Francia/ Charlie-Hebdo: ¿y ahora? los hechos, su alcance y los retos [François Sabado - Pierre Rousset]

Ernesto Herrera germain5 en chasque.net
Vie Ene 16 14:40:19 UYST 2015


  _____  

Correspondencia de Prensa

boletín informativo – 16 de enero 2015

germain5 en chasque.net

A l’encontre – La Breche

www.alencontre.org <http://www.alencontre.org/> 

  _____  

Francia

Charlie-Hebdo: ¿Y ahora? Los hechos, su alcance y los retos

François Sabado, Pierre Rousset *

Viento Sur 

http://www.vientosur.info/ <http://www.vientosur.info/%0d> 

“¿Ya no queréis saber nada de las clases ni de sus luchas? Tendréis entonces
la plebe y las multitudes anómicas. ¿Ya no queréis saber nada de los
pueblos? Tendréis bandas y tribus. ¿Ya no queréis saber nada de los
partidos? Tendréis el despotismo de la opinión”. (Daniel Bensaïd, Elogio de
la política profana. Península, Barcelona, 2009, p. 348).

Es demasiado pronto para extraer todas las consecuencias de los
acontecimientos de estos últimos días, pero es necesario tomar conciencia de
lo que ha pasado. Hemos asistido a un momento histórico. Sobre todo, por la
fuerza y la masividad de las manifestaciones del sábado 10 y el domingo 11
de enero: en todo el país se han movilizado casi cinco millones de personas.
Algo jamás visto.

Por encima de todas las confusiones, estas manifestaciones han constituido
un gran momento de fraternidad humana, como lo ha puesto manifiesto la
reacción y el comportamiento de la gente: hablando entre ella y ayudándose
mutuamente para poder avanzar en medio de la presión que ejercía la multitud
concentrada. Algunas imágenes de las tardes del sábado y el domingo, que no
duraron mucho, nos recordaban los momentos vividos en las manifestaciones de
1995 o 1968, en las que por encima de todo estaba la solidaridad.

La composición de las manifestaciones, que agruparon a cerca de 5 millones
de personas, era fundamentalmente de gente asalariada y, también, de
jóvenes. Tanto en las ciudades como en la mayoría de los suburbios se
trataba de manifestaciones populares. Aun cuando no hayan sido
"socio-sindicales" o "de lucha social", estas manifestaciones muestran que
la sociedad se moviliza. Se puede discutir sobre esto, pero las
movilizaciones han congregado, sobre todo, al "pueblo de izquierdas".
Confraternizando contra la barbarie del terror y a favor de las libertades
democráticas y de la libertad de expresión, hemos denotado la presencia de
pancartas o carteles contra todos los racismos (antisemita o antimusulmán).
Al mismo tiempo, tampoco tiene mucho sentido darle vueltas al "Todos somos
Charlie" repetido hasta el infinito. 

Los millones de personas que han hecho "Todos somos Charlie" es un grito de
solidaridad humana que estalló contra los asesinatos. Se podía haber
manifestado de diferentes maneras. Se hizo referencia a la idea de un
"Charlie obrero"; es decir, vincular la solidaridad con los periodistas
asesinados a la necesidad de una movilización por los derechos sociales. Una
idea discutible pero que en el fondo expresa un planteamiento justo: el de
dar un contenido democrático y social a la movilización y a la emoción. suyo
ese eslogan no expresaban su apoyo a la línea editorial de la revista, del
mismo modo que la gran mayoría de quienes decían "todos no somos Charlie"
conocían más o menos la revista, pero no la leían.

Ese fue el sentido del movimiento profundo de la sociedad que se expresó
desde el 7 de enero y los anticapitalistas tenían que formar parte de él,
dialogar con esos millones de ciudadanos y ciudadanas que forman parte del
mismo. No se trataba de manifestaciones reaccionarias. Y, sobre todo, no
estaban hegemonizadas por la "Unión Nacional", por las políticas
securitarias o antisociales anunciadas por el gobierno. La sociedad se
movilizó espontáneamente, con una gran confusión pero en un sentido
progresista. Este es el punto de partida de nuestra reflexión y el marco en
el que es necesario examinar los problemas que nos plantea.

