, a CEDAW reafirmou os direitos
das pessoas adultas à alfabetização. O
reconhecimento gradual da educação e da
aprendizagem das pessoas adultas como um direito
foi reforçado pela Declaração de Paris de 1985
(CONFINTEA IV) que recalcou o “direito a
aprender”. Baseada nela, a declaração de Hamburgo
sobre a Aprendizagem de Pessoas Adultas construiu
sua afirmação de que a educação de pessoas
adultas é ‘mais que um direito humano, é a chave
para o século XXI’ (CONFINTEA V).
O Marco de Ação de Dakar do ano 2000, que afirmou
a meta de “Educação para Todos” de Jomtiem em
1990, definiu as metas específicas para a
alfabetização e educação das pessoas adultas: os
Objetivos 3 e 4 estão dirigidos às necessidades
de aprendizagem dos jovens e dos adultos e se
comprometem a uma melhoria da alfabetização de
pessoas adultas da ordem de 50% para o ano de 2015.
Apesar dos mencionados compromissos, continua
sendo vasta a brecha entre a retórica e a ação,
entre as elevadas promessas e as conquistas reais
para assegurar uma educação para todos e todas e
o direito a aprender ao longo de toda a vida.
B. A Ásia e o Pacífico Sul: o caso da educação de pessoas adultas
Nos países em desenvolvimento da região, dezenas
de milhões de pessoas adultas ainda lutam para
ter acesso apenas à alfabetização, aos alicerces
básicos da aprendizagem. O Informe de
Acompanhamento da EPT no Mundo 2008 (GMR)
descreve o alcance surpreendente do
analfabetismo, a primeira barreira para a aprendizagem:
· O analfabetismo nas pessoas adultas recebe uma
mínima atenção política e permanece como uma
desonra global, mantendo uma de cada cinco
pessoas adultas e uma de cada quatro mulheres, à margem da sociedade.
· No mundo, 774 milhões de pessoas adultas
carecem das habilidades básicas de alfabetização,
segundo o que foi constatado por métodos
convencionais (self-reporting). Quase a metade da
referida quantidade reside no sul e no oeste da
Ásia. A medição exata das habilidades de
alfabetização aumentaria em forma significativa a
estimativa do número de pessoas adultas às quais
se negou o direito à alfabetização.
· Dos 101 países que se encontram longe de
conseguir a “alfabetização universal”, 72 no
conseguirão reduzir à metade seus níveis de analfabetismo até o ano de 2015.
· Durante a década passada, a maior parte dos
países realizaram escassos avanços na redução do
número absoluto de pessoas adultas analfabetas
(no Sul e Oeste da Ásia, o número de pessoas
analfabetas diminuiu apenas em um escasso 0,3% desde 1990).
· Mais das três quartas partes das pessoas
analfabetas do mundo residem em 15 países,
incluindo oito dos nove países de maior população
(E-9), cinco dos quais encontram-se na Ásia. O
sul e o oeste da Ásia possuem os índices de
alfabetização mais baixos do mundo (59%). Na
maioria dos quinze países mencionados, os índices
de alfabetização em adultos melhoraram no período
1985-1994, embora o contínuo crescimento da
população se traduza em aumento dos números
absolutos de pessoas analfabetas em vários países.
Estas cifras, por terríveis que sejam, não
conseguem captar em sua totalidade a perda
massiva de potencial humano que o analfabetismo
provoca, ou o aporte que poderia significar para
o mundo, que poderia abrir-se assegurando a
aprendizagem como um direito humano básico.
Ainda de um ponto de vista estritamente
econômico, os benefícios de uma educação de
pessoas adultas justificam o investimento. Os
níveis de retorno do investimento em educação
para a alfabetização foram analisados em projetos
do Banco Mundial. Na Indonésia, em 1986, o nível
individual de retorno do investimento esteve em
torno de 25 por cento. Em Bangladesh, em 2001, o
nível privado de retorno foi estimado em
aproximadamente 37 por cento. Agreguemos a isto
os retornos sociais associados a uma consciência
política expandida, reflexão crítica e cidadania
responsável: promover a educação de adultos se torna inquestionável.
O exame do valor agregado da educação de adultos
em torno aos objetivos de desenvolvimento prova
que se trata do nexo que une todas as Metas de
Desenvolvimento do Milênio (ODM) sem o que nenhum
desenvolvimento sustentável é possível.
Como os Programas de Alfabetização de Pessoas Adultas
contribuem para os ODM
ODM 1- Erradicar a pobreza extrema e a fome
Quando a alfabetização de pessoas adultas é um
elemento integral dos programas de capacitação
para as habilidades, permite que minorias
significativas de educandos de 20% a 30%- elevem seu nível de produtividade.
ODM 2 Ensino primário universal
Entre 60% e 70% das pessoas que participam,
principalmente mulheres, das aulas de
alfabetização, são mais inclinadas a enviar e
manter seus filhos e filhas na escola, bem como monitorar seu progresso.
