Israel/Gaza/ Una implacable l骻ica de expulsi髇. [Gilbert Achcar]

Ernesto Herrera germain5 en chasque.net
Sab Dic 9 01:03:06 UYT 2023


  _____  

Correspondencia de Prensa

9 de diciembre 2023

 <https://correspondenciadeprensa.com/> https://correspondenciadeprensa.com/

redacci贸n y suscripciones

 <mailto:germain en montevideo.com.uy> germain en montevideo.com.uy

  _____  

 

Israel/Gaza

 

Una implacable l贸gica de expulsi贸n

 

Desde 1977, con escasas intermitencias, la derecha israel铆 gobierna Israel, con posiciones cada vez m谩s extremas. Los brutales ataques perpetrados por Hamas en su territorio parecen haberle ofrecido la ocasi贸n perfecta para avanzar en su proyecto de Gran Israel, expulsando a la poblaci贸n palestina de Gaza.

 

Gilbert Achcar *

Le Monde diplomatique, edici贸n uruguaya, diciembre 2023

https://ladiaria.com.uy/

Traducci贸n de Micaela Houston

 

Afirmar que es m谩s f谩cil empezar una guerra que terminarla es un lugar com煤n. La que est谩 llevando a cabo Israel en la Franja de Gaza se presenta ya como un ejemplo particularmente convincente de ese adagio. Para la extrema derecha israel铆, que predomina en el gobierno formado por Benjamin Netanyahu a fines del 2022, la operaci贸n Tormenta de Al-Aqsa lanzada por Hamas el 7 de octubre brind贸 la oportunidad ideal para poner en marcha su proyecto de un Gran Israel que incluya Cisjordania y Gaza, es decir, la totalidad de la Palestina del Mandato Brit谩nico (1920-1948).

 

La ra铆z pol铆tico-ideol贸gica de la que surgi贸 el Likud, dirigido sin ininterrupci贸n por Netanyahu desde 2005 (lo hab铆a dirigido antes, por primera vez, entre 1996 y 1999), est谩 constituida por una rama de inspiraci贸n fascista, conocida bajo el nombre de 鈥渟ionismo revisionista鈥, originado en el per铆odo de entreguerras. Antes de la fundaci贸n del Estado de Israel, esa corriente militaba por incluir en el proyecto estatal sionista la totalidad de los territorios bajo mandato brit谩nico de un lado y del otro del Jord谩n, incluyendo Transjordania, asignada por Londres a la dinast铆a hachemita. Luego, habiendo centrado su ambici贸n en el Mandato de Palestina, reproch贸 al sionismo laborista dirigido por David Ben Gurion haber frenado el combate en 1949 sin apoderarse de Cisjordania y de Gaza.

 

Para Ben Gurion y sus compa帽eros, ello quedar铆a para m谩s adelante: ambas zonas fueron ocupadas en 1967. Desde entonces, el Likud presion贸 de forma constante al sionismo laborista y a sus aliados sobre la situaci贸n de aquellos territorios. En lugar de huir de los combates como en 1948, en 1967 las poblaciones de Cisjordania y de Gaza, en su gran mayor铆a, se aferraron a sus tierras y a sus viviendas. Hab铆an aprendido la lecci贸n: el 80 por ciento de los habitantes palestinos del territorio en el cual el Estado de Israel se hab铆a por fin establecido en 1949, es decir, el 78 por ciento del Mandato de Palestina, hab铆a huido en busca de un refugio temporal, que result贸 definitivo, dado que el nuevo Estado les prohibi贸 el regreso. Este desposeimiento es el meollo de lo que los 谩rabes llaman la Nakba (la cat谩strofe). (1)

 