Primer problema, la Unión nacional. Estuvimos en lo cierto al denunciar la
operación de "Unión nacional" tanto con Sarkozy como en relación a las
maniobras de Marie Le Pen. Tuvimos más razón aún al denunciar a los
"sátrapas internacionales" que acompañaron a Hollande en su operación para
dar pábulo al imperialismo francés y a las diversas coaliciones
imperialistas. ¡Qué escándalo que los Netanyahu, Bongo, Orban y otros
asesinos de las libertades fueran invitados a este desfile!. ¡No había que
firmar ninguna declaración conjunta ni con Hollande, ni con el PS o la UMP,
ni acudir a la cabeza de la manifestación u organizar conjuntamente la cita
"presidencial"! Desde este punto de vista hay que remarcar que si bien en un
primer momento Jean-Luc Mélenchon y el Front de Gauche tomaron parte en la
operación, el sábado a la tarde ya se desvincularon de la misma. ¡Era tan
escandalosa! Nosotros, por nuestra parte, teníamos que haber expresado esas
críticas pero hubiéramos tenido que subrayar mucho más la prioridad de la
solidaridad con las y los millones de manifestantes. Porque la gente no se
chupa el dedo: la gente no fue a las manifestaciones para apoyar las
maniobras políticas que se estaban urdiendo. De estas manifestaciones, lo
que va a quedar en la memoria de la gente, son los millones de participantes
y no el coro de los "señores" del planeta.

Segundo problema: la presencia en la movilización de la juventud
arabo-musulmana. Fueron decenas de miles de personas franco-argelinas,
marroquís o tunecinas las que estuvieron en las calles con cantidad de
banderas de los países del Magreb. Pero la mayoría de la juventud
arabo-musulmana no estuvo presente. La "línea" editorial de Charlie-Hebo ha
ejercido un contrapeso en ello; de la misma forma que ha actuado el
sentimiento de "dos pesos, dos medidas" que opera en la represión (Dieudonné
condenado, Zemmour no)/1. La débil movilización en Marsella es un indicativo
de esta desigualdad en la movilización. El riesgo de ruptura es real. Es
necesario -y constituye una de nuestras tareas prioritarias- hacer frente a
este riesgo de fractura. De entrada, luchando contra las políticas de
austeridad y sus consecuencias para la gente más pobre y más desfavorecida
que vive en los suburbios. Luchando a favor de la igualdad de derechos y, en
concreto, a favor del derecho a voto para los extranjeros. Los
revolucionarios debemos estar al frente en la lucha contra la islamofobia,
tenemos que denunciar todos los actos racistas. Tenemos que defender el
derecho de los musulmanes a practicar su religión y las mezquitas cuando son
atacadas. Es necesario que el movimiento obrero y democrático se sitúe de su
lado. Eso empieza con expresiones tangibles de solidaridad como la ayuda a
los más jóvenes en las escuelas. La población árabe-musulmán tiene que ser
defendida contra toda agresión cuando es atacada por ser árabe o musulmana.

Este antirracismo, también lo hacemos extensible al antisemitismo. Ahora
mismo, es necesario diferenciar más que nunca -y sabemos que es difícil-
entre la política sionista del Estado de Israel y la población judía, a la
que tenemos que defender, también, contra todas las agresiones cuando es
atacada por ser judía.

Tercer problema: la voluntad del gobierno es utilizar estos acontecimientos
para incrementar el arsenal jurídico de la "Ley Antiterrorista" a golpe de
leyes liberticidas, como la Patriot Act impuesta por Washington tras el 11
de septiembre. Se trata de un problema fundamental: no se puede combatir el
terrorismo atentando contra los derechos y libertades fundamentales. Las
organizaciones obreras y democráticas deben enfrentarse a cualquier medida
gubernamental que vaya en ese sentido. Por lo tanto, deben negarse a
participar, de cerca o de lejos, en las reuniones que van a comenzar en
torno al "Pacto de Seguridad" propuesto por el PS.