ODM 3: Promover a igualdade entre os sexos e o empoderamento da mulher
Entre 30% e 40% das mulheres que recebem educação
em alfabetização desenvolvem maior confiança para
ajudar na tomada de decisões familiares e para
participar em assuntos públicos locais.
ODM 4: Reduzir a mortalidade infantil e ODM 5: Melhorar a saúde materna
As mães analfabetas enfrentam uma maior
mortalidade infantil. Entre 20% e 30% das
participantes mostram uma maior probabilidade de
melhorar as práticas nutricionais e de salubridade de suas famílias.
ODM 7: Garantir a sustentabilidade do meio ambiente.
Entre 30% e 40% dos participantes da educação em
alfabetização desenvolvem uma maior consciência
da necessidade de proteger o meio ambiente e o desejo de agir para isso.
Fonte: Adaptação de DFID’s Literacy Update, agosto de 2008.
A educação, em geral, e a educação de pessoas
adultas, em particular, podem oferecer às pessoas
as faculdades, habilidades, a tomada de
consciência e as aptidões criativas necessárias
para enfrentar e transformar suas condições de
vida. Permite que as pessoas exercitem da melhor
maneira e avancem em seus outros direitos. A
educação de pessoas adultas é uma ferramenta para
o empoderamento, um meio poderoso para vencer a
pobreza. Isto adquire um significado especial
quando nos enfrentamos aos desafios esmagadores
para o desenvolvimento da região Ásia e Pacífico:
§ 641 milhões de pessoas na Ásia e no Pacífico
vivem em extrema pobreza, representando mais de
60% das pessoas pobres do mundo.
§ Na Ásia houve um grande avanço no combate à
fome na década de 1990, mas apesar da marcada
melhora na condição nutricional das crianças, a
região ainda tem a mais alta predominância de
crianças com peso insuficiente em todo o mundo.
§ Embora a Ásia tenha experimentado um rápido
crescimento econômico na última década, o
crescimento da desigualdade, que leva mais gente
a situar-se abaixo da linha de pobreza, também foi proporcional.
§ Cerca de 80% da população mundial que vive em
áreas rurais sem serviços básicos de saúde e
saneamento encontra-se na Ásia e no Pacífico; mais de 60% em áreas urbanas.
§ A recente crise alimentar um aumento sem
precedentes no custo dos alimentos em todo o
mundo ameaça desgastar as conquistas na luta
contra a pobreza. O Banco Mundial estima que os
aumentos de preços vão levar outras 100 milhões
de pessoas ou mais a uma profunda pobreza
representando sete anos perdidos na luta contra a pobreza.
§ As taxas de analfabetismo são as mais altas nos
países com maior pobreza, um vínculo que se
observa mesmo no âmbito familiar. Geralmente, por
várias razões sociais, culturais ou políticas,
certas populações migrantes, grupos indígenas e
pessoas com capacidades diminuídas estão sujeitas
a um acesso reduzido à educação formal e aos programas de alfabetização.
A mudança climática, que se manifesta em
desastres naturais erráticos e gradualmente cada
vez mais devastadores, como tsunamis, inundações,
secas, impactam com mais força a população pobre.
As lutas étnicas, as guerras e o fundamentalismo
comunitário e religioso continuaram
caracterizando a natureza do conflito e da
violência na região, cobrando vidas e danificando
profundamente a trama social em um grande número
de países da Ásia e do Pacífico.
As mulheres suportam uma carga
desproporcionalmente mais alta na pobreza da
região. A globalização amplia essa brecha e as
mulheres perdem postos de trabalho, benefícios e
direitos. As violações sexuais se multiplicam e
as mulheres e meninas se convertem no objetivo
último e mais íntimo das conquistas da guerra;
enquanto isso persiste a violência doméstica ao
longo de toda a vida, com o beneplácito de
praticas e leis consuetudinárias que surgem das
identidades religiosas e outras. Não causa
surpresa, portanto, que a educação continue sendo
menos accessível às mulheres e meninas, e promova
um sistema de valores que lhes confere um baixo
status e desvalorize o trabalho e os aportes das
mulheres, não apenas nos seus lares, mas também no desenvolvimento.
As mulheres e os homens jovens representam alguns
dos maiores ativos do mundo e constituem os
alicerces para o desenvolvimento futuro. No
entanto, centenas de milhões de jovens são
frustrados em sua capacidade para desenvolver seu
pleno potencial pois ficam submersos na pobreza,
sendo privados de uma vida digna com liberdades
fundamentais. O Informe Mundial sobre a Juventude
do ano de 2005 estimava que quase 515 milhões de
jovens, cerca de 45% de todos os jovens, vivem
com menos de US$ 2 diários. O Sul da Ásia possui
o maior número de jovens que vivem abaixo dessa
linha de pobreza. Cerca de 88.2 milhões de
mulheres e homens jovens em todo o mundo estão
desempregados, o que constitui 47% dos 185.9
milhões de pessoas desempregadas em todo o mundo
(OIT 2006). As mulheres jovens enfrentam
dificuldades adicionais, pois é mais provável que
sejam confinadas aos trabalhos menos protegidos e
mais mal pagos. A juventude indígena, carecendo
de oportunidades em seus próprios territórios,
também deve enfrentar vulnerabilidades
específicas no momento de buscar emprego em outras áreas.