Dado que en 1967 el 茅xodo palestino no se reprodujo (no obstante, 245.000 palestinos, en su mayor parte refugiados de 1948, huyeron hacia la otra orilla del Jord谩n), el gobierno israel铆 se enfrent贸 al dilema de que la voluntad de anexi贸n estaba obstaculizada por un factor demogr谩fico: apoderarse de los dos territorios otorgando la ciudadan铆a israel铆 a sus habitantes pondr铆a en peligro el car谩cter jud铆o del Estado de Israel; anexarlos sin naturalizaci贸n comprometer铆a su car谩cter democr谩tico (una 鈥渄emocracia 茅tnica鈥, seg煤n el soci贸logo israel铆 Sammy Smooha), creando un apartheid oficial. La soluci贸n que se encontr贸 para este dilema 鈥揷onocida bajo el nombre de Plan Allon, por el nombre del viceprimer ministro Yigal Allon, que lo elabor贸 en 1967-1968鈥 consisti贸 en apoderarse a largo plazo del Valle del Jord谩n y de las zonas con baja densidad de poblaci贸n palestina en Cisjordania y considerar la restituci贸n del control de las zonas pobladas a la monarqu铆a hachemita.

 

Opuesto a ese proyecto, el Likud militar铆a sin descanso por la anexi贸n de los dos territorios ocupados en 1967 y por su colonizaci贸n integral con ese prop贸sito, sin limitarse a las zonas consideradas por el Plan Allon en Judea y Samaria (denominaci贸n b铆blica de las regiones de las cuales Cisjordania constituye una parte). Gan贸 las elecciones en 1977: menos de 30 a帽os despu茅s de la fundaci贸n del Estado de Israel, la extrema derecha sionista lograba obtener el mando. Lo mantendr铆a durante la mayor parte de los 46 a帽os transcurridos desde entonces, de los cuales m谩s de 16 transcurrieron bajo la direcci贸n de Netanyahu, con un desplazamiento continuo hacia una derecha a煤n m谩s extrema.

 

Maximalismo y unilateralismo

 

El levantamiento popular palestino conocido con el nombre de Primera Intifada, iniciado a fines de 1987, puso en peligro la hegemon铆a del Likud y la perspectiva del Gran Israel. Los laboristas volvieron al poder en 1992 bajo la direcci贸n de Isaac Rabin, decididos m谩s que nunca a poner en pr谩ctica su plan de 1967. Dado que la monarqu铆a jordana hab铆a rechazado de modo oficial la administraci贸n de Cisjordania en 1988, en plena Intifada, fue reemplazada como interlocutor por la Organizaci贸n para la Liberaci贸n de Palestina (OLP). La direcci贸n de la central palestina acept贸 abandonar de forma provisoria las condiciones sine qua non de la retirada a largo plazo del Ej茅rcito israel铆 de la totalidad de los territorios palestinos ocupados en 1967 y el desmantelamiento a la larga de las colonias empezando por el cese de su expansi贸n. As铆 es como pudieron celebrarse los Acuerdos de Oslo, firmados en Washington por Rabin y Yasser Arafat en setiembre de 1993 bajo el patrocinio del presidente estadounidense William Clinton.

 

En 1996, el Likud volvi贸 al poder bajo la direcci贸n de Netanyahu, pero tres a帽os m谩s tarde fue vencido de nuevo por los laboristas, ahora conducidos por Ehud Barak. Netanyahu debi贸 renunciar y fue reemplazado a la cabeza del partido por Ariel Sharon. Este condujo al Likud a la victoria en 2001, tras haber provocado el estallido de la Segunda Intifada al acudir al Monte del Templo de Jerusal茅n en el oto帽o de 2000. En 2005, llev贸 a cabo una retirada unilateral israel铆 de la Franja de Gaza, con el desmantelamiento de las pocas colonias que hab铆an sido establecidas all铆, satisfaciendo as铆 a los militares puestos a prueba por la dificultad de controlar un territorio de gran densidad de poblaci贸n. Sharon estaba interesado sobre todo en la anexi贸n de la mayor parte posible de Cisjordania, siguiendo la opci贸n perfilada por el Plan Allon en modo maximalista y unilateral.