Cuarto problema: ¿Cómo evitar el choque de barbaries: la barbarie
imperialista y la de organizaciones como el Estado islámico (Daesh) y
Al-Qaeda? Es en la tierra abonada de la barbarie imperialista y del apoyo a
dictaduras que oprimen día a día a millones de seres humanos en el planeta,
donde prosperan las organizaciones fundamentalistas y terroristas. Se
alimentan de las intervenciones imperialistas occidentales como las
desarrolladas por Estados Unidos y otras potencias occidentales en
Afganistán, Medio Oriente y en Iraq, o de la de países regionales como
Qatar, Arabia Saudí, Turquía… A menudo, estas organizaciones
fundamentalistas ha estado inicialmente apoyadas por Washington o Estados
como Pakistán. Pero ahora, estas organizaciones desarrollan su propia
política y su propia estrategia de confrontación.

Es necesario recordar sin cansancio una evidencia: la violencia terrorista
de estos movimientos se dirige, sobre todo, contra las poblaciones de los
países musulmanes. Atacan todas las libertades y los derechos fundamentales,
y ejercen un papel contra-revolucionario muy grande, por ejemplo, contra las
aspiraciones progresistas de las "primaveras árabes. Imponen un grado de
terror que nos recuerda a los movimientos fascistas de los años 1930. Son
enemigas del género humano. Nuestros camaradas de Pakistán caracterizan
algunas de estas organizaciones fundamentalistas (lo que puede generar
debate) como fascismos religiosos. En cualquier caso hay que combatirlas
mientras sigan con sus actos bárbaros, sea en Paria o en el norte de
Nigeria. Combatirlas en nuestro propio país pero, también, impulsando la
solidaridad a nivel internacional: luchando contra las guerras
imperialistas, prestando ayuda a los movimientos progresistas que resisten
frente al asalto fundamentalista en Kobané, Alep o en Pakistan y defendiendo
en todas partes a las víctimas de su intolerancia.

Quinto problema: nuestra debilidad y la debilidad en general del movimiento
obrero en sus bastiones históricos; sobre todo en Europa. La globalización
capitalistas está hundiendo nuestras sociedades en una espiral de crisis
sociales sin fin. La precarización se extiende y adquiere una dimensión
dramática. Ni la "izquierda de la izquierda", ni los sindicatos son capaces
de ofrecer una respuesta radical a estos ataques drásticos del capital
globalizado. En estas condiciones, los fundamentalismos (de todas las
religiones) y las nuevas extremas derechas (xenófobas y racistas) intentan
ocupar el terreno ideológico de la radicalidad. Necesitamos un amplio frente
internacional de resistencia antifascista, antifundamentalista; pero también
una izquierda militante capaz de ofrecer una alternativa radical al
capitalismo. Para lograrlo, esta izquierda debe arraigarse en los sectores
de la población golpeadas por la precariedad, lo que actualmente no es el
caso. Ahí tenemos un verdadero talón de Aquiles.

En fin, otras dimensiones que debemos tomar en cuenta en relación a la
situación política francesa. ¿Logrará François Hollande utilizar esta crisis
para alzarse, más o menos, como el Bonaparte por encima de los partidos para
asegurar su candidatura en 2017? ¿Podrá, tirando del hilo de esta operación
de Unión nacional, continuar con su política de austeridad y agravar la
situación social de millones de trabajadores y trabajadoras? ¿Llegará a
poner freno a la extrema derecha que, durante estos últimos días, ha estado
marginalizada?

La dinámica de la movilización de la sociedad durante estos últimos días
abre también otra posibilidad: la indignación y la aspiración democrática
pueden adquirir un contenido social a través de luchas y movilizaciones a
favor de los derechos, por la dignidad, contra la injusticia social, contra
todas las opresiones, a favor de la igualdad de derechos. Es necesario
impulsar juntos esas luchas comunes para superar nuestras divisiones de las
que los poderes dominantes extraen su fuerza.

Los anticapitalistas deben hacer todo lo posible para que este impulso
democrático siga adelante. 

* Militantes del Nuevo Partido Anticapitalista (NPA) de Francia.

Nota

1/ Dieudonné, humorista que profesa su anti-semitismo abiertamente; Zemmour,
periodista político, que profesa abiertamente su racismo, xenofobia e
islamofobia (ndt)

  _____  

 



---
Este mensaje no contiene virus ni malware porque la protección de avast! Antivirus está activa.
http://www.avast.com
------------ próxima parte ------------
Se ha borrado un adjunto en formato HTML...
URL: http://listas.chasque.net/pipermail/boletin-prensa/attachments/20150116/fca5e2f6/attachment-0001.htm


Más información sobre la lista de distribución Boletin-prensa