Investir nos e nas jovens através da
alfabetização, da educação, da aprendizagem de
jovens e das habilidades para a subsistência,
outorga meios poderosos para lutar contra a
pobreza, empoderar a juventude, especialmente as
mulheres jovens e as adolescentes, para que
possam assumir o controle de suas próprias vidas
e tomar decisões informadas, e para que
desenvolvam uma cidadania ativa e socialmente responsável.
C. Quatro ângulos de um marco de trabalho holístico e colaborativo
Durante a avaliação de Meio Termo da CONFINTEA V
no ano de 2003, ASPBAE e as organizações da
sociedade civil da Ásia e do Pacífico investiram
contra o estado das políticas e práticas de educação e observaram o seguinte:
A Educação de Pessoas Adultas:
? Tem baixo status e baixa prioridade
? Recebe financiamento deficiente
? Está definida de forma estreita
? É de má qualidade
? É de responsabilidade de todos e portanto de ninguém
? Sofre escassez de informação e análise
Fonte: Asia Pacific Civil Society Perspectives on
Progress in Implementing CONFINTEA 5: A Discussion Paper, ASPBAE 2003
Embora algumas medidas relacionadas com a EPT e a
Década da Alfabetização da ONU tenham feito que,
até certo ponto fosse prestada atenção às
políticas, especificamente à alfabetização de
pessoas adultas (objetivo 4 da EPT) no nível
mundial, os informes nacionais, em sua maioria,
indicam que as observações das OSCs realizadas há
cinco anos ainda continuam vigentes.
O que é que poderia gerar uma mudança decisiva
para assegurar de uma vez por todas o direito as
pessoas adultas à aprendizagem ao longo de toda a vida?
1. Mecanismos de políticas e mecanismos
institucionais: refletindo o compromisso e o dever de prestar contas.
O consenso global sobre os Objetivos de
Desenvolvimento do Milênio levou muitos governos
e organizações doadoras a reduzir a agenda mais
ampla da EPT ao objetivo de Ensino Primário
Universal (EPU). Muitos governos nacionais e
organizações doadoras caracterizaram a educação
primária como o veículo mais eficiente para
assegurar a educação para todos e todas,
contrariando a suposição medular por trás dos
objetivos da EPT, segundo o qual esses objetivos
são indivisíveis e devem ser perseguidos de
maneira holística a partir de um enfoque que leve
em conta múltiplos ângulos. Embora a
alfabetização de pessoas adultas que tem um
objetivo quantitativo definido entre os objetivos
da EPT tenha atraído pouca atenção das políticas,
o Objetivo 3 sobre programas de habilidades para
a subsistência e aprendizagem de pessoas adultas
quase não apareceu no discurso das políticas.
A UNESCO buscou focalizar a atenção na
importância da educação e da aprendizagem de
pessoas adultas no nível global dentro do marco
dos processos da EPT, da Década das Nações Unidas
para a Alfabetização, da Iniciativa de
Alfabetização para o Empoderamento (LIFE), da
Década das Nações Unidas para o Desenvolvimento
Sustentável e da CONFINTEA, por exemplo, mas a
realidade atual nos diz que a noção de
aprendizagem ao longo de toda a vida como marco
de referencia operacional e de políticas ainda
tem que encontrar aceitação e informar sobre a
prática e a prioridade política, tanto no nível
global como no nacional. O valor da alfabetização
e da aprendizagem de pessoas adultas para acabar
de forma decisiva com a pobreza e construir um
futuro sustentável, deve ser entendido e aceito
amplamente. Este é um desafio que CONFINTEA VI
deve enfrentar de maneira enérgica.
Nestas circunstancias, a ASPABE insta a que:
§ Os governos se comprometam a colocar, onde não
existir, uma legislação e políticas nacionais de
educação de pessoas adultas que garantam o
direito de todas as pessoas adultas à
alfabetização e à educação no marco da
aprendizagem ao longo de toda a vida; onde for
necessário, os governos deveriam ser apoiados em
seus esforços para fortalecer sua base
legislativa e de políticas em torno à aprendizagem ao longo de toda a vida.
§ Os governos se comprometam a desenvolver planos
e objetivos de alfabetização e educação de
pessoas adultas como parte de seus planos em
relação à EPT e à educação em todos os setores, e
dos planos gerais dos governos para erradicar a
pobreza. Esses planos devem contar cálculos
exatos dos custos e receber plenos recursos.
§ Seja determinado um espaço legítimo para as
OSCs para sua participação nos processos das
políticas, a fim de promover a educação de
pessoas adultas de forma verdadeiramente colaborativa.