 

Netanyahu, al que Sharon hab铆a confiado la cartera de finanzas, renunci贸 de manera estrepitosa al gobierno en protesta contra la retirada de Gaza. Mencion贸 razones de seguridad, adulando al mismo tiempo a la base m谩s ideologizada del Likud, as铆 como al movimiento de los colonos. Encontr谩ndose en una posici贸n delicada dentro de su propio partido, Sharon lo abandon贸 en el oto帽o de 2005, cediendo el lugar a Netanyahu. De regreso en el cargo de primer ministro en 2009, este 煤ltimo se mantendr铆a en 茅l hasta junio de 2021, batiendo el r茅cord antes detentado por Ben Gurion. Recuper贸 el puesto en diciembre de 2022 por medio de una alianza con dos partidos de la extrema derecha sionista religiosa, calificados en Haaretz de 鈥渘eonazis鈥, incluso por el historiador israel铆 de la Shoah Daniel Blatman. (2)

 

El partido Fuerza Jud铆a, dirigido por Itamar Ben Gvir, desciende en l铆nea directa del Kach fundado por el supremacista jud铆o Meir Kahane, quien propon铆a el 鈥渢raslado鈥 inmediato de los 谩rabes fuera de la 鈥渢ierra de Israel鈥, es decir, la limpieza 茅tnica de la totalidad del territorio entre el mar Mediterr谩neo y el r铆o Jord谩n. (3) En cuanto a Bezalel Smotrich, jefe del Partido Sionista Religioso, dio que hablar en octubre de 2021 al decirles a los diputados 谩rabes de la Knesset: 鈥淓s un error que Ben Gurion no haya terminado el trabajo y no los haya expulsado en 1948鈥. (4)

 

As铆, el actual gobierno israel铆 est谩 controlado por hombres animados por el deseo de hacer realidad el Gran Israel por medio de la anexi贸n de los territorios conquistados en 1967 y la expulsi贸n de las poblaciones aut贸ctonas. Pero, en una situaci贸n normal, un proyecto as铆 no podr铆a ser realizado m谩s que a trav茅s de un proceso de largo aliento, sin garant铆a de 茅xito: la rastrera anexi贸n de Cisjordania por medio de la expansi贸n de las colonias y el hostigamiento de los aut贸ctonos (5), ambos agravados de modo considerable desde que se instal贸 el gobierno de extrema derecha, y la asfixia econ贸mica de Gaza.

 

Al igual que para la administraci贸n de George W. Bush, repleta de personajes que exhortaron a Clinton a invadir Irak, pero incapaces de realizar ese proyecto en fr铆o, para la extrema derecha israel铆 era necesaria una buena oportunidad pol铆tica. Es sobre todo en ese aspecto que resulta pertinente la analog铆a entre los atentados del 11 de setiembre de 2001 y la operaci贸n conducida por Hamas el 7 de octubre, subrayada por Netanyahu al presidente estadounidense Joe Biden durante la visita solidaria realizada por este 煤ltimo a Israel el 18 de octubre. La Tormenta de Al-Aqsa fue inmediatamente explotada por la extrema derecha israel铆 en su conjunto para presionar por la ejecuci贸n de su prop贸sito expansionista.

 

Opciones de 鈥渢raslado鈥

 

Es claro que el Ej茅rcito israel铆 no estaba preparado para esa eventualidad. Los planes de guerra en reacci贸n a la operaci贸n del 7 de octubre tuvieron que ser elaborados de urgencia, lo que explica el retraso del inicio de la ofensiva terrestre en la Franja de Gaza. Sin embargo, las tres semanas que transcurrieron entre la operaci贸n de Hamas y el comienzo de la invasi贸n, el 27 de octubre, fueron empleadas para bombardear con intensidad las concentraciones urbanas con el fin de que la ofensiva terrestre pudiera desarrollarse con el menor costo en vidas de soldados israel铆es 鈥搚, por consiguiente, con el costo m谩s elevado en vidas de civiles palestinos, entre ellos, necesariamente, una gran proporci贸n de ni帽os鈥.

 

La intenci贸n del gobierno israel铆 de no darle importancia a la suerte de la poblaci贸n civil, compartida por el gabinete de guerra establecido el 11 de octubre, fue expresada de la manera m谩s cruda por el ministro de Defensa, Yoav Gallant, miembro 鈥渕oderado鈥 del Likud y rival de Netanyahu, cuando anunci贸 tan pronto como el 9 de octubre haber ordenado un asedio completo de la Franja de Gaza, que justific贸 describiendo al adversario como 鈥渁nimales humanos鈥. Desde entonces, se incrementaron las declaraciones del mismo tenor por parte de miembros del gobierno y de personajes influyentes de la vida pol铆tica e intelectual de Israel. (6) A tal punto que, el 9 de noviembre, un grupo de 300 abogados, en su mayor铆a franceses y europeos, present贸 una denuncia contra Israel ante la Corte Penal Internacional (CPI) por el 鈥渃rimen de genocidio en Gaza鈥 鈥搖na calificaci贸n que implica la intencionalidad. (7).

 

La misma denuncia ata帽e a 鈥渓os traslados de poblaci贸n鈥, fundamentada en el desplazamiento masivo de la poblaci贸n gazat铆 en curso en el seno del enclave. En este aspecto, la intencionalidad es m谩s manifiesta. A partir del 7 de octubre, el ministerio de Inteligencia israel铆 鈥揹irigido por otro miembro del Likud, Gila Gamliel, y que se encarga de la coordinaci贸n entre el servicio exterior del Mossad y el servicio interior del Shabak, bajo la 茅gida del primer ministro鈥 se dedic贸 a la elaboraci贸n de un plan para Gaza. Este proyecto, terminado el 13 de octubre, cuya divulgaci贸n debemos, 15 d铆as m谩s tarde, al sitio web israel铆 Mekomit, se titula 鈥淥pciones para una pol铆tica respecto de la poblaci贸n civil de Gaza鈥 (8). Contempla tres escenarios: a) los habitantes de Gaza permanecen en la Franja y son gobernados por la Autoridad Palestina; b) permanecen all铆, pero son gobernados por una autoridad local ad hoc, establecida por Israel; c) son evacuados de Gaza hacia el desierto egipcio del Sina铆.

 

El documento considera que las primeras dos opciones tienen importantes lagunas, y que ninguna de ellas puede producir un 鈥渆fecto disuasivo鈥 suficiente a largo plazo. En cuanto a la tercera opci贸n, esta 鈥減roducir谩 resultados estrat茅gicos positivos a largo plazo para Israel鈥 y es considerada 鈥渞ealizable鈥 bajo la condici贸n de que la 鈥渆sfera pol铆tica鈥 muestre determinaci贸n frente a la presi贸n internacional y logre asegurar el apoyo de Estados Unidos y de otros gobiernos proisrael铆es. Luego se detalla cada una de las tres posibilidades.

 

El escenario contemplado por la tercera opci贸n, preferida por el ministerio, comienza con el desplazamiento de la poblaci贸n civil de Gaza fuera de la zona de los combates, y luego su traslado al Sina铆 egipcio. En un primer momento, los refugiados ser谩n albergados en carpas. 鈥淟a etapa siguiente comprender谩 la creaci贸n de una zona humanitaria para ayudar a la poblaci贸n civil de Gaza y la construcci贸n de ciudades en una zona dedicada a su reubicaci贸n en el norte de Sina铆鈥, manteniendo al mismo tiempo un per铆metro de seguridad de un lado y del otro de la frontera.

 

El documento describe luego la manera de lograr el traslado de la poblaci贸n gazat铆. Recomienda el llamado a la evacuaci贸n de los no combatientes de la zona de los enfrentamientos armados, concentrando a la vez los bombardeos a茅reos en el norte de Gaza para allanar el camino hacia una ofensiva terrestre que comenzar铆a por el norte, hasta la ocupaci贸n de toda la Franja de Gaza. Al hacerlo, 鈥渆s importante dejar abiertas las rutas hacia el sur para permitir la evacuaci贸n de la poblaci贸n civil hacia Rafah鈥, donde se encuentra el 煤nico puesto fronterizo egipcio. El documento se帽ala que esta opci贸n se inscribe en un contexto mundial en el que los desplazamientos de poblaciones a gran escala se banalizaron, particularmente con las guerras de Afganist谩n, de Siria y de Ucrania.