§ Sejam convocadas as estruturas nacionais de
todas as partes interessadas (stakeholders),
envolvendo todos os ministérios governamentais
relevantes, doadores, OSCs, educandos,
facilitadores de educação de pessoas adultas,
departamentos universitários, o setor privado,
com o objetivo de mobilizar o apoio político e
público necessário para sustentar a alfabetização
e a educação de pessoas adultas no marco da
aprendizagem ao longo de toda a vida.
§ A UNESCO realize o máximo de esforços para
conseguir obter coerência e coordenação entre as
diversas iniciativas DNUA (UNLD), LIFE e
CONFINTEA a fim de conseguir uma sinergia, com o
objetivo de que elas brindem argumentos poderosos
a favor da alfabetização e da educação de pessoas
adultas no marco da EPT e dos ODMs, e seus
respectivos processos (por exemplo, IVR, Grupo de
Alto Nível, Cúpulas sobre os ODMs).
§ Tendo em vista que os ODMs são as metas que
geram um maior compromisso, que a UNESCO lidere
os esforços a favor de que sejam incluídas taxas
de alfabetização de pessoas adultas (e não apenas
de jovens) como um dos indicadores medulares a
serem monitorados em relação ao Objetivo 1 de
reduzir à metade a pobreza no mundo.
2. Valorização, monitoramento e avaliação:
ferramentas poderosas no kit dos encarregados de formular políticas
Desenvolver políticas justas e inclusivas e
traduzi-las em programas eficientes é difícil, se
não impossível, sem ter uma avaliação exata da
realidade do terreno. Um aspecto indicativo da
baixa prioridade que se outorga à educação de
pessoas adultas na maior parte dos países é que a
base de dados e estatísticas para esse setor é
sumamente pobre. Existe pouca informação sobre a
oferta e a demanda em relação à aprendizagem de
pessoas adultas como, por exemplo, sobre o número
de educandos adultos que participam de atividades
relativas à aprendizagem de pessoas adultas, seu
perfil demográfico e sócio-econômico, ou seus
avanços e necessidades diferenciadas de
aprendizagem. Grande parte da escala e a
qualidade do fornecimento de educação de pessoas
adultas por parte dos diferentes ministérios
governamentais e por parte dos atores não
estatais que trabalham no campo da educação de
pessoas adultas, como as OSCs, ONGs, sindicatos,
organizações empresariais e de negócios ainda
permanece sem ser estudada. Monitorar a qualidade
e conhecer os resultados e avanços das atividades
relativas à educação e aprendizagem de pessoas
adultas é fundamental para assegurar uma
aprendizagem de alta qualidade. Da mesma forma, o
que foi mencionado anteriormente é igualmente
importante no momento da certificação e
credenciamento das atividades de aprendizagem,
ajudando a aplainar o caminho entre os sistemas
de aprendizagem formal e não formal para os
educandos nos diferentes níveis, bem como para
aumentar suas oportunidades de trabalho.
No campo da alfabetização de pessoas adultas, a
avaliação está dominada por instrumentos
indiretos e pouco elaborados, tal como o método
do auto-informe (self-reporting), que quase
invariavelmente exagera os níveis de
alfabetização. Portanto, isso distorce o grau de
desafio e dilui a devida prioridade. Além do
mais, existem lacunas evidentes nos dados de
alguns países que constituem obstáculos para uma
formulação efetiva de políticas (a escassez dos
dados sobre alfabetização em 12 dos 15 países do
Pacífico é testemunho do terrível estado em que
se encontram a avaliação e o monitoramento da
alfabetização). Mesmos nos casos em que existe
informação disponível, a magnitude de problema é
quase sempre diluída. Por exemplo, em Papua Nova
Guiné, a taxa oficial de alfabetização era de 52%
em 2005, enquanto que uma avaliação exata
realizada pelo observatório de Educação da ASPBAE
revela que apenas 15% estão alfabetizados e que
39,4% estão semi-alfabetizados.
Mesmo quando são realizadas enquetes sobre
alfabetização, sua freqüência é tão baixa que é
difícil encontrar informação recente. O custo
proibitivo das enquetes sobre alfabetização é
citado como a razão desse empreendimento ser tão
esporádico; no entanto, a coordenação e a
sincronização entre várias enquetes realizadas
nos domicílios podem ajudar a acumular a
informação necessária com orçamentos razoáveis.
Sob estas circunstancias, a ASPABE insta a que:
§ Os governos se comprometam a estabelecer
mecanismos com credibilidade, relevantes e mais
oportunos para a coleta de dados e para uma
avaliação apropriada da alfabetização de pessoas
adultas, cobrindo as diversas necessidades e
contextos de aprendizagem, com a plena
participação de todas as partes interessadas
(stakeholders). Pede-se que a comunidade
internacional apóie plenamente estes esforços com
financiamento, dando também um apoio orientado à
demanda, baseado no contexto e na construção das capacidades.
§ A CONFINTEA VI marque o ritmo de um
monitoramento firme e efetivo da educação de
pessoas adultas mediante a criação de um
mecanismo de monitoramento global sobre as
políticas de educação de pessoas adultas,
interagindo e complementando os mecanismos de
monitoramento global existentes, tal como o
Informe de Acompanhamento da EPT no Mundo, e
apontando efetivamente à EPT, aos ODMs e a outros
processos que experimentam as políticas de
educação na região, a fim de prestar à
alfabetização e à educação de pessoas adultas a
atenção que merecem. O Informe Global sobre
Aprendizagem e Educação de Pessoas Adultas
(GRALE), que será apresentado na CONFINTEA VI,
deveria formar parte de um mecanismo sistemático
existente de monitoramento e acompanhamento à
implementação dos compromissos assumidos na CONFINTEA VI.
§ Seja realizada uma Revisão de Meio Termo da
CONFINTEA VI que seja substancial, a qual
coincidiria com o prazo da EPT e dos ODMs no ano de 2015.
3. Financiamento: fundos concretos para respaldar os compromissos assumidos
Em 1997, a CONFINTEA V reiterou o apelo aos
governos para que investissem 6% de seu PIB em
educação e destinassem uma parte eqüitativa
desses fundos para a educação de pessoas adultas.
Na região da Ásia e do Pacífico foram
pouquíssimos os países que cumpriram com esse
ponto de referencia da destinação orçamentária
para a educação e como conseqüência a provisão de
educação sofre profundamente. Apesar do número
esmagador de analfabetos adultos, o investimento
estatal em programas de alfabetização vem caindo
abruptamente nas últimas duas décadas. Em muitos
países o investimento em alfabetização de pessoas
adultas constitui aproximadamente 1% ou até menos dos orçamentos de educação.
A “Iniciativa da Via Rápida” (IVR) para educação,
o único mecanismo multilateral financiado para
atingir as metas da EPT está focalizada
exclusivamente nos objetivos da EPU da EPT.
Embora a IVR declare que não está renitente a
apoiar a alfabetização de pessoas adultas, sempre
que esta esteja considerada dentro dos planos
gerais da educação, a ausência de uma referência
à alfabetização de pessoas adultas nas pautas de
avaliação da IVR está enviando um sinal aos
governos, fazendo com que estes entrevejam que a
alfabetização de pessoas adultas não entra nas prioridades de financiamento.
Muitos mitos são utilizados para justificar um
investimento pobre na alfabetização de pessoas
adultas; argumenta-se que as taxas de
alfabetização vão se elevar automaticamente
quando passem as gerações mais velhas e com pouca
educação, sendo substituídas pelas gerações que
as sucedem e que foram beneficiadas pelo Ensino
Primário Universal. Este enfoque é deficiente em
muitos pontos: manifesta um excessivo otimismo
nas projeções da EPU. Mesmo nos sistemas de
educação primária com melhores desempenhos, um
número importante de crianças na maioria as mais
pobres e vulneráveis abandonam a escola antes
mesmo de haver adquirido as habilidades
funcionais da alfabetização. E com uma educação
de má qualidade, o fato de ir à escola tampouco
garante a alfabetização. E mais, esperar que a
EPU elimine o analfabetismo significa esperar por
décadas até que as pessoas adultas estejam
alfabetizadas e que os adultos analfabetos que
existe caminhem para a extinção. Isso é uma grave
violação dos direitos de centenas de milhões de
pessoas adultas e representa um custo inaceitável para a sociedade.
Outro mito comum, mas sem fundamentos, que
alimenta o já muito escasso investimento, é que
os programas de alfabetização de pessoas adultas
são um desperdício dos poucos recursos que
existem, porque não oferece habilidades
sustentáveis e o retorno do investimento é muito
mais baixo comparado com a educação primária. A
evidência que surge da pesquisa aponta o
contrário. As pessoas adultas que passam um ano
em um curso de educação básica têm um melhor
desempenho que as crianças de 3º e 4 º ano nos
exames padronizados. Portanto, os custos da
educação básica pareceriam ser efetivos,
dependendo dos custos relativos (Oxenham e Aoki, citados no GMR ’06 da ETP).
São necessários investimentos importantes para
satisfazer as necessidades básicas de
aprendizagem diversas e complexas da região e
para assegurar o direito à educação de toda a
cidadania. Uma revisão dos dados sobre a
destinação de fundos para a alfabetização de
pessoas adultas por porte dos governos, que
aparecem nos informes nacionais para a CONFINTEA
VI (nos lugares em que estão disponíveis), revela
enormes brechas entre os recursos que atualmente
se investem em alfabetização de pessoas adultas e
os custos mínimos requeridos para atingir o
Objetivo 4 da ETP para 2015. Terão claramente que
ser gerados internamente através de um incremento
do investimento do Estado em alfabetização e através da ajuda externa.