 

El 13 de octubre, el mismo d铆a en que fue terminado ese documento del Ministerio de Inteligencia, el Ej茅rcito israel铆 llam贸 a la poblaci贸n del norte de Gaza a dirigirse hacia el sur. El 30 de octubre, Financial Times report贸 que Netanyahu hab铆a acudido a los gobiernos europeos para que ejercieran presi贸n sobre Egipto con el fin de que allane el camino para el tr谩nsito de los refugiados de Gaza hacia el Sina铆 (9). Esta perspectiva, apoyada por algunos participantes en la cumbre europea reunida los d铆as 26 y 27 de octubre, habr铆a sido considerada no realista por parte de Par铆s, Berl铆n y Londres.

 

No obstante, seg煤n el ministerio de Inteligencia, Egipto tendr铆a la obligaci贸n, en virtud del derecho internacional, de permitir el tr谩nsito de la poblaci贸n civil. A cambio de su cooperaci贸n, recibir铆a una ayuda financiera para aliviar la crisis econ贸mica que padece. Ahora bien, aunque se enfrenta a una deuda considerable, cuyo servicio se acerca al 10 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), el presidente egipcio Abdelfatah El-Sisi se mostr贸 contrario, de manera categ贸rica, respecto de todo traslado de poblaci贸n de Gaza al territorio egipcio. Su gobierno incluso organiz贸 una campa帽a publicitaria que proclama: 鈥淣o a la liquidaci贸n de la causa palestina a expensas de Egipto鈥.

 

Apoyos contradictorios

 

Por supuesto, el motivo de ese rechazo no es la adhesi贸n a esta causa. Fue expresado en p煤blico por el presidente egipcio en presencia del canciller alem谩n Olaf Scholz, quien viaj贸 a El Cairo el 18 de octubre para tantearlo con respecto a esta perspectiva. El-Sisi subray贸 que el traslado de la poblaci贸n de Gaza al Sina铆 convertir铆a al territorio egipcio en 鈥渦na base para el lanzamiento de operaciones contra Israel鈥, poniendo as铆 en peligro las relaciones entre los dos pa铆ses (10). El gobierno egipcio sabe hasta qu茅 punto la cuesti贸n palestina puede ser explosiva, m谩s a煤n cuando est谩 muy recargada por la guerra en curso. Del mismo modo, el gobierno jordano, alarmado por la intensificaci贸n de los abusos cometidos por los colonos en Cisjordania a partir del 7 de octubre y por las operaciones del Ej茅rcito israel铆, advirti贸 contra todo desplazamiento de los palestinos m谩s all谩 del Jord谩n.

 

Sin embargo, los partidarios israel铆es del traslado de los gazat铆es cuentan con la concentraci贸n masiva en la frontera con Egipto de personas huyendo de la aplanadora de las fuerzas de invasi贸n, que podr铆an desbordar a los guardias fronterizos egipcios. Adem谩s, el rechazo egipcio incit贸 a la ministra de Inteligencia, Gila Gamliel, a lanzar el 19 de noviembre un llamado a la comunidad internacional con el fin de que reciba a los palestinos de Gaza y financie su 鈥渞einstalaci贸n voluntaria鈥 en todo el mundo, en lugar de movilizar fondos para la reconstrucci贸n del enclave (11).

 

No obstante, Washington se pronunci贸 de modo categ贸rico en contra de la reubicaci贸n de los palestinos fuera de Gaza. Los dirigentes estadounidenses, al mismo tiempo que respaldaron sin reservas la guerra conducida por Israel, incrementaron las declaraciones de advertencia hacia su aliado. El 15 de octubre, en una entrevista con el canal estadounidense CBS, el presidente estadounidense indic贸 claramente que se opon铆a a una nueva ocupaci贸n de Gaza, admitiendo a la vez que es indispensable que Israel invada la Franja con el fin de erradicar de all铆 a Hamas (12). Ello explica el rechazo de Washington, imitado por varias capitales occidentales, de pedir el cese del fuego hasta que este 煤ltimo objetivo no haya sido alcanzado. En suma, Washington y sus aliados aprueban la ocupaci贸n temporal de Gaza con el fin de extirpar de all铆 a Hamas, pero quieren que a ello le siga la retirada de las tropas israel铆es.