Para tal fim, ASPBAE insta a que-
§ Sejam acertados objetivos de Orçamento e
Finanças para a alfabetização e a educação de
pessoas adultas. Os governos deveriam destinar 6%
de seu PIB para a educação e pelo menos 6% do seu
Orçamento Geral de Educação à educação de pessoas
adultas. Onde for necessário, dever-se-á destinar
pelo menos a metade (3% do orçamento nacional de
educação) aos programas de alfabetização de pessoas adultas.
§ Seja levada em conta a indivisibilidade dos
objetivos da ETP no momento de destinar os recursos.
§ Seja incrementada a AOD para a alfabetização e
educação de pessoas adultas no marco das metas e
objetivos da EPT. Os doadores deveriam mobilizar
os recursos de acordo com os padrões indicativos:
pelo menos 15% da AOD deveria ser destinado à
educação; com pelo menos 60% desses recursos
destinados à educação básica, incluindo programas
de alfabetização de pessoas adultas e habilidades
para a subsistência para pessoas jovens e
adultas. A assistência deveria ser mais
receptiva, transparente, participativa e livre de
ataduras- sem condicionantes. A Iniciativa da Via
Rápida da EPT deveria incluir componentes de
educação e alfabetização de pessoas adultas e
assegurar uma entrega eficiente e ágil do apoio financeiro.
4. Educação de pessoas adultas de qualidade: transformando as políticas em ação
Na Ásia e no Pacífico, várias avaliações dos
programas de alfabetização de pessoas adultas têm
demonstrado que a má qualidade desses programas
vem desmotivando a participação sustentada dos
participantes. Os educadores e as educadoras de
pessoas adultas da região são mal remuneradas e
recebem uma má capacitação. As oportunidades
limitadas para o desenvolvimento de uma equipe e
uma baixa compensação não proporcionam incentivos
para um ensino sustentado e de qualidade. Os
cálculos que são realizados sobre os custos por
estudantes são geralmente sumamente baixos, pois
freqüentemente são feitas conjecturas baseadas na
dependência de “voluntários” e contribuições da
comunidade, e na lógica de que os sistemas não
formais, particularmente os de pessoas adultas,
não requerem infra-estrutura tal como prédios e
outros equipamentos e materiais que são
considerados necessários para a escolarização
formal. (mesmos que estes também estejam sendo
reduzidos a uma estrutura mínima). Os planos de
estudo da alfabetização e da educação
pós-alfabetização são freqüentemente irrelevantes
para as muito diversas realidades e contextos dos
diferentes educandos, são enfadonhos e os
materiais para tais programas são habitualmente de má qualidade.
Embora supostamente o foco esteja posto nas
educandas e nos educandos, na realidade os
programas de alfabetização de pessoas adultas
perdem sua credibilidade social porque elas não
encontram que esse pacote seja relevante para
suas vidas. As pessoas que completam os cursos
tampouco sentem que suas vidas possam se
transformar tal como lhes foi prometido. Faltam
materiais criativos, atraentes e relevantes para
motivar a continuar com a aprendizagem e com um
hábito sustentado de leitura. A infra-estrutura
de alfabetização e educação vinculada às
necessidades das pessoas ao longo de suas vidas
centros comunitários de aprendizagem, bibliotecas
e salas de leitura continuam ausentes, em grande medida.
O subemprego invisível baseado em uma
incongruência de habilidades tem penetrado
lentamente na região. A porcentagem de emprego
vulnerável no Sul da Ásia ainda é o mais alto do
mundo (mais de 70%), mas não se deu a merecida
atenção a programas de aprendizagem de qualidade
que mitiguem essa situação. Busca-se uma
capacitação vocacional em torno aos interesses e
demandas da indústria e dos interesses
corporativos nacionais e transnacionais, em lugar
de fazê-lo em torno do desenvolvimento
sustentável e dos sistemas de meios de
subsistência para as cidadãs e cidadãos.
As oportunidades para a educação e aprendizagem
de pessoas adultas que sirvam para promover o
pensamento crítico, a compreensão dos direitos
humanos, a tolerância, a consciência social, um a
maior consciência e responsabilidade, são
exíguas. E isso acontece apesar da crescente
consciência de que os sistemas econômicos não
podem se sustentar a menos que se assegure a paz
e uma boa governança baseadas na justiça.
Sob o peso de todos esses defeitos, os programas
mal elaborados perpetuam os mitos da futilidade
da educação de pessoas adultas e criam um círculo
vicioso, onde são formuladas políticas míopes
através de avaliações defeituosas, as quais, por
sua vez, conduzem a programas com financiamento
inadequado e que não respondem às necessidades das pessoas.