 

La opci贸n que propone Washington es la reactivaci贸n del proceso iniciado por los Acuerdos de Oslo, que lleg贸 a un punto muerto despu茅s de la Segunda Intifada al cambiar el siglo. 鈥淓s necesario que haya un Estado palestino鈥, afirm贸 Biden en CBS. Para ello, quiere que en Gaza el poder sea nuevamente puesto en manos de la Autoridad Palestina, cuya sede est谩 en Ramala. En un art铆culo publicado el 18 de noviembre en The Washington Post, el presidente estadounidense reafirm贸 su preferencia por una soluci贸n de dos Estados, llamando a unificar Gaza y Cisjordania bajo una Autoridad Palestina 鈥渞evitalizada鈥. Esta opci贸n es preferida por la mayor parte de los gobiernos occidentales, pero tambi茅n por Mosc煤 y Pek铆n, al igual que por la mayor parte de los Estados 谩rabes. Es apoyada por una parte de la oposici贸n israel铆, que sin embargo aprueba el anuncio hecho por Netanyahu acerca de que Israel permanecer谩 鈥渋ndefinidamente鈥 a cargo de la seguridad en el interior de Gaza (13). Esta posici贸n es la que expres贸 el actual dirigente de la oposici贸n israel铆 Yair Lapid, cuyo partido rechaz贸 participar en el gabinete de guerra (14).

 

La vacuidad de la opci贸n de revivir el proceso de Oslo y de crear un Estado palestino es evidente, incluso en vista de su patente contradicci贸n con lo que Israel anuncia. A fin de cuentas, un Estado palestino creado en el marco de los Acuerdos de Oslo no podr铆a ser m谩s que un bantust谩n sometido a la buena voluntad de Israel 鈥搇ejos de las condiciones m铆nimas sin las cuales ninguna soluci贸n pac铆fica podr铆a ser aceptada por los palestinos: retirada total de Israel de todos los territorios ocupados en 1967, desmantelamiento de las colonias y planificaci贸n del retorno de los refugiados鈥. Esas condiciones fueron enunciadas en 2006 en el documento elaborado por los prisioneros palestinos detenidos en las c谩rceles israel铆es, y aprobado por la casi totalidad de las organizaciones pol铆ticas palestinas, incluyendo las que integraban la OLP y Hamas.

 

El mayor temor es que la guerra en curso conduzca efectivamente a una nueva Nakba, como lo plantearon muy pronto los palestinos y como lo han anunciado de manera abierta algunos pol铆ticos israel铆es, resultando en un problema de refugiados en suelo egipcio o, al menos, 鈥渄esplazados internos鈥 en los campos del sur de Gaza. Adem谩s, es evidente que el objetivo mismo de erradicar una organizaci贸n arraigada en la poblaci贸n como lo es Hamas en Gaza no podr铆a ser alcanzado sin una masacre de gran amplitud. Todo ello muestra hasta qu茅 punto el af谩n de las capitales occidentales por expresar su apoyo incondicional a Israel es irresponsable. De forma inevitable, se tornar谩 en contra de sus intereses y de su propia seguridad. Sin embargo, el final del partido real en Gaza estar谩 determinado por la evoluci贸n de los combates en el territorio y por la presi贸n internacional sobre Israel.  

 

* Gilbert Achcar, naci贸 en L铆bano. Profesor de Estudios del Desarrollo y Relaciones Internacionales de la Escuela de Estudios Africanos y Orientales de la Universidad de Londres. Autor, entre otros libros, de El choque de barbaries. Terrorismo y desorden mundial, Capital intelectual-Le Monde diplomatique, 2013. 