Nesse contexto, ASPBAE faz um apelo para que:
§ Os governos se comprometam a implementar
programas de alfabetização e educação de pessoas
adultas de boa qualidade. Os Pontos de Referência
Internacionais sobre a Alfabetização de Pessoas
Adultas (Anexo 1) da Campanha Mundial de Educação
(CME) e ActionAid avalizados pelos representantes
dos governos, OSCs e doadores que participaram da
Oficina de Alto Nível sobre Alfabetização de
Pessoas Adultas em Abuja no ano de 2007 oferecem
um ponto de partida muito útil para estabelecer
padrões de qualidade na alfabetização de adultos,
que devem ser avalizados pela CONFINTEA VI.
§ Os governos e a comunidade internacional
sustentem os investimentos em pesquisa, bolsas e
desenvolvimento profissional em educação de
pessoas adultas. As universidades e os institutos
de ensino superior deveriam ser contrapartes
plenas e responsáveis, compartindo suas
competências definidas e substanciais com as
comunidades de educação de pessoas adultas, com
as organizações não governamentais, com as
entidades públicas e privadas, com a UNESCO e com
outras organizações intergovernamentais na plena
implementação da aprendizagem ao longo de toda a vida.
§ Os governos se comprometam a sustentar fortes
mecanismos de coordenação interagências no nível
nacional para o planejamento, implementação e
monitoramento de programas de educação de pessoas
adultas e de aprendizagem de pessoas adultas de
qualidade. As OSCs deveriam estar bem
representadas nesses espaços e deveriam ter os
recursos suficientes para desempenhar seu papel
como contrapartes plenamente funcionais.
§ Os governos realizem uma “Auditoria sobre a
Alfabetização” e assegurem que todas os trâmites
e comunicações oficiais sejam simplificados a fim
de evitar a exclusão das populações
semi-alfabetizadas, atendendo ao mesmo tempo a
melhoria de seus níveis de alfabetização.
É preciso agir... aqui mesmo e JÁ!
Para que a educação de pessoas adultas realmente
faça diferença na vida de bilhões de pessoas
pobres e marginalizadas, uma série de projetos
pequenos, díspares, excepcionais não vai ser
suficiente. O que se requer não são “meias
medidas”, nem “meias oportunidades”, mas uma
mudança fundamental na visão sobre educação, que
respeite e valorize o direito de todas e todos
(crianças e pessoas adultas) a satisfazer suas
necessidades de aprendizagem, tanto básica como
ao longo de toda a vida. É necessário usar esta
oportunidade de encontro na CONFINTEA VI e
aproveitá-la ao máximo, com o objetivo de
desenvolver acordos sólidos em torno de uma
agenda medular para o compromisso e a ação
marcante que finalmente assegure de forma
decisiva o direito de todas as pessoas a ter
acesso ás oportunidades de aprendizagem ao longo de toda a vida.
Bibliografia:
ActionAid International. 2005. Writing the
Wrongs: International Benchmarks on Adult Literacy. London: ActionAid and GCE.
ASPBAE. 2008. An Asia Pacific Citizens’ Report
Card Rating Governments’ Efforts to Achieve Education for All. Mumbai: ASPBAE.
ASPBAE. 2003. Asia Pacific Civil Society
Perspectives on Progress in Implementing CONFINTEA 5: A Discussion Paper
DFID. 2008. Adult Literacy: an update: A DFID Practice Paper. London: DFID.
ILO and FAO, Youth Employment,
http://www.fao-ilo.org/fao_ilo_youth/en/ accessed on September 30, 2008
International Food Policy Research Institute.
2007. The World’s most Deprived: Characteristics
and causes of Extreme Poverty and Hunger. Washington. IFPRI.
UNESCAP.2007. MDGS: Progress in the Asia and the Pacific 2007. Bangkok
UNESCO. 2006. Literacy for Life.: EFA Global Monitoring Report. Paris: UNESCO.
UNESCO. 2008. Education for All by 2015: Will we
make it? EFA Global Monitoring Report. Paris: UNESCO.
UNESCO Institute for Education. 2003.
Recommitting to Adult Education and Learning:
Synthesis Report of the CONFINTEA V Midterm review meeting. Bangkok: UNESCO.
Youth and United Nations, Hunger and Poverty
http://www.un.org/esa/socdev/unyin/wpayhunger.htm
ASPBAE
O Escritório da Ásia e Pacífico Sul para a
Educação de Pessoas Adultas (Asian-South Pacific
Bureau of Adult Education ASPBAE) é uma rede
regional de organizações e pessoas que trabalham
no tema da educação de pessoas adultas com e
através de ONGs, organizações comunitárias,
agências governamentais, universidades,
sindicatos, povos indígenas, organizações de
mulheres, meios de comunicação e outras
instituições da sociedade civil em toda a Ásia e no Pacífico.
Fundada em 1964, a ASPBAE tem mais de 200
organizações membro em 30 países. Mantém relações
operativas com a UNESCO e tem Status Roster
perante o ECOSOC. ASPBAE forma parte da Diretoria
da Campanha Mundial de Educação (CME) e do
Conselho Internacional para a Educação de Pessoas Adultas (ICAE).
Por comentários a este informe e consultas : mtanvir.aspbae en gmail.com.
ANEXO 1: PONTOS DE REFERÊNCIA INTERNACIONAIS DA CME-ActionAid
1. A alfabetização tem a ver com a aquisição e o
uso de habilidades de leitura, escrita e cálculo
matemático e, portanto, com o desenvolvimento da
cidadania ativa, a melhoria da saúde e dos meios
de subsistência e igualdade de gênero. As metas
dos programas de alfabetização deveriam refletir este conceito.
2. A alfabetização é um processo contínuo que
requer aprendizagens sustentadas. Não existe uma
linha mágica que se cruza para passar do
analfabetismo à alfabetização. Todos os programas
e políticas deveriam estar desenhados para
fomentar uma participação continuada e um
aproveitamento progressivo, em lugar de
centrar-se em uma provisão pontual com apenas um resultado final.
3. Aos governos corresponde cumprir o direito à
alfabetização das pessoas adultas, exercer
liderança para o desenvolvimento de políticas
públicas e de um entorno propicio y prover os recursos necessários. Eles devem
• Velar para que exista cooperação entre os
ministérios pertinentes e vínculos com todos os
programas de desenvolvimento pertinentes.
• Trabalhar em colaboração sistemática com organizações da sociedade civil.
• Garantir a criação de vínculos entre todos
esses organismos, especialmente no âmbito local.
•Velar pela relação com assuntos da vida das e
dos participantes, fomentando a descentralização
de orçamentos e da tomada de decisões sobre o
currículo, os métodos e o material.
4. É importante investir em mecanismos contínuos
de retro-alimentação e avaliação, sistematização
de dados e pesquisa estratégica. Todas as
avaliações deveriam centrar-se na aplicação
prática do que foi aprendido e no impacto sobre a
cidadania ativa, a melhoria da saúde e dos meios
de subsistência e igualdade entre os sexos.
5. Para favorecer a permanência dos educadores e
educadoras, é importante que sejam remunerados
com pelo menos o equivalente ao salário base de
um professor de escola primária, em função do
número de horas trabalhadas (incluindo tempo de
formação, preparação e acompanhamento).
6. Os educadores devem ser de preferências
pessoas da localidade que recebam uma formação
inicial importante. Deverão receber uma
capacitação inicial considerável e freqüentar,
posteriormente, cursos regulares de atualização.
Também é importante que possam intercambiar
permanentemente idéias com outros educadores. Os
governos devem estabelecer um marco para o
desenvolvimento profissional do setor da
alfabetização de adultos, especialmente para os
formadores/supervisores, accessível aos
educadores de todo o país (por exemplo, por meio da educação a distância).
7. A relação entre educadores e estudantes
deveria ser de pelo menos um educador para cada
30 estudantes e de um capacitador ou supervisor
por cada 15 grupos de estudantes (1 a 10 em zonas
afastadas), com um mínimo de uma visita de apoio
por mês. O calendário de aulas, que deverá
responder de maneira flexível às necessidades da
vida diária dos estudantes, consistirá em
contactos regulares e sustentados (por exemplo,m
duas vezes por semana durante dois anos, no mínimo)
8. Em contextos multilingües, é importante que em
todas as etapas do processo, os
participantes possam escolher em que idioma
aprender. Deve-se fazer todo o possível para
fomentar e sustentar a aprendizagem bilíngüe.
9. Para manter o interesse dos participantes é
fundamental utilizar uma ampla gama de métodos
participativos nos processos de aprendizagem e
temáticas relacionadas com sua vida cotidiana.
Esses mesmos métodos e processos participativos
devem ser utilizados em todos os níveis de formação de formadores e educadores.
10. Os governos devem assumir a responsabilidade
de fomentar a produção e distribuição de uma
ampla variedade de materiais que se adaptem às
necessidades dos novos leitores, por exemplo,
trabalhando com editoras e produtores de
periódicos. Deveriam equilibrar esta tarefa com
financiamento para a produção local de materiais,
especialmente pelos próprios participantes,
facilitadores e capacitadores-supervisores.
11. Um programa de alfabetização de boa qualidade
que respeite todos estes pontos de referência
provavelmente custará entre 50 e 100 dólares por
participante, por ano, durante um mínimo de três
anos (dois anos de aprendizagem inicial, mais a
criação de outras oportunidades de aprendizagem para todos).
12. os governos deveriam destinar pelo menos 3%
de seu orçamento nacional de educação para
programas de alfabetização de adultos, como os
que são formulados nestes pontos de referencia. A
isto poderiam ser somadas as contribuições
adicionais de outros ministérios (por exemplo, de
gênero/ da mulher, de desenvolvimento rural, da
agricultura, da saúde, etc.). Quando o governo
cumpre com este nível de compromisso, os doadores
internacionais (por exemplo, mediante a
Iniciativa da Via Rápida) deveriam preencher
qualquer falta de recursos que pudesse haver, em
concordância com a promessa feita no Fórum Mundial de Educação de Dakar.
------------ próxima parte ------------
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