 

Notas   

 

1) V茅ase Alain Gresh, 鈥淧alestina, un continuo volver a empezar鈥, Le Monde diplomatique, edici贸n Cono Sur, Buenos Aires, junio de 2017. 

2) Ayelet Shani, 鈥溾業srael鈥檚 Government Has neo-Nazi Ministers. It Really Does Recall Germany in 1933鈥欌, Haaretz, 10-2-2023. 

3) Sylvain Cypel, 鈥淚tamar Ben Gvir, l鈥檃scension d鈥檜n fasciste isra茅lien vers le pouvoir鈥, Orient XXI, 5-12-2022, y Ruth Margalit, 鈥淚tamar Ben-Gvir, Israel鈥檚 Minister of Chaos鈥, The New York Times Magazine, 20-2-2023. 

4) Louis Imbert, 鈥淏ezalel Smotrich, le colon radical qui impose sa marque au gouvernement isra茅lien鈥, Le Monde, Par铆s, 7-3-2023. 

5) V茅ase Dominique Vidal, 鈥淒e la colonizaci贸n a la anexi贸n鈥, Le Monde diplomatique, edici贸n Cono Sur, febrero de 2017. 

6) Una edificante recopilaci贸n en video de tales declaraciones fue realizada por el sitio web europeo musulm谩n: 5 Pillars x.com/5Pillarsuk/status/1722564050154840439   

7) Ligue des droits de l鈥檋omme, section de l鈥橝ube, 鈥淧lainte pour g茅nocide pr茅sent茅e 脿 la cour p茅nale internationale (CPI) le jeudi 9 novembre 2023 鈥 la justice est la r茅ponse 脿 la violence鈥, site.ldh-france.org, 15-11-2023. 

8) La direcci贸n de ese sitio web es www.mekomit.co.il, en tanto el documento fue traducido al ingl茅s por la revista judeo-谩rabe de Internet +972 bajo el t铆tulo 鈥淓xpel all Palestinians from Gaza, recommends Israeli gov鈥檛 ministry鈥, www.972mag.com <http://www.972mag.com> ,  30-10-23. 

9) Henry Foy, Leila Abboud, Donato Paolo Mancini y Andrew England, 鈥淣etanyahu lobbied EU to pressure Egypt into accepting Gaza refugees鈥, www.ft.com, 30-10-2023. 

10) Nayera Abdallah, Nadine Awadalla y Mohamed Wali, 鈥淓gypt鈥檚 Sisi rejects transfer of Gazans, discusses aid with Biden鈥, Reuters, 18-10-2023. 

11) Gila Gamliel, 鈥淰ictory is an opportunity for Israel in the midst of crisis鈥, The Jerusalem Post, 19-11-2023. 

12) Scott Pelley, 鈥淧resident Joe Biden: The 2023 60 Minutes interview transcript鈥, CBS News, 15-10-2023. 

13) Alexandra Hutzler, 鈥淣etanyahou to ABC鈥檚 Muir: 鈥楴o cease-fire鈥 without release of hostages鈥, ABC News, 7-11-2023. El presidente israel铆 Isaac Herzog confirm贸 ese prop贸sito en una entrevista publicada posterior: Andrew England y James Shotter, 鈥淚srael will maintain 鈥榲ery strong force鈥 in Gaza, says president鈥, Financial Times el 16-11-2023. 

14) Victoria Kim y Matthew Rosenberg, 鈥淚srael Signals Future Role in Gaza as Fighting Enters Second Month鈥, NYT Live, 7-11-2023. 

  _____  

 



-- 
Este correo electr贸nico ha sido analizado en busca de virus por el software antivirus de Avast.
www.avast.com
------------ pr髕ima parte ------------
Se ha borrado un adjunto en formato HTML...
URL: http://listas.chasque.net/pipermail/boletin-prensa/attachments/20231209/04d9e66e/attachment-0001.htm


M醩 informaci髇 sobre la lista de distribuci髇 Boletin-prensa